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Nadie sabe nada

Andreu Buenafuente y Berto Romero se sientan frente a frente, micro a micro, e improvisan. ¿Qué puede salir mal? El humor de estos dos genios es oro para tus orejas. Ábrelas bien que, en el fondo, nadie sabe nada. Andreu Buenafuente y Berto Romero se sientan frente a frente, micro a micro, e improvisan. ¿Qué puede salir mal? El humor de estos dos genios es oro para tus orejas. Ábrelas bien que, en el fondo, nadie sabe nada.

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Time transcribed: 6d 0h 26m 18s

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¿Revisión?
Revisión.
Hoy San Pedro.
San Pedro.
¿Qué quieres saber de San Pedro?
San Pedro fue...
San Pedro fue el primero de los apóstoles.
San Pedro era pescador.
¿Pescador de hombres?
Sí.
San Pedro estaba pescando.
¿Qué reyes?
Sí.
Ni idea de nada.
Sí.
Como no tenéis ya clase de religión.
¿Pescaba de hombres?
A la gente dice...
El río.
Pérate.
Buscos y cadáveres.
Y una bota.
Un día pesca una bota.
Pérate.
Esto hay que remontarnos al momento en que Jesucristo
empieza a predicar.
Sí.
Hacer proselitismo.
Sí, proselitismo.
Vamos a hablar bien.
Él se busca un equipo.
Sí.
¿Vale?
Porque estaba solo.
Que hay una escena en la Biblia
que van yendo a buscar a cada uno del equipo.
Con música.
Uno es, por ejemplo, carpintero.
Claro.
¡Vámonos allá!
Y se conjera la imagen.
Carpintero.
En canto.
En canto.
En canto.
Yo aporto mi serrucho a la religión.
Lucas.
Mateos.
La comunidad del anillo.
La comunidad del anillo.
Sí.
Bueno, entonces, hay un momento en que Jesús, el primero,
al primero de los que recluta, es San Pedro.
San Pedro.
Va Jesús por allí.
Sí.
Con su túnica, agua y guapo, con la barba.
Se gustaba.
Sí, se gustaba.
Se gustaba.
Así quiero camino por las aguas.
Se gustaba.
Sí.
Y de repente ve un río.
Y se acerca y un tío pescando con su familia.
¿Qué haces?
¿Qué le dice?
¿Qué haces?
¿Qué haces?
Y dice, pesco.
Y otro dice, soy pescador.
Soy pescador.
Y le dijo, y esto está en las escrituras.
Sí.
Yo te haré pescador de hombres.
Y el otro le dijo, no va con mi interés sexual.
Bueno.
Me dijo, no va por ahí, no va por ahí.
El otro dijo, tío, no habría otro símil.
No va por ahí, Pedro le dijo.
Jesús le dije, no hay otro símil.
Y él...
No.
Y entonces, pues, tío.
Dijo, sabrás tú de símiles.
Exacto.
Y pa Pedro a su mujer le dice, mira, no te lo vas a creer,
pero ha pasado un tío con barba y una túnica.
Sí.
Que dice que no lo hace el pescador de hombres.
Esa mujer.
Y dice a la mujer, y aquí, ¿quién, quién tal salario a casa?
Que el chiquillo allí, pa, pa, pa, pa, pa.
Esas son pocas remotas.
Claro.
Y él dice, ¿qué me voy?
Claro.
Y la mujer me dice, ¿vaya dónde?
Pues por ahí a predicar.
Muy bien.
Y con quién vas? Con 11 más.
Sí, sí.
Y tú lo que quieres, ir con los amigos.
Claro, claro, claro.
Como una bronca de cojón.
Y Jesús, afuera, pero, ya ves, cortándose la soña,
lo escuchaba todo desde afuera.
Y así, ahi.
¿Qué hizo?
Estamos salvando la humanidad y estamos jubi con estas cosas.
Claro, claro.
Voy a hablar así, Jesús.
Ah, sí, tenía un poco de frendillo.
Ah, no lo sabía.
Habla así.
Claro, una grabación, es.
Una grabación, es.
Y de repente, porque la bronca se guía dentro de la casa,
y él dice, va.
¿Has hablado así?
Sí.
Buenas tardes.
Sí.
Esto lo sale a la escritura.
Está en un evangelio apócrifo,
que la Iglesia no autorizó.
El evangelio de la voz, le daba, ¿no?
De la forma de hablar.
Sí, el evangelio de la voz.
¿Estaban en los Rollos del Mar Muertos, estaban?
No, no, estaba en la Biblioteca de Alejandría.
Ah, vale, se quemó, ¿eh?
Bueno.
Bueno.
Pero quedó flotando y todos lo unieron con pegamento.
Claro.
Y nada, y Pedro fue el primero.
Y luego le dijo, porque todo el rato le decía cosas,
y le daba, ¿no?
Sí, a Pedro.
A Pedro, Jesús.
Pedro, Pedro.
Le cogió cariño.
Sí.
Y dice, ¿tú serás sobre ti edificaré mi Iglesia?
Esto es lo verdad que sabe.
Sí, sí, sí.
Y él dijo, él preguntó, ¿cómo?
¿No?
Porque es como si yo te digo, Berto,
sobre ti voy a hacer la toreclatraba.
¿Tú qué me dirías?
Hombre.
Pues, ¿qué como lo hacemos?
Claro, como.
¿Qué menos?
¿Qué menos?
¿En qué me afecta?
Te preguntaría.
Y Jesús le dijo, ¿sona hablar?
Ah.
El rato le dice, no lo entiendo.
Tú serás el primero.
Entonces, el primer papa.
Porque Pedro, luego, cuando hablaba con los otros apóstoles,
que le decía, ¿qué te ha dicho?
¿Qué te ha dicho?
Y Pedro decía, Dios, que no lo entiendo.
Claro.
Porque como habla con metáforas, entre las metáforas,
y ese frenillo que tiene en la boca.
Sí.
Yo no entiendo lo que me dice.
Dice, que tengo que hacer una Iglesia.
Yo no entiendo.
Y que tengo que hacer una Iglesia.
Y, Jesús, no lo entiendo, no lo entiendo.
Para lo que quieres, sí.
Para lo que quieres.
Pero tú no has dicho que eras pescador, sí.
Sí, sí.
Pues soy pescador de hombres.
Ahora me habla de construcción.
Lo mismo me habla de pesca que me habla de construcción.
Sí.
No lo entiendo.
No lo entiendo.
No he hecho la F.P.
Ah.
Y así fue la cosa.
Sí, sí.
Y entonces, ya, cuando ya se mueren todos,
porque al final se mueren, al final de la primera temporada.
El de vida, el de vida, ¿eh?
Sí.
En la primera temporada murió Jesús.
Y ya la segunda...
Esa es Cliffhanger.
Y la segunda es que vuelve.
Van muriendo.
Y ya cuando se instalan en el más allá,
que eso es la hostia.
Sí.
Eso es pa verlos más allá, ¿eh?
Sí.
¿Qué hace Pedro?
Está en la puerta del cielo.
Ah, vale.
Claro.
También le dio por el saco.
Y le dijo, ¿y ahora qué estás aquí?
En la eternidad.
Y, pero...
Pero...
Déjame ya, ¿no?
Claro, déjame.
No, tienes que estar en la puerta.
O sea...
Toma las llaves.
Y le da las llaves del cielo.
¿Lo ha puesto de sereno para toda la eternidad?
Las llaves del cielo las tienes a Pedro.
¿Lo ha puesto en la puerta?
Pero tú irís yendo con lo que no me escuchas.
Ahí sí, llega un paquete.
Sí, llega lo que sea.
Lo que sea.
El de Amazon.
Todo vivo.
Todo.
Gente que igual no está todavía para entrar.
Claro.
Y él tiene que...
O la vengo al cielo, no, mira.
Y toda la eternidad.
No, usted está en la lista.
Pero después unir moreno.
Espera un momento.
Lo que sea, lo que sea.
Me lo invento, ¿eh?
No he entendido esto.
Ya, bueno, yo qué sé.
Parecía que veía una faltada ahí.
Sí, un poquito.
Ha sido faltadita.
Pero, bueno, oye, qué...
Y Pedro ya está.
Si tú pudieras hablar con él, te diría,
mire, estoy ya.
No puedo bajar.
Estoy harto.
Estoy harto.
Primero en la tierra pescando hombres,
haciendo iglesias.
Pero, bueno, no sé qué es lo que tiene aquí que podría estar yo tranquilo.
Claro.
Que la eternidad es lo que tiene.
Tranquilidad tienes, ¿no?
Sí.
También te digo que la eternidad,
hagar lo que haga es una putada.
Sí.
Porque toda la eternidad en la puerta es una putada.
Pero toda la eternidad sin hacer nada.
También.
No sé qué es peor.
Bueno, sabes cuál es la frase de Budialen, no?
Que dice, la eternidad es muy aburrida,
pero la eternidad es muy aburrida.