logo

Nadie sabe nada

Andreu Buenafuente y Berto Romero se sientan frente a frente, micro a micro, e improvisan. ¿Qué puede salir mal? El humor de estos dos genios es oro para tus orejas. Ábrelas bien que, en el fondo, nadie sabe nada. Andreu Buenafuente y Berto Romero se sientan frente a frente, micro a micro, e improvisan. ¿Qué puede salir mal? El humor de estos dos genios es oro para tus orejas. Ábrelas bien que, en el fondo, nadie sabe nada.

Transcribed podcasts: 694
Time transcribed: 6d 0h 26m 18s

This graph shows how many times the word ______ has been mentioned throughout the history of the program.

La cadena ser presenta Nadie Sabe Nada.
Un programa a priori de humor con Andrés Buenafuente y Lerto Romero.
¡Oh! ¡Oh, oh, oh, oh!
¡Oh, oh, oh, oh!
¡Oh, oh, oh, oh!
¡Pas gracias!
¡Madre mía!
¡Madre mía!
¡La madre que me parió!
¡Ay, ay, ay!
¡Pero!
¡Gracias!
¡Gracias!
¡Gracias!
¡Gracias!
¡Madre mía!
¡Madre mía!
¡Muchísimas gracias!
Pero si dura mucho, la gente se va, ¿eh?
¡Muchas gracias!
Estás en tu casa y dices, ¿pero qué ha pasado aquí?
Yo iba a proponer lo contrario, que estirara lo máximo para que tuvimos que hacer menos programa, pero...
Como esos tenores, ¿no? Que cuando...
El aplauso duró 20 minutos.
Sí, sí, hay como una obsesión para la obsesión.
Igual, 15.
No, pero hay una obsesión por cuantificar el aplauso.
7 minutos y medio, ¿eh?
Sí, sí, sí.
Pues el medio ese ya no les gustaba.
Era de regalo.
Y piensa que son solo... ¿cuántas gente sois?
30 y...
35 escogidas y escogidos.
Pero han aplaudido como 100.
No, no, cojonante.
Es más, yo creo que ya no tiene que venir más gente.
Con 35 ya vamos bien.
Porque luego se sudaba mucho, se transpiraba mucho.
¿Sabías una peste?
No, peste, no.
Sí, sí, la gente huele fuerte.
Bueno, a ver si la...
Igual cada uno por separado lo se puede tolerar.
Pero claro, cuando mezclas...
Oye, buenas tardes.
Es como los colores.
Cuando los mezclas todos salen negro.
Como mezclas varios olores que cada uno puede ser tolerable.
Claro, claro.
Es peste. Es peste.
Como un barro, ¿no? O leis fuerte.
Pero eso no quita que se os quiera igual.
Están aquí arreglados.
Oye, este es un momento muy importante.
Yo también huele.
¿Sabes si me quieres escuchar o empezamos ya la novena temporada
sin escucharlo?
No me interesa nada más que escucharte.
Vale, vale.
Porque alguien tiene que sentar una base inicial,
que es novena temporada,
que empieza estamos en Barcelona
y este es un momento memorable.
Un otro aplauso.
Me cago la...
Espérate.
Atención.
Esta es la búchica de...
Esta es la búchica
de las grandes ocasiones
y la ser
de falta la letra
pero que la tiene.
Como el himno de España,
el himno de la ser no tiene letra.
Es la primera vez que regresa
el público cárnico en persona.
Con olor o sin olor.
Con olor, con olor.
Con olor.
Desde la última vez en que vino,
que fue un 20 de febrero
de 2020
en Madrid.
No nos hace falta que aplaudan aquí.
Bueno, la pausa...
estaba pidiendo aplauso.
Pausa mendigo.
O sea, yo creo que soy de letras
y me ha dado pereza contar los días
porque esto hubiera estado muy bien decir
584... No lo sé,
que lo cuente el que está escuchándolo.
Mucho tiempo.
Yo lo creo que soy de llorar pa' dentro.
Si no, ahora estaría como una madalena.
Yo le llamo Mear.
Sí, claro, también.
Mear es para afuera.
Bueno, muchísimas gracias por venir.
Disculpas a los que no caben.
Me dicen que hay cientos de personas
incluso mil, mil, ¿no?
Mil de cerebraos que dicen...
Nuestro compañero de público
y también ausente esos días
de nuestro entorno.
Muy bien, aquí esperando ya que viniera gente
a recibirles.
¿Y tú qué hacías? ¿Les llamabas por teléfono
uno a uno? ¿Has pasado una cosa?
¿No se te has enterado?
¿Pandemia? ¿No puedes venir?
A mí me da igual la pandemia.
¿Quién pagabas a las llamadas?
Yo, yo, yo.
Soy negacionista, llamaba a vos secas
cada semana. Yo voy, eh.
Yo voy y lo lleno todo.
Pero una pregunta,
como amigo te digo,
pues sí, sí, sí, gracias.
Gracias, Andrés. Joder, muy bien.
Ha sido fantástico. Qué buen empresario soy.
Te pago un Kyoto, no hace nada.
La medida de lo buen empresario que eres
es no saber. Claro, claro, claro.
No, porque es broma, porque está en nuestro programa
de televisión también, Oli.
Es el señor público.
Está todo preparado para empezar.
Muy bien.
Bueno, a ver.
Ahora, con cariño lo decimos.
¿Nos molestáis un poquito?
Pero nos vamos a acostumbrar y todo bien.
¿Venis vosotros con vuestra dictadura
de cuando me río está bien, cuando no me río, no?
Claro, claro.
Aquí hemos hecho cosas que... Habíamos superado esa fase.
Sí, también es un momento de confianza,
se es como de la familia.
¿Te acuerdas que al final la temporada pasada dijimos,
por favor, que venga gente? No, no me acuerdo.
Sí, sí, sí, sí.
Dijimos, mira, hubo un tramo, hubo un tramo
en que estábamos, joder, bien,
porque recuperamos la intimidad,
trabajamos unas cosas, pero luego ya...
Estamos resecando. Tantos días.
Yo te veía, no te di una hostia el último día,
porque te quiero.
Pues te diré una cosa.
A veces, porque me quieres, me lo tendrías que dar.
No, no, no, nunca violencia física.
Porque una buena hostia a tiempo
es mejor que un abrazo.
O un abrazo muy fuerte
que te duela como una hostia.
Claro, esa gente que abraza y te da en el homoplato
que te lo saca de sitio.
Hostia, cómo suena eso.
Ya me saco yo la mucosidad asquerosa.
Bueno, yo tengo unas notas
que he tomado aleatorias muy locas
y muy absurdas durante el verano.
¿Tú has tomado alguna nota de algo?
Yo tomo notas, no, pero me acuerdo de todo.
Vale, perfecto. Yo lo digo, como yo no me acuerdo de nada.
¿Quieres que te las lea?
Es una sección que se llama Notas del Verano.
Adelante.
Venga, va.
Yo aquí quisiera otra música,
porque esta ya venía de la hostia amorosa.
¿Estás como de masturbaz?
Sí, un poquito, sí.
A mí me ha llevado a eso.
Vale.
¿Me haces la cabecera chatón?
Sí.
Métemela.
Notas del verano
con Andrés Buenafuente, fresquitas.
Notas
que aún aguantan
un poquito el caborro.
Cabecera, la intro no hace falta.
Pero si la quieres hacer.
Notas del verano.
Voy, ¿eh?
Vale.
Hay gente que parece gilipollas
a simple vista.
Muy bien.
Luego hablan y efectivamente lo confirman.
Escribo esto mirándome al espejo.
Muy bien.
Vale.
Un aficionado a la astronomía
me da una chala nocturna en verano
mientras avistamos las estrellas.
¿Estás otra nota?
Sí, me ha cambiado ya.
No es que éste sea gilipollas, ¿sabes?
Una chala nocturna mientras avistamos las estrellas.
Nos dice muchos datos.
La mayoría, yo no sé cómo lo lleváis vosotros,
yo no me acuerdo de nada.
¿Has hecho otra quedada para mirar las estrellas?
Sí, llevo cuatro.
¿Dónde está Júpiter?
Con cuatro avistamientos ya te digo.
Las has visto todas ya, las estrellas, ¿no?
Tanto al vista.
Es que he visto una vista toda.
Voy por el segundo cuadrante.
Me he partido el cielo como un cuadrante.
Segundo cuadrante de cuatro.
Nos dice este señor, sigue la nota,
que el sol se extinguirá en 5.000 años.
Bueno...
¿Sabíais éste dato o no?
5.000 años.
No concreta si será por la mañana o por la tarde.
Y ni poco.
Así no hay quien haga planes.
Esto es mierda, es que apunto.
Lo que también me enteré que se calcula
que hay en el planeta Tierra
unos 15.000 millones
de gallinas.
Unas 15.000 millones de gallinas.
Por favor, que te lo dijera...
No, no, no.
Se lo ha mirado Júpiter y dice, por cierto...
¿Ves?
Júpiter?
Esto lo podía haber unido.
Porque sabes que cuando pete el sol
no sé como vais de astronoma...
Las gallinas van las primeras.
Son tontísimas.
¿Gallinas? Eso es pollo a las.
¿Tú sabes como acabará la tierra?
Que te lo digo ahora.
¿Como se queman?
Bueno, pega un pedo el sol, pero de la hostia, que llega hasta el pluton.
O sea, solo hasta el sistema solar.
Su manera de extinguirse es petar.
Entonces todo lo que llega entre el sol y el pluton lo absorbe.
Esto es un... si este verano sea caluroso...
Imagínate pensando en esa mierda, claro.
Imagínate dentro de 5.000 años.
Oye, qué calor, qué calor, qué calor, qué calor.
Hostia, el sol que grande, ¿no?
Y luego se enfría y se queda como una enana blanca y se va.
Cuidado, no ofendas, ¿eh?
Bueno.
Una acondroplástica caucásica sería un poco.
Bueno, sí, sí.
Una enana blanca es muy duro.
Vale, pues sí, como has dicho, andro...
Acondroplástica blanca, eh, caucásica.
Pues se quedará como una acondroplástica plástica, claro.
Acondroplástica, caucásica...
Eso era un tema de Andúr.
No era un tema de Andúr, acondroplástica, para plásticas.
No era un tema de quién?
De Andúr, ¿no?
¿Quién es de Andúr?
Hostia, Andúr, ¿eh?
Era un tío pues que tenía como una deformación, era un cantante inglés.
Sí, que tenía un...
Bueno, problemas físicos graves.
¿Hay Andúr, se llamaba?
Hay Andúr.
Sí, si encuentras...
¿Puedes buscar música en Barcelona?
¿Y cantaba sobre problemas físicos?
No, no, no.
Era su tema.
No, hombre, no, la de Sex and Drugs and Broken Rules.
Sex and Drugs and Broken Rules.
Este es Andúr.
Hostia, ¿lo tenía preparado?
Sí.
No, no, no lo ha encontrado.
Este año, ¿no?
¿Te acuerdas de todos estos años que le pedíamos algo?
Sí.
Mira.
A ver.
¿Trabaja una nota solo?
Sí.
No, hay tres, por lo menos.
Pues sí, iba como un traje zico y caminaba como un muñeco, ¿sabes?
Que se...
Bueno, era muy especial a Andúr.
Sí, sí, sí.
Pues me ha recordado eso.
Bueno, estamos que el sol se convierte en una condroplásica caucásica.
Sí.
Que explota.
Que explota.
Y todo lo que está en ese perímetro, pues lo...
Lo absorbe.
Lo absorbe, lo absorbe.
Muy bien.
Lo absorbe.
Que yo digo, hostia, pues también te podías apagar con más clase,
que si ya no estás generando energía, pues te vas...
Te vas como pa' dentro.
Sí.
Como una flor marchita.
Te vas a decir, ¿tú al sol cómo se tiene que apagar?
Hombre, no sé, yo no quise ya repregüe.
Es razón de más para no coleccionar cosas.
Va, va.
Es que en serio lo digo.
Claro, claro.
Estáis coleccionando mierdas.
Claro.
Y mira, tengo la habitación esa llena de legos.
Si se va a quemar.
Sí, se va a quemar todo.
No es que se va a convertir en una nana blanca.
Sí.
Tengo más notas del verano.
Tú al conmilenario de legos.
Oye, al conmilenario.
Para acumular polvo nada más.
Tú sabes el polvo que pilla entre las...
Yo tengo uno.
Sí.
No al conmilenario que hicimos por los chiquillos.
Sí.
Eso es una mierda.
Sí, sí.
Porque tenemos la mierda entre las chicas.
Pues, es esto con un cepillo de dientes usados.
Sí, no tengo más que hacer yo.
Conportarme como lo que limpia los baños en las cárceles de las películas.
Con un cepillo de dientes.
Hombre, yo qué sé.
Hombre, ¿no?
Vaya distinto.
Un hostil.
Y va el ján solo ese de Lego.
Ah, tomaba por saco.
Hombre.
Vale.
¿Quieres que siga con notas del verano?
Sí.
El otro día me equivoqué en Instagram.
Y en lugar de teletrabajo escribí telebrajo.
y creo que la palabra explica mejor el concepto desde aquí propongo que
teletrabajo ya se consigue telebrajo porque es un es como más
peor ativo más más chungo en telebrajo
el otro día apare en una área de autopista y va camino de victoria y tuve que
parar varias veces a miktionar los que tienen más de 50 pues ya sabemos de qué
hablamos. Uy te toca explicar yo una cosa de me arde este verano. Pues te lo hubieras
apuntado en unas notas de verano haber hecho la reacción de verano. Porque ha
cambiado el programa ahora solo uno habla si lo tiene escrito antes. Venía aquí con una mano en cada huevo como siempre.
Bueno el caso que íbamos parando de Barcelona a victoria pues mis tres
veces paré y además esa urgencia en el fin que nos coja los de 50 que dice
es que tengo que ir a la babuya y luego va así y es tanto no necesidad y pero es que ese es el tema. Ya, ya, ya.
Está la perica que no tiene fuerza. Está la pera reseca ¿no? Está la pera ya. La pera reseca ¿eh?
Sí, te lo has hecho mirar o no? Te has metido el dedete. Sí, sí, sí. Tú no eh, un especialista. Sí, no, no, claro, claro.
Tú te metes eso enlúdico. Sí, sí, sí. Tienes que meter del dedo y saber y saber lo que vas a buscar.
Pero a lo mejor para él también es lúdico ¿sabes? A lo mejor también para él. Bueno, hay una parte de su trabajo pues que por como le apasiona.
Esa gente que dice me gusta mi trabajo. Sí, sí. Usted es proctólogo ¿eh? Bueno, hoy que he dicho.
He tocado una hoy que mamma mía. Sí. Era como una perota nivea aquello. Sí, sí, sí. Pero eso tiene que quedar siempre en tu intimidad personal.
Ya, ya, ya, ya. Sobre todo no decírselo al paciente. Ay, qué rico. No, no. Que bien me lo estoy pasando. O como el chiste ¿no? De tranquilo, Ramón.
Dice yo no me llamo Ramón, dice no, no, yo me llamo Ramón. Pero no es como nuestro trabajo. Muy viejo este ¿eh? No es como nuestro trabajo que puedes decir.
Cómo disfrutáciéndolo. Claro, claro. El proctólogo no puede decirte, mire, ha sido una mañana increíble. Sí. Llevo diez próstatas examinadas.
La suya la mejor. Y la suya ha sido la guinda de esta mañana. Sí, sí, sí. Qué maravilla. Bueno, el caso, tenemos siempre una urgencia por ir al baño.
Y, y joder, pues, es que tienes que ir, tienes que ir. Tienes que ir. Y entonces, bajo una hora de autopista, puma, parco, hay en las sombras, esas áreas que feas son las áreas de autopista.
Un día hay que hablar de ese tema ¿eh? Que feas, que sucias, nadie quiere parar. Todo el mundo para por obligación.
O sea, cojonate aquí. Las hacen feas para eso ¿eh? Para que no te parezca. Para que te vayas rápido ¿no? Entro rápido a los baños y claro, como un día hablamos aquí en el Nadie, sin entrar en detalles, pero vas a lo que vas.
¿Al baño? Sí. La verdad que sí. Sí, sí, sí. Si está ocupado, a según queda no hay problema, pero a otras sí. Va. Vas con urgencia. Necesidad. Entonces yo ya entré y vi una señora que estaba limpiando, que me sorprendió, porque normalmente ponen un carrito.
¿Sabes? Que ahora no puede entrar, que también esto te entra una rabia, pero hay que respetarlo. Ahí no había carrito. Había una señora que no entró, no, no, no, no, y que dije, joder, qué confianza tiene ¿no? Ya con esto ¿no?
Pero bueno, yo entré y digo, no pasa nada. Y conforme estoy bajándome la braqueta y ya un poquito...
Bueno, salí al cuco, salí al cuco. Era las 12 ya. Vale, vale. Era la hora en punto. Y os lo juro, no exagero, y yo estoy ahí en ese proceso, ya y yo digo, ¡No!
Y yo, ¡Hostia! Dice, es que me la apunté, me la apunté porque es que esa cojana te dice, ¡No! ¡Ahí no! ¡Se puede quemar!
¿Cómo? Sí, con esta voz casi la mujer, ¡He tirado un producto! ¡Se puede quemar! Oye, ¿todas las ganas que tenía?
¿Cómo funciona la pera? ¿Se te queda el navo como Freddy Krueger? Hostia, pero... Y la señora, ¡No! ¡Ay no! ¡Se puede quemar! ¡He tirado un producto!
Y yo, ¡Cojones! Y otro tío a mi lado que ya estaba en el tema, como diciendo, ¡Mira! ¡Me lo ha dicho! ¿Sabes? ¡Se me va a quemar a mí! ¿Pero qué tiro? ¿Qué tiro?
¡Han sido! ¡Salfumán, amoniaco, el vapor! ¡Ya, bueno tío! ¡Te quema el capullo, el vapor!
¡Va! ¡Ambri, no! Se le puede quemar yo por allí como pollo sin cabeza. ¿Nunca me han dicho? Sí. ¡Y llámeme como pollo sin cabeza! Perdón, perdón.
Esa polla es gallina, ¿no? Sí, polla de agua. Y me metí en un cubículo, aquí puedo, aquí sí. Esa muy dura la tía, ¿eh? No estaba pa' hostia. Nadie mía. Pero qué verano has vivido, tío, qué locura, ¿no?
Te dije a los que viajábamos y no paramos más, ¿eh? Yo hasta el Vitoriano meo, ¿eh? O en un campo, en un campo. Y ya cambiando de tema, la última que te quiero decir, un tío en Menorca, iba yo andando por la calle, me mira, esto es, bueno, salvo Vitoriano en nosotros, nos miran como algunos sonríen, otros señalan de...
Bueno, un diálogo maravilloso con la gente, pero este se vino más arriba y dice... Berto, ¿no? Pete, pete. Y yo guardé un segundo y dije... Sí.
Hay un tío en Menorca que se cree que tú soy yo. Vale. Bueno, pues ya está. Perfecto. No pasa nada, tampoco, ¿no? No, no, muy bien.
Hasta aquí mis notas de verano. Muchas gracias, adiós.
Gracias. Bueno, yo tengo... He levantado, ¿eh?
Ahora sí que hubiera sido bueno. Como hubiera pirado, te hubiera dejado aquí tú solo, ¿no?
Tengo un mensaje para la empresa de helados Frigo. No quiero meterme en líos, ¿eh? Pero es que tenéis un helado que se llama Esallerato.
Esallerato. Esallerato XXL. Por si acaso con Esallerato. Pero por qué? Que es muy grande.
Sí, es muy grande. Estamos cenando con los chiquillos y aquello que dices... Y escoger un helado. Sí. Pues se vinieron con Esallerato.
Es un helado que no lo puedes sostener con una mano. ¿En serio? Es como una espada, medio lado.
Es uno de helado que la parte de arriba es tan grande que necesita un capuchón extra de plástico para retenerlo.
Sí. Se llama Esallerato. Y tú sabes lo que es ver a los niños no poder más a mitad del helado dejarlo.
Claro. Es decir, mira... Me ha vencido. Sí, sí, sí.
Entonces, aquí es una llamada de atención a Frigo. De decirles cuál es el siguiente paso. Un helado que se llama Demasiato.
Ya, ya. Hasta aquí. Es una gran desconstrucción en heladeras, ¿no?
Esto es básicamente lo que... ¿No te cabe en la boca, la boca estando? No, no, no te cabe en la boca. No cabe.
Ningún helado en general cabe entero en la boca. Bueno, a ver, cucuruchito pequeño. Bueno, sí.
Pero, ya te digo, que se llama Esallerato. Estoy absolutamente en contra de este helado.
Vale, ya sabes que la semana que viene van a llegar cuatro palets de Esallerato.
No quiero ver ningún Esallerato aquí. Si tenéis uno normaletti, convencionale, helados a la medida del ser humano.
Claro. Es lo que yo pido. Ya está. Muy bien, muy bien apuntado. Gracias.
Vamos con el público y sus preguntas, porque no sé, ¿son nuevas?
Estamos heredando las anteriores, presidente, más o menos, ¿no?
Oye, ¿no te contó lo que me pasó con lo de orinar en el verano?
No, me di, me di, me di.
Me tiró como un mes y medio que me meaba todo el rato.
Ostras.
Cogí una infección.
Claro.
Bueno, y tú sabes lo que es orinar todo el rato, que me cambió carácter,
pero una gotica y otra vez, y otra vez, y todo el rato pensando en mirar,
y inmediatamente, obviamente lo que pienso es, ya está, esto es la última etapa.
Ya está.
Ya está, esto se me va a quedar.
Pero tienes 46 años, ¿no?
Sí.
¿Trabajaste pañal?
No trabajé pañal.
Entonces fui a un médico.
No digo yo, ¿eh?
De nombre italiano, lo busqué en la lista de médicos que me podías coger y busqué uno, que era la primera vez que Ivaluro, luego.
Sí.
Y lo cogí uno italiano.
Italiana, exagerato.
Se llamaba, ¿no?
No, no te voy a decir el nombre, pero el nombre para entre los otros es Enrico Palacho.
Le voy a llamar Enrico Palacho.
No se llama Enrico Palacho.
Vale.
Y me digo un antibiótico, el antibiótico no funciona.
Oh, mamá.
Otro antibiótico.
Y bingue, bingue, bingue, bingue.
¿Sabes cuándo funcionó el antibiótico?
¿Cuándo?
El día después de acabarlo.
O sea, pero tú hay que tomar todo.
¿Hasta que no me lo tomé todo?
Eso que te dice.
Claro, dice, no, a los tres, cuatro días esto ya reacciona.
Mi cuerpo, hasta que no tuvo todo el antibiótico,
hasta que no tuvo la pauta completa, el cuerpo nos dijo, venga, cierro el grifo.
Hostias.
Eres ordenado hasta para las infecciones.
Cerro el grifo, volví a ver Enrico Palacho.
Me hizo lo que él llamó, la prueba del chorro.
¿Sabes lo que era prueba del chorro?
Tienes que beber un litro de agua antes de ver Enrico Palacho.
Sí.
Y entonces te hace mear en una especie de embudo que está conectado a un ordenador.
¿Qué dices?
Sí, sí, sí.
Un embudo conectado a un ordenador, que es como una mezcla muy rara, ¿no?
Embudo y ordenador, son dos mundos como antitéticos.
Sí, sí, sí.
Entonces el ordenador recoge la presión.
¿Ell lleva para el embudo la cabeza cuando te recibió?
No, no, no.
No, no, no, no, no, no.
¡Oh, está bien Enrico Palacho!
O sea, él en una habitación, o sea, él en la consulta mirando el ordenador
y yo en el váter, me ando, pero todo eso conectado gracias a la tecnología.
¿Y hablabais mientras...?
No, dijo adelante.
Ya puede...
Avanti.
Avanti con el chorro.
Avanti dai con el chorro.
Avanti chorro.
Chorrazzo.
Esagerato.
Entonces, ra, yo eché todo allí, po.
Sí.
Y salí y me dice, el chorro está bien.
El chorro está bien.
El chorro va bien, ¿eh?
Y me dijo, no te quiero ver hasta dentro de cinco años,
que es cuando tengas ya tu edad, que es cuando ya uno tiene que ir,
porque a lo mejor tiene que parar en marcaso y...
A mí no me metes en 120, ¿no?
A mí no me metes en 100.
Sí, él sí, sí.
Ya, hostia, tío, muy bien, muy bien.
Ya está.
¿Y por qué escogiste el italiano?
No sé, porque me llamó el nombre.
Italia, me...
Ya.
Me llamó Italia, tradición, orinar.
Sí.
Ya los romanos ya meaban.
No, eso es verdad, sí.
Sí, claro.
Y los griegos también, ¿eh?
Sí, pero pensé que esta gente tiene...
Tiene una larga tradición.
Cultura milenaria, ¿no?
Sí.
Si hubiera habido chino, también.
Si hubiera escogido chino.
Ya, ya, ya.
Cultura milenaria.
Sí, sí, sí.
Orín.
Bueno, me está molestando un poco el tema ya.
Vamos a cambiar.
Y otra cosa que he visto...
Ahora le viene todo.
Ahora le viene todo.
Otra cosa que he visto este verano es una mascarilla hecha para llevar barba.
Ah, sí?
O sea, la mascarilla ya lleva una estructura como...
La parte de abajo hace como una especie de forma que recoge la barba.
Un recoge, como un comedero de caballo, ¿no?
Sí, sí.
Tiene un aspecto muy raro.
Claro.
Pero se está comercializando ya eso.
Bueno, ya sabrán los oyentes que aquí en su momento pusimos el dedo en esa llaga, ¿no?
Sí, sí, sí.
De que la gente con barba pues no les queda bien la mascarilla.
Bueno, aquí lo que dijiste exactamente es que era como ponerle un pañuelo en el culumburo.
El trapo del culumburo, sí.
El trapo del culumburo, pero...
Sí, lleva el trapito, baja por abajo, el pelo...
Pues no, una mascarilla que ya está pensada para recoger barba.
No será una gorrita para el pelo, ¿no?
No, no, no, no, era una mascarilla para recoger barba.
Así que esto repito más veces hasta que tú integres que era...
Pues ya es que lo ha visto nunca, ¿no?
Bueno, pues yo te lo explico.
Bueno, bueno, bueno.
Lleva como una carpa en la boca, ¿no?
Sí, lleva como un...
Una carpa...
Una carpa y entonces se cuece en su propio pelo, claro.
Claro, eso se va cociendo ahí.
Sí, sí, sí.
Vale, aquí dice Fernando Rodíguez...
¿Dónde hay que enviar las preguntas?
O sea, la primera que sale...
Ya no es una inquietud.
¡Joder, qué bien que habéis vuelto!
No, no, no.
¿Dónde hay que enviar las preguntas?
A Internet.
¿Cómo que publica?
Sí, vamos a hacer una breve pausa.
¿Publica?
Sí, sí.
Vale.
Vamos a hacer una breve pausa y luego te cuento otra cosa.
Bueno, no es...
Tampoco es un gran cebo, ¿no?
Uy, uy, uy, volvamos, que va a contar otra cosa, ¿eh?
Oye, oye.
Que acaben pronto los anuncios, que va a contar otra cosa.
Venga, seguimos en LASER.
Nadie sabe nada.
Alguna oferta de otro programa para que les preste mi voz.
Muchas gracias.
Oye, eh...
Dime, ¿no te he contado lo del gato?
Hombre, no, esto no lo saben estas señoras y señores.
Cantaselo, sí.
¿Hemos adoptado un gato en casa?
Yo... Aplausos.
Es un gato.
Tú has adoptado un gato y a mí se me ha escapado el conejo Michelangelo.
¿No me digas?
Es...
Michelangelo ha vuelto Back to the Forest.
Back to the Wild.
¿Qué dices?
Sí, sí, sí.
¿Se ha escapado?
Sí, tenemos un jardín y Silvia, que ya sabéis, es muy pro todo, es pro todo.
¿Pro todo?
Dicen, no puede estar el conejo a cerrar la casa, es que si abrimos se irá.
Claro, no tiene conocimiento.
Dicen, no, no, hay que confiar en los animales.
Dijo esta expresión.
Sí, porque entre un puma.
Y la niña.
Unos nervios todos.
Entre unos hormigueros.
Oye, dos semanas con nervios.
Se le ató un acordecito al conejo, que eso daba una pena.
Una acordeica y por allí...
Y como...
Bueno, muy mal.
Nos quería.
Tiene que ser libre, cortemos la cuerda y se ha ido.
¿Se ha ido?
Se cumplió, se cumplió así.
¿Cómo se llamaba Juan José?
Miguel Ángel.
Sí, pues este nombre de persona.
Bueno, mi hija le puso Mickey y yo concreté.
Digo, creo que es Miguel Ángel concretamente.
Pero...
Ya está.
Miguel Ángel es el pasado.
¿Y dónde está? No lo sabéis.
Yo...
En la barriga de algún depredador.
Me temo lo peor.
Sí, hombres están una paella.
No, más que paella, es que estamos en una zona donde hay mucho jabalí.
Ah, ahí está.
Una superpoblación de jabalíes.
Ahora hay que confiar en los animales.
Sí.
Y yo creo que Miguel Ángel ya está en el cielo de los conejos.
Pero bueno...
Pobrecito.
Sí, sí.
Bueno, oye, es lo que le habría querido.
Sí, claro, claro, claro.
No sé qué decir.
No sé qué decir.
Pero las gallinas que entran por las que salen, o sea...
Sí, sí.
Los conejos que salen por los gatos que entran, ¿no?
Pues que nos encontramos en una casa que fuimos a veranear.
Sí.
Un gato, pero que es que no te puedes imaginar lo que era aquello.
Perdona, conozco un poco el dato.
Creo que necesitaría una música como muy entrañable, algo como muy azucarada.
Pero ¿por qué?
Hombre, porque hay una historia de salvación.
Pues estoy de amor, ¿eh?
Sí, estoy de amor.
Sí, estoy de amor.
Sí, sí, sí.
Salió el gato de un árbol.
¿Tú sabes lo que es eso?
Que parecía una ilustración de un libro de Tolkien.
Sí.
Salía de un algarrobo.
De un algarrobo.
Un algato robo.
No, no, por favor, no.
Y luego te extraña que se escaparan conejos.
Sí.
Del árbol salía un gato.
De que tenía el gato igual.
Mira, mira, mira.
Un gato precioso.
El árbol quedaba gatos.
Los podcast.
Sí, y lo parió el árbol.
Un gato salía del algarrobo.
Una imagen bucólica, maravillosa.
El gato tenía dos meses y medio o tres.
Tenía piquenico, piquenico.
Naranja, precioso.
Gato precioso.
El gato más guapo que he visto en mi vida.
Sí.
Y venía cariñoso.
Y eso que te da con la cabeza.
Sí.
Que parece que te empuja.
Sí, sí.
Dices, pero si quieres...
Te empuja el amor.
Ya, pero dices, si quieres que te acarices, ¿por qué me empujas?
Porque no tiene manos, hombre.
Pero no puede hablar.
Y yo me guía que toda la familia con el gato había sobrado lubina.
Ah, mira.
El primero que le dimos fue lubina, claro, el gato dijo, hombre.
Aquí manejan.
Dijo, esta gente no me está dando...
Lubina al horno, ¿eh?
Sí, sí, lubina.
Con patatita también le pusiste un platito o sólo...
No, sólo lubina.
Y lo que... Ustia, ¿qué ha pasado?
¿Qué ha pasado, Ramón?
¿Qué ha caído?
Se ha roto algo, Ramón.
Ha pasado algo.
Se ha roto algo.
Ustia, se ha roto la ser, ¿eh?
Sí, bueno.
Se ha ido como un armario, ¿no?
Bueno.
Vale.
Y estábamos en Mallorca.
Entonces, ¿cómo nos llevamos al gato a casa?
Y al final decidimos que no nos lo llevamos.
¿Qué dices?
Me dijo, no, no lo podemos llevar.
Pero en la casa donde estábamos nos dijimos, bueno, nos podemos hacer cargo de él,
pero estará por aquí suelto, y tal.
Pero...
Tristeza, ¿no?
Volvimos de Mallorca pensando, hemos dejado a alguien atrás.
Uno de los nuestros se ha quedado atrás.
Compungidos, y entonces me puse...
Se notaba la tristeza...
Se notaba la tristeza.
¿Cómo la detectabas?
Se hablaba con cariño.
Se miraban fotos.
¿Agún miembro de mi familia lloró?
O...
¿No eran los niños?
Un adulto, ¿eh?
Un adulto lloró.
Una lágrima furtiva.
Una lágrima furtiva de algún adulto que lloró.
Ante la pregunta, ¿por qué lloras ese adulto contestó?
Sólo cuando pienso en él.
Con lo que yo vi aquí hay algo.
Habíamos tenido algunas señales de que el gato tenía que venir con nosotros,
como por ejemplo, yendo por la carretera y al consultarnos mi mujer y yo,
¿crees que deberíamos llevarnos al gato aparecer uno muerto en la carretera?
Como señal de...
Hostia, pero es una señal que dices, claro,
esta señal que es que me lo tengo que llevar
porque si no se muere, o que siempre lo llevo muere.
Porque las señales son así,
que tú las interpretas luego,
como te sé un poco los huevos.
Sí, difícil lectura.
Hablando de imágenes,
¿se produjo la imagen de todos en el coche
los niños con la cabeza en el cristal de atrás
y el gatito en mitad de la carretera alejándose?
¿Se produjo esa imagen?
Se produjo.
Hombre, son las películas americanas para en el coche.
Pero no fuimos, no fuimos.
La película europea, más cruda, ¿no?
Pero entonces aquí en casa te digo,
se derramó cura gágrima.
Furtiva.
Dijimos, hay que ir por el gato.
¿Cómo? Perdón, han entendido.
Porque lo dijimos así.
Ah, ya.
Como hay que ir por el gato.
Porque estábamos comiendo.
Hablabais gatos, bueno.
Porque comíamos para la ansiedad.
No comeríais conejo.
Curiosamente apareció uno por la montaña.
Sí, eh.
Blanco y negro.
Es una zona que hay jabalíes también.
Era Miguel Ángel.
Y muy rico, la verdad.
Y entonces nos pusimos en contacto
con una empresa que transporta animales.
¿Qué me dices?
Sí, sí.
¿Petaway?
No, animal.
Yo la llamaría petaway.
Animal bus.
Animal bus, también.
Me gusta también.
Y lo hicieron muy bien.
Sí.
Muy bien, la verdad.
El gato llegó con el mínimo de estrés.
Y se daba los buenos días.
Animal bus.
Muy bien.
El gato en casa.
¿Qué querías?
Entonces la felicidad.
Entonces llegó la felicidad.
Felicidad absoluta.
Gato pequeño en la casa.
Entra ola de calor.
Justo nada más llega el gato ola de calor fuerte.
Vino con el calor bajo el brazo, ¿no?
El gato tiraba por el suelo.
Sí.
Es mucho calor tiene este gato.
Claro, se pone la pancica.
La panza se la pone en el mosaico, ¿no?
El gato estaba poco activo.
El viaje, a lo mejor.
Viene un tramo de la historia feo, ¿eh?
Si alguien es aprensivo, el tramo que viene ahora es feo.
Uy.
El sábado...
Un momento.
Voy a poner un sonido de...
Para relajar un poco.
El gato llegó el jueves.
Sí, para...
El gato llegó el jueves y el sábado...
Perdona.
El gato descansaba mucho.
Perdona.
Yo como responsable de Peta Huey te digo...
Sí.
Que...
Anímal bus, no Peta Huey.
No, pero a mí ya se llama Peta Huey.
Ah, bueno, eh.
Peta Huey.
Que a lo mejor le suministraron un pequeño fármaco.
No, no, no.
No, nada, nada.
Tú lo sabes eso.
No, no, que va, que va.
No, no, no.
No, no, no.
Pero que nada, que es para que el gato no...
A más el gato era muy pequeño, no se podía administrar nada.
Ah, vale, vale.
Pasó por un veterinario en la...
En Mallorca.
Veterinar en la isla, le dio...
Sí.
Pero bueno, el gato no... Bien, pero se ha dado mucho sueño, yo pongo un gato.
Uff, duermen mucho los gatos, eh.
Sí, pero...
Ya, ya.
Ya, ya.
Es demasiado.
Y el domingo ya...
El gato estaba que...
Le levantaba la pata y la pata caía.
Puto, puto.
Un muñeco roto.
Sí.
Un peluche.
Y entonces...
Aquí igual una música de acción.
Vale.
Que no la he pedido, eh.
Pero bueno, este trozo luego lo cortas.
Vale.
Se pone en marcha.
Entonces el domingo...
Es la maquinaria de rescate.
Hospital.
Uff.
Gato Hospital.
Ahí entería Pet Rescue.
Pet Rescue.
Pet Rescue, que es una división libre de PetAway.
Gato Hospital.
Pet Rescue.
Que vienen difazados de gatos.
No.
De Pet Rescue.
Sí, van como...
Calla, calla.
Como el Sámor, pero ya van como una cola.
Calle, calle.
Gato Hospital.
Este gato tiene bronco-neumonía aguda.
Uff, rápido.
Este gato está al borde de la muerte.
Iban dando las órdenes bien asentado a la camilla por urgencias.
Gato pequeño.
Todo lo que he dicho.
Este gato está gato de Rodinger.
El gato está y no está.
Uff.
¿Lo perdemos?
¿Aquien dijo lo perdemos?
Esa semana lo dije.
No entiendo usted, gato, oye.
Lo perdemos.
Dañado no lo sabemos.
Uff.
Al gato se le practica todo lo que la veterinaria moderna le puede ofrecer para salvar su vida.
El gato se debate entre la vida y la muerte.
Son horas decisivas.
Una semana en la UCI.
Mucho dinero.
También.
Pero se paga con gusto.
Se paga con gusto.
Que sepas que Pet Killer está a punto.
No, no.
No.
No, no, no.
No, no, no.
Pet Killer dignidad.
Con dignidad.
Gato pequeño.
Puede vivir.
Vale.
Yo le plateo fríamente a la veterinaria.
¿Qué podemos esperar?
¿Qué podemos esperar?
¿Era italiana?
No.
No lo digo porque hubiera venido una oleada de médicos y veterinarios y todo.
Francesca Tognacci.
Va.
Francesca Tognacci.
Sí, Tognacci.
Me dice el gato mea bien.
Pero respirar regular.
Toma un embudo.
El chorro del gato bien.
Pero respirar regular.
Hostia, se debate entre la vida y la muerte.
UCI para gatos.
UCI para gatos.
UCI para gatos.
Una semana un dinero se invierte ahí.
Bien pagado.
No te digo que...
Una UGI.
Una UGI.
Bien pagado.
Unidad de gatos intensivos.
Me planteé ponerle al gato el nombre de la cifra que me iba a gastar.
O sea que...
Claro, claro.
Sí, porque todo eso son dinericos.
No hay seguro para gato.
No hay seguridad asociada.
No pasa nada.
No.
Es uno de los nuestros.
Ya, ya, ya.
Vamos a salvar su vida.
Y vamos a visitarlo cada día.
Hostia, otra vez ha pasado.
Otra vez.
¿Queréis que deje de contar la anécdota?
Puede ser eso.
Hostia, pero qué ruido.
Yo nunca...
No, es que hace como...
Piu, piu, piu.
Luego hablamos del ruido.
No quiero cortarla en el gato.
El regato.
El regato del gato es el regato, ¿no?
En estas...
Sí, sí.
Vamos a analizar las heces del gato.
Vamos a ver qué...
En la caca del gato estaba la respuesta.
La caca está la solución, ¿no?
Descubrimos que todo eran parasitas.
Oh, pobre.
Ya todos los pulmones del gato estaban llenos de gusanos.
El gato era una piñata de mascotas.
O sea, el gato era una mascota llena de millones de pequeñas mascotas.
Propias del solo, ¿no?
Había llegado...
Había llevado la felicidad a nuestro hogar.
Y sigue el tratamiento y a la semana el gato sale del hospital.
Vamos a ver.
El gato vuelve a casa.
Betalive.
El gato se le administra cinco medicinas al día.
Sí.
Se las tengo que dar yo.
El gato me odia.
Ustia.
El gato ahora mismo me odia.
El gato lleva pas días poniendo pasión a Maraca, ¿no?
Sí.
Y hoy, que estamos grabando esto, le he dado el último antibiótico.
A partir de ahora el gato está limpio.
¿Cómo se llama para que ya le cojamos más cariño?
Harpo.
Harpo, muy bien.
Me gusta el nombre, sí.
Y ya está bien, porque ya se comporta como un auténtico hijo del demonio,
como se comportan los gatos.
Compañero, el gato ya está bien.
La tensión de si moría ya la pajita, si quieres.
Ya está.
Entonces, ha acabado bien.
Ustia, qué bien.
Y ahora tengo un...
Bueno, pues a por la parejita.
Yo tengo, yo no tengo nada.
El gato vive en mi casa.
A por la parejita.
Y me respeta.
¿Qué parejita?
Pues otro gato o gata que se divierta él, ¿no?
Sí, los cojones.
Como no lo encuentre moribundo, ¿no?
Oye, este ruido que está sonando en la grabación
desde Barcelona en la sérdia,
que es donde estamos trabajando,
yo no la había escuchado en toda mi vida,
en 30 años de radio.
O sea, es como un seco.
Es una cosa que me está gustando un poquito.
Quiero decir que yo propondría cada vez que suene
que el público aplauda, porque estamos ante algo,
sonoramente rico, diferente.
Esto no le pasa a los otros programas.
Hay acoples,
hay una gama de su ruido muy chulo.
Este es bonito, es bonito.
Es como una nevera.
Sí, tiene algo como de música electrónica.
Muy bien, vao.
Perdón, perdón.
Perdón.
Muy bien.
Perdón, pero me lo he tragado.
Sí, sí.
Te ha venido un aire propio, ¿no?
Pero me lo he tragado.
Bueno.
Oye, veo ya atrás luz
de la propia urna.
Ve una carta que viene desde New York
fechada 24 de junio,
que va a tu nombre.
Ah, ¿sí?
Sí.
Se ve que esta persona nueva yo,
se cree que el programa lo hacía uno solo.
Bueno, pues.
Tomela, Tomela.
Tomela.
Un momento, un momento.
Dice Jess Knuckle,
que vive en el 515 de West.
De West.
De Westside.
Ah, de Westside.
Sí.
De Westside ¿qué?
538 y la 515.
Vale, dame la carta.
Dame la carta.
Dame la carta.
Dame la carta.
Mira atrás luz, a ver si hay un cheque.
No.
No, para ti.
A ver.
Una...
New York.
Enviado el 24 de junio de 2021.
Sí, lo que acabo de decir.
Jess Knuckle.
¿Qué es Jess Knuckle?
Jess Knuckle.
Jess Knuckle.
Vale, vamos a ver.
Abre la carta.
Esto es muy bonito, porque esto pasaba antes.
Hace muchos años.
Oh, pasaba antes.
Está pasando ahora.
La radio llevaba en carta.
Sólo hay una tarjeta de metro.
Oh.
Una tarjeta del Subway.
Subway Court.
Subway Court.
Y dice, hola Aberto, puedes contar de dónde viene la expresión
camisa de 11 varas.
Muy bien, muy bien.
Gracias con antelación.
Qué guay.
Pues mira, quizás sea el momento de decir que no.
Que lo vamos a contar cuando nos dé la ganas.
Es que no me acuerdo muy bien.
Claro, ha pasado tanto.
Me informé cuando fue el momento, pero ahora no me acuerdo.
Pero más o menos lo puedo contar.
¿Queréis que lo cuente?
Sí.
¿Tú te acuerdas?
Más o menos.
Ah, vale, sí.
¿Sí, lo cuento?
Sí, sí.
En las murallas de los castillos.
Las murallas de los castillos,
sabéis que hay una parte que es la torre.
O sea, como el nervio y entre nervio y nervio,
hay una...
¿Qué nervio?
O sea, coño.
Una muralla no es todo una pared,
sino que hay como...
Una balustrada.
Hay columnas.
¿Qué es que me inventé términos?
Sí, inventé de los.
Pues una balustrada.
Pero una balustrada no es.
¿Cómo una balustrada?
Una columna, un nervio, un nervio de la muralla.
Sí.
El nervio de la muralla.
La západa.
La západa.
La západa que coge dos balustras.
Vale, pues la západa de la muralla,
que es como un nervio entre...
Una muralla está dividida en varios tramos
que se van separando por esa columna o nervio.
Entonces entre cada trabajo hay una franja,
una...
¿Balustra?
Una loncha, digamos.
No, no, no.
Una razapa.
Luego viene todo razapado.
Claro.
Viene...
Se corona, se corona con una razapa.
Viene con comitado para abajo.
Entonces esa lámina de pared,
eso es una camisa.
Eso es la camisa, ¿vale?
Entonces, para subir...
Para subir la camisa,
pues usaban unas varas.
O sea, no, perdón.
La vara era una unidad de medida, ¿vale?
Entonces...
Si lo lo sabes.
Es que ya os he dicho que no me acuerdo muy bien.
No pasa nada.
Entonces, si la camisa era de 11 varas,
es que era muy alta.
Entonces no se podía asediar esa muralla.
Ya.
Entonces, camisa de 11 varas es...
Bueno, esto es muy complicado.
Ah, vale.
Porque cualquiera sube una camisa de 11 varas.
No te metas en camisa de 12 varas.
Ah, eso es.
Una tarea muy difícil, ¿no?
Eso es lo que yo tenía entendido.
Pero creo que hay más significados que este.
Creo que este es uno.
Entonces, este es el bueno,
porque es el que se ha explicado yo.
Vale, vale, vale.
Vale, vale, vale.
Ya está, lo tenéis.
Muy bien, muchas gracias.
Gracias.
Gracias.
Como ya sabrás, amigo Berto y amigos siguientes,
he experimentado durante los últimos meses
un proyecto de podcast paralelo a este,
que es la Madrid, la madre.
Esto es...
Esto es la hostia.
Esto es lo que tenemos aquí.
Pero yo de vez en cuando hago cositas.
Y he hecho uno que se llama TodoPasa.
Sí, ya he escuchado unos cuantos.
Que he contado vividas, sí.
¿No te ha gustado, no?
Sí, pero en un momento...
Pérezca, por favor.
Por favor.
Por favor.
Por favor.
Por favor.
Por favor.
Por favor.
Pero en un momento...
Pero es que ahora lo dejo todo.
Te he dejado de interesar.
Es que me...
Lo dejo todo.
Series, por ejemplo.
Veo dos o tres y ya lo dejo.
Bueno, pues no me sirves para que quiero hablar.
No, o sea...
Pero si no te...
Lo que había un final...
No, al final sales tú.
No has llegado.
Yo me he escuchado salir.
Sí, pues sales al final.
Bueno.
Es que creo que escuché, o algunos de principio,
algunos de final.
Como tú cuando mis series que la escuchaste,
desordené de nada.
Sí, es verdad, sí.
Que la viste desordené de nada pues igual.
Sí, sí, sí.
La osadía es que fue culpa suya, pero bueno, es igual.
Es broma, es broma.
Pero no quiero hablar de eso.
Quiero hablar de que a raíz de ese podcast,
hay una publicación...
Esto lo sabe mejor el presidente.
Esto que es un podcast en Miami,
que cada semana o cada día...
Cada día...
Uy, qué pesados, ¿no?
Cada día explica las novedades del mundo del podcast.
Ah, sí, ¿eh?
Sí.
Porque en Estados Unidos, ni que decir, tiene que estar muy desarrollado.
Hay mucho...
Mucho podcast.
Y también en idioma español, ¿no?
No hay tantos.
Esto explicaría que al no haber tantos,
me mencionaron a mí.
Y quiero que escuches el fragmento de la locutora de Miami.
En Parcas Recomendado todo pasa.
Es un parcas definido por sus creadores
como un experimento sonoro con el que el humorista,
presentador y productor español,
Andréo Buenamente, se destaca.
Gracias.
Primero.
Muy bien.
Primero.
Yo para mí que lo hace Siri.
Sí.
Porque la adicción está paquete.
Algunas veces escuchará su voz,
la ajena o la de la vida en general.
Sí, sí.
Sí, es un poquito una señora robot.
Una señora robot.
Atención, incorporemos ya el concepto.
Padcas.
Padcas.
Paremos ya del podcast.
Un podcast.
Que la gente dice Posca como los rotuladores.
Sí, Posca.
Te he escuchado tu Posca.
Y la gente que dice Winston.
Sí, sí.
No sabes, fija.
Mucha gente dice Winston.
Sí.
No, a mí me gusta el Winston.
Estoy escuchando un Posca de Winston.
Mientras me como una picha, ¿no?
Bueno.
Hombre.
Bueno, ya me entiendes.
Y moviestar, que la gente dice moviestar.
Y esa E donde ha salido.
Ya, ya, ya.
Metes una E donde te sale a ti de los cojones.
Y, claro.
Moviestar.
Pero, por favor, a partir de ahora.
Padcas.
Es que quitando yo, todo el mundo habla muy mal.
Claro, claro, claro.
Quitando yo.
Sí.
Quitando yo.
Quitando yo.
Todo el mundo habla mal.
Claro, claro.
Pues que sepas que a mí me gustaría
que me llamaras Andrés Buenamente.
A mí me gusta un poco.
Andrés Buenamente.
Gracias.
Pero es que yo no te llamo por el apellido.
Bueno, pues sí.
En algún momento tienes que decir,
Bertón Romero.
Si tú dices Andrés Buenamente.
Si puedes cambiar a Buenamente.
Vale.
A mí me hace como más ilusión.
Llevo con la fuente de medio siglo.
Pues soy de la fuente a la mente.
A mí me gustaría que me llamaras Taras Bulba.
Cuando...
Pues que a mí me transporta imágenes que no quiero...
Pero es Bulba con B, ¿eh?
Ah, vale, vale.
Las dos B son Bulba.
Entonces sí.
Con B.
Vale, vale, vale.
Es un personaje de una novela, creo.
Sí, ¿eh?
Sí, creo que es rusa.
Crímen y castigo?
No.
¿Por qué dices?
No, si no lo sabes.
Porque es que no.
O sea, no lo sé, pero dentro de lo que no sé,
sé que no es de crimen y castigo.
Vale.
Por ejemplo.
Vale, vale, vale.
¿Aguna otra novela rusa?
Sí, rojo y negro.
Muy bien.
Que son los colores del rey Deportivo, que es mi equipo.
Por eso me la leí.
Yo si no, yo leer de qué.
Si no, yo leer de qué.
Últimos minutos del programa.
Venga.
Nadie sabe nada.
Con Andréu...
Buenamente.
Y Berto Romero.
Pues tú vengas.
La gran apoteosis de la ignorancia.
También en...
Podcast.
Ay, esto es maravilloso.
Correcto.
Mira.
Sí, mételo todo, Ramón, mételo todo.
Oye, chatarrero por ahí.
He chupado esto, ¿eh?
He chupado esto.
Ha sido tú.
Para allá tengo que chupar yo toda la temporada.
Sí, sin presión.
Para ti, para ti.
Vale.
Oye, y el público, que no...
Vale.
¿Sólo quedan tres minutos?
Sí.
¿Los quedan tres minutos?
¿Puedo tan tan mierda con el público y qué alegría?
No.
¿Y hemos pasado de ellos?
Queremos oírle su voz y que sea testimonial a algunos.
No, no, no, no.
Quiero no.
¿Para tres minutos?
No.
No.
No, no, no.
¿Para tres minutos?
Sí.
¿Puedo dejar para la siguiente semana?
Quedaba mucho tres minutos.
¿Tres minutos?
Madre mía.
En tres minutos paro yo en dos áreas de autopista.
Venga.
Vamos a ver.
Hola, ¿cómo estás?
Hola, muy bien, muy bien.
Mira, una persona que...
Público que suena por primera vez en casi dos años.
Pero él se la pela, ¿eh?
Él no tiene ninguna...
Muy bien.
¿Cómo estás?
Muy bien, muy bien.
Pero esa voz es tuya o es por la mascarilla?
Es una voz de puta madre, pero como muy...
No me la puedo quitar, o sea, no vamos a comprobar.
Ya, claro, claro.
Está filtrada, ¿no?
Claro.
Está como filtrada.
Sí, sí.
Oye, hay programas de radio, no es el caso,
que están haciendo los locutores...
Con la mascarilla.
Con la mascarilla.
Yo eso...
Pero yo la espumilla es mía.
O sea, esta espumilla es mía.
Cuando yo deje...
Esta la guarda luego.
Sí.
Y me la vuelven a poner a mí.
Y sí, y cuando...
Cuando me mueran me entierran con ella.
Claro, claro.
Bueno, muy bien.
Oye, ¿cómo te llamas?
Jan.
Jan, ¿representas a todo el público del Nadia?
Cientos de miles de personas.
¿Cómo ha sido este tiempo sin poder venir al plato?
Estudio.
Callao.
Te dios bueno, ¿eh?
Sí, para...
No, no, no, trabajalo concreto.
No, claro, que bien.
Un tío muy...
No, pero Callao, ¿no?
Te habrás hablado, ¿no?
Manillas.
Vale, ¿no? El que digas no, es que como no pude ir al programa,
yo no hablo.
Bueno, Callao es él.
Callao es él, me parece.
No, más que Callao, que he decidido eso, silencio.
Ya, ya, ya.
Silencio en las calles.
Silencio, ¿eh?
Silencio en las calles.
Bueno, buen tiempo que sí, ¿eh?
Sí.
Silencio en las calles.
Cara tapada.
Sangre derramada en el asfalto.
Se me ha acordado una canción.
Y en todo esto quería hacer una punta de la pedantería,
ya que estamos.
Que al principio no lo he dicho,
pero que se habrían asustado,
que son, creo, 5.000 millones de años,
de lo del sol.
¿Qué he dicho yo?
¿Qué he dicho?
A estos 5.000 años,
que a lo mejor a lo más que se asusta,
porque aquí hay que vivir mucho.
Muy bien, tío.
Pues a mí me pareció poco.
5.000 y digo, guau.
5.000 millones.
5.000 millones.
5.000 millones.
5.000 los nervios y el primer día.
Yo recuerde, me suena a lo sí parecido.
Pero entonces no habrá gallinas, Andreo.
No, porque las gallinas...
No, pero no mezcles campos, ¿eh?
Porque son dinosaurios de las gallinas.
Bueno, pero las gallinas vienen de los dinosaurios.
Claro.
Que solo hay que verles la cara.
Y es, claramente, un dinosaurio.
Sí.
Los normales, o sea, lo esperables,
es que en 5.000 años ya hayan vuelto a ser dinosaurios.
Por eso, por eso, que a lo mejor vuelven.
La de la gallina.
El dinosaurio de la gallina, de la gallina de los árboles.
Pues, tío, ¿cómo echaba de menos yo estas charlas?
Que no aportan nada.
No, pero muchas gracias porque has matizado
y me equivoca.
Gracias, tío.
Gracias a vosotros también.
¿Os habéis portado también
que os esperamos la semana que viene?
La semana que viene más público.
Ya veréis, ¿eh?
Sí.
Sí, sí.
No sé yo, ¿eh?
Yo ya he hablado de lo del gato y de lo de mearme,
con lo cual...
Ya.
Muchas gracias y que...
lo pasemos bien este año.
Gracias.
Eh, si te ha gustado.
Suprímete.
Y dale al...
¡Lizant!