Primer escándalo de corrupción, menos de un año y medio después de tomar el
poder, dentro del gobierno muy honorable, muy honesto y muy transparente de
Gabriel Boric en Chile. ¿Qué ha sucedido exactamente?
Veámoslo.
Gabriel Boric llegó a la presidencia de Chile hace poco más de un año con la
promesa de que iba a regenerar las instituciones democráticas del país y
menos de año y medio después del comienzo de su mandato ya afronta su
primer caso de corrupción institucional. El escándalo que ha estallado en Chile
durante los últimos días afecta a un partido, Revolución Democrática, que es
uno de los tres partidos que integran la coalición política de Gabriel Boric, el
frente amplio. La trama de corrupción se ha estructurado del siguiente modo. Cada
Ministerio del Gobierno de Chile tiene una Secretaría Regional Ministerial,
Seremi, en cada una de las 16 regiones que componen el país. Pues bien, la Seremi
del Ministerio de Vivienda en la región de Antofagasta estaba encabezada por un
militante del Partido Revolución Democrática, Carlos Contreras. Carlos
Contreras había sido, además, asesor directo de Catalina Pérez. ¿Y quién es
Catalina Pérez? Pues Catalina Pérez es otra militante del Partido Revolución
Democrática. Llegó a ser, de hecho, su presidenta entre los años 2019 y 2021 y
hasta hace unos pocos días era vicepresidenta de la Cámara de Diputados
de Chile. Es decir, que existía una relación histórica estrecha entre Carlos
Contreras y Catalina Pérez. Pues bien, ¿dónde hallamos el escándalo de
corrupción? En que Carlos Contreras, al frente del Seremi del Ministerio de
Vivienda en la región de Antofagasta, transfirió por asignación directa sin
ningún tipo de concurso, sin ningún tipo de concurrencia. Simplemente porque
Carlos Contreras así lo quiso, por su cuenta y riesgo, le entregó más de medio
millón de dólares, que equivale, atención, al 6% de todo el presupuesto de
la Seremi de Vivienda en la región de Antofagasta, el 6% de todo el dinero que
maneja la Seremi de Vivienda en esa región, a una fundación llamada Fundación
Presidida por un tal Daniel Andrade. ¿Y quién es Daniel Andrade? Pues es otro
militante del Partido de Revolución Democrática, pero que además es la actual
pareja de la diputada y vicepresidenta de la Cámara de Diputados y
expresidenta del Partido Revolución Democrática, Carolina Pérez. Se trata
además de una transferencia por asignación directa de más de medio
millón de dólares, cuyo supuesto objetivo era acondicionar asentamientos
irregulares en la región de Antofagasta. Problema, que la Fundación
Democracia Viva no es una fundación que se dedique a esos asuntos, no tiene
ningún tipo de experiencia en el acondicionamiento de asentamientos
irregulares. Por tanto, le transfirieron más de 500.000 dólares a una fundación
presidida por la pareja de la vicepresidenta de la Cámara de Diputados,
que había sido la jefa del que transfiere esa suma de dinero. Y, además,
todos ellos forman parte del mismo partido, Revolución Democrática. Y,
además, y por si todo esto fuera poco, la subsecretaria del Ministerio de la
Vivienda de Chile, Tatiana Rojas, también militante del Partido Revolución
Democrática, estaba al tanto de todo esto y no informó al ministro de
Vivienda de Chile que no forma parte del Partido Revolución Democrática. Por
tanto, la apariencia de lo que ha sucedido aquí es que cuatro amigos que
forman parte de un partido que integra la coalición gubernamental se han
repartido entre ellos, o más bien algunos se han consentido que otros se repartan
entre ellos, más de 500.000 dólares con el subterfugio de que esos más de 500.000
dólares iban a parar al acondicionamiento de asentamientos irregulares
en la región norteña de Antofagasta. Y si todo esto ya huele muy mal, una vez
escuchamos las excusas oficiales de los implicados, apesta. Primero, la diputada
Carolina Pérez utiliza la estrategia que empleó en España la infanta
Cristina con su marido Iñaki Urdangarín, que ella no sabía nada del
asunto y que el reparto poco ético de fondos entre Carlos Contreras, su ex
asesor, y Daniel Andrade, su actual pareja, es algo por lo que tienen que responder
políticamente esos dos hombres adultos que ningún tipo de relación guardan
con ella.
Y los responsables políticos, que son los firmantes del convenio, don Carlos
Contreras, don Daniel Andrade, tendrán que responder políticamente como
corresponde.
Carlos Contreras, el ex encargado de la Seremi de Vivienda en Antofagasta,
diciendo que él no tiene ninguna relación ni ningún conflicto de interés
con la fundación que preside el marido de su exjefa y que además es militante
del mismo partido que él y que Carolina Pérez.
Lamento mucho no haber dimensionado la maliciosa malinterpretación y manipulación
que sería de un convenio con una entidad sin fines de lucro, con la cual no tengo
ninguna relación ni conflicto de interés.
Presenté mi renuncia para que esto no siga siendo utilizado políticamente en
contra del gobierno.
Y Daniel Andrade diciendo que él no se ha lucrado con esta transferencia de fondos
a la fundación que él preside y de la que cobrará por ser presidente, pese a que se
trata de una asignación directa de Carlos Contreras, el que dice que no tenía
ningún conflicto de interés ni ninguna relación con esa fundación, pues para
que le diste por asignación directa 500.000 dólares y que además son 500.000
dólares con un propósito que no guarda relación con la actividad de la
fundación. Pero claro, él dice que no se ha lucrado y que está todo en regla y
que como mucho es un error político pero no legal.
Los convenios firmados están todos en regla y quiero ser enfático en que yo no he
recibido ningún peso de estos. Aquí no hay nada irregular, pero sí cometimos un
error político.
Y por último, la diputada y ex vicepresidenta de la Cámara de Diputados de Chile, Carolina
Pérez, después de que la presión social y política dentro de Chile la obligara a
dimitir de vicepresidenta de la Cámara de Diputados de Chile, a pesar de que desde su
punto de vista ella no guarda ninguna responsabilidad por el dinero que se
hayan podido repartir su actual pareja y su ex asesor personal.
Estamos aquí el conjunto del oficialismo porque hemos tomado una decisión, yo he
tomado una decisión que es suspender mi participación en la mesa de la Cámara.
Estos días han sido días sumamente duros, han sido días sumamente duros en
que se me ha buscado endosar a mí una responsabilidad que yo no tengo por
actos que son de terceros y por los cuales yo creo firmemente no debiese
asumir ninguna responsabilidad. El daño que a mí se me ha infringido, no puedo
permitir, se le infringa también al oficialismo. Nosotros tenemos un proyecto
político que cuidar, tenemos un Congreso nacional que cuidar para que
esté a la altura de las demandas que Chile requiere. Necesitamos que el
Congreso no se pierda en este tipo de discusiones sino que más bien de
discusiones de cara a la ciudadanía y no vamos a dar lugar al aprovechamiento
político de ninguna fuerza ni en esta ni en otras ocasiones. Vamos a seguir
trabajando firmemente porque este Congreso nacional está a la altura de
lo que la ciudadanía demanda. Si parece necesario que yo suspenda mi participación
en la mesa de la Cámara, yo no tengo ningún problema en hacerlo porque acá
tenemos un objetivo mayor que es proteger al oficialismo, que es proteger
nuestro proyecto político y proteger dar respuesta a las necesidades de la
ciudadanía. Pero bueno, es cierto que hasta aquí aparentemente no se ha
cometido ningún delito. Estamos ante actos políticos nada ejemplares, cuatro
amigos de un partido político que se reparten el dinero público pero que se
lo reparten dentro del ámbito de sus competencias porque la asignación
directa de esos más de 500 mil dólares era competencia de Carlos Contreras, por
tanto podía hacerlo dentro de la ley. No es ético pero lo podía hacer dentro de
la ley. Pero el asunto se está enredando cada día más. Ahora resulta, y así lo ha
confirmado el Ministerio de Vivienda, que además de todo esto había
funcionarios del Ministerio de Vivienda que estaban a sueldo de la Fundación
Democracia Viva. O dicho de otra manera, que la Fundación Democracia Viva estaba
sobornando a funcionarios del Ministerio de Vivienda para, entre otras cosas,
recibir este tipo de fondos. Tú y los tuyos me asignáis 500 mil dólares y yo os
pago a cambio de esta transferencia pues lo que sea 100 mil o 200 mil dólares,
es decir, no repartimos el botín. Los indicios de delito están ahí y por eso
la Fiscalía de Antofagasta ya está investigando tanto a la Seremi del
Ministerio de la Vivienda en Antofagasta como a la Fundación Democracia Viva. Ha
entrado en sus sedes y ha incautado documentación para esclarecer lo
sucedido. A su vez, el Ministro de Vivienda ha cancelado los convenios de
colaboración entre la Seremi y la Fundación Democracia Viva. Ha pedido a la
Fundación Democracia Viva que devuelva todo el dinero que ha recibido. El
presidente Boric ha exigido y ha conseguido la renuncia de la
subsecretaria del Ministerio de Vivienda, Tatiana Rojas, que como ya hemos
explicado también es militante del Partido de Revolución Democrática y
estaba al tanto de estos trapicheos ocultándoselos, o supuestamente
ocultándoselos, al Ministro de Vivienda. Y para rematar, el presidente Boric
tampoco ha expresado ningún tipo de confianza hacia ninguno de los
implicados porque, según él, no pone la mano en el fuego por nadie.
Yo creo que es gravísimo y en esto no se puede en ningún caso aminorar o tratar
de bajarle el perfil a esta situación. A mí me parece gravísimo y acá hay, desde
mi punto de vista, responsabilidades políticas que hay que hacer valer.
La justicia tendrá que determinar su camino y en esto yo he señalado que el
gobierno se pone a disposición para ya sea ser parte cuando corresponda
como para colaborar en todo lo que sea necesario respecto a la investigación
que realice la justicia. Por lo tanto, ningún tipo de complacencia con este
tipo de actos. Yo no pongo las manos al fuego por nadie.
Todos tienen que estar disponibles a ser absolutamente investigados.
¿Por qué no pone Boric la mano en el fuego por nadie? Si sus estándares morales son
tan elevados, como decía George Jackson, Ministro del Gobierno de Boric y también
miembro del Partido de Revolución Democrática, si todo esto es así, debería
confiar ciegamente en que nadie ha metido la mano en la caja. ¿Cómo tendrá
que ser la cosa? ¿Y qué información todavía no conocida tendrá que tener
Boric para que se distancie de todos ellos y ya preventivamente diga que no
pone la mano en el fuego por nadie? En suma, este caso debería nuevamente
hacernos entender que la política es inherentemente corrupta y corruptora.
Debería hacernos entender que la nueva política es igual a la vieja política,
solo que con una nueva fachada para seguir engañando a los ciudadanos. Y es
fundamental que los ciudadanos vayan entendiendo que la corrupción o el
abuso de poder no se curan reemplazando a los viejos políticos corruptos por
nuevos políticos corruptibles. La corrupción y el abuso de poder no se
curan con supuestos mejores políticos. La corrupción y el abuso de poder se
curan con menos política.