This graph shows how many times the word ______ has been mentioned throughout the history of the program.
¿Es verdad que la política económica de Javier Milei es un mero continuismo de la
política económica de las dictaduras militares o de Carlos Menem?
¡Veámoslo!
Aunque Javier Milei es un economista liberal libertario, en muchas ocasiones, en demasiadas
ocasiones, sus rivales, sus adversarios políticos, lo han acusado de tener ideas cercanas, proclives,
a las dictaduras militares de la Argentina.
Algunos han llegado al extremo de acusar a Javier Milei de ser una especie de videla
elegido democráticamente, una especie de videla 2.0.
Pero si esto fuera así, Javier Milei debería estar aprobando, impulsando normativas que
fueran muy similares a las que estuvieron vigentes en las dictaduras militares de la
Argentina.
Y como es bien sabido, hace unos días, Milei, a través de un decreto de necesidad y urgencia,
derogó o modificó más de 300 normas legales de la Argentina.
Y por tanto, ahí podemos ver cuáles son sus prioridades legislativas.
Ahí podemos ver cuál es la agenda normativa de Javier Milei, qué tipo de normas y aprobadas
por quién, por qué gobierno, por gobiernos democráticos, por gobiernos dictatoriales,
qué tipo de normas y aprobadas por quién se quiere cargar Javier Milei porque son incompatibles
con su visión liberal libertaria sobre la Argentina.
Pues bien, en el siguiente gráfico elaborado por Néstor Magariños para Infodash, podemos
observar con claridad quienes aprobaron las leyes que el decreto de necesidad y urgencia
de Javier Milei, el decreto liberalizador de Javier Milei, deroga o modifica.
Y como vemos, la mayoría de las leyes derogadas por Javier Milei son leyes de la dictadura
militar.
52 leyes derogadas o modificadas de la dictadura militar de Juan Carlos Onganía entre el año
1966 y 1970 y 56 leyes derogadas o modificadas de la dictadura militar de Jorge Videla entre
el año 76 y 81.
Por tanto, repito, el decreto de necesidad y urgencia, el decreto liberalizador de Javier
Milei deroga o sustituye 138 leyes elaboradas y aprobadas por las dictaduras militares de
Onganía y de Videla.
O expresado de otra manera, paradójicamente, todos aquellos que están dando batalla, que
están combatiendo contra la entrada en vigor y la consolidación de este decreto de necesidad
y urgencia, paradójicamente, o quizá no tan paradójicamente, lo que están haciendo
es defender la vigencia, la continuidad de legislación que fue aprobada, fue impuesta
por dictaduras militares.
Vamos que se nos dice que el decreto de necesidad y urgencia es un mecanismo democráticamente
problemático para modificar leyes que están en vigor en la Argentina, y es verdad, quien
debería legislar en una democracia con separación de poderes es el poder legislativo y no el
poder ejecutivo, pero no perdamos de vista que 138 de las leyes derogadas por este decreto
de necesidad y urgencia fueron aprobadas por dictaduras.
No sé qué poder legislativo democráticamente electo pudo haber en esas dictaduras como
para que la derogación de las leyes de las dictaduras a través de un decreto de necesidad
y urgencia constituya un ataque a la democracia.
Si esas leyes nunca entraron en vigor a través de mecanismos democráticos, su derogación
o sustitución, a través de un mecanismo que sí, que es problemático desde un punto
de vista del estado de derecho y de la separación de poderes, como es el decreto de necesidad
y urgencia, pero su derogación o modificación a través de ese mecanismo no atentará contra
la democracia, porque esas leyes no están en vigor gracias a la democracia.
Pero más allá de lo anterior, el hecho de que el decreto de necesidad y urgencia de
Javier Milei derogue o reemplace 138 leyes aprobadas durante las dictaduras de Onganía
y de Videla debería llevarnos a tres conclusiones harto importantes.
La primera es que la visión ideológica subyacente en Argentina durante los últimos 70 años
ya sea con dictaduras militares o con democracia, ha sido muy continuista, ha sido prácticamente
la misma. El hecho de que hasta hoy hayan subsistido, hayan pervivido 138 leyes aprobadas
por dos dictaduras militares a finales de los 60 y a finales de los 70, lo que significa
es que la sucesión de ejecutivos y de legislativos dentro de la democracia argentina durante
las últimas décadas ha juzgado que esas leyes que fueron aprobadas por las dictaduras
de Onganía y de Videla eran leyes perfectamente compatibles con su corpus ideológico.
Nadie hasta ahora las ha querido derogar o reemplazar porque a nadie hasta ahora le
han chirreado. Por tanto, el establishment político argentino
de las últimas décadas ha estado esencialmente de acuerdo con este tipo de regulaciones profundamente
antiliberales promovidas y aprobadas por dos dictaduras militares. Es decir, y dicho
con otras palabras, Argentina lleva más de 70 años, ya sea con dictaduras militares
o con democracia, con una misma sintonía ideológica en materia económica. Y esa
sintonía ideológica en materia económica que han aplicado tanto dictaduras como democracias
durante los últimos 70 años ha sido una desastrosa sintonía ideológica en materia
económica. Ha sido la causa de la decadencia económica y social de Argentina durante las
últimas décadas. Segunda conclusión importante, este decreto
de necesidad y urgencia aprobado por Javier Milei, es el proyecto de liberalización y
de desregulación de la economía argentina más ambicioso del último siglo. Es verdad
que Menem a comienzos de los 90 también emprendió un proyecto de regulador muy importante
de la economía argentina. Pero démonos cuenta de que hay muchas normas muy intervencionistas
que fueron precisamente aprobadas por las dictaduras militares o por el peronismo durante
los años 50 y durante los años 70 que Menem no llegó a derogar. Porque todas esas leyes
seguían en vigor desde los 50, desde los 60 o desde los 70. Y es ahora, con este decreto
de necesidad y urgencia de Javier Milei, cuando por primera vez en la historia reciente de
Argentina, todas esas piezas legislativas antiliberales, estatistas e intervencionistas,
es la primera vez en que han sido derogadas. Y tercera conclusión importante, vinculada
muy estrechamente con las dos anteriores. Aunque hay mucha gente que intenta encajar
a Javier Milei en perfiles políticos de la historia argentina que puedan ser reconocibles
por la población, como hemos dicho, algunos dicen que Milei es un Videla 2.0, otros dicen
que es un neomenemista, una reedición de los gobiernos de Menem durante los años 90.
Aunque estamos escuchando todo este tipo de discursos, debería quedar bastante claro
a tenor de este decreto de necesidad y urgencia que Javier Milei es algo radicalmente distinto
a lo que ha experimentado Argentina durante los últimos 70 u 80 años.
Justamente porque Milei con este decreto de necesidad y urgencia hace una tabla rasa en
materia de legislación económica a los últimos 70, 80 años de historia legislativa argentina,
con dictaduras militares y con democracia, Javier Milei es algo distinto a lo que se
desarrolló durante estos últimos 70 u 80 años, algo distinto incluso a aquellos que
decían ser distintos a lo que había vivido argentino durante las décadas anteriores,
como es el caso de Menem, que no derogó muchas de las leyes, 138 en concreto, que seguían
en vigor bajo su mandato y que habían sido aprobadas por dos dictaduras militares.
Esperemos que el establishment político tradicional de la Argentina, la casta política, que es
aquella que está siendo derogada con este decreto de necesidad y urgencia, porque se
están derogando las leyes que ellos aprobaron o que ellos han estado protegiendo durante
décadas, esperemos que ese establishment político argentino que está viendo amenazado su modus
vivendi, el status quo a partir del cual han parasitado y empobrecido a los ciudadanos
argentinos durante las últimas décadas, esperemos que ese establishment político argentino
que se ve amenazado no termine frustrando social y políticamente la presidencia de
Javier Milei, porque con su apertura de la economía argentina, Milei está intentando
cambiar el rumbo de decadencia que ha seguido a Argentina con su proteccionismo, con su
intervencionismo y con su mercantilismo de las últimas décadas. El proteccionismo,
el intervencionismo y el mercantilismo del que ha vivido la casta política y que ahora
se resiste, como gato panza arriba, a que se ha derogado.
Ojalá en suma Javier Milei consiga enterrar en la Argentina actual la nefasta herencia
económica tanto de las dictaduras militares como del peronismo.