logo

Juan Ramón Rallo

Laissez faire, laissez passer. Laissez faire, laissez passer.

Transcribed podcasts: 2280
Time transcribed: 38d 6h 22m 10s

This graph shows how many times the word ______ has been mentioned throughout the history of the program.

Este domingo 13 de febrero se han celebrado elecciones regionales en Castilla y León.
¿Quiénes han ganado? ¿Quiénes han perdido? Veámoslo.
Elecciones autonómicas en Castilla y León resumen fundamental del resultado.
El PP podrá seguir gobernando en la región,
siempre que llegue a un acuerdo de investidura y probablemente de gobierno con Vox.
¿Cuál es la valoración política general de este resultado?
Bueno, aunque ahora haré un análisis breve partido por partido,
la valoración política general dependerá de cuál era el objetivo de estas elecciones
para aquel que las convocó.
¿Y quién convocó estas elecciones?
El Partido Popular.
El Partido Popular de Alberto Fernández Mañueco y de Pablo Casado.
¿Y para qué las convocaron?
Pues esencialmente tenían tres objetivos al convocar estas elecciones.
Primero tenían un objetivo de política nacional.
Lo que buscaban era una victoria contundente en Castilla y León
para consolidar el relato de que el Partido Popular estaba en ascenso,
de que el Partido Socialista de Pedro Sánchez estaba en descenso
y de que, por tanto, el cambio político en el gobierno de España era inevitable.
Al alud de los resultados, es verdad que el Partido Socialista ha descendido
de manera apreciable, de manera notable,
pero el Partido Popular no ha consolidado ninguna trayectoria al alza relevante.
El segundo objetivo de la convocatoria de estas elecciones
era consolidar al Partido Popular como fuerza hegemónica de la derecha,
terminar de rematar a ciudadanos.
Y esto, si se ha conseguido, Ciudadanos ha desaparecido virtualmente de Castilla y León
y, sobre todo, también mostrar que Vox no es una alternativa seria a Sánchez,
no es un partido de la oposición que vaya a obtener un enorme número de votos,
que la fuerza principal dentro de la derecha, dentro de la oposición al Sánchez,
es el Partido Popular como fuerza política hegemónica a mucha distancia de Vox.
Bien, este segundo objetivo al alud de los resultados tampoco se ha logrado.
El Partido Popular apenas ha experimentado una subida en estas elecciones regionales
y Vox, en cambio, ha obtenido un resultado extraordinario,
ha crecido muy notablemente en la región.
De hecho, sin duda, el principal vencedor de estas elecciones regionales es Vox.
Y el tercer objetivo de la convocatoria de estas elecciones era un objetivo
de política interna dentro del Partido Popular.
Después de la contundente victoria de Isabel Díaz Ayuso en las elecciones autonómicas madrileñas,
sobrevolaba una duda razonable dentro del Partido Popular de Pablo Casado.
Los muy buenos resultados del Partido Popular en Madrid,
donde Ciudadanos desapareció y Vox en Madrid se convirtió en una fuerza testimonial,
en una muleta del Partido Popular, pero no en un rival serio del Partido Popular
dentro del bloque de la derecha en Madrid. Esos contundentes resultados eran gracias
a Isabel Díaz Ayuso, que además está reclamando la presidencia del partido
en la Comunidad de Madrid, o en cambio, gracias a la marca PP y gracias a Pablo Casado,
que estaba consiguiendo hacer renacer al Partido Popular en toda España
y, por tanto, también en Madrid. Lo que buscaba Pablo Casado, evidentemente,
en las elecciones regionales de Castille y León, era lograr un muy buen resultado
que llevara al imaginario colectivo a pensar que el triunfo de Ayuso en Madrid
era imputable en última instancia a Pablo Casado, al Partido Popular de Pablo Casado,
y no a Isabel Díaz Ayuso. Pues bien, este tercer objetivo de la convocatoria
de estas elecciones tampoco se ha conseguido en absoluto, ha sido un fracaso total.
El PP sube muy poco con respecto a las elecciones autonómicas de 2019,
nada que ver, de hecho, con la subida que experimentó Díaz Ayuso en Madrid,
se queda muy lejos de la mayoría absoluta, a diferencia de Isabel Díaz Ayuso en Madrid,
que prácticamente obtuvo la mayoría absoluta, y de hecho podríamos decir
que Pablo Casado, al forzar la convocatoria electoral en Castille y León,
ha hundido el buen momento electoral, el buen clima electoral
en el que se encontraba el Partido Popular después de la victoria
del Partido Popular de Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid.
Y cuidado, me parece muy bien que los Castellanos Leoneses hayan castigado
al Partido Popular con una subida raquítica de votos y descaños,
porque fijémonos que ninguno de los tres objetivos que había detrás de la convocatoria
de estas elecciones eran objetivos que tuvieran nada que ver
con mejorar la calidad de vida de los Castellanos Leoneses.
Eran tres objetivos que buscaban reforzar el poder interno y externo
y las probabilidades de alcanzar de conquistar ese poder en la Moncloa
de Pablo Casado era instrumentalizar a los ciudadanos de Castille y León
para las aspiraciones personalistas y partidistas de Pablo Casado
y del Partido Popular. No había ningún proyecto que estuviese atascado
en Castille y León porque fuera necesaria otra correlación de fuerzas políticas.
El Partido Popular convocó elecciones por lo que he dicho antes,
no pensando en los ciudadanos, como hacen siempre todos los partidos
que nunca piensan en los ciudadanos, sino en su poder, en cómo conservar y ampliar su poder.
Pero en este caso ha sido una instrumentalización muy descarada
de los Castellanos Leoneses y por tanto tampoco han acudido a las urnas
de manera entusiasta a apoyar al Partido Popular.
Sentado todo esto, un comentario más detallado sobre el resultado
que han obtenido los distintos partidos políticos que han concurrido a estas elecciones.
Empecemos con el bloque de la derecha, es decir, Partido Popular, Ciudadanos y Vox.
En este bloque de la derecha claramente el vencedor en estas elecciones
ha sido Vox, que ha pasado de 1 a 13 escaños.
Y el gran perdedor, al menos cuantitativamente, ha sido Ciudadanos,
que ha desaparecido prácticamente del Parlamento de la región.
El Partido Popular, en teoría, mejora un poquito, a falta de los escaños definitivos.
Estamos hablando de dos, tres escaños de mejora frente a los 29
que obtuvo en las elecciones autonómicas de 2019.
Pero, obviamente, un Partido Político no convoca anticipadamente unas elecciones
para obtener una mejoría tan sumamente raquítica en este resultado.
Por tanto, el Partido Popular, aunque mejore, también es uno de los perdedores
de esta noche electoral, instrumentalizó a los ciudadanos de Castilla y León
para sus aspiraciones políticas, personales y partidistas,
y no ha conseguido nada de eso.
Vayamos con el bloque de la izquierda, Partido Socialista y Unidas Podemos.
El bloque de la izquierda, en su conjunto, ha pasado de 37 diputados
en las elecciones del año 2019 a 29-30, es decir, ha habido una caída importante
de los diputados de este bloque, que además es la coalición política
que integra el Gobierno de España.
Los dos partidos han salido perdiendo en estas elecciones.
El PSOE se ha dejado alrededor de siete escaños,
y Podemos, a falta de los escaños definitivos, o se queda igual,
o pierde uno de los dos diputados que tenía.
Por consiguiente, el efecto Sánchez en las elecciones de Castilla y León
ha sido un efecto de hundimiento, y el efecto de Yolanda Díaz,
esa gran negociadora que tantas simpatías despierta por toda España,
el efecto de Yolanda Díaz en Unidas Podemos, pues de momento no se lo ve,
y si se lo ve, es para mal.
En todo caso, es significativo que tras dos años de gobierno de coalición
en España entre PSOE y Podemos, en el Ecuador, por tanto de la legislatura,
esta prueba de fuego haya significado que los dos partidos salen perjudicados,
salen damnificados de estas elecciones regionales.
Las cosas chulísimas en palabras de la vicepresidenta Yolanda Díaz,
que hace este gobierno, no parece que estén calando entre la población,
ni que estén despertando un enorme entusiasmo que se traduzca en más votos.
Y por último el bloque de los partidos regionalistas dentro de la región,
de Castilla y León, en particular los dos grandes partidos regionalistas
que han concurrido en estas elecciones, y que han salido los dos vencedores,
han sido Unión del Pueblo Leones y Soria ya.
Unión del Pueblo Leones, a falta del reparto de escaños definitivos,
ha triplicado su representación y Soria ya,
que no tenía ningún diputado en las anteriores elecciones, ha entrado con tres.
Por tanto, claramente, junto con Vox, han sido los vencedores de estas elecciones regionales.
¿Es bueno o es malo que preponder en este tipo de partidos regionalistas?
Pues aquí personalmente tengo opiniones encontradas.
Creo que hay que distinguir entre dos tipos de partidos regionalistas.
Por un lado, los partidos regionalistas que abogan por autogovernarse,
porque les dejen solos.
Este sería el caso de Unión del Pueblo Leones,
que quiere conformar una comunidad autónoma separada de Castilla y León,
porque consideran que el gobierno central de Castilla y León
no tiende adecuadamente las necesidades, las reclamaciones de provincias
como León, como Zamora o como Salamanca.
Estos partidos regionalistas no buscan saquear al resto de la región,
lo que reivindican es, en todo caso, que no se lo saquea a ellos,
o en todo caso, que se puedan atender las necesidades locales de manera más descentralizada.
Y por tanto, este tipo de partidos regionalistas,
sí me parece que es bueno que empiecen a preponderar.
Ahora bien, tenemos otro tipo de partidos regionalistas, como Soria ya,
que son partidos regionalistas extractivistas.
Estos no se quieren autogovernar, no quieren separarse del resto de la región,
quieren mantenerse unidos a la región.
Ahora bien, lo que reclaman es que el gobierno central les dé más a costa del resto,
que haya más transferencias, que haya más inversiones del resto de la región
a estas provincias, por ejemplo, la provincia de Soria.
No es que quieran autogovernar los recursos de los orianos,
que eso sería perfectamente legítimo y defendible,
sino que, lo que dicen es, no tenemos suficiente recursos dentro,
dénnos recursos de fuera, dénnos recursos de otras provincias,
dénnos dinero del contribuyente de Castilla y León, que no sea contribuyente en Soria.
Y este tipo de partidos regionalistas que no buscan el autogoverno,
sino, en última instancia, para citar al resto de la ciudadanía,
desde luego no me parece en absoluto una buena noticia que empiecen a preponderar.
En definitiva, ganadores de estas elecciones regionales,
Vox, Soria ya, y Unión del Pueblo Leones,
perdedores, ciudadanos, partido socialista, Unidas Podemos
y también el Partido Popular, casado, el Tacticismo Electoral te ha salido fatal.