Hola, bienvenido y bienvenida una semana más a Rendimiento Evolutivo. Hoy venimos con un
podcast que os va a gustar mucho, muy inspirador de ciclismo, de desarrollo personal, de una
historia de vida. Pero antes de empezar con el episodio, recordaros, como siempre, que si queréis
profundizar más en cuestiones de entrenamiento, de nutrición, de psicología, de todo lo que
necesitáis para mejorar el rendimiento, tenéis los cursos de RendimientoEvolutivo.com, de los cuales
os dejo un link en las notas del episodio, donde tenéis todo lo que necesitáis para entrenaros o
para entrenar a otros deportistas. Y así, vamos con el invitado de hoy, Javier García Díez, Javicho,
conocido un poco ya en el mundillo ciclista, por su faceta como corredor, por supuesto,
también como divulgador en redes sociales y ahora con su centro de fisioterapia. De todo esto vamos
a hablar, porque es que creo que tu historia tiene mucho que enseñar, sobre todo para gente
joven. O sea, me encantaría que chavales de juveniles, su 23, que te escuchen, que entiendan
un poco lo que has pasado, lo que has vivido, porque es que es una historia muy buena de enseñanza.
Y bueno, pues para empezar, bueno, me gustaría preguntarte un poco, aparte de una pequeña
presentación, ¿no? El saber por qué tú empiezas a competir, ¿no? O sea, vienes de... no habías
hecho ciclismo hasta que llegué a esta categoría élite, prácticamente, y no sé qué te da o por qué
dices, bueno, me voy a poner a hacer ciclismo y a competir, a entrenar fuerte.
Pues, bueno, buenas a todos. Gracias por la presentación, Manu. Muy guay. Y nada, yo empiezo
con la bici. Yo he vivido la bici siempre en casa. O sea, mi padre es un fanático y yo
la he vivido desde pequeñito. O sea, me lo he visto todo, tour, giro, las clásicas de
primavera, la vuelta, todo, todo, todo. Pero nunca me había dado por probar y montar. Yo
simplemente, pues, veía a mi padre llegar los fines de semana y le preguntaba cuántos
kilómetros había hecho. Si había hecho menos de 100, me parecía poco. Si había hecho
más de 100, era como, ah, muy bien, muy bien, joder. Pedazo padre tengo que se pegan unas
palizas que no veas, ¿no? Y, pero no, ostras, yo juego a fútbol, luego pasé un lapso de
tiempo en la universidad que no hice, bueno, iba a gimnasio, salí a correr porque siempre
me ha gustado hacer deporte. O sea, quieto nunca he estado hasta que llegué a la cuarentena
y me subo al rodillo porque es lo único que puedo hacer. Entonces, cuando nos dan la posibilidad
de salir a hacer deporte, digo, pues voy a probar lo que estaba haciendo en casa, ¿no?
Y fue tal la sensación de libertad que sentí. Es que no lo sabría explicar, pero, guau, me
enganchó, me enganchó desde el minuto uno y fue una pasada. Yo ya lo había probado una
vez en verano en la Cerdaña y con mi padre y lo recuerdo muy chulo salir sonriendo, pero
no me enganchó. Y fue esta vez cuando realmente fue la decisiva y desde entonces, es que te
diría que desde entonces no he estado más de una semana sin montarme en la bicicleta.
Ostras, Javi, ¿sabes lo que más recuerda? Cuando lo decía a la primera salida que hice
yo también después de la cuarentena. Bueno, o sea, me acuerdo de salir y de ir con una sonrisa
de oreja a oreja en la boca yo solo, o sea, sin verme nadie. Y diciendo, madre mía, o
sea, era increíble, ¿no? Estaba disfrutando, ibas como loco, ¿no? Y fíjate, yo llevo un montón
de años haciendo ciclismo, pero esa sensación, era como, qué guapo, tío, de la velocidad,
de todo, ¿no? Del sitio, de... Bueno, qué sensación. Y bueno, creo que más aún me alegra
sabes que no era el único, ¿no? Que sintió eso. Y cuando ya te dice, bueno, voy a empezar a
entrenar más en serio, ¿no? Y cuando ya contactaste conmigo, por ejemplo, ¿qué objetivo
te marcabas? O sea, ¿tú qué idea tenías? Oye, voy a terminar en marcha cicloturista
o querías competir o no tienes ni idea y decías, a ver dónde llego, ¿no? O voy a ser
profesional. ¿Qué pensabas?
No, yo el mundo de los profesionales siempre lo he visto como... Es otro rollo, o sea, creo
que ponerte en la cabeza de ese objetivo a la larga. Lo más probable es que sea el golpe
psicológicamente más duro que te des cuando veas que no lo puedes alcanzar. Que, oye,
que habrá gente que llegue, ¿eh? Y partiendo de nada. Pero no... Tampoco es algo que tenga
yo como... No era mi obsesión ser profesional. Simplemente, como yo entiendo el deporte, lo
que buscaba era mejorar. Ser mejor cada día. Y además ir más rápido, ostras, me gustaba
más. Cuanto más rápido iba, más me gustaba. El puerto que tenía al lado de casa, cuanto
más rápido lo subía, más satisfacción sentía. No sé, es como entiendo el deporte,
cómo lo vivo. Y entonces, cuando contacté contigo, lo único que buscaba era mejorar,
hacer las cosas con cabeza. Ya te venía escuchando en el podcast desde hacía un tiempo
y dije, hostia, este tío... Creo que tu forma de entender el entrenamiento coincidía mucho
con mi forma de entender otros aspectos de la vida, como puede ser la fisioterapia, como
puede ser, pues al final, la integración de todo, ¿no? Que no te centrabas solo en números
y ya está, sino que veías la globalidad de todo, el sistema complejo, ¿no? Y me
sentí muy identificado. Y dije, ostras, yo es como lo entiendo. Entonces contacté
contigo, ¿no? Y con eso, con la premisa de mejorar y si era suficiente esa mejora, intentar
competir, que es a lo que iremos este año.
Claro. Te decía lo de profesionalismo, ¿no? Porque muchas veces de la ignorancia, ¿no?
Pues la gente de fuera, no sé si a ti ha pasado, pero yo he tenido amigos que en su ignorancia
te preguntan, oye, ¿cómo hace uno para apuntarse a la Vuelta a España, no? O sea, son como
cosas que la gente está muy lejos. Entonces, claro, tú llegas desde... Bueno, tú sí que
tenías un conocimiento, ¿no? Ya lo has dicho, ¿no? Que con tu padre, que siempre ha sido
las carreras. Pero llegas el primer año, las primeras carreras y la primera carrera retirada
por hipotermia. Luego tuviste, pues eso, una marcha que te caíste dos veces, ¿no? En
la quebrantabuesos te caíste, luego te partiste el radio, ¿no? O sea, fue un año como con
un montón de contratiempos y no sé cómo lo viviste desde dentro, si se te pasó por la
cabeza rendirte o qué.
Rendirme, te diría, la vez que me caí compitiendo con la gente de élite y que me rompí
el radio, me acuerdo entrando en el hospital que estaba en ese momento, ostras, me dio un
bajón fuerte y estar tumbado y decir, vale la pena preguntármelo, pero me duró cinco
horas. Cuando ya me pude poner de pie, dije, bueno, una más. Sé que me va a costar superarlo
mentalmente, o sea, porque al final le coges incluso miedo a la velocidad, a tener gente
cerca, pero por cómo soy, tenía claro que lo seguiría intentando y en eso estamos.
Luego lo de la quebrantabuesos, me caí, pero fue un error mío por no prevenir la mecánica.
De eso también he aprendido y creo que de cada cosita he ido aprendiendo mucho. De la hipotermia
también aprendí. Ahora estoy en el País Vasco, hace frío y lluvia, lo mismo que viví ese día,
pero ya no dudo mucho que me vuelva a pasar porque lo que pude aprender de ese día fue mucho.
Fue mucho. Y poco a poco y dándole tiempo a la cabeza también lo vas como asimilando,
superando y queda en el olvido. De hecho, cuando me dijiste, oye, piensa las cosillas para el podcast
que te pasaron y tal, al principio tuve que hacer memoria porque alguna es como que ya la había
desplazado completamente y no tengo ese recuerdo.
Y claro, Javi, entre tanto, o entre inconvenientes, entre comillas, o entre esas pequeñas caídas,
la verdad que tu aprendizaje o tu mejora incluso en rendimiento en vatios, pues sin que ha sido
constante pero con muchos altibajos, que al final la forma. Has tenido momentos de que mejorabas,
luego hemos tenido los parones que hemos tenido que tener y cuando veo, por ejemplo,
tus gráficos, que los he estado viendo ahora antes para el podcast, pues ves que desde que empezamos
hasta ahora, ¿no? En 24 meses, la mejora, si sacas, si quitas ruido, ha sido como suave y progresiva,
pero claro, si vas día a día o semana a semana, pues hay semanas que van mejor, semanas que van peor, ¿no?
Y al final es un poco lo que la gente también, ¿no? Yo creo que tú lo verás, la gente de la grupeta,
que en el momento que tienen un pequeño bajón, ya se vienen abajo, ¿no? Y no entienden que esos ciclos
son naturales, son fisiológicos.
Sí, sí, sí. De hecho, mira, yo creo que una de las cosas buenas que tengo es que cuando la cosa va mal, mal,
bueno, mal, mal, que no sale lo que te gustaría, mentalmente yo pienso, bueno, calma, es cuestión de tiempo,
todo son fases y cuando la cosa va bien, bien, dices, aprovecha el máximo porque esto volverá a caer, ¿no?
Y sí que con la gente más conocida ves que de alguna manera cuando llega una época mala como que se rinden en parte
y entonces es cuando o dejan de salir o ya afecta tanto a su día a día que empiezan a ver el ciclismo como algo negativo
en vez de, oye, hacemos esto por diversión, quieras o no quieras mejorar, lo haces porque te gusta.
Y yo creo que he conseguido eso, el mantenerme, pues ser consciente que no todos los días van a ser el mejor de tu vida,
incluso en una misma semana puedes tener un día muy malo y a los dos días decir, guau, hoy voy volando, ¿no?
Pero eso, mantener, pues, la calma, por así decirlo, es mantener la calma más que otra cosa.
Sí, al final disfrutar, ¿no? También de lo que haces, o sea, centrarte más en el proceso que en el resultado
porque yo creo que si hay algo que hemos llevado bien estos años, ¿no?
Y bueno, tú lo has ido contando y de hecho ha hablado sobre ello, es esa capacidad de disfrutar de los entrenamientos,
de poder, pero al final no te has privado, de salir con grupeta, de hacer los puertos que te han gustado.
O sea, hemos hecho que el entrenamiento, obviamente siguiendo el plan, ¿no?
Porque es que nunca, no ha sido que no lo hayamos saltado, sino que hay muchas formas de entrenar
y hemos buscado la forma de que lo puedas hacer, pues, haciendo los puertos, las rutas que te gustan,
las salidas con grupeta, ¿no? Muchos días, luego otros que no, que te ha tocado también picar piedra, ¿no?
Y hacerte tus series y tus intervalos o paseos, ¿no?
Que a lo mejor te han puesto más hacer los paseos o los rodajes en zona 2, no sé cuáles te gustan más y cuáles te gustan menos.
Pues, mira, a ver, los días que más me gustan quizá te diría con una grupeta que vaya fuerte y que te exija,
o sea, que en los puertos te tengas que esforzar más de lo que sueles hacer solo
o más de lo que solo puedes llegar a esforzarte, porque a veces luchar solo con tu mente es más difícil que cuando tienes a gente al lado,
que al final el pensamiento se va a otra cosa y creo que te puedes esforzar más, ¿no?
Incluso con menos sensación de que estás ahí dándole caña.
Y luego, ostras, pues cuando llegan los entrenamientos suaves, muchas veces también pienso,
bueno, aprovecha este día que no vas a sufrir y pues disfruto más del paisaje, la zona, no sé.
Es como que cada día le sé sacar un poquito la parte buena.
No te voy a engañar, hay días que estoy subido en la bici y pienso, ¿qué me mandaría a mí salir hoy?
¿Qué hace frío? ¿Qué luego tengo que hacer mil cosas? ¿Voy corriendo a los lados?
Pero siempre intento quedarme con eso, con la parte positiva.
Oye, hoy no toca sufrir. Oye, pues bien, voy tranquilo, lo disfruto.
Que hoy toca apretarse y tal, venga, a ver hasta dónde puedo llegar, a ver si puedo mejorar un poquito más.
Bueno, perfecto. Luego, a mucha gente le interesa saber temas de datos, ¿no?
De cuánto se progresa con el entrenamiento, cuánto no.
Bueno, he estado mirando, por ejemplo, los tuyos desde, pues en 24 meses, ¿no?
Desde septiembre del 21 a septiembre del 23, septiembre, octubre del 23,
tenemos, por ejemplo, el P5, el 3 de 5 minutos, de 296 a 378, que sería un 27%,
y luego el P20 pasaría de 273 a 320, ¿no?
Que son un 17% más, ¿no?
Y yo creo que esto es una mejora bastante alta, ¿no?
O sea, yo por lo menos estoy muy contento, o sea, no es lo típico,
y menos ya, como te decía, en personas que ya somos adultos, ¿no?
Que ya estamos, entre comillas, desarrollados, pero claro, al final es un trabajo muy constante,
o sea, si tú miras tu training peak, ¿no?
O tu historia de entrenamiento, lo único que tienes de parón es cuando te partiste el radio, ¿no?
Que hay dos semanas sin entrenamiento, pero que ahí estuviste andando,
que además me acuerdo de hablar contigo, ¿no?
Un día estuvimos hablando y tú ibas caminando, ibas con tu pareja,
ibas por el monte ya con la escayola, ¿no?
O con lo que te pusieran, y ya estabas haciéndote dos, tres horas por ahí andando, ¿no?
Entonces, claro, eso al final es un interés compuesto que lo que la gente no ve, ¿no?
Que esa continuidad, continuidad, continuidad, continuidad,
pues claro, va sumando y parece poco, ¿no?
Dice, un vatio más, un vatio menos, ¿no?
Un pelín más de adaptación.
Pero claro, juntas 24 meses seguidos, y claro, la diferencia es grande.
Sí, sí, recuerdo el este, el de la lesión.
Al principio era más agobio decir, ostras, ya era un parón,
con lo bien que íbamos, con la progresión que llevábamos,
pero al final de ese parón, pues oye, se pudo hacer lo mejor posible y ya está.
Y luego sí, ostras, yo estoy súper contento también.
O sea, es lo que te he comentado antes de empezar la entrevista.
O sea, cuando te metes en tu día a día y, por ejemplo, mueves 2,90 y al día siguiente mueves 2,87,
incluso te frustras y dices, ¿cómo puede ser?
Por si el otro día movía más.
Pero si, ostras, amplías la mirada, vas hacia atrás y realmente ves de dónde vienes,
es lo que decías, ¿no?
Si quitas el ruido, ves como poco a poco va más, poco a poco va más,
como cuando se acerca verano vas mejorando y cuando se acerca el invierno, ¿no?
Pues normalmente hay un descanso, hay esa caída y aceptarla.
Simplemente no dejarlo, aceptarla y ya está.
Sí, sí, pero ya te digo yo, ostras, ahora lo pienso.
Yo creo que nunca me planteé poder mejorar tanto en dos años.
No.
Claro, fundamentalmente ya no los vatios, ¿no?
Porque no es lo realmente importante, sino el verte en las marchas, ¿no?
Porque has mejorado ya no solamente en rendimiento, ¿no?
O en fondo, sino también en todo, ¿no?
Meterte en el pelotón.
De hecho, ahora pues te vas a meter este año en carreras sociales, ¿no?
Carreras en máster o en algunas, que va a ser un paso más, ¿no?
O sea, de venir en 2022, de caerte en la cicloturista a competir en máster,
es un progreso, o salir, yo por lo menos lo veo como un salir de la zona de confort impresionante.
Sí, sí, sí.
Joder, salir de la zona de confort y sí.
A ver, ostras, tengo mucha intriga de ver cómo me sentiré.
Soy consciente que los nervios no me suman para ese día, sobre todo la primera vez,
porque si la primera vez te va bien, ya encaras la segunda con más confianza.
Si la segunda va bien, encaras la tercera con más confianza, ¿no?
Al final esto, cuanto más te expones y lo vives, pues más lo normalizas.
Pero esa primera sé que los nervios no me van a jugar, no me van a sumar.
Intento pensar, estate tranquilo.
No voy a estar tranquilo.
O sea, es así, pero porque es algo nuevo.
Bueno, no nuevo, pero la última vez fue una caída.
Entonces, bueno, es eso, no conformarme con lo que hay ahora.
Quiero ver, a ver, hasta dónde se puede llegar y lo vamos a intentar.
Y creo que la única manera es salir de eso, de la zona de confort realmente.
Es lo que te hace ir subiendo.
Exactamente.
Y como decíamos antes, que la única forma de progresar ahí,
de sabes, colocarte en el pelotón, de perderle el miedo,
de tener mejor estrategia, es meterte, ¿no?
Porque sí, tú puedes, podemos hablarlo ahora aquí, a 50 pulsaciones.
Decir, bueno, pues tienes que ir de esta forma,
ir por el lado del pelotón, guardándote, tal y cual.
Pero, mira, eso no es lo que pasa cuando vas a 180, a 50 por hora,
cuando se va haciendo el látigo, ¿no?
Pues es que eso tienes que vivirlo, ¿no?
Y es otra experiencia y, bueno, a lo mejor poniéndolo gradualmente, ¿no?
Y en la primera carrera, pues, sabes que tampoco tienes que aspirar,
ni a estar bien colocado, ni a ir en mitad del pelotón, ¿no?
Tienes que exponerte progresivamente y a lo mejor puedes, o si te ves bien,
intentar ir adelante, incluso intentar meterte en una fuga, ¿no?
Y reducir el tiempo en pelotón o ir un poco más a cola,
pasar puntualmente, pegar algunos ataques,
pero no pretendés correr como si fuese Peter Sagan en la primera carrera, ¿no?
Porque al final el exceso también de valentía, ¿no?
Creerse más de lo que eres, pues es lo que lleva a eso,
a que esa primera prueba te salga mal, te caiga, le cojas miedo,
porque pasas de cero a diez de golpe.
Sí, sí, sí.
Joder, sí, la verdad que, ostras, cuando hablo contigo y me explicas, tal,
tú al final tienes mucha experiencia en esto y yo intento interiorizar y tal,
pero cuando empieza no tienes eso en la cabeza.
O sea, creo que es lo último que te pasa por la cabeza.
Y quizá hasta que no llega un momento de calma,
que quizá llegará con más carreras, ¿no?
Pero un momento de calma donde esté en el pelotón metido y pueda pensar
conscientemente y diga, vale, voy a intentar aplicar lo que me ha dicho Manu, ¿no?
Ese día será cuando intente, pero no sé si será la primera, la segunda, la tercera,
pero bueno, sé que eso, al principio tienes que ser de forma consciente
hasta ir automatizándolo, ¿no?
Como cuando conduces, que al final te sale todo solo,
pues me imagino que esto será lo mismo.
Exactamente. Es que ahí no puedes pensar, no da tiempo.
Pues son comportamientos instintivos, ¿no?
Igual que la toma de curvas, las bajadas, en fin.
Bueno, al hilo de esto, ¿no?
Te decía también lo de desarrollo personal, emprendimiento,
porque de este proceso de entrenamiento que has seguido, ¿no?
Bueno, entrenamiento, disfrute, etcétera.
Al final decidiste, pues, hace un tiempo documentarlo, ¿no?
Y empezar a contar en Instagram un poco tu historia, tu...
Bueno, como... O sea, a mí me gusta verte, la verdad, porque es sentido común en un mundo
que cada vez parece que hay menos sentido común.
Es como que tú lo cuentas, súper realista, ¿no?
Siendo súper sincero.
Y, joder, además he ido gustando, ¿no?
O sea, de hecho, tienes ya más de 30.000 seguidores en Instagram, ¿no?
O sea, tienes más de cinco veces más que yo ya contándolo súper bien, ¿no?
O sea, sin vender humo, sin nada, ¿no?
Y entonces, claro, también me parece interesante saber eso.
¿Por qué te decides a...
Oye, voy a contar mi vida y a ver si puedo ayudar a alguien o no?
Pues, mira, pues todo también empezó para salir de mi zona de confort.
Un poco por eso.
Me autoobligué un poquito.
Yo siempre... Bueno, y sigo siendo muy vergonzoso.
Me cuesta mucho exponerme.
Al principio voy con...
Bueno, pues lentamente conocer a la gente.
Y al final me voy exponiendo.
Pero esto fue como un...
Venga, va.
Tienes que exponerte de una manera que lo puedes hacer,
aun teniendo la protección que lo estás haciendo tú solo con una cámara, ¿no?
Pero al final no deja de ser también la exposición social.
Dije, voy a intentarlo.
Oye, a ver, ¿qué pasa?
¿Te vas a pasar muchas horas sobre la bicicleta?
¿Por qué no contarlo, no?
Pues...
Y...
A ver, yo toda la vida había seguido, pues, a gente del mundo del ciclismo.
Me gustaban mucho los retos que hacían y demás.
Y fue una forma también de ponerme a prueba y eso, dar un poco la cara, que es lo que siempre me había costado.
Ostras, yo las presentaciones en el cole las sufría mogollón.
Cada vez las fui llevando mejor y esto era un pasito más.
Un pasito más.
Joder, macho, me siento súper identificado.
Y lo mismo que dices, ¿no?
De las presentaciones en la universidad, de ponerme súper nervioso, teniendo que exponer delante de 30 personas que estaban mirando el móvil, realmente, ¿no?
Pero en ese momento era como, ¡qué nervio!
Y ahora, fíjate, estamos aquí, ¿no?
Por un proceso, lo mismo que decíamos de meternos en el pelotón, un proceso de entrenamiento progresivo, ¿no?
Donde, obviamente, si te pones a presentar delante de una audiencia, en un pabellón, si estás preparado al principio, te da un trauma, ¿no?
Y entonces no vuelves a hacerlo.
Pero si vas haciendo así poco a poco con nosotros, pues llega un punto que, oye, pues mira, no tienes vergüenza, hombre.
Tampoco es verdad que estamos en casa, ¿no?
Cada uno, pero claro, tú eres consciente que llegas a muchísima gente, ¿no?
Y de hecho, no sé, Javi, si también incluso, pues, llega un punto que es inevitable que a lo mejor hasta tenga algún comentario negativo, ¿no?
Algún hate, alguna cosa, no sé cómo lo gestiones.
Sí, sí, y al final sí que siempre hay algún comentario porque, a ver, no todo el mundo ve la realidad con los mismos ojos.
Entonces, aunque tú intentes ser lo más neutro y explicándolo siempre desde mi realidad, ¿no?
Pero siempre llega algún comentario negativo, algo que te toca las narices y, a ver, molesta.
Yo tengo poco, muy poquito, pero cuando llega reconozco que me molesta.
Sí que es verdad que eso con el tiempo lo vas llevando mejor, te importa menos.
Al principio era como una puñalada, no te voy a engañar, pero con el tiempo lo vas un poco, no te iré normalizando, pero mejor, lo llevas mejor, lo llevas mejor.
Y ves que quizá lo peor que puedes hacer es incluso darle bola porque a veces simplemente busca eso, tu respuesta, tu enfado y, mira, es mejor pasar o si crees que tienes que hablar con él, le hablas por privado y, oye, ¿te pasa algo?
En plan, no sé, intento siempre de la forma más correcta posible saber, porque a veces, oye, detrás de esto hay una persona con, yo qué sé, con un problema o, pues si puedes ayudar, pues, oye, mejor.
Exactamente, al final muchas veces, pues eso, la gente lo está pasando mal, ¿no? Cada vez parece que es peor, ¿no? Parece que el estado en el que estamos ya como país no ayuda, ¿no?
Pero bueno, aparte de todo eso, ¿no? Y como te decía antes, o sea, claro, ahora habéis creado un centro de fisioterapia llamado EREIN, ¿no?
Que me ha gustado mucho, además, la traducción, que no lo conocía, que significa sembrar en castellano, ¿no? Y claro, me parece, o sea,
alucinante, ¿no? O sea, una persona con 25 años ya saca su centro, o sea, se atreve, saca su centro de fisioterapia, además con clientes, ¿no?
Con ya con bastantes ciclistas, ¿no? Que al final, oye, es una cosa que, mira, te gusta el ciclismo, te pones a trabajar, a practicar el ciclismo y ahora sacas tu centro de tu especialidad, ¿no?
De lo que a ti te gusta y encima pudiendo también llevarlo a ayudar a ciclistas, ¿no? O sea, bueno, ¿qué tal con el centro?
Bueno, pues la verdad que mejor de lo que me esperaba, eso sí, también tengo que agradecer que el puntito de partida, lo que detonó, que empezáramos,
se lo tengo que agradecer también a mi pareja. Si hubiera sido por mí, quizá me hubiera esperado un poquito más,
pero me sirvió de, venga va, pues vamos a darle. O sea, si salen mal, pues aprenderemos, me imagino.
Entonces, pues eso sí que tengo que reconocer que el último pasito me ayudaron, bueno, mi pareja y socia ahora,
trabajamos juntos aquí y, ostras, ahora yo lo pienso, ahora que llevamos ya, esta es la cuarta semana,
llevamos muy poquito, realmente, pero digo, ostras, soy ciclista por la mañana y fisioterapeuta por la tarde, ¿no?
Que me gusta mucho, estoy muy enganchado en mi rutina, ya me gustaba antes, pero ahora más y encima, ostras,
tienes a un ciclista muchas veces tumbado o lo que sea en la camilla, entiendes perfectamente lo que te está contando,
él, de alguna manera, ve que tú le entiendes quizá mejor que otros profesionales porque no viven ese deporte,
entonces no hay nada como vivirlo para entenderlo y, ostras, estoy aprendiendo mogollón.
Y también me doy cuenta de lo que me queda por aprender, que siempre lo he tenido presente,
que siempre hay que seguir y seguir aprendiendo, pero es que mucho, o sea, queda mucho, mucho por picar.
Sí, sí, bueno, pero es un viaje, la verdad, que se nota que te apasiona y es lo chulo, ¿no?
De hecho, hay una frase que no sé de quién es, o sea, escuché a John Tuvao que decía algo así como
no puedes competir contra el que está jugando, ¿no? Contra el que le gusta lo que hace, porque yo lo pienso,
a mí hay veces que me preguntan, oye, ¿cuántas horas trabajas? ¿Cuántas horas le dedicas a la semana?
Pues ni puta idea, pues sí, cuando tengo libre me pongo a leer cosas que tienen que ver con entrenamiento
o voy con la bici y voy escuchando un podcast de cosas también de salud, tal, pues dices, ¿cuántas horas son?
Pues si sumo a esas, un montón, ¿no? Entonces no podemos ni siquiera medirlo, ¿no?
Y pasa por lo que dices tú, que por la mañana eres ciclista, por la tarde eres fisio,
pero en realidad las dos cosas son las mismas, ¿no? Porque has construido, yo creo que como te pasa a mí, ¿no?
Tenemos un núcleo que es lo que nos gusta, que es el ciclismo o el deporte, mejor dicho, ¿no?
Porque, bueno, puede ser ciclismo, puede ser tri, puede ser otra cosa.
Y a ese núcleo pues le vamos añadiendo cosas, ¿no?
Pero siempre intentando hacer lo que nos gusta, ¿no?
Entonces, claro, tú como fisio, yo creo, ser ciclista te hace que entiendas mucho más
las lesiones o los problemas que pueda tener cualquier deportista que te venga, ¿no?
No va a ser lo mismo el que no ha hecho deporte que tú, que te ha doliado la rodilla,
que te has hecho agujetas en el gimnasio, que te has partido un hueso, ¿no?
Al final cambia mucho, ¿verdad?
Sí, sí, no, yo creo, bueno, a ti te pasa lo mismo, lo que te puede explicar un ciclista
con sus sensaciones sobre la bici, las entenderás mucho mejor que quizá otros entrenadores.
No sé si hay entrenadores que no se han subido nunca, pero, o sea, hacer lo que están enseñando,
pero creo que es lo mismo que tú, que ya lo has vivido, entonces sabes un poco por dónde ir
y sí que ayuda la experiencia personal.
Obviamente tienes que tener los conocimientos, tienes que estudiarlos y demás,
pero creo que la experiencia personal suma mucho, o al menos a mí me ayuda mucho,
sí, sí, a empatizar también con la persona que tienes delante.
Esto al final también va mucho de empatía.
Si no te preocupas por la persona que tienes delante, difícilmente le vas a ayudar.
Y sí que es verdad que lo que dices, ¿no?
Al final le dedicas, no sabes las horas que le dedicas porque indirectamente,
haciendo otras cosas, también estás sumando al final para eso.
Y yo me acuerdo en la universidad, ostras, tener profesores para mí muy referentes
y darme cuenta de eso.
Digo, es que está todo el día haciendo esto.
Porque por la clase, por la tarde da clases, por la mañana está en su clínica.
Luego se va a ver no sé qué el fin de semana que está relacionado con la fisio.
Es como que realmente para ser bueno en lo que haces,
no digo que no se pueda ser bueno de otra manera,
pero es vivirlo sin darte cuenta.
Y luego cuando te empecé a escuchar en el podcast,
dije, mira, otro que le pasa lo mismo.
Digo, y ya, pues también, la verdad que como un referente,
es que este tío lo vive, lo vive y lo disfruta.
Sí, al fin, hay que estar un poco loco también en este mundo moderno.
Y hasta qué punto también, a nivel de mentalidad,
crees que el haber sido ciclista, competir,
ese desarrollo personal y ese gestionar las frustraciones que tenemos con el ciclismo,
con esos problemas que has tenido y que hemos tenido todos,
crees que te ha ayudado también a lanzarte.
Porque es lo que te decía antes, o sea,
cuánta gente de nuestra edad, o sobre todo de la tuya,
cuánta gente de 25 años conoces,
que estén siendo emprendedores, sacando cosas, arriesgándose,
porque al final no es fácil, hay un componente de incertidumbre,
o sea, tú sacas un centro, no sabes si te va a ir bien o si no,
si vas a tener gente, si te vas a comer la inversión con patatas,
hay mucho trabajo de por medio,
hay incluso un proceso de atreverse, lo que dices,
oye, porque la gente dice, oye, pues mira qué fácil es este
que se pone a grabar vídeos de Instagram y tal,
pero pasamos por un proceso de que hay que salir de tu zona de confort,
como decíamos, para ser capaz de exponerte y sacar tu cara ahí,
y que salgan a todos sitios, y que te vean y no te vean.
Y yo personalmente sí que pienso que, por ejemplo,
que el deporte en general, el deporte de élite,
da esa mentalidad de alto rendimiento a la hora de emprender
o hacer cosas que la gente normalmente creo que no tiene
y que van al victimismo, al conformismo.
No sé si tú lo ves así o no.
Yo creo que sí, va bastante relacionado.
Creo que la gente que se atreve a meterse en eso,
en el deporte de alto rendimiento,
también luego lo aplica en su día a día.
Es su forma de entender las cosas, creo.
O al menos, es como lo digo yo, es como,
bueno, ya que lo hago, pues vamos con todo, ¿no?
Si no, y ojo, sí te pasa por la cabeza.
O sea, yo al final en Barcelona sí que tenía un sueldo fijo,
pero también llevo trabajando ahora desde los 19 años,
los fines de semana mientras estudiaba,
luego empecé en la escuela y dije, bueno,
pues también quizás el momento de eso, dar un paso más, ¿no?
Ha sido como todo muy progresivo.
Quizá como empecé muy pronto, pues ha llegado antes
que en otra gente, pero sí que eso creo que era el momento, quizá.
Sí, era una buena oportunidad de empezar.
Pero es eso, yo creo que la persona que tiene la mentalidad
en el deporte de esta manera,
luego en su día a día creo que ve lo mismo.
Bueno, ¿y qué esperas o qué te gustaría que ocurra en este próximo año,
en estos próximos dos o tres años, ¿no?,
a nivel deportivo, laboral?
Ostras, a nivel laboral aprender mucho más.
Y, bueno, poder trabajar como me gusta,
que ya lo estoy haciendo,
poder seguir trabajando como me gusta.
Al final, en el mundo de la fisioterapia,
tú no sé si sabrás el tema de las mutuas y tal.
No, pues en el mundo de las mutuas,
el fisioterapeuta creo que no trabaja como debería,
trabaja con poco tiempo,
le puede dedicar poco tiempo a la persona.
Entonces, creo que es muy importante,
por ejemplo, un dolor,
no solo abordar el síntoma,
sino saber cuál es su origen
para poder solventar eso, ¿no?
Siempre pongo el ejemplo de la fiebre.
Si a ti te sube la fiebre,
es por algo.
No tienes fiebre,
porque sí, quizá tienes una infección.
Hasta que no cures la infección,
no vas a quitar la fiebre.
Te va a volver a aparecer.
Tú le das el ibuprofeno,
le baja,
pero va a volver a aparecer.
Pues tu dolor cervical,
por ejemplo,
quizá es el síntoma
de algo que hay por debajo.
Quizá no,
pero eso es lo que tienes que saber.
Entonces,
en el mundo de las mutuas,
con tan poco tiempo,
es muy difícil
dedicarle el tiempo necesario
al paciente
para poder dar un buen servicio.
Al final,
la gente va buscando un servicio,
pues dar un buen servicio
y dar una solución.
Entonces,
la clínica también me permite eso,
trabajar como yo quiero.
Entonces,
a nivel profesional,
pues eso,
tener cada vez a más gente,
eso sí,
no te voy a engañar,
pero sobre todo
con esa premisa,
trabajar como creo
que realmente puedo ayudar
y luego a nivel deportivo
seguir mejorando.
Es que yo en mi cabeza
no te diré,
pues dentro de cuatro años
quiero ganar una carrera.
Pues si en cuatro años
puedo ganar una carrera,
bienvenido sea,
pero eso va a pasar
si yo sigo mejorando.
Entonces,
en mi cabeza
yo tengo el objetivo claro
que es seguir mejorando.
Cada verano ver
que estoy
un paso más arriba.
Sinceramente,
lo veo así.
No, no,
no me quiero poner un,
pues para 2028
quiero estar,
yo qué sé,
sprintando en una élite
con el grupo de delante.
Pues no lo sé,
no lo sé.
Sí sé que si
eso tiene que pasar
tengo que seguir mejorando.
Entonces,
en mi cabeza es eso,
progresar.
Exactamente.
Bueno,
me ha parecido muy interesante
lo que decías,
el tema de la mutua.
Me recuerda,
por ejemplo,
pues obviamente,
para la sanidad pública,
cuando tú vas,
tienes una cita
dentro de dos semanas
y estás allí
tres,
cuatro minutos
y obviamente
que no da tiempo
a que se sepa
que tiene,
porque además
los problemas
normalmente son complejos,
están interconectados
y muchas veces
le viene a la persona
y tiene un problema
en el estómago
que le duele la barriga
después de comer
y le viene del estrés
o le viene
de una exposición
a contaminantes
o de todo a la vez,
de todas las perturbaciones
a la vez
y eso,
claro,
necesitan mucho tiempo,
necesitan mucho trabajo
para hacerlo.
Claro,
¿cuál es el problema?
Porque tú te encuentras
el problema seguramente
el mismo que me encuentro yo,
que si tú quieres
hacer las cosas bien,
necesitas más tiempo
y necesitas cobrar más,
¿no?
Entonces,
claro,
es lo que la gente
también muchas veces
no entiende,
¿no?
Porque cuando decimos
que no hay receta,
pues que obviamente es eso,
¿no?
Una receta es
que vas al médico
y te mande ibuprofeno,
¿no?
Ahora,
cuando tú tienes un problema
que no es quitar el síntoma,
necesitas que se vean las causas,
necesitas un trabajo largo
y, claro,
necesitas, pues,
una intervención mejor,
¿no?
Entonces,
claro,
lo que no puedes tener
es por 50,
por 60 euros
un plan de entrenamiento
que sea personalizado,
¿no?
Es imposible
menos sabiendo
que tú estás pagando
la mitad realmente,
¿no?
Porque mitad impuesto
y mitad
y mitad
para entrenado.
Sí, sí.
No,
es que yo lo veo
fundamental.
Al final,
sí que a nivel
de sanidad pública
se está intentando
implementar cada vez más
y se ha mejorado mucho,
pero, bueno,
sigue faltando eso,
sigue faltando tiempo.
Entonces,
mira,
para que te hagas la idea,
yo normalmente
las primeras visitas
son de una hora y media,
se cobra algo más,
pero yo ahora,
por ejemplo,
que también estamos empezando,
no tenemos todo lleno.
Si yo luego
no tengo a nadie,
si esa hora y media
se me alarga dos,
dos y media,
a mí me da exactamente
lo mismo.
Tampoco cobro más
por hacerlo,
pero creo que
si puedo estar más rato
y cuanta más información
tenga,
estás mucho mejor,
mucho mejor.
Al final es como,
bueno,
yo ya te dije
el otro día,
la última vez te dije,
sé que te escribe poco,
hay poco feedback
a veces,
pero
entiendo que
cuanta más información
tengas tú
como entrenador,
más puedes ayudar
al final al ciclista.
Exactamente,
yo siempre digo
que el entrenamiento
tiene que ser co-guiado
y lo mismo seguro
en la consulta
de fisioterapia,
de medicina,
de lo que quieras,
porque tú como fisio
o yo como entrenador
tenemos algo
que el deportista
necesita,
o la persona,
que es el conocimiento
de la teoría,
de la fisiología,
de otros casos prácticos
que te han ocurrido previamente,
pero hay algo
que no puedes tener tú,
que como fisio,
como entrenador,
tú no sabes
cuánto le duele a la persona,
justo en qué sitio,
en qué ejercicio,
qué percepción tiene ella
del dolor,
o del movimiento,
si cree que el movimiento
es perjudicial,
si cree que el movimiento
le hace romperse
o al revés,
si cree que el movimiento
es bueno
y todo eso,
si no lo sabes,
tampoco puedes poner
un programa,
porque es que
hay muchos fisios también
que me acuerdo
de algunos así,
entre comillas,
como no deberían hacer
esas cosas
que era,
ahí va,
y venga,
infrarrojos,
corrientes,
tal,
y para tu casa.
Sí,
eso es lo que no,
yo cuando lo vi
en la universidad,
yo por suerte
pude elegir
bastante
dónde hacer las prácticas
y toqué un poco todo,
vi mutuas,
vi pública,
sanidad pública
y vi también privada
y dije esto
no lo quiero hacer,
es que no voy a ser feliz
haciéndolo,
porque no es,
no,
no,
fue como,
y por eso me decidí
también,
por esto,
pero sí,
creo que
la información
es poder,
¿no?
Dicen,
o sea que
todo suma,
al final,
ostras,
yo aquí
en la clínica
es eso,
intentar,
pues,
bueno,
es un poco
lo que tú dices
en el libro,
que por cierto
tengo aquí expuesto,
tenemos una pequeña biblioteca
y lo tengo ahí puesto,
pero el eso,
tener todo,
la persona
no es solo
su dolor,
hay muchas otras cosas
y hay que tenerlas en cuenta,
sin duda.
100%,
bueno Javi,
pues nada,
muchísimas gracias
por esta charla
tan agradable
y nada,
seguimos,
seguimos escuchándote,
¿vale?
Seguimos viéndote
en tu perfil
de redes sociales
y pues cualquier deportista
también
que tenga
cualquier tipo
de problema,
¿no?
Y especialmente,
pues,
tema de ciclismo,
de atletismo,
pues ya saben
que se pueden pasar
por tu consulta,
que por cierto,
¿qué pueblo era?
¿Cómo se llama el pueblo?
Está en Astigarraga,
está entre San Sebastián,
está muy cerca
de San Sebastián,
a unos 10 minutos
en coche.
Vaya zona guapa
para entrenar,
por lo menos en verano.
Sí,
sí,
y ahora que hay una ventana,
no sé,
dos semanas que no llueve,
también,
la verdad que es una maravilla,
eso sí,
para que sea tan bonito,
hay semanas
en las que hay que
sufrir un poco.
Sí,
sí,
hay que sufrir,
pero bueno,
es alucinante.
Tú ya estás acostumbrado,
¿no?
Después de la hipotermia,
además,
ya salió bastantes días
con el chubasquero.
Sí,
sí,
no,
ahora ya me he acostumbrado.
Por cierto,
te mando a ver
si te parecerá curioso
antes de acabar.
El otro día leí
que en Guipúzcoa,
por estadística,
era de donde más
atletas profesionales salían.
No sé
si será por el clima,
por la dureza,
por sus creencias también,
su mentalidad.
Hay que decir que
tienen un chip competitivo
tremendo todos
hasta el que sale a correr
cinco kilómetros
el fin de semana,
pero los tiene que hacer
a tope.
No sé,
por si quieres investigar
por ahí,
pero me pareció
muy,
muy curioso.
Lo investigaré,
la verdad.
O sea,
yo creo que el tiempo
seguramente influye,
aunque también
hay sitios duros,
¿no?
Y tipo,
yo qué sé,
Castilla y León,
un sitio así
que por invierno
te hiela,
después la niebla,
luego en verano
hace calor.
Pero sí,
seguramente sea también
un poco la cultura,
¿no?
Del deporte
que tenéis.
O sea,
no me extraña,
aquí desde luego
en Andalucía
no va a ser
el mejor sitio
para tener
deportistas profesionales,
ya te lo digo.
bueno,
bueno,
sí,
al final
la forma
de entender
el deporte
como sociedad
entiendo
que es un
factor clave.
También las oportunidades
que dan
los ayuntamientos
y esas cosas
me imagino
que habrá
que tenerlo
en cuenta.
Pero bueno,
ya a ver
si sacas algo
por ahí.
Pues nada,
lo investigaremos,
porque me parece
muy interesante
esta mezcla
de sociología
y geografía
con entrenamiento,
¿no?
Que de hecho
me encanta
la geografía,
¿sabes?
Ah,
pues mira,
yo aquí te puedo decir,
es más duro
que en Barcelona,
sin duda,
sin duda,
sin duda.
Bueno,
pero hay menos coches.
Eso sí,
ostras,
eso sí,
eso lo notó
un mogollón.
De hecho,
creo que no te lo he comentado,
pero ayer
hasta las 2 horas
y 20
no puse el pie
al suelo.
Y en Barcelona
me acuerdo
que los primeros
20 minutos
era parar
constantemente,
parar constantemente
y ahora
depende de lo que elija
puedo tirar,
tirar,
tirar
y si me paro
es porque
me quiero parar yo.
Sin duda,
eso hace mucho.
Sí,
sí,
sí.
No sé por Andalucía
cómo vais,
pero aquí eso
mola,
mola bastante.
Bueno,
aquí depende del sitio.
Yo donde vivo
hay días que no me cruzo
ni coche
porque
vivo en mitad
de la montaña,
pero claro,
pues en Granada
sí que era más estresante
y al final
no va igual.
Sí,
sí,
no,
yo,
mira,
recomiendo que
si la gente
se puede apartar
un poco del tráfico,
creo que eso va a sumar
para que disfruten más
al menos.
Genial,
Javi.
Pues bueno,
espero que no sea la última,
estamos en contacto,
así que nada,
un abrazo
y muchas gracias.
Un abrazo,
Manu,
muchas gracias
por traerme al podcast,
la verdad que ha sido
un gustazo
poder venir aquí
después de tanto tiempo
escuchándolo.
Pues sí,
sí,
pues nada,
seguiremos escuchándolo.
Venga,
adiós.
в proven Rochester
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