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El precio de Bitcoin ha caído un 70% desde sus máximos.
¿Significa esto que Bitcoin en una burbuja pura y que en el fondo no vale nada?
¿Estamos ante un caso único e histórico de desplome del valor de un activo en los mercados financieros?
Pues no. Si echamos un ojo a esos mercados financieros, podremos encontrar muchos otros ejemplos
de activos emitidos por empresas sólidas y por estados sólidos que han caído tanto o más de un 70%.
Veámoslo.
¿El precio de Bitcoin ha colapsado un 70% desde sus máximos de 2021?
Ha pasado desde unos 67.500 dólares por Bitcoin a los actuales 20.500 dólares por Bitcoin.
En un vídeo anterior ya explicamos las diversas causas que han llevado a este fenómeno,
que han llevado a este desplome del precio de Bitcoin.
Sin embargo, muchos comentaristas, muchos analistas, muchas personas que siempre se han mostrado críticas con Bitcoin
están aprovechando la caída actual, una de las más intensas de su historia, para darse palmaditas en la espalda,
para asegurar que ellos tenían razón cuando decían que Bitcoin era puro humo,
que Bitcoin no valía absolutamente nada, que Bitcoin no es que estuviera inflada de precio,
que eso es perfectamente posible, opinable y razonable,
sino que en realidad Bitcoin no vale nada, su precio real es cero,
y el mercado se está empezando a dar cuenta de eso, de que Bitcoin va a valer cero,
porque ha caído un 70% de precio y, por tanto, en los próximos meses veremos cómo se termina desmoronando hasta que valga cero.
Los mismos, por tanto, que hace unos meses consideraban que el mercado era una entidad irracional,
que era incapaz de valorar adecuadamente Bitcoin,
ahora nos aseguran que el mercado es un juez perfectamente racional,
que se ha dado cuenta de las debilidades de Bitcoin y las está introduciendo en su precio.
No es posible que, de la misma manera que el mercado en el pasado sobrereaccionó,
inflando el precio de Bitcoin, ahora esté sobrereaccionando deprimiéndolo.
No, cuando el mercado les lleva a la contraria, el mercado se equivoca,
cuando el mercado les da la razón, el mercado acierta.
En todo caso, el argumento de que Bitcoin no vale nada,
de que Bitcoin era una burbuja pura, sin ningún valor subyacente,
por el mero hecho de que la cotización de Bitcoin haya caído un 70%,
es un argumento que no vale demasiado.
Y es un argumento que no vale demasiado,
porque durante el mismo periodo en el que el precio de Bitcoin ha caído un 70%,
los índices bursátiles en Estados Unidos han caído más de un 30%.
Es más, hay compañías cuyo valor es incuestionable, cuya utilidad es incuestionable,
podremos cuestionar el precio de esas compañías,
pero no que por debajo de ellas haya algo, hay una estructura que genera valor,
que genera servicios útiles para los consumidores.
Hay compañías, decía, cuyo valor es incuestionable,
que han caído porcentajes similares a los que ha caído Bitcoin.
Empecemos por una compañía sobradamente conocida,
y en muchos casos utilizada por todos, Facebook, o como se llama ahora Meta.
Meta, en los últimos meses, ha perdido el 60% de su valor.
El precio de sus acciones ha pasado de 380 a 150%.
No es una caída tan intensa como la de Bitcoin,
que acumula desde máximos un desplome del 70%, pero se acerca bastante.
Si Bitcoin no vale nada por el hecho de haberse depreciado un 70% desde máximos,
estamos diciendo que Facebook tampoco vale nada por el hecho de haber caído un 60% desde máximos.
Pero también podríamos mencionar el caso de otra muy conocida compañía,
Zoom Communications, la compañía que nos proporciona servicios de comunicación online,
a través de la plataforma Zoom, cuya cotización bursátil ha caído un 75% desde máximos.
Ha pasado de unos 480 dólares por acción a 115 dólares por acción.
O por último, también podemos mencionar el conocido caso de Netflix,
cuya caída acumulada desde máximos también es del 75%.
Superior a la experimentada por Bitcoin,
ha pasado de 700 dólares por acción a 180 dólares por acción.
¿Qué estamos diciendo?
¿Que Zoom o que Netflix no valen absolutamente nada?
¿Que su valor intrínseco es cero, que no proporciona ningún servicio de utilidad para nadie?
¿Que habrá decir que la estimación que había hecho el mercado sobre el valor presente y futuro
que proporcionan estas compañías estaba muy inflado y que ahora se está corrigiendo?
Pero decir que estaba muy inflado, a decir que en realidad no valen absolutamente nada,
media un trecho gigantesco.
Y ese trecho gigantesco es el mismo que media en el caso de Bitcoin.
Puede que la cotización de Bitcoin estuviera inflada en su momento,
pero que se haya desinflado no implica necesariamente que vaya a caer a cero.
Eso dependerá de la utilidad de los servicios que proporciona Bitcoin a sus usuarios.
Bien, fijémonos que he escogido tres compañías, que no son tres compañías precisamente pequeñas.
La capitalización bursátil de Zoom, aún después del desplome de valor del 75%
que ha experimentado desde máximos, sigue siendo de 35.000 millones de dólares.
La capitalización de Netflix ronda los 80.000 millones de dólares
y la de Facebook meta supera los 400.000 millones de dólares.
Son compañías muy grandes que prestan servicios a muchísima gente
y que aún así han experimentado desplomes similares a los sufridos por Bitcoin.
Evidentemente si buscáramos empresas más pequeñitas, chicharros bursátiles,
podríamos encontrar muchísimos ejemplos de compañías que siguen siendo valiosas,
que siguen proporcionando servicios útiles a sus clientes,
incluso que siguen siendo rentables y que han experimentado caídas superiores al 70% o al 80%.
Pero no nos centremos únicamente en el caso del sector privado,
no nos centremos únicamente en el caso de los pasivos de compañías privadas,
que ha sucedido con el precio de algunos pasivos del sector público
de esos títulos de inversión que supuestamente son sólidos, seguros, libres de riesgo,
títulos en los que todo el mundo debería confiar y resguardar su inversión,
alejándose de la volatilidad extrema de los mercados financieros alocados en el sector privado.
Bueno, pues si echamos un ojo a lo que ha sucedido con el precio de los bonos estatales,
de la deuda pública estatal, de más larga duración, aquellos bonos que vencen,
no en el corto plazo, sino en el largo plazo, observaremos desplomes muy considerables.
Aquí tenéis el precio de mercado de una serie de bonos emitidos por el estado alemán,
no estoy hablando de un estado insolvente, no estoy hablando de un estado poco confiable,
sino de un estado tan sólido como el alemán, una serie de bonos emitidos por el estado alemán
y que vencen en el año 2052. Son bonos que no pagan tipos de interés,
bonos que han comprado aquellos que querían tener su capital asegurado en el año 2052.
Y sí, en el año 2052 van a recuperar exactamente el mismo dinero,
que no necesariamente el mismo poder adquisitivo a tenor de la actual inflación,
que le prestaron al estado alemán. Pero ahora mismo, si quisieran deshacer su posición,
si quisieran liquidar el bono en el mercado y recuperar el capital que invirtieron,
que le prestaron al estado alemán, fijémonos que para recuperar ahora, y no tener que esperar
a 2052, el capital prestado tendrían que perder un 43% de lo invertido. Pero si en lugar de fijarnos
en los bonos públicos, en los bonos estatales que vencen en 30 años, nos fijamos en aquellos
que vencen a 100 años vista, sí, sé que es llamativo, sorprendente e impactante,
que existan bonos que venzan a 100 años vista, no sólo que existan, sino que alguien los comprará,
pero existen e incluso podría tener en algunos casos algún sentido financiero actual. Por ejemplo,
pueden ser activos que a las compañías de seguros les interese tener en su balance. Pues bien,
si nos fijamos en los bonos que vencen a 100 años emitidos en el año 2020 por el estado
austríaco, otro estado reputado, de solvencia más o menos garantizada, observaremos que la caída
que han experimentado en su valor de mercado es del 90%. No del 70% como Bitcoin, sino del 90%.
Si quienes compraron esos bonos a 100 años quisieran liquidarlos hoy para recuperar el
capital que invertieron en ellos, perderían el 90% de lo invertido. ¿Significa todo esto,
que la deuda pública no tiene absolutamente ningún valor, que los estados son absolutamente
inútiles, que son una burbuja pura? Bueno, ojalá significara esto porque eso implicaría que la
sociedad está despertando, se está desanescesiando. Pero no, obviamente no significa eso. Los estados
siguen teniendo una capacidad fiscal extractiva de recursos de la sociedad, que no deberían tener,
pero la tienen, y con esa capacidad extractiva pueden pagar la deuda. No es que estos estados hayan
dejado de ser solventes, no es que el precio de estos bonos se haya desplomado porque los
inversores consideren que estos estados, el estado alemán o el estado austríaco,
van abocados a la quiebra. No, la razón por la que el precio de mercado de estos bonos
se ha hundido, hay que buscarlo en otro factor. Un factor que también permite explicar por qué
se ha hundido el precio de las acciones tecnológicas y que también permite explicar por qué se ha
hundido el precio de Bitcoin. Y ese factor común es el alza de los tipos de interés. Cuanto más
elevados sean los tipos de interés en el mercado, más agresivamente descontamos los flujos de caja
futuros esperados. Es decir, menos vale hoy el dinero que esperamos que a través de intereses,
dividendos o plusvalías, llegue en el futuro. Cuanto más alejado se ubique en el tiempo el
dinero que nos permite un determinado activo, en forma, repito, de dividendos, intereses o plusvalías,
y cuanto más altos sean los tipos de interés a los que descontamos ese dinero alejado en el tiempo,
menor será el valor presente, lo que vale hoy, lo que el mercado está dispuesto a pagar por ese
dinero futuro esperado. Eso es así en el caso de las acciones tecnológicas, que pueden tener un
futuro muy brillante, pero en todo caso es un futuro alejado en el tiempo y, por consiguiente,
un alza de los tipos de interés destroza especialmente la valorización de estas compañías. Esto es
así también en los bonos estatales, que tienen los flujos de caja futuros perfectamente garantizados o
prácticamente garantizados al 100%, el estado alemán va a pagar, el estado austríaco va a pagar,
pero va a pagar muy tarde y ese dinero tan futuro, tan alejado en el tiempo, con tipos de interés
más altos, hoy vale mucho menos, cuanto menos, pues en el caso del bono alemán, a 30 años,
ya lo hemos visto, un descuento del 45%, y en el caso del bono austríaco, a 100 años, un descuento
del 90%. Y también, eso mismo, es lo que probablemente esté ocurriendo con Bitcoin, los tenedores de
Bitcoin eran personas que esperaban rendimientos futuros en forma de plusvalías, es decir,
de revalorizaciones de Bitcoin, rendimientos que no iban a llegar necesariamente en el corto plazo,
pero que sí se esperaba que llegaran en el medio largo o muy largo plazo. Pues bien,
aunque esas revalorizaciones puedan llegar en el futuro, que está por ver, simplemente no estoy
entrando en ese argumento, quiero aislar la influencia que por sí mismo tiene la subida de
los tipos de interés, aunque esas revalorizaciones puedan llegar en el futuro, si los tipos de
interés han subido, esas revalorizaciones futuras hoy valen mucho menos, y de la misma manera que
se hunde el precio de las acciones tecnológicas, o de la misma manera que se hunde el precio de los
bonos estatales a largo plazo, también por ese mismo argumento se puede hundir hoy el precio de
Bitcoin. Por eso no tiene ningún sentido, o ningún sentido honesto, utilizar el argumento de que
Bitcoin ha caído un 70% desde máximos para llegar a la conclusión de que el valor intrínseco de
Bitcoin es cero. Quizá uno pueda defender con buenos argumentos, tengo mis dudas, pero quizá uno
pueda defender con buenos argumentos, que el valor intrínseco, el valor fundamental de Bitcoin,
es cero, es decir, que es una burbuja pura y que terminará por no valer nada, pero desde luego
utiliza el argumento de que como ha caído un 70%, eso ya pone de relieve que era una burbuja pura
y que terminará valiendo cero, eso es una trampa, eso es un argumento falaz, porque ese mismo argumento
luego no se utiliza para concluir que el valor intrínseco de Facebook es cero, que el valor
intrínseco de Netflix es cero, que el valor intrínseco de Zoom es cero, o que el valor intrínseco de
los estados, de la solvencia de los estados, alemán y austriaco es cero. Y si no se utiliza para todos
estos casos, tampoco debería utilizarse para Bitcoin, salvo que quienes utilicen ese tipo de
argumento en realidad no estén tratando de razonar, sino de manipular.