This graph shows how many times the word ______ has been mentioned throughout the history of the program.
Jesús Seijas dice, soy developer de casi 50 años.
Se ve bastante bien en la foto.
Creo que bueno es lo mío, pero ni así evito la ansiedad por la edad.
Las empresas ya no me quieren, o al menos eso es lo que yo creo.
Y a veces ese pensamiento me viene de noche.
Y si pierdo mi trabajo actual, ¿qué haré con mi vida?
Hay empresas que dicen que los jóvenes aprenden más rápido.
Yo nunca he dejado de aprender.
Pero al irme a la cama, mi cerebro es mi enemigo y me dice que todo eso no importa.
Que ya tengo casi 50 años y que si pierdo mi trabajo, nadie me querrá.
Esta noche fue una de esas noches.
Noté el tum-tum en el pecho al despertarme.
Hoy programar no me ha hecho olvidar que cada vez me será más complejo encontrar a alguien que me contrate.
La verdad es que me ha parecido muy visceral, muy sincero, muy bonito el exponerse así.
Qué mierda tener que sentirte así.
Y luego estaba hablando bastante del tema, ¿no?
Por ejemplo, Ari le preguntaba que se haga streamer.
Que se haga streamer.
¿Desde qué edad empezaste a sentir esto?
A ver cuánto me falta para que comience a agobiarme.
¿Tienes ese pensamiento por qué has estado buscando y siendo rechazado o es lo que imaginas que va a pasar?
Desde los 40.
Pero seguramente sea que mis muñecos de Inside Out el más fuerte es la azulita.
Y bueno, hace unos meses me pasó.
Empresa muy grande me contactó, envié el currículum, hubo silencio una semana, pregunté.
Y me dijeron que mi currículum no había pasado sus algoritmos por exceso de experiencia.
Porque perfiles como el mío no son continuistas.
Exceso de experiencia.
Voy a dar, porque ya me estaba diciendo la gente en el chat.
Oye, sé sincero, sé ir sincero con este tema.
Voy a ser sincero y voy a seros súper, súper sincero.
Hay una cosa que por desgracia en el mundo que nos rodea no podemos controlar y es el pensamiento ajeno.
Y lo sé por experiencia por gente que me rodea y gente, y porque me ha pasado a mí también,
es que nos agobiamos, nos preocupamos en qué piensan los demás de mí.
De alguna forma creemos que sabemos lo que la gente piensa, ¿no?
Y nos afecta. Esto pasa mucho con el signo del impostor, pasa mucho con inseguridades que tenemos, ¿no?
Y una de ellas es la edad.
Porque es verdad que hay gente que lo piensa.
O sea, es verdad que hay edadismo.
El edadismo es básicamente la gente que hay discriminación por la edad.
Eso existe. O sea, eso es verdad totalmente.
Hay muchas discriminaciones y una de ellas es la edad.
O sea, que hay gente ahí fuera que realmente piensa lo que le preocupa a Jesús es cierto.
Lo sé porque lo he escuchado, lo sé porque lo he pensado, lo sé por mil millones de historias.
Obviamente no estoy de acuerdo, pero lo sé, lo sé porque sería mentirnos.
Pero también es verdad que a veces una cosa que nos pasa mucho es que miedos que tenemos,
de alguna forma los materializamos y los estigmatizamos en nosotros.
Por ejemplo, nos preocupa mucho lo que piensan los demás a tal punto que hacemos nuestro ese pensamiento, ¿no?
Jesús, obviamente que piensa esto, tampoco tiene la certeza que la han rechazado nunca por eso.
No sabe que la han rechazado.
Es verdad que la han rechazado porque tiene demasiada experiencia.
Pero imaginad que en realidad esa empresa el problema es que estaba buscando un junior que, claro, que realmente cobrase menos.
Una persona que supiese menos.
No porque fuese que tuviera 40, 45, 50 años.
Sino más por eso.
O sea, el problema es que ante la duda, o sea, al tener la inseguridad, nos ponemos en el caso peor en el que alimentamos ese miedo, ¿no?
Que existe y es cierto, pero lo alimentamos.
Y es una mierda.
Y no digo que Jesús en este caso...
No, porque es que a mí también me pasa.
Así es que empatizo, comprendo y entiendo totalmente ese sentimiento que tiene Jesús.
Porque a mí también me ha pasado.
O sea, es que lo entiendo totalmente.
También sé que así es como funciono, ¿no?
Así es como funciono y como veo mucha gente a los demás.
Entonces, que tiene razón Jesús que existe ese edadismo, es verdad.
Esto que él siente, lo sienten toda la gente a todas las edades.
Lo que siente Jesús, que es válido, lo siente la persona que tiene 18 años, que acaba de salir de la universidad y que se siente que es muy inmaduro.
Que las empresas lo van a ver muy inmaduro, lo van a ver que acaba de salir de la universidad, que no tiene experiencia, que es muy joven, que no va a ser profesional.
Le va a pasar.
También hay gente que tiene 30 años y que, claro, las empresas ven que igual es que tiene 30 años y no tiene tantos años de experiencia y qué es lo que ha hecho.
Y por qué se tomó un año sabático ahí en medio, no sé qué.
O la gente ve que tiene 40 años.
Y es que pasa en todas las edades, porque esas inseguridades al final, sea la edad porque crees que eres muy viejo, porque crees que eres muy joven, porque crees que no tienes la edad correcta, porque crees que no...
Esto nos pasa.
Y es una mierda, obviamente.
Y sí que puede pasar.
O sea, yo no digo, yo no digo, no, es mentira que hay...
No, no, es que es verdad.
Es que lo que dice Jesús pasa.
Pasa y fuera.
Pero lo que es muy importante que no tiene que pasar es que seamos nosotros mismos los que creamos que tenga que pasar.
O sea, lo que le diría Jesús, aparte de darle un abrazo, es que él no tiene que sentirse así, porque él sabe lo que vale.
O sea, no es que estás triste, no estés triste.
No me refiero a eso, sino que me refiero al hecho de que él no se tiene que preocupar de que tenga 50 años y qué tal.
Que lo vayan a pensar los demás, al final él no lo puede controlar, porque seguramente a alguna empresa a lo mejor le pasa que sí que le vaya a rechazar por eso.
Pero al final él tiene valores y tiene cosas que ha conseguido que otras personas no han conseguido.
Tener una carrera hasta los 50 años siendo programador, teniendo todavía una actitud de que siga aprendiendo.
Y eso son cosas en las que él se tiene que, de alguna forma, apoderar, porque es lo que le hacen único.
Es lo que él tiene que poner sobre la mesa.
El hecho de decir, oye, sí, tendré 50 años, pero estoy aprendiendo como el que más, como el primer día y tal.
Y eso yo creo que solo él puede poner eso.
No lo puede poner cualquiera.
No cualquier persona tiene tantos años de experiencia como él, no tanta gente a lo mejor ha cambiado tantas veces de lenguaje de programación, ha estado en diferentes empresas haciendo cosas tantas diferentes.
O sea, yo creo que esos son valores en los que él, él mismo es en los que se tiene que fijar y se tiene que amarrar, ¿sabes?
Eso es el núcleo sobre lo que tiene que girar y no la edad.
O sea, la edad la vamos a cumplir todos.
Eso es una cosa que pues va a ocurrir.
No le define, no le define.
Y si alguien por lo que sea en algún momento es por eso, ahí no era.
Punto.
Ahí no era.
Las cosas como son.
O sea, ya está.
Porque en esa empresa, si no hubiera sido por la edad, le hubiera sido por otra cosa.
Y si, o sea, ¿qué más da?
Y eso es lo que le tengo que decir.
No a él, sino a todo el mundo.
Porque sé que me escribís mucho, que me escribís, me escribís, tengo 30 años, tengo 40 años, tengo 50 años.
Tengo, o sea, me habéis escrito gente que no tiene trabajo.
Que tiene trabajo.
Jesús tiene trabajo ahora mismo.
Y aún así entiendo que está, y le agobia.
Y es ilícito que le agobie.
Totalmente ilícito que le agobie.
A mí me agobian otras cosas también.
O sea, me agobia la edad, me agobia tal, me agobia a todo el mundo.
Todos tenemos derecho a saber nuestras cosas.
Pero lo que tenemos que trabajar, y es difícil, porque yo también tengo que trabajar mucho en eso,
es el hecho de que cosas que nos preocupan, que piensan los demás,
tenemos que hacer que, si los demás, que las piensen siquiera, pero que no las pensemos nosotros.
¿Sabes?
Que no dejamos convencernos de que realmente las pensemos nosotros.
Además, había por aquí algunas cosas buenas.
O sea, Héctor de León decía, tu experiencia puede ser transmitida, y no es un error cobrar por ello.
Es totalmente cierto de que muchas veces, y de hecho lo veo, es que fijaos, mira, históricamente,
Delphi, Java, C Sharp, Cobol, Visual Basic, en el trabajo actual, JavaScript, Node, Python y C++, por ocio, Rust.
O sea, me parece espectacular el currículum que tiene Jesús.
Me parece espectacular.
Entonces, yo creo que ahí, programayores, te voy a llamar, programayores.
El problema se llama edadismo.
Cuando cumples 40, cada vez te contactan menos reclutes, y más empresas te rechazan sin ni mirar el currículum.
Como para saber tu stack.
Cuando llegues casi 50, verás que tienes la misma ansiedad, salvo que lleves años en el mismo trabajo estable.
Es verdad, pero luego, al final, también, hay que ver en qué, o sea, que si se pusiese de verdad,
al final es verdad que les rechazar una empresa y tal, habría que ver, y yo creo que él tendría mucha salida.
Mucha, mucha, mucha salida.
Tengo 49, ¿debo preocuparme por no sentirme como Jesús?
No tienes que preocuparte, tampoco tienes que sentir así, hombre.
Tengo 50 y tantos, llevo desarrollando laboralmente de 2,90, y aquí nos encontramos prendiendo de Midu.
Si te gusta el desarrollo, hay que seguir con la formación continua.
No solo desarrollo, es una cobertura amplia.
Habilidades blandas y otras para ser un mejor profesional.
Sí, no, totalmente, o sea, yo creo que aprender, y eso es una cosa muy bonita que tenemos que tener en cuenta,
que en la programación a veces nos agobiamos y tal, pero creo que hay que aprender de forma sana,
de, oye, pues reinventarse, y está súper bien, mira, Jesús ha estado tocando un montón de lenguaje de programación,
y es que a mí eso me parece increíble, y muy, muy, muy a valorar, ¿no?
Mucho lenguaje, pero no tiene un teclado mecánico 60%.
Sé que no es el mismo caso, pero yo cumplo 61 años en unos días.
Estoy retomando programación por el gusto de programar.
Quiero salir adelante con ello.
Claro, a ver, hay mucha gente que me dice, tengo 60 años, es tarde para aprender a programar.
Yo creo que aprender cualquier cosa, como si quieres aprender la guitarra, tocar la trompeta.
Mira, mi padre está jubilado, tiene 70 y pico años, y aprendió a tocar la trompeta hace poco, ¿no?
Entonces, nunca es tarde para aprender, porque además de que es positivo en temas de salud,
ya sea de ocio, de lo que sea.
Yo creo que debemos tener un plan B igualmente, y tratar de inventir en algo que nos dé para vivir nuestra vejez con tranquilidad y dignamente.
Puede ser, al final hay cosas que nosotros no controlamos, de cómo le puede pasar al mundo, a la economía, lo que sea.
Pues eso, mi padre empezó a aprender a tocar la trompeta a los 70 años.
Y es que nunca es tarde.
A esa edad se dice que ya deberíamos tener algún puesto de manager, pero habemos algunos que eso nos parece aburrido,
que nos encanta ensuciar nuestras manos con código, cara triste.
Bueno, esas son mentalidades, yo creo que muy antiguas, no creo que todos los managers,
yo he conocido muchos programadores buenos que tenían 50 años, y yo cada vez veo más que eso no pasa.
O sea, que sí, que puede ser un crecimiento interesante el ir a manager, pero que no todo el mundo tiene que ir a manager y tal, ¿no?
Ahora, tienes 60 años o 61 años y estás aprendiendo a programar y quieres encontrar tu primer trabajo.
A ver, no digo que te vaya a ser imposible y tal, pero obviamente el pensar que vas a tener una carrera en el mundo de la programación,
pues tienes que pensar, oye, tienes 61 años, aprender a programar, por más que los bootcamps te dicen que en 2 o 3 meses se hace y tal,
pues es complicado aprender, se tarda más tiempo, luego tienes que encontrar un trabajo.
Bueno, pues mientras tengas en mente eso, de que vas a poder tardar durante años,
pero claro, tienes que pensarlo así, que puedes tardar años.
Entonces, yo creo que a veces también lo que nos pasa, que tenemos una edad, pues hay gente que me ha escrito,
hay gente que me ha escrito con 25 años, que si es muy tarde para aprender a programar porque son muy viejos,
25 años o 21, es que hay de todo, es que todo el mundo piensa que es muy viejo para aprender a programar.
Entonces es increíble.
Pero yo creo que no es que se trate de ser viejo, es que hay que saber, o sea, entender las expectativas, punto.
Ya está, porque si no te frustras y la frustración lleva al miedo y el miedo al lado oscuro, punto.
Ese es el problema.
Que tú tienes 21, vale, tienes 21, estás aprendiendo a programar, lo que tienes que entender es,
no te puedes comparar con alguien que haya empezado con 18, no vas a encontrar tu trabajo en 2 meses,
porque no funciona así y que si tienes 21, pues a lo mejor hasta los 23 o los 24,
pues a lo mejor no encuentras tu primer empleo en programación.
Y aceptarlo y ya está.
Entonces si haces eso, seguro que no te sientes mal.
Pero claro, si piensas que tienes 21, que deberías tener el trabajo en 2 meses,
porque hay uno que tiene 20 años, que ya tiene un año de experiencia y que no sé,
pues claro que te vas a frustrar y vas a ponerte a pensar en la edad y en la madre que los parió a todos.
Y esto pasa con los de 30, con los de 35, con los de 40.
Hay gente que con 30 años han ido a un bootcamp, han encontrado trabajo,
les ha ido bien y que, y lo sé porque yo he estado haciendo un montón de mentorías y tal,
y que estaban agobiados con ansiedad que tenía que ir al psicólogo esta gente,
porque no paraban de compararse con gente menor que ellos que habían empezado 5 años antes.
Pero claro, como él tenía 30 o 32 años, pues claro, como puede ser que este chico que tiene 25 me da 30 patadas.
Tío, te da 30 patadas porque empezó 5 años antes que tú.
Empezó con 20 años y pues cómo te vas a comparar, ¿sabes?
Porque pues no.
Entonces eso es lo importante, las expectativas, no compararte y aceptar también cosas
que hay que, hay que, todo tiene sus etapas, su proceso y tal y ya está.
Y con eso yo creo que es importante.
Esto no tiene nada que ver con lo de Jesús, como él se siente,
pero sí para toda esa gente que cree que no, con 20, con 25, con 30, nada.
Y claro que además, pues entras con 30 y empiezas a ganar muy poco dinero comparado con el chico que tiene 25 años
y también, ¿no? Ostras, que claro, esta persona gana tanto, gana tanto.
Y dices, tío, es que encima tampoco, no te compares.
Y encima aprovecha que has encontrado un trabajo, que no sé qué.
El problema, Midu, no somos los programadores, como tú.
Son todos los recursos humanos en Mayer que ven la edad como una pesto cáncer que incapacita a las personas a programar.
A ver, fulano de tal.
Eso es verdad.
Es totalmente cierto.
Pero también os digo una cosa.
Esa mentalidad que nosotros tenemos de, son todos los recursos humanos y maneras.
Yo conozco un montón de managers, y lo sé porque los he conocido personalmente,
que prefieren gente mayor.
Es que hay preferencias de todo.
Hay gente que me dice, yo prefiero gente que sea casada.
Que son preferencias que a mí, yo sinceramente, yo no pienso así.
Porque yo creo que cada persona es un mundo y creo que hay edades de todo.
Pero yo he conocido gente que me decía, yo prefiero gente casada porque es gente que sé que no me va a fallar,
porque esto, esto y tal, y no sé qué, eso y cuánto.
Yo prefiero gente que tenga más de 50 años porque sé que hay gente mucho más tranquila que no sé qué y no sé cuánto.
Yo prefiero gente que tenga hijos porque, o sea, yo esto lo he escuchado, de managers y de gente de recursos humanos.
No, yo gente de menos de 30 años no ficho.
¿Sabes?
Esto, o sea, que hay siempre prejuicios que no son aceptables, obviamente, pero de todas las edades, que son tonterías.
De verdad, y te lo digo en serio, yo no tengo la sensación de que haya una mayoría de que sea de edad.
De que diga, no, la mayoría, el mayor prejuicio que tienen es de mayores de 50.
Yo, al menos, a mí personalmente, yo no conocía a todos los recursos humanos del mundo, ¿eh?
No sé, en el caso de Latinoamérica tal, que ahí pues yo no he estado y no lo conozco.
Pero a lo que a mí me ha rodeado no he tenido esa sensación.
No, no ha sido para nada esa sensación.
De hecho, lo he visto bastante que cada uno tenía sus historias.
Incluso he visto prejuicios de gente de, no, es que esta persona ha trabajado en no sé dónde sitio.
Es que claro, es que ha trabajado.
Mira, el mayor prejuicio que he visto yo real de descartar gente ha sido de estar muy tiempo en las empresas.
De, es que esta persona solo ha estado en tres empresas de forma seguida seis meses.
Ese es el mayor prejuicio que he visto a gente de recursos humanos a la hora de descartar gente.
¿Por qué? Porque dicen, claro, es que esta persona lleva tres ahí y yo incluso le he dicho,
ostras, pero vamos a conocer un poco la historia, a ver por qué.
Porque a lo mejor tiene una explicación y tal.
Y me ha costado mucho, mucho batallarlo.
Ha sido el mayor, el peor, el más difícil.
El ver a gente que ha hecho esto de estar en una empresa seis meses y esa otra, seis meses y esa otra.
Porque lo ven como alguien que se puede ser problemático, una persona que lo hace para el job jumping este, ¿no?
De, bueno, ir cambiando de empresa para ganar más dinero, de que al final no afianzan, de que es una persona que no le gusta quedarse en un sitio.
Eso sí que lo he visto.
Eso sí que lo he visto.
A mí me han rechazado por lo contrario, por estar nueve meses en una misma.
Bueno, es que al final te pueden rechazar por cualquier cosa, por cualquier cosa.
Las cosas como son.