Este es un vídeo que debería ser innecesario hacer, pero que se vuelve
necesario hacer cuando algunos se empeñan, intergiversar, manipular,
en mentir sobre las declaraciones ajenas. Y en este caso me refiero a unas
recientes palabras de Isabel Díaz Ayuso en una entrevista en el programa de Ana
Rosa, donde dijo lo siguiente.
Cuando te amas fascista sabes que lo estás haciendo bien,
estás en el lado bueno. Pero a mí es que...
En el lado uno de la historia digo...
Por ejemplo, la cadena ser tituló cuando te llaman fascista sabes que lo estás
haciendo bien. Ayuso y el lado bueno de la historia.
La presidenta de la Comunidad de Madrid deja sin palabras a Ana Rosa Quintana y
le hace cómplice de su afirmación. A ti te lo han llamado alguna vez.
También el periodista Antonio Maestre puso en Twitter, ayuso, entre comillado,
si te llaman fascista estás en el lado bueno de la historia.
Y añadió postfascismo o libertad. Me lo ha dejado hecho.
Asimismo, Monedero comenzó su programa con la siguiente afirmación.
Para Isabel Díaz Ayuso, estar con el fascismo es estar en el lado correcto de la
historia. En fin, creo que la desmesura de la derecha cuando está transitando
caminos hacia ese fascismo 2.0 son inenarrables.
Y por último, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, una reciente entrevista en RACU
no manifestó lo siguiente.
Madrid, creo que es un país no només para la agenda de Madrid, sino para el Conchón
de la Estado. Es decir, esta señora representa el neo-fascismo y aquí no estoy
exagerando ni estic banalizando el termo, sino que esta señora, aparte de muchos
gestos que ha hecho y que desacomplexadamente lo gobierna en Vox y
diu que ofería siempre encantada de la vida, pero es que ha dicho que cuando iban
fascistas te encantaba estar del costado correcto de la historia.
Por tanto, se ha reivindicado ella misma como neo-fascista.
Yo creo que eso no lo podemos banalizar, porque además son movimientos que están
avanzando a casa nuestra y a toda Europa y al mundo.
Por tanto, poca broma. Estamos hablando de la extrema dreta que, de forma desacomplexada,
volve a gobernar en mentiras con cobs autoritarios.
Démonos cuenta de que aquí el debate no es si Ayuso es o no es fascista.
Probablemente todos o prácticamente todos a los que he mencionado
consideren desde su punto de vista que Ayuso sí es fascista.
Pero no estamos debatiendo sobre esto.
Estamos debatiendo sobre si Ayuso ha dicho de sí misma que es fascista,
que es justamente lo que la cadena sed, Antonio Maestre, Monedero o Ada Colau
están dando a entender. Es decir, que Ayuso ha salido del armario
y se ha proclamado a los cuatro vientos fascista y que ha dicho que el fascismo
es estar en el lado correcto de la historia.
Pero Ayuso no ha dicho nada de esto.
Visualicemos el corte completo de la entrevista, dentro del cual se produjeron estas declaraciones.
Está preparada para lo que le viene, ¿no? Soy consciente porque no me han dejado
ni un solo día. Yo, desde que fui candidata, me han hecho todo tipo de campañas de desprestigio.
La llamada, Isabel, la caótica insensata loca.
Lo de Ida, me dijeron que también venía del equipo de Iván Redondo.
Ida, acrónimo, Isabel Díaz Ayuso, imprudente, osada, temeraria, excéntrica,
psicópata... Fascista, porque ese es el mejor.
Cuando te amas fascista, sabes que lo estás haciendo bien.
Ese no tiene que fallar. Te lo han llamado a ti alguna vez.
Han visto los días. Pues entonces nada, ¿verdad? En el lado bueno.
Pero a mí es que... En el lado uno de la historia digo.
A mí me toca un pie lo que me digan, así que ya llega un momento.
Estamos en ese lado. Bueno, la presidenta es más joven, pero a mí ya,
a estas alturas de mi vida, yo sé muy bien quién soy y dónde voy y qué es lo que quiero
y qué es lo que he sido y qué es lo que pienso. Las etiquetas me van a dar igual.
También hay otras que también es... Su propuesta electoral es un vermú de grifo,
personaje contradictorio, la izquierda tiene más de 40 formas de llamarla tonta,
trompista, supremacista... ¿A usted le molesta esto?
Démonos cuenta de que Ayuso pronuncia estas palabras dentro de una pregunta que le formula
Ana Rosa sobre los insultos continuos que está recibiendo Ayuso.
Remarco el sustantivo, insultos. Lo que dice Ayuso es que ya está muy acostumbrada
a recibir insultos, porque los ha recibido desde hace años, y que su insulto preferido,
el insulto, insulto que más ha terminado gustándole, es el insulto de fascista.
No porque ella se identifique con el fascismo, eso no lo dice en ningún momento,
sino porque, dice, la izquierda ha terminado convirtiendo al término fascista en un significante
sin significado más allá de ser utilizado contra aquellos enemigos, contra aquellos
adversarios ideológicos de la izquierda a los que más odian.
Básicamente, para gran parte de la izquierda, fascista es el que no es de izquierdas o el
que se aleja demasiado de la izquierda, demasiado del pensamiento único, dominante, hegemónico
de la izquierda. Y lo que dice Ayuso es, como yo no me considero de izquierdas, pero no
considerarse de izquierdas no equivale a considerarte fascista, como yo no me considero de izquierdas,
creo que es una medalla que la izquierda me etiquete con aquel término, sea el que sea,
en este caso, fascista, me etiquete con aquel término que la izquierda utiliza para destacar
a las personas que la propia izquierda considera más alejadas de su ideología. Por eso dice
Ayuso que si te llaman fascista, no si eres fascista, sino si te llaman fascista, si la
izquierda te llama fascista, si la izquierda sectaria que banaliza el fascismo te llama
fascista, entonces es que estarás haciendo algo bien, estarás en lo correcto, estarás
en el lado adecuado de la historia. Porque para Ayuso, con razón o sin ella, el lado
correcto de la historia es el lado anti-izquierda, pero esto lo puede decir también un liberal,
un liberal también cree que el lado correcto de la historia es aquel donde no se aplican
políticas izquierdistas. Y eso no significa que el lado correcto de la historia ni muchísimo
menos sea el fascismo. En el fondo, lo que está denunciando Ayuso con este comentario,
así jocoso, es que la izquierda ha terminado, como decía, banalizando, vaciando de todo
su contenido al término fascista. Irónicamente, comportamientos como los de la cadena ser,
Antonio Maestre, Ada Colau o Juan Carlos Monedero le están dando la razón en esto
a Isabel Díaz Ayuso. ¿Por qué? Pues porque están buscando cualquier excusa absurda y
ridícula para conseguir etiquetar a Ayuso como fascista. No es que desarrollen un profuso
análisis donde se muestre cómo las ideas que actualmente sostiene Isabel Díaz Ayuso
conectan con las ideas que históricamente ha propugnado el fascismo. No, nada de esto
que podría ser un ejercicio intelectual y académico bastante respetable si es que esas
conexiones fueran ciertas. El nivel analítico no va mucho más allá de decir, como no eres
de izquierdas, como además te alejas mucho de la izquierda, eres fascista, como además
te has burlado de los que te insultan como fascista diciendo que si esas personas te
insultan como tal es que lo estarás haciendo bien, entonces eres fascista. Lo que les queda
por decir básicamente es como llevas puesta una camisa negra, entonces eres fascista.
Ese es el nivel analítico que, evidentemente, está vaciando de contenido el significado
histórico, el significado ideológico, el significado político del término fascista.
Y que en el fondo simplemente está diciendo si no piensas como yo o si no piensas de una
manera bastante cercana a la mía, entonces eres fascista.
Y todo esto se produce, insisto, siendo muy conscientes todos los protagonistas a los
que hemos mencionado de que estaban tergiversando, de que estaban manipulando, de que estaban
mintiendo sobre las palabras de Ayuso, porque cualquiera que vea el vídeo sabe perfectamente
que Ayuso no se está llamando fascista, que Ayuso no está diciendo que ella se identifique
con las ideas del fascismo. Lo que está es criticando a quienes la identifican sin venir
a cuento con las ideas del fascismo. ¿Por qué entonces están mintiendo para desacreditar
a un rival político? Bueno, ellos sabrán el motivo, pero desde luego ni es un comportamiento
honesto ni un comportamiento que debe quedar sin ser criticado públicamente.
Gracias por ver este vídeo, nos vemos en el próximo vídeo, nos vemos en el próximo vídeo.