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Guerra intestina entre Podemos y Sumar a cuenta del reparto de los sillones ministeriales.
Veámoslo.
La legislatura apenas ha echado a hablar y Podemos y Sumar, dos partidos supuestamente
integrantes de la coalición gubernamental, ya se están tirando los trastos a la cabeza
por el reparto del poder.
Este bodevil autodestructivo entre ambas formaciones políticas ha constado de 5 actos.
En el primer acto, Yolanda Díaz, líder de Sumar, veta que los dirigentes de Podemos
puedan ocupar un ministerio en el nuevo gobierno progresista de coalición entre PSOE y Sumar.
En el segundo acto, el líder de facto de Podemos, Pablo Iglesias, amenaza públicamente
con romper la coalición parlamentaria entre Sumar y Podemos si Pedro Sánchez no mantiene
al frente de igualdad, al frente del Ministerio de Igualdad, a su esposa Irene Montero.
Y se trata de una amenaza bastante seria por dos razones.
Si Podemos se sale de Sumar y se convierte en un grupo parlamentario propio con 5 diputados,
cualquier proyecto de ley que quiera aprobar este gobierno de coalición necesitará contar
sí o sí con el consentimiento de Podemos.
En un vídeo anterior, ya explicamos que Podemos se convertiría así en una minoría
de bloqueo de cualquier proyecto de ley que llegara a las Cortes.
Pero además, y en segundo lugar, el próximo año hay elecciones europeas y si Podemos
se extiende de Sumar, Podemos concurrirá a esos comicios por su cuenta, compitiendo
directamente con Sumar.
Y eso puede suponer un riesgo para la viabilidad a medio plazo del proyecto político de Yolanda
Díaz, dado que si Podemos barriera electoralmente a Sumar, Podemos ganaría enteros para volver
a convertirse en el partido de referencia a la izquierda del PSOE.
Tercer acto.
Yolanda Díaz filtra a los medios de comunicación, y más en concreto a eldiario.es, que ha hecho
la siguiente oferta a Podemos.
A cambio de que Podemos no deje la coalición parlamentaria de Sumar, a cambio de que Podemos
deje de criticar públicamente a Sumar, a cambio de que Podemos siga votando en el Congreso
del mismo modo que todos los restantes diputados de Sumar, a cambio de que Podemos no se presente
independientemente a las elecciones europeas, a cambio de todo eso, Yolanda Díaz les ofrece
un ministerio a Podemos, pero que será ocupado no por Irene Montero, no por Yone Belarra,
la secretaria general de Podemos, sino por Nacho Álvarez, el economista de referencia
de Podemos, que hasta este momento era el número 2 de Yone Belarra en su Ministerio
de Derechos Sociales y Agenda 2030.
Cuarto acto.
Podemos rechaza públicamente esta oferta, que Pablo Iglesias llega a calificar de patética
bajo tres argumentos.
El primer argumento es que aunque Nacho Álvarez sigue siendo formalmente miembro de Podemos,
desde los últimos meses se ha ido acercando a la coalición de Sumar hasta el punto de
aceptar ser su portavoz económico.
Por tanto, en realidad, Nacho Álvarez no es la cuota de Podemos que están reclamando
en el Gobierno, sino que es un candidato de Sumar que pretenden hacer pasar como de Podemos
para decir ante la opinión pública que Podemos sí cuenta con un ministerio, a pesar de que
el veto a que ocupe un ministerio se sigue manteniendo.
En segundo lugar, Podemos se muestra indignado con que Yolanda Díaz les indique qué candidato
de Podemos ha de ocupar el Ministerio porque esa misma regla no la aplica al resto de formaciones
políticas que integran a coalición de Sumar.
Los ministros cuota de Izquierda Unida los escoge Izquierda Unida.
Los ministros cuota de los Comuns los escoge Los Comuns.
Los ministros cuota de Mas Madrid los escoge Mas Madrid.
No es Yolanda Díaz quien dice este sí, este no, este sí o este no, sino que cada una
de estas formaciones políticas tiene autonomía para decidir quién va a ser su ministro,
pero en cambio a Podemos se le impone que sólo vale Nacho Álvarez como ministro.
Y en tercer lugar, Podemos también se queja por las formas empleadas por Yolanda Díaz.
Si Yolanda Díaz quería de buena fe llegar a un acuerdo con Podemos para que cesaran
las hostilidades a cambio de un ministerio, lo que no debería haber hecho es filtrar
a la prensa la oferta que les ha hecho a Podemos.
Si filtra a la prensa la oferta que les ha hecho a Podemos es porque quiere romper las
negociaciones y dejar a Podemos como los malos, mostrando que nunca hubo una auténtica intención
de pacto, sino que solo se buscaba ganar la batalla del relato frente a la opinión
pública.
Y quinto y último acto, Nacho Álvarez, la persona de Podemos cercana a su mar a la que
se le había propuesto ser ministro cuota de Podemos en el próximo gobierno de coalición,
confirma que se le ha hecho esa oferta, pero renuncia a ser ministro porque antepone la
lealtad a su partido político, a Podemos, que no quiere que sea el ministro de Podemos
antes que su ambición personal.
No solo eso, Nacho Álvarez considera que ha perdido la confianza de su partido porque
no lo quieren como ministro y decide dejar todos sus cargos en Podemos y abandonar la
política.
Textualmente, Nacho Álvarez ha escrito lo siguiente, hoy he recibido la propuesta de
Yolanda Díaz de ser ministro en el próximo gobierno de coalición, propuesta que la
dirección de Podemos no respalda.
Agradezco mucho la confianza que Yolanda deposita en mí, pero yo no voy a aceptar ser ministro
del próximo gobierno si la dirección de mi organización no lo comparte ni lo aprueba.
En mi cultura política no es concebible aceptar un cargo institucional al margen de la organización
de la que uno forma parte.
Ahora bien, añade Nacho Álvarez a continuación, es evidente que la actual dirección de Podemos
ha perdido la confianza que depositó en mí cuando me nombró miembro de la Ejecutiva del
Partido.
Considero por tanto que lo más honesto es dar un paso a un lado y dimitir de mis cargos
en el Partido, dejando tanto la Secretaría de Economía como el Consejo Ciudadano Estatal
y la Ejecutiva.
En los próximos días concluye mi mandato como Secretario de Estado de Derechos Sociales
y, una vez finalizado este, volveré a mi puesto de trabajo como profesor de Economía
en la Universidad Autónoma de Madrid.
Ha sido un honor desempeñar este cargo, sirviendo a mi país durante estos cuatro años, y quiero
agradecer tanto a Pablo Iglesias como a Yone Belarra la confianza que depositaron en mí
al nombrarme.
Estamos ante una clara lucha por el poder dentro de su mar, una de esas luchas por el
poder tan típicas de todos los partidos políticos que Pablo Iglesias nos aseguraba que
no se daría dentro de Podemos.
¿Qué es lo que pensaban?
Si una discusión en Podemos iba a ser como en el PP o en el PSOE, donde pactan las familias,
donde tú me ofreces no sé cuántos puestos en la dirección y llegamos a acuerdos.
En este caso ambas partes mienten.
Miente Podemos cuando dice que su única prioridad es colocar a una persona de confianza y competente
al frente de un ministerio de Podemos para garantizar que así se van a desarrollar las
políticas sociales que ellos consideran pertinentes para mejorar la sociedad.
Si ese fuera el caso habrían aceptado el nombramiento de Nacho Álvarez como ministro.
Y por otro lado también miente Yolanda Díaz, cuyo objetivo último no era realmente colocar
a Nacho Álvarez al frente de un ministerio.
Su objetivo era construir un relato que le permitiera justificar ante su parroquia que
no está vetando a Podemos cuando en realidad sí lo está haciendo.
Podemos se ha convertido ahora mismo en un partido cuya única obsesión es conservar
las cuotas de poder de Irene Montero y sumar es ahora mismo una coalición política obsesionada
con destruir a Podemos para quedarse así con todo el poder social a la izquierda del PSOE.
Y como es obvio ni Podemos ni Sumar se están ahora mismo despellejando vivos en aras del
superior interés general.
Se están despellejando vivos porque están peleándose por el poder.
Su único interés psicopático, el de ellos y el del resto de los políticos, es ese,
el poder.
Y solo intentan convencerte arteriamente de que les preocupa tu bienestar de que su máxima
prioridad es tu bienestar para que los obedezcas mansamente y para que agaches la cabeza aceptando
servilmente que te gobiernen.