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Como sabéis, la convención se organiza este año en torno a los libros, en torno a la literatura liberal.
Y en esta charla de apertura, lo que me gustaría es hacer algo que bueno, a lo mejor la mayoría de vosotros no os aporta demasiado,
a otros quizás sí, y es simplemente mencionar, comentar verdaderamente varios títulos,
varios libros, libros no papers, solo libros, que creo que son fundamentales, desde un punto de vista filosófico o económico,
para el desarrollo y la defensa adecuada de las ideas de la libertad.
Títulos que creo que todo el mundo debería leer, o practicar que todo el mundo debería leer,
si quiere acometer una defensa verdaderamente integral y coherente del liberalismo, en la mayor cantidad de ámbitos posibles.
Entonces, libros dedicados a fundamentar filosóficamente o moralmente el liberalismo,
libros que expliquen por qué el liberalismo es el sistema político, económico, social,
y que consigue la coexistencia pacífica de las personas y el progreso de todas ellas.
Bueno, hay varios que creo que son positivos en este sentido.
Uno, por ejemplo, que a mí me marcó y me gustó mucho, es el Persons Rights and Moral Communities de Loren Lomansky.
Es un libro que está no muy conocido, pero Lomansky es uno de los filósofos de referencia de cabecera dentro de la familia liberal.
Es un libro del año 87 y que no ha perdido actualidad.
Un libro donde se explica cómo desarrollar desde el inicio las ideas liberales y cómo hacer una sociedad o cómo estructurar moralmente una sociedad más libre.
Otro libro, este sí, mucho más conocido y que es un libro de cabecera para los liberales,
que se desanarquía hasta hoy en su vida, es un libro donde, como su nombre indica, explica por qué la anarquía no es necesariamente o no es un sistema que los liberales puedan defender.
Por supuesto, aquí hay mucho debate, porque el estado mínimo que estructura Lomansky es el estado máximo que los liberales pueden defender
y porque el liberalismo, en última instancia, es un marco para la existencia de utopías morales y políticas muy diversas.
Otro libro, también de cabecera, probablemente el libro que más liberales abrace para fundamentar las ideas de la libertad, no es el mejor en todos ellos,
pero si es un libro que a mí me impactó muchísimo, luego con el tiempo lo vas corrigiendo en cierta medida y que es, en cada modo, un contrapunto del denuncio,
que es la ética de la libertad de Murray Roth, por qué las ideas de la libertad se pueden, de nuevo,
él no explica cómo fundamentarlas, pero sí explica cuál es el desarrollo lógico de las ideas morales de la libertad y Rothbard, lo que dice es que el estado es absolutamente injustificable,
porque atenta contra los derechos naturales. Otros libros para fundamentar el liberalismo de Libertad y Anaïdía, de Jean-Marverson, que es un suelo supo canadiense,
a la capitalista también, no hace prisioneros, básicamente no adlite ningún tipo de hegebranto contra la libertad individual, contra la propiedad privada, contra los contratos,
y desde un punto de vista contractualista, que quizá es algo no muy común dentro de la familia liberal, consiga articular las ideas de la libertad.
Y dos últimos libros de fundamentación de las ideas liberales. Por un lado, Simple Rules por Aconcrete's World, que es regla simple,
porque ahí también es castellano por un mundo complejo, desde Charles Epstein, de nuevo, no estamos hablando en este caso de un filósofo anascapitalista,
que es un turista más que filósofo, sino de una persona que intenta articular principios muy elementales, principios políticos, principios anales del derecho muy básicos,
para resolver los problemas complejos de esta sociedad, de estas anancias como los que tenemos, según Epstein, con la libertad individual, la propiedad privada, los contratos,
las reparaciones del año causado, principios que vienen prácticamente todos ellos de nuestro derecho romano, se consigue silencial en un estado megaintervencionista,
para resolver la mayoría de las problemáticas sociales. Y por último, un libro espectacular, quizá, en gran medida, mejor de todos ellos,
es La Instructiva de la Libertad y Charles Liberty, de Randy Barney. Barney es, de nuevo, un filósofo jurista hallequiano,
espero que intenta desarrollar las implicaciones jurídicas de Hayek y exponer como, si queremos resolver problemas básicos, problemas esenciales para la convivencia humana,
como es el problema de información, el problema de incentivos, el problema de poder y coordinar a las personas para que coperen y generen triqueza,
prácticamente entre ellas como el liberalismo, el derecho de propiedad, los contratos, la libertad individual, la libertad empresarial,
como el liberalismo, que es el único sistema capaz de conseguirlo.
Bien, libros, ya no de fundamentación del liberalismo, había algunos más, pero por extenderme, creo que estos son los principales libros,
no de fundamentación del liberalismo, sino de fundamentación del ataque al enemigo máximo del liberalismo, que es el Estado, libros contra el Estado.
Bueno, empecemos con un libro que no es antiestado, pero que, desde luego, sí expone cuáles son los problemas de que el Estado se entrometa en demasiados ámbitos de nuestras vidas,
que es Camino de Servidumbre de Haye. En Camino de Servidumbre de Haye lo que advierte es cuidado con el Estado de Bienestar,
porque lo que puede parecer un Estado paternalista, un Estado benevolente, un Estado que se preocupa de los ciudadanos,
en última instancia lo que termina instituyendo, lo que puede terminar instituyendo, es un control absoluto de la política sobre la sociedad.
Y esto lo estamos viendo continuamente en debates como la educación, como la sanidad, una vez los políticos quieren que manejar,
cómo nos educamos, cómo nos curamos, cómo ahorramos para nuestra presión, en última instancia los políticos se convierten en dueños de nuestras vidas,
desde la junta a la secultura, y los políticos pueden, con el palo y la zanahoria, a través del Estado de Bienestar,
orientar incluso el resultado electoral, comprar votos o excluir opciones ideológicas que no les sean de su agrado.
Por tanto, más allá de la ineficiencia que el Estado de Bienestar puede tener a la hora de proporcionar servicios fundamentales
que deberían estar justamente por ser fundamentales en manos del marcado, en manos de la sociedad civil,
existe un peligro, añadido un peligro político que es el de la totalización, totalización del poder político a los homos de ese Estado.
Luego, otro libro que este tampoco se ha antiestado, me dejo los dos antiestados para el final,
este tampoco se ha antiestado, sino que ha hecho una justificación del Estado, de nuevo del Estado mínimo,
que es The Limits of Liberty, de Jane Fukana.
Básicamente, es un libro sobre por qué la anarquía no funciona, por qué la anarquía es un sistema inestable
que tiende a generar necesariamente un Estado.
De nuevo, creo que es un libro que los libiales deben leer, deben entender,
y si quieren rechazar el Estado deben ser capaces de refutar.
Y los dos últimos libros sobre el Estado, esto sí claramente antiestado.
El primero es el Estado de Anthony de Jasé.
Anthony de Jasé, filósofo economista, recientemente fallecido, está su bracumbre.
Y básicamente empieza el libro con unas palabras que creo que son muy relevantes
y que normalmente no adoptamos a analizar el poder político.
Imagina que usted es el Estado, ¿qué haría?
Normalmente en el Estado lo vemos como un ente benevolente,
como un ente que está manejado por seres casi honestientes y seres de luz
que son bien intencionados y que velan por el interés general,
y en realidad el Estado es una máquina de poder, una máquina de control
que evidentemente se subordinan a los intereses de aquellos grupos,
ya sean políticos, burocratas, lobis, que consiguen controlar el Estado.
Entonces en este libro Jasé reflexiona sobre lo muy complicado
que es limitar el poder del Estado en la práctica
y cómo el Estado se tiende a utilizar para fines no demasiado nobles.
Y el último, el mejor de todos ellos desde mi punto de vista sobre este capítulo,
es un libro que por cierto va a ser aproximadamente traducido
por el Instituto Juan de Mariana, que es el problema de la autoridad política
de Michael Comer. Michael Comer es un filósofo analcapitalista
y en este libro demuestra desde mi punto de vista de un modo absolutamente concluyente
que no hay ninguna filosofía política de todas las que existen,
actualmente capaz de fundamentar y de legitimar la autoridad política del Estado.
Otra cuestión es si el Estado es inevitable o no,
pero desde un punto de vista moral no existe forma de fundamentar
de justificar la obligación política,
es decir, la obligación de someterse a los mandatos de un gobernante,
no hay ninguna forma, ninguna, la teoría democrática,
la teoría del contrato social, ninguna,
a los mandatos de un gobernante que tiene el privilegio de mandar sobre otras personas
simplemente por ser gobernante, eso es lo que no hay forma de justificar.
Y de hecho, una de las teorías más conocidas para justificar el Estado
es la de la legitimidad democrática.
Entonces, creo que los rivales también hemos de ser bastante críticos,
no con la democracia como sistema de organización de las mayorías
o de colectivos sociales que tienen que tomar decisiones
en ocasiones en ámbitos privados
y por tanto, donde hace falta esa organización y ese sistema de agregación de voluntades
sino como legitimación del Estado.
La democracia no le fitima que el Estado pueda excederse
de los limites del respeto de los derechos individuales
por el hecho de que el Estado se organiza democráticamente,
por el hecho de que haya una voluntad mayoritaria
que a través del Estado quiera conculgar la libertad, la propiedad
y los mandatos de las personas, no por eso se justifica automáticamente.
Entonces, hay que ser, en cierto modo, críticos con esta hiperlegitimación
de la democracia para atentar contra las minorías.
Es decir, hay que ser críticos contra las piranías de la mayoría.
Libros contra la democracia.
Bueno, pues, básicamente, o sobre la democracia, básicamente tres.
El primero, el mito del votante racional de Brian Kaplan.
Por cierto, vamos a tener a Brian Kaplan este mes de junio, todo el mes,
aquí en la Universidad de Francisco Marroquín, impartiendo varios seminarios
sobre sus libros, entre ellos este.
¿Cuál es la tesis de Kaplan?
Tendemos a pensar que en la democracia al agregar los votos
de mucha gente que tiene sesgos respectivos, ¿no?
La izquierda tiene sus sesgos, la derecha tiene sus sesgos.
Bueno, de algún modo, cuando agregamos muchos votos de gente muy sesgada,
el término medio de todos esos votos será la virtud.
Y, por tanto, la democracia nos conducirá a una decisión virtuosa
en función de la irracionalidad, de la agregación,
de la irracionalidad relativa de muchas personas.
Lo que les mostré a Kaplan en este libro es que no.
Que los votantes estamos sesgados, no es que haya sesgos distribuidos
aleatoriamente por toda la muestra de votantes, sino que estamos sesgados
en una dirección.
Y, por tanto, la democracia lo que proporciona son resultados sesgados.
Por ejemplo, sesgados en contra del mercado, en contra del inmigrante,
en contra del comercio exterior.
Todos estos sesgos están muy concentrados en el votante,
por tanto, cuando se vota sale esto sistemáticamente,
aunque sean decisiones malas.
Si uno se pone a estudiar sobre estos temas,
se ve que el mercado funciona, se ve que una inmigración
que permita a la integración es totalmente beneficiosa para una sociedad,
se ve que libre comercio es positivo,
incluso Paul Gruchman defiende libre comercio
y, sin embargo, a la hora de votar, a la hora de ejercer nuestro derecho soberano
decidir lo que hacemos es votar mal, votar sistemáticamente mal,
votar incluso en contra de nuestros propios intereses.
Y el otro libro, Contra la Democracia,
es un libro que ha traducido el Instituto Juan de Mariana,
que se llama Contra la Democracia, de Jason Brennan,
donde explica por qué la democracia, en última instancia,
es un sistema de fanatización de las personas,
no es un sistema para alcanzar ningún tipo de consenso racional,
sino para hacer una especie de guerra de todos contratos a través del voto.
Y ya el último libro sobre la democracia,
no es exactamente sobre la democracia, pero creo que es un libro que los liberales deben leer,
se llama Governing the Commons, Governando los Comunes,
de la novel El Ignoroso, donde explica cómo organizar propiedades colectivas
también a través de la democracia.
Este sí es el ámbito donde la democracia puede tener sentido.
Y bueno, para ir cerrando, porque ya me ha consumido el tiempo
y tampoco quiero aburriros.
Muy rápidamente, libros sobre capitalismo.
Libros sobre economía de mercado.
Fried to choose de Milton Friedman,
la acción humana de Ludwig von Mises, Capitalism de George Reisman.
Este último por cierto, tenéis que ir con una carnetilla para moverlo,
porque es un libro de este tamaño y de más de mil páginas.
Por tanto, deberé pesar como 10 kilos al personal.
Luego, si queréis algo sobre instituciones bancarias libres,
The Theory of Humanitarian Institutions de Larry White,
para entender por qué el capitalismo se basa sobre el concepto de capital,
sobre la propiedad privada de los medios de producción
y cómo no puede haber economía de mercado sin capital,
el misterio del capital de Hernando de Soto.
Y por último, sobre capitalismo,
pero sobre una visión moral del capitalismo,
un libro, Market Without Limits,
de Brennan and Jaworski.
Es un libro donde explica
por qué todo lo que podemos hacer gratuitamente,
todo lo que es admisible de toda la sociedad,
sin cobrar, también deberían poder hacerse sin cobrar.
Es un libro que creo que puede ser muy interesante,
por ejemplo, para conservadores en contra de la gestación subrogada
o conservadores en contra de la venta de sangre,
porque en este libro se explica
por qué todos sus mercados, Market Without Limits,
deberían poder abrirse.
Y por último, la trilogía del Rema Kloski,
donde explica por qué el capitalismo
no solo es un sistema de normas,
un sistema de instituciones formales,
sino también es un sistema fundamentalmente moral,
como el capitalismo no puede funcionar adecuadamente,
sino hay determinados valores,
las famosas éticas aristotélicas y cristianas
aplicadas a la era del comercio,
la perseverancia, la templanza, la fortaleza,
la caridad, el respeto a la tradición,
como todo eso, si no lo insertamos dentro
de la era comercial, de la era burguesa,
el capitalismo no puede funcionar adecuadamente.
Ya lo hayis terminando.
Sobre el capitalismo y contra el socialismo.
Libros contra el socialismo.
Dos libros.
Liberty or equality, de Eric Cohen,
Colin Ledin, es un filósofo libertario conservador,
pero donde explica por qué el igualitarismo
que promueve la izquierda en general
es un igualitarismo fundamentalmente liberticida,
porque la única libertad con Ledin ni siquiera esta,
yo creo que la única libertad tan visible
es la libertad entre la ley,
obviamente Ledin no la entiende de esta manera como yo,
que es igualdad, simetría de derechos,
y esta sí es una igualdad totalmente liberal,
pero Ledin lo que dice es
toda igualación del proceso social
que se quiera acometer,
que es una igualación que implica violencia.
Una vez uno sobresalga un poquito,
hay que cortarle en la cabeza.
Y aunque se la hayamos cortado, si luego le vuelve a crecer,
para volver a igualar, hay que volver a cortar en la cabeza.
Y ese es el proceso típico del planificador
del ingeniero social liberticida,
que es en última instancia en estado total del que tenemos.
Y el represum es como la acción humana,
pero sobre el sistema socialista,
explicando por qué el sistema socialista no funciona,
que es el socialist system de Janos Kornay,
un economista húngaro que explica
mucho más allá de mises
porque el socialismo es un sistema
que intensicamente fracasa la hora de coordinar
a los agentes económicos.
Y ya termino.
Sobre un punto, porque el socialismo
parece que se quiera acercarlo de la asistencia social
y que los liberales no tengamos ningún discurso
en materia de asistencia social.
¿Qué pasaría con los pobres en una sociedad libre?
Pues creo que sobre esto también
hay que reflexionar un poco.
Primero, un libro
que socio-liberal, por si lo queréis,
es decir, que extiende en cierta medida
algunas ramas del estado de bienestar
dentro del idealismo.
Free market furnace de John Tomasi,
un filósofo halleguiano
pero a su vez mausiano.
Y que, por tanto,
admite cierto tipo de redistribución de la recta
dentro del esquema básico de libertades.
Un libro sobre
cómo se proporcionaba,
cómo se suministraba la asistencia social
antes del estado de bienestar,
que creo que esta es un área
donde se han trabajado muy poco,
que desconocen mucho y que habría que reivindicar.
¿Dónde explica cómo la sociedad
es de ayuda mutua?
¿Cómo las mutualidades, en el sentido más amplio
del término, antes del estado de bienestar
eran capaces de suministrar ayuda
para todas las personas?
No ayuda filantrópica, sino ayuda exigible
en términos de igualdad horizontal
de derechos.
Y, por tanto, no había una subordinación
para recibir ayuda, y cómo esto ha articulado
una sociedad civil mucho más cohesionada
que la que tenemos.
Y, por último, ya la última recomendación
encierro con esta intervención.
Lo mejor que podemos hacer los liberales
para promover el desarrollo
y la prosperidad
del conjunto es blaneta
no es crear el estado de bienestar,
es abrir las fronteras,
es liberalizar el comercio
y liberalizar el movimiento de personas.
Con inmigración libre,
obviamente libre no significa absolutamente
desordenada, absolutamente caótica.
Del mismo modo que tenemos libertad
de movimientos internas de países
y no es movimientos desordenados, caóticos,
donde los terroristas puedan ir de un lado a otro
dentro de nuestras fronteras, tampoco hasta la global.
Pero si queremos que millones,
miles de millones de personas salgan de la pobreza,
se desarrollen y, a su vez, no sean riquísicas
lo que deberíamos estar defendiendo,
y lo que defendemos muchos es
la libertad total
en materia de comercio
y libertad migratoria,
es decir, la globalización
en su estado más avanzado.
Y en este sentido
hay un libro que ha salido recientemente
sobre justicia global,
sobre derechos humanos,
desde una perspectiva liberal,
plenamente liberal, que es
Justice Atadistas
de Loren Lomanski y Fernando Tesón.
Un libro extraordinario
donde lo que
se concluye es que
nos pueden exigir los demás a nosotros.
¿Cuáles
o qué es aquello que los pobres del tercer mundo
nos pueden exigir a nosotros?
¿Que les demos ayuda exterior,
que les subsidiemos permanentemente?
No, que les dejemos en paz,
que les dejemos vivir.
Eso es lo que nos pueden exigir
y eso es lo que les tenemos que conocer.
Muchas gracias.