¡La turra!
Samanté para Laurna Carla desde Tenerife. Hace unas semanas enseñé a mi abuela de 87 años.
Muy bien.
87.
Muy bien llevados.
Un vídeo donde aparecía Infinito de Córdoba.
Bueno.
Ya está. Bueno, chicos, es lo que hay.
Vídeo que tuve que parar ante la amenaza. Palabras textuales.
Quítalo que memeo esa señora.
Pero para rematar, en días posteriores, mi abuela vino a mi habitación y me preguntó que si podía ponerle el vídeo de Infinito.
Lo que me hizo no poder disimular las risas imaginándome una conversación representada por vosotros.
Ah, porque le dijo, ponme Infinito de Málaga.
Le dijo, bueno, y dice, me gustaría ver una conversación entre Infinito de Córdoba e Infinito de Málaga.
Ella cree que es una raza que se reparte por el territorio andaluz, ¿sabes? Y que cada provincia tiene el suyo.
Gracias, gracias, gracias por hacer posible tal, tal. No pareis nunca.
No, no, si es lo que estamos haciendo.
Sí, sí, sí. Exactamente.
Excepto el año que viene que va a venir el paro razo.
Ya, ya, ya.
Vas a flipar tú y tu abuela. Vas a flipar la abuela.
Tu abuela. Tu abuela.
¿Quieres que invoquemos a Infinito?
Bueno, vale.
¿Qué es eso?
¿Estamos en la recta final del programa? ¿Nos lo podemos permitir?
Bueno, venga, va. Vamos a invocar con nuestra ouija de la improvisación.
Ya, mira, ya. Ya calienta, ya calienta.
Ya se acerca por el pasillo imaginario.
Ya está con su camisa entre abierta y palmeando.
¿Cómo estás, Infinito?
A la bola de Tenerife.
Ya no he entendido nada de lo que has dicho.
Oiga, ¿y el efecto?
¿Y el efecto de que yo sude cuando lo hace usted?
¿Eso qué es?
¡Joder!
Una cosa que no me ha gustado,
una cosa que no me ha gustado
es que a Bordilas le aguanta el caracoleo
y a mí, a Mickey, me canto.
Y toco un poquito.
Voy a intentar hacer una cosa que no he hecho nunca, que beber agua.
No.
¡Ay, madre mía!
Bueno, madre mía, está mojado.
Bueno, Infinito, no quiero abusar de usted.
Solo una pregunta. ¿Le consta que tenga...?
¿Le consta que tenga un pariente malaga?
Somos muchos de familia.
¿Cuántos hermanos eran?
Somos siete. Uno se fue a vivir a América.
Otro volvió.
Bueno, sí, en general.
Sé que somos tantos que no me acuerdo.
Pero probablemente haya alguien en Málaga
porque la tierra es muy bonita.