This graph shows how many times the word ______ has been mentioned throughout the history of the program.
Feijó no aspira a ser presidente del gobierno para derogar el sanchismo.
Feijó aspira a ser secretario general del nuevo del refundado Partido Socialista Obrero
Español para llegar a la presidencia del gobierno y consolidarse en ella.
No es el enterrador del sanchismo, sino su blanqueador.
Veámoslo.
El principal lema de campaña del Partido Popular de cara a las elecciones generales
del próximo 23 de julio ha sido eso de derogar el sanchismo.
Con esta consigna, Feijó pretendía sintetizar de manera accesible todo su programa político
y económico.
Sin embargo, y como ya manifestamos en un vídeo anterior, resulta harto dudoso que
Feijó verdaderamente quiera derogar el sanchismo.
Al menos en materia económica, el propio Feijó, a lo largo de la campaña electoral,
ha mostrado su apoyo público a políticas económicas que ha implantado el sanchismo
durante los últimos años.
Por ejemplo, Feijó se ha manifestado a favor de revalorizar las pensiones según el IPC,
de seguir subiendo el salario mínimo interprofesional, de mantener el sablazo a los trabajadores
autónomos mediante el cambio de su régimen de cotización y también del ingreso mínimo
vital.
¿Cómo vamos a creer que Feijó piensa derogar el sanchismo cuando está abrazando políticas
económicas que llevan un cuño distintivamente sanchista?
Simplemente no es verosímil.
Y de hecho, durante los últimos días, Feijó nos ha dado más muestras de que en realidad
no pretende derogar el sanchismo, o más bien que solo pretende derogar la superficialidad
del sanchismo.
En realidad, a lo que aspira Feijó es a suplantar el sanchismo por el feijoísmo, preservar
el núcleo de las políticas económicas y sociales del sanchismo pero con un nuevo envoltorio
más higiénico, más transparente, más vistoso, menos burdo que el del sanchismo.
Es decir, reemplazar el continente sanchista por el continente feijoísta pero conservando
el mismo contenido.
Sin embargo, durante los últimos días hemos leído titulares verdaderamente ilustrativos
de por qué Feijó, en el fondo, no quiere derogar el sanchismo, o solo quiere derogar
el sanchismo como continente de un contenido que desde luego no quiere derogar.
Y ese contenido es la política social y económica de la socialdemocracia del PSOE.
Así, por ejemplo, hace unos días, en una entrevista que concedió al Confidencial,
Y más allá del titular, en la propia entrevista, el mismo se explaya diciendo
Y a su vez, también, en una reciente entrevista en El Español, Feijo ha manifestado lo siguiente.
Si necesito 20 escaños, voy a hablar con el PSOE.
Hasta cierto punto cabe interpretar estas declaraciones de niñez Feijo como un intento
propio de la campaña electoral de engañar, de seducir, de atraer al votante de izquierdas
para que, en lugar de votar al PSOE de Pedro Sánchez, vote al PP que se plantea o se replantea
a sí mismo como una filial azul decente, higiénica, no sanchista del PSOE.
Si tú eres de izquierda, si no te gusta Pedro Sánchez, vota al PP que no está tan lejos del
PSOE tradicional y no carga con ese fardo, con ese peso muerto que nadie quiere, que es Pedro Sánchez.
Por tanto, como digo, muy probablemente esto, en parte, sea mera estrategia electoral para captar,
para atraer a parte del voto de la izquierda y así incrementar el número de escaños que
alcanza el PP, con la expectativa, desde el PP, de poder gobernar en solitario o sin demasiadas
tutelas de Vox. Pero, y esto es lo importante, aunque estos titulares, en parte, sean una
estrategia propia de la campaña electoral para manipular a una parte de los votantes del PSOE,
es una estratagema que tiene ciertos visos de funcionar porque no es una estratagema absolutamente
inverosímil. Es decir, que precisamente porque el programa electoral del Partido Popular no es una
enmienda a la totalidad del programa electoral del Partido Socialista, este tipo de frases,
este tipo de mensajes, sí calan, sí pueden calar en una parte pequeña en cualquier caso,
pero en una parte del electorado socialista, porque objetivamente la distancia que separa a
PSOE de PP no es ni mucho menos tan grande. En muchísimos asuntos es cierto, es tal cual,
que el Partido Popular está mucho más cerca del PSOE tradicional de Felipe González o de García
Paje que de Vox. Y cuidado, no caigamos en una falsa disyuntiva. No es que sólo exista el programa
del PSOE tradicional o el programa de Vox, uno se podría declarar igualmente alejado de
muchas de las posturas del PSOE tradicional y de las posturas de Vox. Si el PP fuera un
partido genuinamente liberal, en muchos asuntos diría, yo no tengo la agenda del PSOE, pero
tampoco tengo la agenda de Vox. Tengo una agenda bastante distinta a la de ambos partidos políticos.
Pero el Partido Popular no efectúa este mensaje porque el Partido Popular no es ni tiene nada de
partido liberal. Cuando el Partido Popular dice que está más cerca del PSOE tradicional de García
Paje o de Felipe González, en gran medida es cierto, en gran medida es así. No necesariamente
el electorado del PP o todo el electorado del PP, pero desde luego la cúpula política del
PP sí lo está. Y por eso, más allá del juego del reparto de poder, del reparto de carteras con
Vox en un hipotético futuro gobierno de coalición, más allá de la táctica negociadora de querer
minimizar los peajes que se paga a Vox por su apoyo político en el parlamento, más allá de esto,
lo cierto es que para el PP muchas de las propuestas, muchas de las ideas de Vox son
incómodas. Pero no porque tenga una alternativa liberal a las propuestas de Vox, sino porque su
discurso es el discurso en muchos asuntos del PSOE. Y claro, si eso es así, ¿quién se cree que el
PP va a derogar el fondo del sanchismo? No la forma del sanchismo. Claro, si cambiamos a Pedro
Sánchez por feijo, el sanchismo ya ha desaparecido, sino el fondo ideológico de las políticas
implantadas por Pedro Sánchez durante los últimos años en España. Eso no lo va a tocar en absoluto
feijo, no por miedo, no por complejos, no por cobardía, sino porque ideológicamente coincide
con esas ideas. Y desde luego que nadie vote al PP esperando que va a derogar el contenido del
sanchismo. Eso no va a ocurrir. Si uno quiere un PSOE bis, un PSOE azul, un PSOE no tan degenerado
y tan hiper personalista como el de Pedro Sánchez, pues entonces el PP sí es una opción que más o
menos caerá en su órbita política, económica e ideológica. Pero si uno quiere abrogar todo eso,
no sólo el continente, sino también el contenido de lo que ha sido el sanchismo, desde luego que no
busque ese impulso político en el PP. Feijo no ha venido a derogar el sanchismo, sino a consolidar
la socialdemocracia sanchista verdaderamente existente. Feijo no es el enterrador del
sanchismo. Feijo es su blanqueador.