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Juan Ramón Rallo

Laissez faire, laissez passer. Laissez faire, laissez passer.

Transcribed podcasts: 2280
Time transcribed: 38d 6h 22m 10s

This graph shows how many times the word ______ has been mentioned throughout the history of the program.

Unidas Podemos quiere fijar precios máximos a los productos básicos que se venden en
los supermercados, presupone que en los supermercados se están forrando, inflando los precios de
venta y por tanto cosechando unos márgenes de beneficio disparatados, pero lo único
verdaderamente disparatado en esta historia son las ideas y propuestas de Unidas Podemos.
Veámoslo.
La última propuesta estrella, que debería ser más bien estrellada de Unidas Podemos
para controlar la inflación, ha sido la de fijar los precios de la cesta básica de
productos en el supermercado, es decir, que el precio de algunos bienes fundamentales,
como por ejemplo el pan, la leche o los huevos, no pueda subir de determinado nivel, y dejando
de lado los muy perversos efectos que pueden tener determinados precios básicos sobre la
disponibilidad y sobre la calidad de los productos, esta propuesta se da de bruces contra otra
que recogió Unidas Podemos en su programa electoral.
¿Y cuál es esa propuesta de Unidas Podemos que contradice la que acaba de efectuar de
fijar precios máximos a los productos básicos, a los productos fundamentales?
Pues la siguiente, medida 24 del programa electoral con el que concurrieron a las elecciones
generales que conforman el Parlamento actual.
Los productos de la agricultura y de la ganadería tendrán un precio mínimo por ley y no se
podrán comprar por precios más bajos, por ejemplo los tomates o el pollo.
Es decir, que hoy, cuando la inflación aprieta, están planteando establecer precios máximos
a los productos básicos que no se puedan vender por encima de un determinado precio.
Y en cambio, en 2019, claro, cuando la inflación no apretaba y no parecía que fuera a apretar,
proponían establecer precios mínimos, es decir, que no se pudiese comprar por debajo
de un determinado precio.
Sin embargo, muchas personas no ven que exista una contradicción entre estas dos medidas
por una razón.
Unidas Podemos ahora está proponiendo establecer un precio máximo a estos productos para su
venta al comprador final, mientras que en su programa electoral, Unidas Podemos está
planteando establecer un precio mínimo para la compra de esos productos a su productor.
Es decir, que se trata de fijar el precio de venta final y el precio de compra al productor
primario, de tal manera que quien se ubica en medio, es decir, los intermediarios, vean
estrechados sus márgenes de beneficio.
Los márgenes de los intermediarios consisten en la diferencia entre el precio al que compran
los productos a los productores primarios y el precio al que venden esos productos
a los consumidores finales.
Si limitas el precio máximo de venta a los consumidores y fijas un precio mínimo de compra
a los productores, pues entonces los intermediarios ganarán menos dinero, o esa al menos es la
mala lógica que utiliza Unidas Podemos.
¿Y por qué digo que esa es una mala lógica económica?
Pues en esencia porque presupone que los intermediarios se están hinchando a ganar dinero y que por
tanto existe en ahí unos márgenes de beneficio gigantescos que se pueden reducir tanto por
el lado del precio de venta, quanto por el lado del precio de compra.
Y esa es una historia que siempre escuchamos.
Los consumidores claros siempre se quejan de que están pagando precios muy altos,
lo cual en el actual contexto inflacionista tiene sentido, y los productores siempre
se quejan de que cobran precios muy bajos, con lo cual si el consumidor siempre se queja
de que paga mucho y el productor siempre se queja de que cobra poco, entonces la lógica
nos lleva a pensar que quien está en medio se lo está llevando crudo, cuando simplemente
puede ocurrir que el comprador se queje de que paga mucho porque le gustaría pagar menos
y que el productor se queje de que cobra poco porque le gustaría cobrar mucho más, sin
que eso implique que el intermediario está ganando muchísimo dinero por cada unidad
que le compra al productor y se la revende al consumidor.
¿Realmente el margen de beneficio que obtienen los intermediarios por cada unidad que compran
a los productores y que revenden a los consumidores es tan alto como nos están diciendo?
En absoluto, esta afirmación parte de un completo desconocimiento sobre cuál es el
modelo de negocio de los intermediarios, por ejemplo, los supermercados, las cadenas
de supermercados.
Las cadenas de supermercados no ganan dinero porque cobren un precio muy alto en relación
a sus costes por cada unidad que venden.
De hecho, el margen de beneficio unitario, es decir, cuánto gana un supermercado por
cada unidad que vende, es bajísimo.
Los supermercados ganan mucho dinero porque, aún ganando muy poquito por cada unidad que
venden, venden al cabo del año muchísimas unidades.
Es decir, más técnicamente no ganan dinero por su margen de beneficio unitario sino por
la rotación de su capital.
Van rotar muchas veces su capital, revenden todos sus inventarios muchas veces a lo largo
del año y, aunque ganen muy poco por cada unidad que venden al vender tantas unidades,
ganancias muy pequeñas por cada unidad por muchísimas unidades vendidas, al final terminan
siendo ganancias decentes.
Pero claro, si por cada unidad que venden no ganan mucho, entonces no existe mucho margen
para bajar el precio de venta o para subir el precio de compra.
Y si fuerzas una bajada del precio de venta, lo que harán los intermediarios es forzar
una bajada del precio de compra.
Y si fuerzas una subida del precio de compra, lo que harán los intermediarios es forzar
una subida del precio de venta.
Y si fuerzas una bajada del precio de venta y una subida del precio de compra, lo que
harán los supermercados será dejar de vender muchos de los productos que no serán rentables.
Pero bueno, esto que estoy diciendo son mis palabras contra la aparente lógica económica
imbatible de aquellos que dicen que los intermediarios se están forrando.
¿Quién tiene razón?
Mis palabras son las suyas.
Bueno, decidámoslo acudiendo a los datos, y los datos que son, son la cuenta de resultado
de esos intermediarios que supuestamente se están forrando.
Acudamos en este sentido a la cuenta de resultados de la primera cadena de supermercados de España,
que además es una cadena de supermercados que controla que fiscaliza estrictamente toda
la cadena previa de distribución de los productos hasta los supermercados.
Es decir, no es que compre simplemente al mercado mayorista a unos precios que le marcan
los mayoristas, no.
Esa cadena de supermercados, cuyo nombre, claro, es Mercadona, controla todo el proceso
previo desde la producción del producto hasta que llega a los supermercados.
Es una cadena que además tiene mucho poder de negociación frente a sus proveedores,
que son proveedores exclusivos a los que les fija contratos que muchas veces se denuncian
como contratos cainitas, donde Mercadona gana mucho y estos proveedores están siendo
explotados exigiéndoles que le vendan a Mercadona a unos precios muy bajos.
Pues bien, vamos a ver cuánto gana Mercadona por cada unidad de producción final que vende
a los consumidores.
Pues bien, lo primero que debería saltar a la vista si contraponemos en un momento la
cuenta de resultados de 2021 con la cuenta de resultados de 2020 de Mercadona es que
Mercadona en el año 2021 ganó menos dinero que en el año 2020.
Concretamente en el año 2020 ganó 727 millones de euros y en el año 2021 680, pero Mercadona
ganó menos dinero en 2021 que en 2020 porque vendiera menos.
No, los ingresos de Mercadona en el año 2021 fueron mayores que en el año 2020.
Los ingresos en 2020 fueron de 24.600 millones de euros y en el año 2021 de 25.500 millones
de euros.
Por tanto, en 2021 Mercadona vende más, ingresa más por ventas y sin embargo termina
ganando menos.
Pero centrémonos en los resultados de 2021.
Mercadona en 2021 ingresó por ventas 25.500 millones de euros y después de restar los
gastos vinculados a la generación de esos ingresos, en primer lugar los gastos por
aprovisionamiento, es decir, la compra del propio producto que luego va a vender.
En segundo lugar los gastos de personal, Mercadona tiene trabajadores que son los que atienden
a los clientes y los que venden esos productos.
Y en tercer lugar, aunque se trata de las partidas de gastos más reducidas, pues otros gastos
vinculados a ese proceso de venta de los productos, como por ejemplo el gasto en electricidad
de los locales de Mercadona o la propia amortización de los locales de Mercadona, es decir, los
supermercados de Mercadona no son eternos, con el paso del tiempo se van deteriorando
y hay que ir renovándolos y todo eso tiene un coste que también se va imputando regularmente
en la cuenta de resultados.
Pues bien, después de todos estos gastos, que son gastos propios de Mercadona para
poder suministrar, para poder ofrecer, para poder vender esos productos que compra a sus
proveedores, a los consumidores finales, ¿cuánto gana Mercadona?, ¿cuál es su beneficio operativo,
que no su beneficio final, porque luego hay que tener en cuenta, por ejemplo, los gastos
financieros de Mercadona o los impuestos que paga Mercadona, pero ni siquiera vamos
a tener en cuenta todo esto, ¿cuál es el beneficio operativo que obtiene Mercadona
sobre sus ingresos? 835 millones de euros.
Si dividimos el resultado de explotación, 835 millones de euros, entre los ingresos
por ventas de Mercadona, 25.500 millones de euros, lo que obtenemos es que, en promedio,
por cada euro que vende Mercadona, que vende Mercadona a los consumidores finales, Mercadona
obtiene unas ganancias de, atención, 3,2 céntimos de euros.
Por un producto que cueste 10 euros en Mercadona, lo que está ganando Mercadona antes de impuestos
son 32 céntimos de euros.
No parece que aquí haya un margen gigantesco que permita bajar muchos céntimos los precios
de venta y subir muchos céntimos los precios de compra.
Y es que, como ya he dicho, el modelo de negocio de los supermercados no consiste en inflar
los precios de venta y deprimir los precios de compra.
El modelo de negocio de los supermercados consiste en mantener muy bajos los precios
de venta, quizá a costa de mantener también muy bajos los precios de compra, eso sí,
pero para bajar los precios de venta y conseguir que haya mucha rotación de sus mercancías,
es decir, que haya muchas ventas de sus mercancías.
Si tú inflas los precios de venta, el consumidor se irá a otros supermercados o dejará de
comprar parte de tus mercancías y a ti no te interesa tener un stock que se te queda
atascado en el supermercado y que además tiene una caducidad muy temprana, a ti lo
que te interesa es vender y volver a comprar a los productores originarios para volver
a vender rápidamente a los consumidores y para eso lo que tienes que hacer es ajustar
al máximo los precios a tus costes, ganar muy poco por unidad y conseguir vender muchas
unidades.
Si penséis que este es un modelo de negocio exclusivo de mercadona, todas las cadenas
de supermercados tienen el mismo modelo de negocio, de hecho, mercadona es la cadena
de supermercados más rentable de España, es decir, que en teoría debería ser la
que tiene un margen de beneficio unitario más alto y estamos viendo que ese margen
de beneficio, promedio, claro, por unidad de producto vendida es de 3,2 céntimos, de
hecho, si nos vamos a la segunda cadena de supermercados de España, Carrefour, comprobaremos
que ocurre exactamente lo mismo que con mercadona, en el caso de Carrefour lo que tenemos son
datos agregados no solo de su actividad en España sino de su actividad mundial, aunque
España es su segundo mercado después de Francia, con lo cual siendo sus mercados principales
Francia y España nos podemos hacer una idea bastante aproximada de qué sucede también
en España y en el caso de Carrefour además sí tenemos datos actualizados del primer
semestre del año 2022, ese semestre de la guerra donde los intermediarios han subido
muchísimo más los precios y se han forrado.
Pues bien, los ingresos por ventas de Carrefour en el primer semestre del año 2022 sin duda
se han disparado frente a los del primer semestre del año 2021, en particular los ingresos
por ventas de Carrefour en el primer semestre de 2022 fueron de 39.000 millones de euros
mientras que en el primer semestre del año 2021 fueron de 34.000 millones, un incremento
muy sustancial.
Ahora que aumenten los ingresos no significa necesariamente que Carrefour esté ganando
mucho más dinero porque pueden haber aumentado tus ingresos pero también tus gastos y esto
es en buena medida lo que ha ocurrido, de hecho los beneficios operativos de Carrefour
en el primer semestre del año 2022 han pasado de 740 millones de euros a 814 millones de
euros, es un incremento que no está mal pero recordemos que los ingresos habían subido
en 5000 millones de euros y los beneficios operativos antes de gastos financieros, antes
de extraordinarios, antes de impuestos únicamente han subido en 70 millones de euros, tienes
que vender 5000 millones de euros más para ganar 70 millones de euros más.
En todo caso, ¿cuál es el margen de beneficio unitario de Carrefour en el primer semestre
del año 2022?
Pues si dividimos 814 millones de euros entre 39.000 millones de euros, obtendremos que
Carrefour gana por cada euro que vende a los consumidores 2 céntimos de euro, gana todavía
menos que mercadona.
En términos promedio, ¿por tanto cómo vamos a exprimir a Carrefour?
Obligándole a que baje un céntimo los precios de venta promedio a los consumidores y a que
suba un céntimo los precios que paga en promedio a los productores primarios o es que la alternativa
es asfixiar financiamente a Carrefour y llevarla a perder dinero.
En definitiva, y como suele ocurrir las propuestas económicas de unidas Podemos, parten de un
absoluto desconocimiento de la realidad económica subyacente de aquello que pretenden regular,
que pretenden controlar y que pretenden planificar.
Se han montado una película propagandística de que los precios suben porque los intermediarios
se están forrando, claro no van a decir que los precios suben porque los agricultores
están forrando porque además no lo están haciendo, con lo cual hay que echarle la culpa
a los intermediarios inventándonos que se están hinchando a ganar dinero cuando no
lo hacen y desde luego, si lo hacen, no es porque vendan mucho más caro aquello que
compran a los productores, sino porque logran vender muchas unidades a un precio muy ajustado,
muy reducido en relación con los precios de compra, es decir, con márgenes de beneficio
por unidad vendida muy estrechos.
Con en definitiva un peligro bolivariano para nuestra economía.