Buda echaba unos tordos, lentos además,
tordos lentos. Y feliz. Estaba ahí Buda y ahora no me molestéis.
Qué Buda, qué Buda. Una hora y media para echar aquí una...
Qué Buda.
Bueno, el que había, ¿no?
Perdona, no tuya escuché una entrevista con un líder tibetano
y dice que Buda ha sabido miles.
Ah, Buda es un cargo.
Pues parece que sí, o es con un hobby. No, un hobby no es.
Sí, hombre, te entra como una espiritualidad, una movida que dice
yo soy Buda. No, sí, hombre, sí, claro.
Yo y yo. Qué muchos Buda.
Te tendrán que decir los demás que eres tu Buda, no tú.
Bueno, ya, te lo dicen, pero que ha habido muchos.
Pero por eso te digo que Buda es un cargo.
Vale, no lo sabía. ¿Alguien conoce aquí?
Sí, mira, tenemos la persona que nos puede iluminar.
Nunca mejor dicho. Ya te he dicho yo que el público de ello es
muy bueno, unos conocimientos. Bienvenida.
Gracias. ¿Cómo te amas? María.
¿Eres practicante del budismo o simpatizante o...?
No, mi profe de ello por si acaso no soy muy experto tampoco.
Bien, estás en el programa adecuado, perfecto.
Bienvenida, bienvenida.
Pero creo que es un tipo de estado máximo en el que llegas
de control absoluto de la mente, de tu cuerpo.
Entonces, como la comunidad en general, el resto de monjes
te dan ese título. Vale, es un título, es un cargo.
Exacto. Entonces, por eso ha habido varios.
Es un poco como él nos gava. Vale, vale.
Pero cuando has llegado al control completo,
se te puede llegar a dar el título de Buda.
Entonces, se juntan todos un día y te dicen,
mira, no hemos hablado y creemos...
A tanto no llego. Y creemos que estás Buda.
O sea, estás para Buda, estás para Buda.
Y él dice, si lo creéis vosotros.
Porque el Buda se la apela todo, ¿eh?
Claro. En el sentido positivo.
Igual dice, tarde os habéis dado cuenta.
Porque llevo ya un par de años que... que Budé.
Ahora voy... voy a hacer de Buda, ¿vale?
Ahora yo era Buda. No, pero esto es ofensivo, ¿eh?
No, pero no, los ofensivos son un homenaje, coño.
Hombre, yo creo que ofende, ¿eh?
A ver, ya ven, venme a ver. Hola.
Espera, ¿qué llegó?
Vamos a ver a Buda. Yo también hago lo de comentar.
Estoy llegando a la puerta de su casa.
¡Uy, qué casa tiene más bonita, Buda!
¿Qué casa? Toda de mármol. No me lo esperaba.
¡Hola!
Hola, Berto.
Porque aunque esté la puerta cerrada, sé que eres tú.
Claro, porque estoy llamando.
No. Y te avise que iba a venir.
Ya, pero aparte de eso, tengo una capacidad sensorial del copón.
Yo sé que eres tú. Es más, ni te voy a abrir.
Voy a hablar desde el con la puerta cerrada.
Dime, dime. ¿Qué quieres?
Es que necesito ir al baño.
Pues a casa del Buda se va cagado y me ao.
¿Qué quieres, aparte de eso?
¿Algún consejo, alguna espiritualidad?
¿Qué quieres?
Es que no me había preparado pregunta.
¿Qué vas a molestar?
¿Que no ves que son las tres y media que yo ahora iba a levitar?
¡Bueno, levitar!
¡Va, va, va!
¿Es usted Buda o uno de los cuatro fantásticos?
No me joda tampoco.
Yo me voy a echar una siesta ahora,
que va a ser épica, que voy hasta a levitar.
Entonces, hoy es muy importante lo que me digas.
Desde la paz te lo digo, o vete a tu puta casa.
Pues nada que muy bien todo y que no era buena.
Que me han dicho que le han ascendido a Buda este mes.
¿Qué llevas puesto?
Hombre, pero esto es muy íntimo, ¿no?
No, es que como no te veo, que está la puerta.
Ah, pues use su poderes.
Porque bien se ha dado cuenta que era yo,
pero vestir ahí no le llega.
Vistes de negro, el color de tu alma.
¡Hombre!
¿Qué?
Ahora te ha molado, ¿eh? ¿Cómo Buda?
Yo ligo mucho.
Los Budas ligamos mucho.
Hombre, es que... ¿Me entiendes, no?
¿Le hago falta yo aquí?
O si quiero hablar de usted solo.
No, no, no. A mí me no me haces falta.
Bueno, pues yo me voy a marchar.
¡Vale! ¡Adiós!
Para coger la autopista.
Ah, no, espera. Se los doy yo.
¿Por qué?
¿Eh? ¿Por qué?
Porque puedo hablar con el más allá.
Tiene muchos poderes, ¿eh?
Sí. Soy como Hax Pino.
Tengo los poderes del Pino.
¡Adiós!
Esto de un tipo no lo ha entendido.
Espera, acabo la puerta. Espera, acabo la puerta.
Vale.
A ver, ¿qué pasa?
Escúchame. ¿Qué?
Soy yo Buda, ¿eh?
Sí, sí.
¿Puedo pasar? Es que realmente me estoy haciendo bis.
No, no, con la pandemia, no, no.
Y por favor, un metro de distancia.
Budismo, pero...
Un metro es poco, ¿eh?
Pues metro y medio.
Vale.
¿Qué?
Hax Pino. Los poderes del Pino.
Era una campaña de los años 80, 90.
Que era un detergente.
Con el que tú fregabas los suelos.
Y la canción decía,
no, no, no, no.
Los poderes del Pino.
¿Por qué?
Porque tenía...
tenía, se ve, que una enzima del Pino.
No, coño, que es verdad, hostia.
Y que, pues bueno,
que a la parte de desinfectar,
te ponía el comedor
como un bosque mediterráneo.
¿Sabes?
No podías chupar el suelo.
Y era como si comieras piñones.
¿Quieres más datos o no?
No me esperaba para nada.
Recibir esta información.
Bueno, pues bien.
Así que ha valido la pena el viaje.
Vale.
Para volver a la autopista desde aquí.
Sí.
¿Cómo vuelvo?
Ponte el huace.
Ponte el navegador.
No hay cobertura aquí donde vive usted,
lo alto de la montaña, coño.
Ni cobertura ni baños públicos.
Esto es cuesta más.
Tiene que cagar aquí al lado,
en el jardín que tiene...
Es igual.
Porque al primero era pis,
pero claro, tanto rato hablando.
Se viene la comadreja.
Tú caga lo que quieras.
Caga tranquilo.
Vale.
Te dejo.
Muchas gracias.
Muchas gracias.