El gobierno de PSOE podemos tomar por asalto la presidencia del Instituto Nacional de Estadística,
del INE, para que publique datos de PIB y datos de IPC que sean del gusto de este gobierno,
un enorme detedioro de la calidad institucional de España que nos coloca en la senda de Turquía
o de Argentina.
Veámoslo.
Desde hace meses el gobierno de PSOE Podemos está enfrentado frontalmente con Juan Rodríguez
Po, el presidente del Instituto Nacional de Estadística español, el INE.
Y es que el INE estaba presentando unos datos macroeconómicos que no eran en absoluto del
gusto del gobierno.
De acuerdo con el INE, la inflación en España es muy alta y de acuerdo con el INE, la actividad
económica en España es más bien mediocre.
España fue, según el INE, la economía europea que más cayó durante la pandemia y también
está siendo, según este INE, la economía europea que menos se está recuperando después
de la pandemia.
Es decir, en pocas palabras que la imagen que estaba transmitiendo el INE sobre la economía
española era la de una economía esclerotizada con alta inflación.
Y eso, obviamente, era algo que no gustaba al gobierno de España.
Y por eso el gobierno de España llevaba meses presionando al presidente del INE a Rodríguez
Po para que presentara otros datos de IPC y de PIB que fueran más del gusto de este
gobierno.
Pero el presidente del INE, Rodríguez Po, que había sido colocado en ese puesto por
el propio Partido Socialista Obrero Español, no es que fuera un hombre de la vieja guardia
del PP, sino que era un hombre, un cargo de confianza del Partido Socialista Obrero Español,
el presidente del INE, Rodríguez Po, se negaba a recalcular el PIB y el IPC a gusto, a conveniencia
del gobierno de España.
Rodríguez Po defendía que el método que estaba utilizando para calcular estos macroindicadores
era el método correcto y que, por tanto, no había nada que recalcular, que no había
razones para revisar el IPC a la baja y mucho menos la sabía para revisar el PIB a la alza.
Y cuál ha sido la reacción del gobierno después de que el presidente del INE, de
que Rodríguez Po, se haya negado a acatar sus órdenes.
¿Publica un IPC más bajo? ¿Publica un PIB más alto?
¿Cuál ha sido la reacción del gobierno después de que Rodríguez Po no acatara esas órdenes?
Cesarlo.
El pasado jueves el gobierno comunicó en una carta a Rodríguez Po que iba a dejar de
ser presidente del INE y antes de que ese cese se oficializara a través del boletín
oficial del Estado, el propio Rodríguez Po presentó ayer su dimisión.
Ahora el cargo está vacante y el gobierno, previsiblemente, nombrará nuevo presidente
del INE al antiguo secretario de Estado de Seguridad Social, es decir, a un antiguo miembro
del gobierno que sorprendentemente y sin ninguna explicación por motivos personales,
lo que se suele decir, había abandonado su cargo el pasado lunes.
Lo había abandonado claro en preparación de ocupar un nuevo cargo, la presidencia
del INE.
Dicho de otra manera, el gobierno de PSOE Podemos, pero sobre todo la facción de PSOE,
aquí Podemos no ha tenido tanta influencia, el gobierno de PSOE Podemos, pero sobre todo
la facción del PSOE, toman por asalto el Instituto Nacional de Estadística para que
éste publique cifras macroeconómicas que sean del agrado del presidente del gobierno
y de la ministra de Economía.
Y cuidado, no estoy diciendo que el gobierno no pueda tener razón en alguna de las críticas
metodológicas que dirigía contra el INE.
Por ejemplo, en materia de IPC, aparentemente, el INE únicamente estaba haciendo un seguimiento
de los precios de la electricidad en España a partir de la tarifa regulada, que es la
parte del mercado eléctrico español que más se ha disparado de precio durante los últimos
meses.
Y no estaba tomando como referencia la otra parte que además es la mayoritaria del mercado
eléctrico español, es decir, el mercado eléctrico libre.
Más del 60% de las familias españolas está acogida a una modalidad de contrato libre
en el mercado eléctrico y estos contratos son de renovación anual, de manera que en
estos contratos los precios no se habían disparado.
Si el INE hubiese cogido no solo una muestra de contratos con tarifa regulada, que son
los que se han disparado de precio, sino también una muestra de contratos de mercado libre
eléctrico, entonces los precios promedio de la electricidad en España, tal como los
han medido el INE, no habrían aumentado tanto como lo han hecho y el IPC nos habría
incrementado tanto como lo ha hecho.
Por supuesto, esto dejará de ser así en los próximos meses, porque ahora mismo se están
revisando los contratos de mercado libre y también están recogiendo los incrementos
que anticipó el contrato de tarifa regulada durante los meses anteriores, pero aún así
es cierto que durante los últimos meses, si se hubiese seguido otro método distinto
al que ha seguido el INE para calcular los precios y es un método que puede tener sentido,
el IPC no habría aumentado hace meses tanto de golpe, habría aumentado de manera más
progresiva, pero habría aumentado, no nos engañemos.
Bien, como digo, no es una cuestión de que algunas de las críticas metodológicas que
dirija el gobierno contra el INE no puedan tener razón, el problema es que has cesado
al presidente del INE para que deje de publicar unos datos que a ti no te gustan, o a contrario
senso, para que publique unos datos que a ti te gusten, imaginemos que dentro de unos
meses el nuevo INE de este gobierno revisa espectacularmente al alza los datos de PIB,
o espectacularmente a la baja los datos de IPC, imaginemos que el nuevo INE, después
de aplicar una novedosa metodología al cálculo del PIB o al cálculo del IPC, nos dice que
la economía española está creciendo muchísimo y que la inflación no es para tanto.
¿Qué credibilidad tendrá esta revisión confeccionada por el nuevo INE sanchista de
los datos de PIB y de los datos de IPC?
Pues la misma credibilidad que tiene a día de hoy el CIS, es decir, ninguna.
¿Y por qué?
Pues porque será una revisión de datos ejecutada a la orden del gobierno, ejecutada tras el
CIS de la actual presidente del INE, ejecutada tras la toma por asalto del INE.
Y algunos dirán, bueno, pero el presidente del INE es un cargo de confianza del gobierno.
Al actual presidente del INE, a Juan Rodríguez Po, lo nombró este gobierno.
¿Por qué entonces el gobierno, si lo nombró, no puede sustituirlo?
¿En qué sentido cabe decir que el gobierno toma por asalto el INE?
¿Para hacer lo que han hecho todos los gobiernos a lo largo de la historia de España?
Es decir, nombrar al presidente del INE.
Bueno, lo primero es que el presidente del INE no debería ser un cargo de confianza
del gobierno.
A la presidencia del INE se debería llegar o por concurso o por oposición o por acuerdo
parlamentario entre las fuerzas políticas, como sucede, por ejemplo, con el nombramiento
del gobernador del Banco de España.
Pero bueno, eso sería una reforma institucional que adecentaría la calidad del estado de
derecho español.
Ahora mismo, sin embargo, las condiciones son las que son.
El gobierno nombra discrecionalmente al presidente del INE.
Pero incluso en ese caso las formas importan.
No es lo mismo reemplazar al presidente del INE en un cambio regular de los altos cargos
de la administración que reemplazarlo después de haberlo presionado en público y en privado
para que recalculara el PIB y el IPC tras haberse negado en la autonomía que tiene
el INE frente al gobierno a recalcular el PIB y el IPC por considerar con razón o sin
ella, pero por considerar que estaban bien calculados y que después de todo eso lo
ceses para que el nuevo presidente del INE publique datos que sí sean de tu gusto.
No es lo mismo por tanto un nombramiento con autonomía, te nombro a ti, haz lo que quieras,
que un nombramiento con mandato, con encargo, te nombro a ti para que hagas esto.
No es un tú dejas de ser presidente del INE, tú pasas a ser el nuevo presidente del INE
y como nuevo presidente del INE voy a respetar tu autonomía para que hagas dentro del INE
aquello que consideres oportuno.
No, este cesado porque no cocinas los datos como a mí me gusta, te nombro a ti para que
cocines los datos como yo quiero que los cocines.
En este caso fijémonos que el cese y nuevo nombramiento de presidente del INE es un cese
y nuevo nombramiento instrumentales para que el INE diga aquello que el gobierno quiere
que diga y eso es en suma lo que acaba de hacer el gobierno, cargarse cualquier mínima
autonomía que seguía teniendo el Instituto Nacional de Estadística para convertirlo
en una agencia estadística al servicio del Partido Socialista Obrero Español.
Eso es lo que ha hecho con las formas del cese y del nuevo nombramiento del presidente
del INE para que el INE publique aquello que el gobierno y sobre todo la facción socialista
del gobierno lleva meses exigiéndole al presidente del INE que publique, en las formas
por tanto exactamente lo mismo que el CIS de Tezanos, instrumentalizar un organismo público
cuyo presidente es un cargo de confianza del gobierno para que se convierta en un subalterno
de los intereses del partido.
Y con este deterioro de las instituciones públicas españolas, con este deterioro de
la independencia de la autonomía estadística metodológica del INE frente a los intereses
expurios del gobierno, lo que está haciendo este gobierno es seguir los pasos de otros
dos países que en su momento también cesaron al presidente de sus institutos nacionales
de estadística porque no les gustaba cómo ese Instituto Nacional de Estadística estaba
calculando datos como el IPC, que otros dos países durante los últimos años han cesado
a los presidentes de sus INES para que los nuevos INES calculen la inflación o calculen
el PIB al gusto de sus respectivos gobiernos, pues los casos más sonados los tratamos
en un vídeo de hace unos meses que no hacía presagiar que eso mismo se iba a reproducir
en España y esos casos son la Argentina de los Kirchner y la Turquía de Erdogan.
Tanto Néstor Kirchner como Tayyip Erdogan, Erdogan hace apenas unos meses, cesaron en
su momento a los presidentes de sus institutos nacionales de estadística porque estaban
molestos con los altos datos de inflación que esos organismos estaban presentando, querían
que esos organismos le dijeran al público en general que la inflación en realidad era
bastante más baja de lo que todo el mundo percibía que realmente era.
Es decir, tanto Kirchner como Erdogan han convertido a sus institutos nacionales de
estadística en órganos de propaganda estadística de sus gobiernos.
En nuestro caso probablemente no lleguemos tan lejos porque el INES se sigue sometiendo
a las normas comunitarias comunes de Eurostat y por tanto el INE está auditado periódicamente
por Eurostat, por la oficina estadística comunitaria, es decir, que afortunadamente
el gobierno de España no tiene un control absoluto sobre el INE, pero aún así sigue
existiendo un margen bastante amplio para presentar las estadísticas de una manera o
de otra según cual sea la conveniencia en ese momento del gobierno de turno y por tanto
en las formas si este gobierno nos está conduciendo por la vía populista de Argentina o de Turquía.
Ese es el grado de deterioro institucional con el que está castigando este gobierno
a España.