This graph shows how many times the word ______ has been mentioned throughout the history of the program.
¿Puede un candidato como Rodolfo Hernández ajeno al establishment político colombiano
derrotar a un político de raza a alguien a quien se consideraba virtual próximo presidente
de Colombia como Gustavo Petro? ¿Lo va a tener muy fácil o muy difícil, Gustavo Petro,
para convertirse en segunda vuelta en el próximo presidente de todos los colombianos?
Veámoslo.
Gustavo Petro y Rodolfo Hernández serán los dos candidatos que se disputarán la presidencia
de Colombia el próximo 19 de junio. El caso de Gustavo Petro era perfectamente esperado,
pero la sorpresa saltó con Rodolfo Hernández, dado que la mayoría de encuestas hasta el
momento habían anticipado que quien le intentaría disputar a Petro la presidencia de Colombia
sería Federico Gutiérrez, fico. Pero esto, como es bien sabido, no fue finalmente así.
Rodolfo Hernández, un octogenario ajeno al establishment político, se situó por delante
de Federico Gutiérrez, pasó a la segunda vuelta y, por tanto, será el rival de Gustavo Petro.
En principio podría parecer que Gustavo Petro puede estar muy tranquilo con este rival,
con Rodolfo Hernández, dado que se trata de un personaje ajeno al mundo político y
que, por tanto, no presenta la seriedad, la solemnidad de un candidato como puede ser
el propio Gustavo Petro, de tal manera que, si enfrentamos a un político de raza con
un outsider que no tiene prácticamente experiencia en el mundo de la política y la experiencia
escasa que ha tenido, ha sido una experiencia bastante criticada, pues parecería que Gustavo
Petro ya tiene en bandeja la presidencia de Colombia. Pero lo cierto es que Rodolfo
Hernández, por buenas o por malas razones, probablemente sea el rival más complicado
para Gustavo Petro. De entrada fijémonos en los resultados finales de la primera vuelta
de las elecciones presidenciales. En esos resultados, es verdad, Gustavo Petro va en
primer lugar con bastante ventaja frente al segundo candidato más votado. Gustavo Petro
tiene un 40% de todos los votos y el segundo candidato, como ya hemos dicho, es Rodolfo
Hernández, con el 28%. Pero es que el tercer candidato, Federico Gutiérrez, quien se esperaba
que pasara a segunda vuelta, posee el 24% del voto. Federico Gutiérrez era un candidato
claramente antipetrista, anti-Gustavo Petro, de tal manera que cabe esperar que todos sus
votos, o parte al menos de sus votos, vayan a parar a Rodolfo Hernández como forma de
evitar una presidencia de Gustavo Petro. No sería en este caso un voto a favor de Rodolfo
Hernández, sino más bien un voto en contra de Gustavo Petro, un voto para evitar, para
bloquear la presidencia de Gustavo Petro. Y si se unen los votos de Rodolfo Hernández
con los de Federico Gutiérrez, llegamos a que ese voto potencialmente antipetro alcanza
el 52%. No solo eso, otro candidato claramente antipetrista, John Milton Rodríguez, consiguió
algo más del 1% de los votos, con lo cual la potencial coalición espontánea antipetrista
podría llegar hasta el 53% del voto, a falta además de lo que suceda con el 4% de votos
que consiguió Sergio Fajardo, una parte de los cuales probablemente irá a Gustavo Petro,
porque Sergio Fajardo es un candidato de Centro y Cierda, otra parte irá a la abstención
y otra parte tal vez irá a Rodolfo Hernández. Y esto mismo no podría haber sucedido si Federico
Gutiérrez hubiese sido el segundo candidato más votado y hubiese pasado en consecuencia
a segunda vuelta, pues probablemente no. El perfil antipolítico de Outsider de Rodolfo
Hernández probablemente le haya permitido pescar votos desde muchas partes del espectro
ideológico, no solo desde la derecha o desde el centro, sino también probablemente desde
la izquierda, de una izquierda a la que no le entusiasme Gustavo Petro y que haya visto
en este discurso antiestablismen y anticorrupción un discurso atrayente al que apoyar. Por consiguiente,
si Rodolfo Hernández consigue retener ese voto transversal que logró en primera vuelta
y sumar además el voto antipetrista del centro y de la derecha, entonces Rodolfo Hernández
podría llegar a ser presidente de Colombia, porque el conjunto de esos votos ya superó
en primera ronda el 50%. La clave del asunto, por tanto, reside en que el apoyo explícito
que está recibiendo Rodolfo Hernández desde sectores del uribismo no espanten a algunos
de los votantes que apoyaron a Rodolfo Hernández precisamente por no tener vinculación con
el uribismo. Si Rodolfo Hernández recibe muchos de los votos de Federico Gutiérrez a costa
de perder parte de los votos que recibió en primera vuelta, entonces el futuro de Rodolfo
Hernández se puede volver más complicado. Necesita sumar sin restar y eso en política
no siempre es fácil. ¿Y cuáles serían en consecuencia las opciones de Gustavo Petro
para crecer en número de votos y llegar a ese 50% de porcentaje de apoyo electoral
que le otorgaría a la presidencia de Colombia? Pues Gustavo Petro necesita obviamente conservar
el 40% de votos que obtuvo en primera vuelta, rascar algo del voto de Sergio Fajardo y quizá
incluso un poco del de Rodolfo Hernández si consigue persuadirlo de que Rodolfo Hernández
no es un candidato serio, no es un candidato que vaya a ser un buen presidente de Colombia
y sobre todo tiene que pescar de la abstención o tiene que conseguir al menos que parte
de los votantes de Rodolfo Hernández o de Federico Gutiérrez se queden en casa y no
vayan a votar el próximo 19 de junio. ¿O moviliza a sectores de la población que
no fueron a votar en primera vuelta? ¿O consigue que sectores antipetristas que votaron en
primera vuelta no voten en segunda vuelta? Lo que sí está claro es que Gustavo Petro
no tiene nada que pescar entre los votantes de Federico Gutiérrez ni tampoco entre la
mayoría de votantes de Rodolfo Hernández y sin poder atraer ese voto llegar al 50%
sin movilizar a tus abstencionistas o sin empujar a los votantes del contrario a la
abstención puede ser un ejercicio muy difícil. Por tanto al candidato que parecía que estaba
predestinado a convertirse en el próximo presidente de Colombia, Gustavo Petro, se
le está atragantando mucho la presidencia. ¿Qué nos dicen las encuestas? Pues la primera
encuesta que se realizó después de la primera vuelta de las elecciones presidenciales,
encuesta realizada por el Centro Nacional de Consultoría, nos indicaba que existía
un empate técnico entre ambos candidatos. Rodolfo Hernández, según esta encuesta,
concentra el 41% de la intención de voto y Gustavo Petro el 39%, un empate técnico
considerando el margen de error que podía haber en esta encuesta y que era atribuido
a que todavía había un importante sector de la población que estaba indeciso entre
si votar a Rodolfo Hernández, hubo un outsider sin experiencia gestora en política o a Gustavo
Petro. Pero es que en la segunda encuesta postelectoral que hemos conocido hoy, encuesta
realizada por la empresa española Agatres, que en España suele aproximar bastante bien
los resultados finales de las elecciones, en esta encuesta la ventaja de Rodolfo Hernández
es totalmente incontestable. Rodolfo Hernández concentra el 52,5% de la intención de voto
frente al 44,8% de Gustavo Petro. Lo que nos dice esta encuesta es que, al menos
de momento, todavía faltan tres semanas para la segunda vuelta de las elecciones, Rodolfo
Hernández sí está siendo capaz de retener a sus votantes y de añadir los votos antipetristas
del centro y de la derecha. Y, en cambio, que Gustavo Petro no está siendo capaz de
crecer electoralmente. Sí, retiene a su 40% de votantes de la primera vuelta, quizá
añada a algunos votantes de los que apoyaron a Sergio Fajardo y quizá a algunos de los
que se quedaron en casa, pero le está costando mucho y no está claro que vaya a ser posible
que Gustavo Petro crezca del 40% de los votos que obtuvo en primera vuelta al 50%, un aumento
de 10 puntos, que necesita para convertirse en presidente de Colombia en segunda vuelta.
¿Y qué nos dicen no las encuestas, sino las apuestas sobre quién será el próximo
presidente de Colombia? Pues, como podemos observar en este gráfico, antes de la primera
vuelta, el candidato que tenía más probabilidades, según las casas de apuestas, de ser el próximo
presidente de Colombia era Gustavo Petro. Sin embargo, una vez se constata que Rodolfo
Hernández pasa a segunda vuelta, las tornas se invierten y el candidato que tiene con
diferencia más probabilidades de llegar a la presidencia de Colombia, según las casas
de apuestas, es Rodolfo Hernández. En particular, en este gráfico, Rodolfo Hernández tiene
un 65% de probabilidades de llegar a la presidencia de Colombia frente al 35% de Gustavo Petro.
Pero es que este gráfico no está totalmente actualizado al día de hoy. Si lo actualizáramos
a día de hoy, Rodolfo Hernández ya tiene el 75% de la probabilidad de llegar a la presidencia
de Colombia frente al 25% de Gustavo Petro. Por supuesto, las casas de apuestas no son
oráculos sobre lo que va a suceder. Sin embargo, sí es gente que se está jugando su dinero
y por tanto que tiene un incentivo muy claro a estar bien informado sobre cuáles pueden
ser los distintos escenarios futuros. Y entre esa gente que se está jugando su dinero y
que antes de la primera vuelta consideraban que Gustavo Petro era quien tenía más probabilidad
desde ser presidente de Colombia, ahora, con toda la nueva información que tenemos, esa
misma gente considera que Gustavo Petro ya no es el candidato favorito para alcanzar
la presidencia. Pero no nos fijemos solo en las encuestas
o en las casas de apuestas, fijémonos también en la actitud de los candidatos a la presidencia
de Colombia. ¿Qué sucedió en el día de ayer? Pues que Gustavo Petro, probablemente temiéndose
lo que se le viene encima, le ofreció a Rodolfo Hernández, a quien hace apenas unos días se
calificaba de charlatán y de filo nazi. Gustavo Petro le ofreció a Rodolfo Hernández un
pacto histórico con independencia de quién pase a segunda vuelta para implementar sus
programas electorales dado que, dice Gustavo Petro, mantienen muchas similitudes. Algo
que, como ya explicamos en un vídeo anterior, es cierto. El programa de Rodolfo Hernández
es muy parecido al de Gustavo Petro, quizá algo menos radical, pero es una mezcla de
socialdemocracia y de mercantilismo. Lo llamativo no es esto, lo llamativo es que Gustavo Petro
ya esté adoptando una pose de perdedor. Por supuesto, quedan tres semanas, muchas cosas
pueden cambiar en tres semanas, pero de momento lo que parece es que la presidencia se le
está poniendo muy cuesta arriba a Gustavo Petro.