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Juan Ramón Rallo

Laissez faire, laissez passer. Laissez faire, laissez passer.

Transcribed podcasts: 2280
Time transcribed: 38d 6h 22m 10s

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Muy bien, muchísimas gracias, como ha dado una calorosa bienvenida a estos nuevos compañeros
que maravilla, qué ilusión, qué juventud, qué envidia me da, pero bueno estos actos
siempre también se aprente, yo me soy un ófito en la materia de la economía, que bastante
tengo lo mío, pero hoy tenemos con nosotros un ponente y la verdad es que si yo sueno
él nos va a salar mucho más, es un auténtico comunicador de la economía, doctor en economía
y gran escritor, gran comunicador y seguramente tenéis muy controlado, yo soy súper fan
suyo en YouTube, por favor damos la bienvenida al programista Don Juan Ramón Rayo que nos
hablará de las causas de la inflación actual, por favor si nos está la madre del Frank,
un auténtico placer a más éxito de la comunidad, por lo cual está muy a gusto, en la casa.
Gracias.
Buenas tardes a todos, felicidades en primer lugar al colegio de economistas por cumplir
50 años, que desde luego en los tiempos que corren ir sobreviviendo es complicado y muchas
felicidades tanto a quienes habéis acompañado al colegio de economistas en estos últimos
50 años, en los últimos 25 y también a quienes nos acabáis de incorporar en estos momentos.
Voy a hablar del tema de actualidad, de prácticamente el tema en economía, que es la inflación,
pero para hablar de inflación déjame que os hable previamente de por qué no hemos tenido
inflación hasta el momento. Comentaba Leo que soy de la tierra, sí, efectivamente
soy de Ben y Carlos y estudié aquí en Valencia, yo me gradué en el Estarangerse en el año
2007. 2007 fue el año en el que reventó la Bulbuja inmobiliaria de España y fue también
el penúltimo año que tuvimos inflación, el último año de inflación fue 2008, porque
a partir de 2009 empezamos una década de cierta estabilidad de precios, incluso algunos
años con deflación, lo cual es algo bastante raro, bastante excepcional. Desde luego todos
los que habíamos pasado por la facultad hasta ese momento la deflación la habíamos estudiado
como un fenómeno marginal de la Gran Depresión de los años 30 que no se había vuelto a
repetir, bueno también del siglo XIX pero en el siglo XX básicamente la Gran Depresión
y el gran problema que azotaba y que preocupaba las economías era la inflación y cómo poder
controlar la inflación, sobre todo en economías que no tenían una institucionalidad fuerte,
una credibilidad fuerte en sus instituciones monetarias como las economías emergentes o
mismamente como España antes de entrar en el Euro, la gran preocupación es cómo generamos
una moneda creíble que no esté provocando o las inflacionistas de manera continuada,
pero de repente en el año 2009 entramos en ese periodo de estabilidad de precios, de
deflación, los bancos centrales intentaron generar por todos los medios de inflación,
no lo conseguían y parecía que la nueva normalidad no era la inflación a la que
estábamos acostumbrados sino la deflación y sin embargo llegó la pandemia y todo este
esquema lo ha echado abajo, veremos por cuánto tiempo, pero ¿por qué no hubo inflación
entre el año 2009 y el año 2019-2020? ¿Por qué tuvimos incluso deflación? Bueno inflación
y deflación se refieren en términos generales al valor del dinero y el valor del dinero
como el de cualquier otro bien depende de su oferta y de su demanda. La oferta de dinero
durante esta década de deflacionaria aumentó de manera considerable, si vemos el balance
de los bancos centrales observaremos una explosión en el tamaño de los bancos centrales aunque
en gran medida era una reabsorción de la oferta monetaria del sistema bancario al balance
del banco central, pero aún así hubo un incremento de la oferta monetaria, entonces
¿cómo es posible que si la oferta monetaria creció y creció tanto no tuviéramos una
caída del valor del dinero y por tanto inflación? Si aumenta la oferta de un bien lo normal es
que baje su precio y si baja el precio del dinero el precio del resto de bien es expresado
en dinero sube, inflación. ¿Por qué no sucedió? Pues simplemente porque la demanda de dinero
durante esa época, durante esa década creció todavía más. ¿Por qué pudo crecer la demanda
de dinero tanto? Pues por varias razones, la más clara y sobre todo la que duró unos
años fue la incertidumbre de la crisis. Durante una crisis queremos activos líquidos,
queremos seguridad, queremos refugiarnos frente a las depreciaciones potenciales del precio
de los activos, por ejemplo los activos busátiles frente a los impagos deuda privada y deuda
pública, sobre todo de determinados estados no la creemos, entonces ¿dónde nos refugiamos?
¿Cuál es ese activo al que todos miramos cuando todo lo demás falla el dinero, la liquidez?
Por tanto hubo un incremento muy importante, año 2009, 2010, incluso en la eurozona se
extendió 2012-2013, hubo un incremento muy importante de la demanda precaucionaria de
dinero, atesoramos dinero porque todo lo demás no nos fiamos.
Un segundo motivo, de nuevo significativo en Europa, fue la esclerotización de la economía.
Hemos tenido una década de bastante poco crecimiento, de hecho en la eurozona el crecimiento
volvió a partir de 2015, 2016 y con cierta debilidad, es cuando no hay rentabilidades
muy altas en ninguna parte, ¿dónde te refugias?
Pues para que voy a asumir riesgos para bajas rentabilidades, si puedo quedarme en dinero
conservando mi valor sin asumir riesgos.
De hecho, durante algunos años no solo hubiese estabilidad de precios o deflación, acordáos
de algo que ahora ya no suena un poco de la prehistoria, como eran los tipos de interés
negativos de la deuda pública de los estados más solventes, es decir, los inversores le
pagaban a determinados estados, como Alemania o como Suiza, para que tuvieran el privilegio
de prestarles dinero.
¿Por qué?
Pues porque esos estados iban a devolver ese dinero en el futuro sin ningún género
de dudas, al menos en su valor nominal.
Eso Austria, un instrumento que en los últimos días ha ganado algo de notoriedad, emitió
un bono a cien años, un bono a cien años que fue muy demandado y que ahora por cierto
está perdiendo el 90% de su valor.
Entonces, claro, si no había ningún sitio claro en el que invertir en función de su
rentabilidad riesgo, nos refugiábamos en el dinero, dinero equivalentes del dinero
como la deuda pública de estados solventes.
Un tercer factor que incrementó notablemente la demanda de dinero fue el progresivo envejecimiento
de la población.
Si nos vamos acercando a la jubilación, incluso si estamos jubilados, no estamos en un momento
vital para asumir grandes riesgos.
Por tanto, queremos ahorro, porque hemos de vivir de esos ahorros, al menos hemos de
complementar nuestras pensiones públicas con ese ahorro, pero queremos un ahorro seguro,
un ahorro que no nos genere sorpresas, que no nos genere altibajos.
En España parte de ese ahorro históricamente había ido a la vivienda, pero claro, después
de 2007-2008 también hubo una cierta precaución de volver a dar el salto al mercado inmobiliario,
precaución que no obstante se fue perdiendo años 2017-2018, pero hasta ese momento la
vivienda era un mercado maldito, tachado, por tanto, ni bolsa por la volatilidad, ni deuda
pública de estados no solventes, ni deuda corporativa, por lo que pueda pasar de nuevo
dinero o equivalentes de dinero.
Y por último, un cuarto factor que impulsó de manera muy notable la demanda de dinero
fue el crecimiento, no lo olvidemos esto, porque en los últimos 10-15 años hemos vivido
uno de los períodos de crecimiento económico mundial más intensos, el crecimiento y el
desarrollo económico de los países en vías de desarrollo.
Claro, cuando un individuo, una sociedad, se vuelven más ricos, quieren tener más dinero
consigo, en términos absolutos, si yo digo, el 5% de mi patrimonio lo quiero tener en
dinero, claro, si mi patrimonio va creciendo, mi demanda absoluta de dinero también va creciendo,
evidentemente, entonces, en la medida en que una gran cantidad de países que eran muy pobres
se han ido enriqueciendo, conforme se han ido enriqueciendo, también ha ido aumentando
su demanda de activos líquidos.
Y cuáles eran los activos o cuáles son todavía hoy esos activos líquidos globales internacionales,
pues el dólar y el menor medida, aunque también el euro, con lo cual estos países acumulaban
reservas de dólares, reservas de euros, durante los últimos meses ha sido muy sonado el caso
de Rusia, es decir, un país, un Estado, que incluso se planteaba una hostilidad abierta
con los emisores de estos activos, parte de sus reservas las tenían dólares y euros,
porque si quieres tener reservas líquidas frente al resto del mundo, lo que tienes
que hacer es demandar estos activos internacionales de reserva.
Todo esto, por tanto, generó un crecimiento de la demanda de dinero que permitió que la
oferta de dinero creciera sin que eso generara inflación.
Problema de todo esto, pues que creo que algunos malinterpretaron o leyeron mal la situación
y pensaron que las leyes económicas, que nos decían que todo tiene un límite, que
no se puede crear dinero de manera ilimitada, se habían suspendido y que, por tanto, como
habíamos creado mucho de dinero y ese dinero nos había traducido en inflación, pues también
podíamos crear muchísimo más sin que pasara nada, sin que se rompiera nada.
Y llegó la pandemia, un año complicadísimo por muchísimos asuntos, no todos ellos estrictamente
económicos, y fue necesaria una respuesta política contundente al reto de la pandemia.
Y esta respuesta política contundente al resto de la pandemia se produjo con todos los antecedentes
que he mencionado, es decir, podemos crear grandes cantidades de dinero sin que pase
nada.
Entonces, si tenemos una necesidad objetiva y es paliar los efectos dañinos de la pandemia
y parece que tenemos una especie de bolsa de dinero infinito, vamos a extraer mucho dinero
de esa bolsa para arrojarlo sobre la economía y compensar contra restar las dificultades
extraordinarias de la pandemia.
Y eso es lo que se hizo, eso es lo que se hizo en el año 2020.
Políticas de estímulo, sobre todo en Estados Unidos, pero también en la Eurozona, políticas
de estímulo fiscal y monetario tremendamente agresivas, acumulación de deuda pública
hasta unos niveles no vistos nunca en tiempos de paz.
Sí que hemos tenido deuda pública a los niveles actuales, pero siempre hasta este momento
se habían originado como consecuencia de una guerra, era un esfuerzo extraordinario
para ganar la guerra.
Hasta cierto punto, en el año 2020 también se nos dijo que era lo mismo, había que ganar
la guerra contra la pandemia y por tanto nos teníamos que endeudar, endeudamiento extraordinario,
endeudamiento extraordinario que además fue de la mano de que, de una política monetaria
muy acomodaticia, tipos de interés nulos al cero por ciento para facilitar ese proceso
de sobre endeudamiento.
Y en el año 2021 estas políticas siguieron en pie, no se retiraron, no dijeron conforme
vamos a abrir la economía, conforme la economía se va a reactivar, vamos a retirar los estímulos
extraordinarios para cuando la economía estaba suspendida, estaba paralizada, no.
De hecho, Biden, recordad, llegó al poder en enero del año 2021, por tanto todos los
estímulos enormes que ha aprobado Biden son del año 2021, no del año 2020, sino del
año 2021.
Los bancos centrales han empezado a subir tipos de interés, no en 2021, sino en 2022,
por tanto hemos tenido un 2021 donde la mayor parte de las políticas de estímulo extraordinarias
de 2020 se mantuvieron en pie y además hemos entrado en 2022 sin una voluntad de retirarlas
rápidamente, sobre todo las políticas fiscales.
He mencionado antes que el tiempos de guerra era habitual acumular mucha deuda para ganarle
la guerra al enemigo, pero siempre que se salía de la guerra se era consciente de que había
que amortizar esa deuda y que había que volver a niveles más sostenibles de deuda.
Por ejemplo, Inglaterra llegó a acumular una deuda pública para ganarle la guerra a
Napoleón del 200% del PIB, pero es que cuando le ganó la guerra creó el IRPF, el equivalente
al moderno IRPF para amortizar esa deuda.
Estados Unidos también se hiperendeudó durante la Segunda Guerra Mundial, pero en el año
1947, es decir, dos años después de terminada la guerra, en realidad año y medio, su presupuesto
tenía superávit, pasó de un déficit público en el año 1945 del 25% del PIB a un superávit
del 2% del PIB en dos años.
¿Por qué? Porque estaban muy endeudados y se trataba de ir reduciendo ese endeudamiento.
Ahora mismo de todo esto no ha sucedido nada o prácticamente nada, con lo cual hemos puesto
en marcha una enorme cantidad de estímulos monetarios y fiscales que han disparado de
una manera igualmente extraordinaria el gasto agregado dentro de las economías y eso ha
provocado un sobrecalentamiento económico, especialmente en la economía estadounidense.
También hasta cierto punto en la eurozona, pero desde luego a mucha distancia de lo que
ha sucedido en Estados Unidos, para que nos hagamos una idea del grado de sobrecalentamiento
que exhibe ahora mismo la economía estadounidense.
Si todos los parados de Estados Unidos encontraran empleo, aún habría 6 millones de puestos
de trabajo sin cubrir.
Por tanto, hay una demanda extraordinaria de trabajadores en Estados Unidos que no
puede ser cubierta con la oferta disponible.
Ese es el cuello de botella principal al que se enfrenta la economía estadounidense.
Por eso cuando falla cualquier cosa, por ejemplo paralizamos una fábrica de producción
de leche de fórmula en Estados Unidos, rápidamente hay desabastecimiento de bienes, porque no
hay margen, no hay capacidad ociosa en la economía para responder, para reaccionar ante
estos cambios de patrones de producción, con lo cual muchísimo gasto agregado llevando
a la economía el límite de su capacidad que sucede pues inflación.
No hay tanta demanda de dinero como dinero se ha inyectado dentro de la economía.
La gente gasta el exceso de dinero y la economía, claro, no tiene capacidad para aumentar la
oferta de bienes y servicios al mismo ritmo al que se está gastando.
Cuando escuchamos hablar de cuello de botella, que parece que en todas partes hayan aparecido
de repente cuello de botella, esto es simplemente, en general, sí que hay cuello de botella
que, como ahora comentaré, pueden venir de un shock de oferta originario, pero en general
los cuello de botella son síntomas de que hemos vertido demasiado gasto en la economía
y la estructura de producción no es capaz de reaccionar ante ese exceso de gasto.
Si no, no aparecerían cuello de botella por todas partes, tendríamos un cuello de botella
en algún sector y en algún otro, pero no en todos los sitios de la economía.
Si aparecen en todos es porque toda la economía está al límite, está al límite de su capacidad
de producción.
Pues esto fue de 2021, en 2021 se generó o llegamos a la mayor inflación en Estados
Unidos en los últimos 40 años, incluso en el caso de España teníamos una tasa de inflación
del 6%, al finalizar el año 2021.
¿Y qué pasó a comienzos de 2022?
La invasión de Ucrania, es decir, un shock de oferta que todavía añade más gasolina,
en este caso no desde el lado del gasto, sino desde el lado de la producción al ciclo
inflacionista.
Cerramos el suministro de determinados bienes y servicios fundamentales, en especial el
energético y el alimentario, y claro, si hay mucho gasto y además reducimos la producción,
si no retiramos ese gasto, pues menos oferta, mismo gasto agregado, precios todavía más
elevados.
Y así hemos llegado a una inflación que hasta cierto punto podemos decir que está descontrolada,
está descontrolada porque los bancos centrales no anticiparon que llegaríamos hasta estos
niveles de inflación, está descontrolada porque los bancos centrales creyeron que
tomando decisiones moderadas iban a ser capaces de reconducir la inflación, está descontrolada
porque las expectativas de inflación, si bien no se han ido a niveles críticos y mucho
menos, sí se están desanclando y, por tanto, está descontrolada porque los bancos centrales
han perdido el control y están intentando recuperar el control.
Y lo que estamos viendo durante las últimas semanas, lo que vamos a ver hoy, lástima
no tener el dato todavía de cuánto va a subir los tipos de interés hoy en la Resedad Federal,
pero previsiblemente subirá los tipos de interés en 75 puntos básicos, ¿por qué sube tanto
la Resedad Federal los tipos de interés?
Una subida de medio punto ya era una subida considerable para los estándares a los que
estábamos acostumbrados, sobre todo después de venir de otras subidas similares en tan
corto plazo, pero no, hoy ni siquiera medio punto, sino previsiblemente, al menos eso
es lo que descuenta la mayor parte del mercado, 75 puntos básicos, pues porque reconocen
que hasta ahora no han hecho lo que debían hacer y lo que debían hacer era empezar a
retirar los estímulos mucho antes y restricir la política monetaria con más dureza y con
anterioridad.
Lo ha reconocido el presidente de la Resedad Federal, Jerome Powell, que ha dicho obviamente
si hubiese sabido que íbamos a llegar a esta situación, habríamos actuado antes y lo
ha reconocido también la secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, que además
fue antigua presidenta del Banco Central, una persona que conoce bien el cargo diciendo
que su infrastimo o subestimo el riesgo de inflación.
Por lo tanto, ahora estamos en un contexto de subidas de tipos de interés, el Banco
Central Europeo que también había dicho, en 2022 no voy a subir los tipos de interés,
porque voy a dejar que la economía europea se vaya recuperando, bueno, en julio subida
de tipos de interés, todavía modesta, pero una subida de tipos de interés que abre la
puerta a nuevas subidas de tipos de interés en septiembre o en los meses finales de este
año es más los mercados de deuda pública de la eurozona que están haciendo anticipando
subidas de tipos de interés más agresivas dentro de la eurozona de las que de momento
se han anunciado.
¿Por qué el Euribor está en el 1% prácticamente?
Porque se anticipan nuevas subidas de tipos de interés.
¿Por qué la deuda pública alemana se fue ayer prácticamente al 1,7% siendo una deuda
libre de riesgo?
Pues porque se anticipan nuevas subidas de tipos de interés.
¿Por qué la deuda pública española ayer superó el 3%?
¿La italiana al 4% y la griega casi se ubica en el 5%?
Pues porque se anticipan nuevas subidas de tipos de interés y en el caso de estos países
subidas de tipos de interés agravan el riesgo de insolvencia y, por tanto, no solo anticipamos
subidas de tipos, sino también mayor riesgo de la deuda soberana que es lo que se incluía
ayer en el precio de la deuda de estos países.
Y por eso hoy el Banco Central Europeo ha tenido que salir en una reunión de urgencia
diciendo vamos a intentar controlar las subidas de tipos de interés porque no queremos que
se reproduzca una crisis de deuda como la que sufrió Europa en el año 2012.
Ahora bien, ¿puede el Banco Central Europeo lograr esto?
Pónganos en esta situación.
El Banco Central Europeo dice yo tengo que luchar contra la inflación y para luchar
contra la inflación tengo que subir tipos de interés y tengo que subir los tipos de
interés a niveles como los que los subirá a Estados Unidos.
Todavía no es hasta el mensaje, ni mucho menos, pero probablemente en algún momento lo será.
Tipos de interés que Estados Unidos se espera colocar en el tres tres y medio por ciento.
¿Qué va a hacer el Banco Central Europeo si el tipo de interés base en la eurozona
es el tres y medio por ciento?
Porque la deuda pública española no va a pagar el tres y medio por ciento, la deuda
pública italiana no va a pagar el tres y medio por ciento.
¿Va a seguir comprando masivamente deuda pública española e italiana?
Bueno, hoy han sugerido que quizá hacen eso.
Y quizá terminen haciendo eso, pero la va a comprar gratis.
Sin ningún tipo de contrapartida les va a decir a los gobiernos nacionales yo les compro
su deuda y ustedes pueden emitir todo lo que quieran sin ningún tipo de limitación,
sin ningún tipo de responsabilidad fiscal.
Previsiblemente no, esto se podía hacer en el año 2015 porque no había inflación,
con lo cual yo compro deuda y no tiene consecuencia sobre otros.
¿Quién va a protestar si el Banco Central Europeo está comprando deuda y no perjudica
visiblemente a nadie, pues nadie, salvo a alguien que quiera fastidiar específicamente
a los gobiernos español, italiano?
Pero claro, cuando en Alemania tiene una inflación del ocho por ciento que se siga comprando
deuda y añadiendo leña al fuego, pues quizá no suena también.
Y por tanto, quizá si se llega a una especie de plan de contingencia, pero coordinando
la política monetaria con la política fiscal, que es lo que de momento no se está haciendo.
Sí, la política monetaria, claro que es indispensable para luchar contra la inflación,
pero la política fiscal también.
Y por tanto, en algún momento, a mi juicio más pronto que tarde, llegará un replanteamiento
de la política fiscal de los gobiernos de la eurozona y tendrán que empezar a reducir
decedís públicos y endeudamiento público.
Y eso implica o subidas de impuestos, que esperemos que no sea el caso, o reducciones
recortes del gasto público.
En cualquier caso, reducción del déficit y reducción del endeudamiento para, junto
con el Banco Juntel Europeo, conseguir reducir la inflación.
La cuestión, sin embargo, es si todo esto se hará y si, en caso de que se haga, se
hace con suficiente rigor y con suficiente determinación, porque la inflación en general
solo sabemos curarla de una manera y es causando dolor, con dolor.
Es verdad que es un dolor sobre un placer excesivo que hemos experimentado con anterioridad.
Es como si colocamos el coche a 250 kilómetros por hora y decimos no, es que hay que bajar
a 120.
Claro, frenas, pero frenas con respecto a un acelerón imprudente al que originalmente
has llevado al vehículo.
Pero bueno, si la economía está sobrecalentada, hay que enfriarla y enfriarla no gusta a prácticamente
nadie.
En general, los políticos, sobre todo, si tienen elecciones cerca, ¿cómo van a enfriar
la economía?
Biden tiene las elecciones en noviembre.
Claro, si la Resedad Federal subebara los tipos de interés al 2% al 3% al 4% y genera
una recesión en Estados Unidos, Biden, que ya tenía mala perspectiva electoral, pierde
las elecciones de midterm.
O dicho otra manera, cuando la Resedad Federal está planteándose si subir o no los tipos
de interés no tiene únicamente en cuenta o no está teniendo únicamente en cuenta si
hay que subir tipos para luchar contra la inflación o no.
También está planteándose si subó tipos de interés, igual Donald Trump vuelve al
poder dentro de tres años.
O sea, ya no es una decisión puramente económica, sino también política.
Y en Europa, lo mismo cuando se plantean, subimos tipos de interés para luchar contra
la inflación.
No se plantearon únicamente si es necesario subir tipos de interés para luchar contra
la inflación.
¿Qué están diciendo?
¿A cuántos Estados europeos voy a quebrar si subo los tipos de interés?
¿Se va a romper el euro?
El euro como proyecto político que no económico queremos que sobreviva, y si queremos que
sobreviva, ¿qué tenemos que hacer con los tipos de interés, aunque haya inflación?
¿Subirlos o bajarlos?
Con lo cual claro, como la inflación solo se cura con dolor, que sufre la población
no los políticos, pero si repercute electoralmente sobre los políticos, hay un riesgo a que
no se haga lo suficiente para luchar contra la inflación.
Hacemos algo, causamos algo de dolor, pero no el suficiente, con lo cual nos quedamos
en el peor escenario posible, que es la estancación de la que hace un momento ya habéis escuchado
hablar.
Esta inflación es, la economía se estanca, pero no se estanca lo suficiente como para
que des de haber inflación.
Por tanto, hay estancamiento e inflación, ese es un escenario.
Otro escenario es que de verdad toman conciencia del problema y dicen, vamos a causar todo
el dolor que sea necesario para evitar que la inflación se mantenga descontrolada para
recuperar el control de la inflación.
¿Qué provoca con eso?
Una recesión importante, quizá a corto plazo, pero una recesión importante.
De modo que el escenario que tenemos ante nosotros, yo diría a medio plazo, no es un escenario
especialmente a la hueño, o nos orientamos hacia un escenario, esta inflacionista, o
hacia un escenario más bien recesivo que consiga controlar las expectativas de inflación.
¿Y todo esto por qué?
Ya voy terminando, pues todo esto porque durante muchos años pensamos que las leyes básicas
de la economía habían entrado en suspenso.
En la base de cualquier sociedad, en la base de cualquier civilización, en la base del
progreso de cualquier comunidad, una de sus bases al menos es la economía.
Y para que la economía funcione bien hay que entenderla bien y la economía la entendemos
bien a través de la ciencia económica.
Y por eso estudiamos economía y por eso es tan importante tener las ideas económicas
claras, porque si nos empeñamos en obviar, en soslayar, en ignorar, en rechazar las leyes
económicas, no vamos a suspender, no vamos a abrogar las leyes económicas, nos vamos
a estrellar contra ellas.
Y por tanto es decisión de todos nosotros si queremos conocer, divulgar, repetir e insistir
en cuáles son las leyes económicas para que nadie se estrelle contra ellas o si nos
queremos estrellar contra ellas, pero no las vamos a suspender.
Y por desgracia, los políticos a veces no conocen las leyes económicas y a veces las
conocen pero prefieren estrellarse a largo plazo para obtener réditos electorales en
el corto plazo.
Y como los perjuicios no los padecen los políticos en el largo plazo, sí perderán las elecciones
pero no tendrán una mala vida, sino que las sufren los ciudadanos, estaría en última
instancia de los ciudadanos, responsabilizarse, conocer bien la economía, conocer que, por
ejemplo, en este caso, crear e inyectar cantidades excesivas de dinero en la economía termina
generando inflación y reclamarle responsabilidad a una clase política que está repleta aquí
en los próximos años.
Muchas gracias.
Muchas gracias, Juan Ramón, muchas gracias, que has hecho un vuelto en tu ajeda súper
apretada, pero muchas gracias por esta colaboración y en este evento se trata también de ser
felices y manejar a los que han hecho durante este colegio y queremos reconocer a los colegiados
que forman parte del colegio desde hace 25 años.
Nuestras compañeras, Valdés Carrimolles y Pepa Terrada, serán de nuevo las encargadas
de la Marcos.