This graph shows how many times the word ______ has been mentioned throughout the history of the program.
Políticos dándose coces entre sí a propósito de la evolución del
empleo en el sector industrial y, de rebote, recibo inmerecidamente una de esas coces. Veámoslo.
Polémica en Twitter entre el Gobierno y el Partido Popular y yo en medio de ese fuego cruzado.
Todo comenzó con este vídeo de Alberto Núñez Fijo ofreciendo unos supuestos datos sobre la
evolución del empleo en el sector industrial. Pues ustedes saben perfectamente que tenemos menos
pedidos en industria, que hemos perdido peso de la industria en el producto entre los rutos de
España y que hemos perdido más de 90.000 empleos en los últimos años. La señora vicepresidenta
dice que no, ni aunque usted vuelva a cambiar al director del INE puede cambiar usted esos datos.
Fijo está diciendo que, de acuerdo con el INE, se han perdido en la industria durante los últimos
años 90.000 empleos. ¿Y qué le responde el ministro de Seguridad Social José Luis Escrivá?
Pues lo siguiente. El señor Núñez Fijo dice que se han destruido 90.000 empleos en la industria.
Veamos qué dicen los datos. Desde el inicio de la pandemia, un incremento de 76.152 empleos
industriales. Desde la llegada de Pedro Sánchez al gobierno, un incremento de 122.196 empleos
industriales. Otro bulo de Alberto Núñez Fijo al descubierto. En este caso, el ministro de
Seguridad Social está utilizando datos de afiliaciones a la Seguridad Social en el
sector industrial. Y efectivamente, si miramos las series de afiliación a la Seguridad Social desde
2018, lo que comprobamos, como podemos observar en este gráfico, es que las afiliaciones al
sector industrial han ido aumentando, salvo por el periodo especial de la pandemia. Efectivamente,
desde mediados del año 2018, cuando llegó Sánchez al poder en su primer gobierno en solitario,
las afiliaciones a la Seguridad Social dentro del sector industrial han aumentado aproximadamente
en 120.000 y desde el periodo anterior a la pandemia en alrededor de 75.000. Por tanto,
el ministro de Seguridad Social, José Luis Escriba, le está diciendo a Alberto Núñez Fijo,
usted miente porque los datos que ofrece no encajan con la realidad. Y más concretamente,
y esto es para mí lo importante, con la realidad tal como viene expresada por los datos de afiliación
a la Seguridad Social. Y es que recordemos que Fijo, cuando ofrece este dato de que los empleos en
el sector industrial han caído en 90.000 personas durante los últimos años, implícitamente hace
referencia al INE. Le reprocha a Nadia Calviño que aún cuando vuelva a cambiar al director del INE,
estos datos no los podrá maquillar. La señora vicepresidenta dice que no, ni aunque esté vuelva
a cambiar al director del INE, puede cambiar usted esos datos. Es decir, que son datos que ofrece el
INE. Y aquí es donde, desde mi punto de vista, el ministro Escriba se pasa de frenada acusando a
Fijo de perpetrar otro bulo. Y es que si Fijo se está remitiendo al INE como fuente de sus datos,
entonces previsiblemente Fijo estará utilizando como estadística de empleo o bien la encuesta
de población activa o bien contabilidad nacional. No estará usando como usa el ministro Escriba la
serie de afiliación a la Seguridad Social dentro de la industria, sino estas otras dos series
estadísticas elaboradas por el INE. Y eso es lo que de alguna manera le replico al ministro Escriba
en Twitter. Tampoco es que critique al ministro Escriba, me parece bien que utilice la serie de
afiliación a la Seguridad Social, pero en su tuit claramente falta contexto. Lo que viene a decir
Escriba es que Fijo se ha sacado completamente de la chistera ese dato y que es un bulo, un invento
sin ningún fundamento. Y yo le digo, bueno, si cogemos los últimos datos de la encuesta de
población activa y de contabilidad nacional, según esos datos, lo que ha dicho Fijo no es tan falso.
Según la encuesta de población activa, el empleo en la industria en el último año, es decir,
entre el segundo trimestre de 2022 y el segundo trimestre de 2023, ha caído en 50.000 personas.
Con respecto al momento previo a la pandemia, segundo trimestre de 2019, segundo trimestre de
2023, ha caído en 38.000 personas. Y desde que llegó Sánchez al poder, segundo trimestre de 2018,
a la actualidad, segundo trimestre de 2023, ha subido solo en 4.000 personas. Y en cambio,
los datos de contabilidad nacional, que también elabora el INE, como puestos de trabajo equivalentes
a tiempo completo, es decir, el número de personas que trabajarían en la industria si todas ellas
trabajaran a jornada completa, estos datos son algo más generosos, pero aún así constatan una cierta
caída durante el último año y un menor dinamismo del que reflejaban las cifras de Escriba durante
los últimos años. Concretamente, durante el último año se han perdido 16.000 empleos en la
industria como puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo. Con respecto al segundo trimestre
de 2019, el empleo equivalente a tiempo completo ha subido en la industria en 29.000 personas.
Y con respecto al momento en el que llegó Sánchez al poder, en 56.000 personas. Por tanto,
si cogemos la encuesta de población activa, el mensaje es 1. Si cogemos contabilidad nacional,
el mensaje es otro. Y si cogemos la serie de afiliados a la seguridad social en el sector
industrial, el mensaje es otro muy distinto. De hecho, la cifra que ofrece Feijó existe. En
ese mismo hilo especulaba, porque realmente no sabía que había hecho Feijó, pero especulaba
que lo que había hecho era basarse en la encuesta de población activa y comparar el empleo industrial
entre el tercer trimestre del año 2019 y el segundo trimestre del año 2023. Y si se
hace esa comparativa, en efecto, el empleo en el sector industrial, según la EPA, cae en 89.000
personas. Es decir, las 90.000 personas que menciona Feijó en el vídeo. Obviamente,
esta comparativa está mal hecha. Y también lo dejé escrito en este hilo de Twitter. Lo
que comenté explícitamente es lo siguiente. Imagino que Feijó estaba dando el dato de la
evolución del empleo en la industria según la EPA desde el tercer trimestre de 2019 al segundo
de 2023. En ese periodo el empleo industrial cae en 89.000 personas. Es un mal uso de los datos,
pero no es una mera invención. Lo que quería expresar con este hilo es que lo que el ministro
debería haber dicho es lo siguiente. Señor Feijó, hay distintas formas de medir el empleo en la
industria. Tenemos la serie de afiliados a la seguridad social, tenemos la EPA,
tenemos Contabilidad Nacional. Y cada una de estas series, por cuestiones metodológicas,
nos ofrecen un resultado distinto y en ocasiones contradictorio. Y desde mi punto de vista es mucho
más riguroso y sólido utilizar la serie de afiliados a la seguridad social, que es un
registro obligatorio para los trabajadores que están trabajando en un sector y no, en cambio,
la encuesta de población activa, que no deja de ser una encuesta y no un registro real de trabajadores
en un sector. Si bien la encuesta de población activa tiene otras ventajas, como que sus datos
son comparables entre países, los de afiliados a la seguridad social no, y además que pueden
recoger las cifras de empleo irregular en un determinado sector económico. Puede haber
trabajadores en la economía informal que, obviamente, no aparecen en las afiliaciones
a la seguridad social, pero que sí aparecen recogidos en esta encuesta, porque a los trabajadores
encuestados se les pregunta si trabajan en un sector, no si están dados de alta o no están
dados de alta. En cualquier caso, hay razones para preferir la serie de afiliados a la seguridad
social. Y lo primero que debería haber dicho Escrivá es esto, que hay distintos datos,
usted está utilizando una fuente de datos, que no es que no exista, esa fuente existe,
esos datos existen, pero es preferible utilizar otra. Y desde luego, lo que sí le podría haber
afeado el ministro Escrivá, en cualquier caso a fijo, es usted está utilizando no solo la EPA,
sino que la está utilizando mal, porque está comparando el tercer trimestre de 2019 con el
segundo de 2023, y debería comparar el segundo de 2019 con el segundo de 2023. No coja el mejor
momento de empleo industrial antes de la pandemia para compararlo con la situación actual. Eso no
es una forma rigurosa de hacer las cosas y solo es, en realidad, una forma de inflar el dato que
usted quiere dar, que ha caído el empleo industrial, para dar el dato más grueso de la caída, aún
cuando uno se esté comiendo la estacionalidad que puede existir en esos distintos periodos. Eso es,
desde mi punto de vista, lo que debería haber contestado el rigor el ministro Escrivá,
pero prefirió acusar a fijo de cometer, de perpetrar un bulo, cuando el dato que da fijo
existe, pero es un dato mal empleado. Pues bien, hasta aquí mi aportación. Mi sorpresa llega cuando
unas horas después, sin que el ministro Escrivá además me hubiese contestado para decir, pues sí,
tienes razón, o no la tienes, o es verdad, habría que haber contextualizado los datos de
otra manera, o aún cuando los contextualizáramos, el señor fijo miente, se equivoca, hace trampas,
y es peor hacer trampas que equivocarse y mentir. No sé, algún tipo de feedback al comentario que
le había hecho, que lo puedo recibir o no, pero mi sorpresa llega cuando, horas después, aparezco
en medio del fuego cruzado entre el ministro Escrivá y el Partido Popular. Y es que el
vicesecretario de Economía del Partido Popular, Juan Bravo Baena, da réplica a las acusaciones de
bulo contra fijo que había escrito el ministro Escrivá. Y lo que le contesta es lo siguiente.
Señor Escrivá, ¿cómo le gusta maquillar los datos? Y a continuación adjunta los datos de la
EPA del tercer trimestre de 2019 y del segundo trimestre de 2023 y dice, resultado, exactamente
90.000 empleos menos. Es decir, que Juan Bravo aquí está confirmando lo que sospechaba en un
comienzo. Y es que el dato de 90.000 empleos perdidos en la industria surgía de comparar mal
el tercer trimestre de 2019 con el segundo trimestre de 2023. ¿Y qué le contesta el
ministro Escrivá a Juan Bravo? En este gráfico, que adjunto ahora en pantalla,
en este gráfico se ve claro. Los rombos son los datos que da Núñez y Jo, elegidos expuriamente.
Los puntos son hitos clave, legislatura, pandemia, que sí permiten ver cómo evoluciona de verdad el
empleo. En el gráfico podemos ver la serie de la EPA y podemos ver la serie de afiliados a la
Seguridad Social. En el eje izquierdo tenemos la serie EPA y en el eje derecho los afiliados a la
Seguridad Social. Y como vemos, ya habíamos indicado, los afiliados a la Seguridad Social
más o menos van creciendo de manera ininterrumpida durante los últimos años y en cambio la serie EPA
se mantiene estancada con una tendencia decreciente. En cualquier caso, la discusión hasta ahí es
legítima, es razonable e incluso creo que el ministro Escrivá tiene la razón de su lado,
salvo por haber acusado de bulo a Núñez y Jo. Si hubiese dicho desde un principio que utiliza
los datos expuriamente o que los escoge expuriamente, pues habría sido una crítica acertada,
pero prefirió dar a entender que Feijó se inventaba absolutamente los datos. Sin embargo,
atención a la última línea que añade el ministro Escrivá en este tuit. Lo suyo, lo del PP,
lo suyo es de una manipulación tal que hasta Juan Rayo lo ve mal. No quiero hacer mucha sangre,
como normalmente haría con este último comentario del ministro Escrivá, porque él mismo se ha
disculpado tanto en público como en privado y por supuesto aceptó las disculpas. Yo mismo le afeé
después de ese comentario que aquí, en esta discusión, el único que no pertenece a un partido
ni le debe lealtad a ningún partido, ni está a las órdenes de ningún partido, ni tiene ningún
problema en criticar a un partido o a otro en función de lo que él, acertada o equivocadamente,
pero en función de lo que él considera que es correcto, de los tres que estábamos ahí metidos,
el ministro Escrivá, Juan Bravo y yo mismo, el único que era partidista soy yo. Y por eso le dije
que la coletilla de hasta Juan Rayo sobraba. Y aquí, elegantemente, el ministro Escrivá rectificó
en público, después en privado también, con el siguiente tuit. Touché al punto 3. Sobraba. El
punto 3 es el punto en el que le afeaba que esa coletilla hasta Juan Rayo sobraba. Lo comento
también porque cuando un político rectifica y se disculpa, dado que no es nada habitual y debería
serlo mucho más, pues cuando un político rectifica y se disculpa, hay que hacerlo notar.
Sea como fuere, creo que toda esta discusión es bastante ilustrativa de que muchas veces
los políticos se acusan de mentir entre ellos, de difundir bulos, cuando en realidad lo que
están haciendo es escoger una serie de datos que encaja en su narrativa y lo que los otros
reprochan es que no han utilizado la serie de datos que ellos consideran que tienen que utilizar.
Eso no es un bulo. Eso será un uso no riguroso, incluso espurio, tramposo, de los datos. Pero no
es un bulo. Si el ministro Escrivá utiliza los datos de seguridad social y alguien del PP le
recriminara que está mintiendo porque los datos de la EPA dicen otra cosa, pues el ministro Escrivá
no estaría mintiendo. Estaría dando los datos de seguridad social con la conclusión que cabe extraer
de los mismos. Si alguien prefiere utilizar otra serie de datos que exponga las razones por las que
esa otra serie de datos es preferible y, por tanto, porque esa otra serie estadística refleja mejor la
realidad que la que ha utilizado su adversario político. Pero bulo, bulo no es. También Juan
Bravo del PP acusa al ministro Escrivá de maquillar los datos, cuando lo que hacía el
ministro Escrivá era dar los datos de afiliaciones a la seguridad social. Lo que tanto uno como el
otro deberían haber dicho es, mis datos dicen esto, pero es cierto que hay otros datos que quizá no
tengan tanta calidad como los míos, porque si no habría utilizado esos otros, que dicen otra
cosa bastante distinta. Pero ah, si empezamos a matizar el discurso político, entonces ya no
podemos demonizar al adversario. Y si no demonizamos al adversario, entonces no caldeamos a nuestros
votantes para que se mantengan leales a nuestro partido y no se les ocurra ni por un momento pensar
que quizá han de votar al otro. Una muestra más de que la política no se basa en conciliar
opiniones contra apuestas, sino en cavar trincheras para crear bandos, para crear partes y convertir
en enemigo a una parte frente a la otra. Ya decía Carl Smith que la división básica en la política
es la división entre amigo y enemigo. Si no hay enemigos, entonces no hay política. En definitiva,
la política consiste en alimentar las peores pasiones en lugar de alimentar las mejores razones.