logo

Nadie sabe nada

Andreu Buenafuente y Berto Romero se sientan frente a frente, micro a micro, e improvisan. ¿Qué puede salir mal? El humor de estos dos genios es oro para tus orejas. Ábrelas bien que, en el fondo, nadie sabe nada. Andreu Buenafuente y Berto Romero se sientan frente a frente, micro a micro, e improvisan. ¿Qué puede salir mal? El humor de estos dos genios es oro para tus orejas. Ábrelas bien que, en el fondo, nadie sabe nada.

Transcribed podcasts: 694
Time transcribed: 6d 0h 26m 18s

This graph shows how many times the word ______ has been mentioned throughout the history of the program.

He gozado de unos días de viaje personal a Argentina.
¿Sí? ¿Y has hecho eso que haces de imitarles en su cara?
Un poquito sí.
No, vengo de España.
No, no, no seas tan listo.
Estoy aquí unos días.
No, no, no, imitar no.
Ya te he dicho muchas veces aquí que tengo una empatía natural.
Que te lleva a la imitación.
Que tú no tienes al serrancio, pero yo sí la tengo.
¿Hay alguien argentino?
Oh, che, ¿qué me contás?
Sí.
¿Tú eres argentino?
A levantarse, sí.
La serendipia del programa, es que esto es acojonante.
Casi catalán, te he visto en el programa de Andy Kuznetsov.
Sí.
Y debo decir que da un poco de vergüenza.
¿Qué dices?
Porque se le va.
Pero yo me siento apelado y voy a contar lo que sucede aquí.
Vale.
Primero, este es un principio activo del comunicador.
¿Qué quiere un comunicador?
Comunicar.
Sí.
Che.
No, es verdad.
Y entonces, ¿qué se me activa a mí cuando estoy, no en Argentina,
sino si cuando voy a Euskadi, que ya sabéis que hablo euskera perfectamente.
Cuando voy a Valencia, que también, che, he parlado toda la vida en Valencia.
O cuando estoy en Menorca unos veranos.
En italiano.
No, en alemán.
En Menorca.
En la gran formentera.
El punto eslavo, sajón, ahí ya no trabajo tanto.
Pero sí que se me activa una cosa, que si sienten en algún momento agua de vergüenza,
pido disculpas, y es su problema.
También.
Pero lo justifico desde aquí.
No es que imite, por supuesto que no, sino que algo me lleva a empatizar más con esa gente.
No lo puedes evitar.
E incluso, esconder tu idioma, tu acento, perdón, es una manera de respetarlos un poco más.
Sí, según tú.
No, no.
Mira, yo estuve diez días con una persona a mi lado que me acompañaba, me llevaba, me movía por allí.
Con el que mantuve un montón de conversaciones.
Cuando yo le decía, voy a buscar la maleta, me decía, perdón.
No, la valija.
Ah, la valija.
Sí, la valija.
Vale, vale.
Muy bien.
Yo no puedo decirle, la maleta, que es valija.
Ah, pero una cosa es cambiar tu léxico, o introducir palabras nuevas, y otra es...
Todo tiene fases.
La cantinela.
Sí, no, no.
Todo tiene fases.
Empecé por valija, empecé por auto, empecé por...
Agarrar.
Claro, blindarme.
Prohibirme decir coger.
Porque coger, en Argentina ya sabéis lo que significa, y era un cachondeo.
¿Cómo llegaste?
No, cogí un taxi, ¿sabes?
Sí, sí.
Claro, un monstruo con un taxi, ¿no?
Por el tubo escape.
Por el tubo escape.
Claro, entonces tu cabeza empieza a cortar campos semánticos.
Sí, sí.
Y se empieza por las palabras que yo quiero gustarte a ti, quiero ser tu amigo.
Es un problema neurológico, ¿no?
Tal como lo estás describiendo.
Poco así.
Sí, sí.
Yo, por mi naturaleza, quiero acercarme a ti.
Y uso tus palabras, porque, joder, ya que estoy allí, tengo que respetar su lengua.
De las palabras a la entonación, no cantarina, porque nunca canté, nunca canté, porque
ustedes cantan a veces, ¿cómo cantan?
Es que no puede parar.
No, no, no, no, no.
Ahora le está pasando esto.
Le está pasando, solo por tu mera presencia aquí, ya tiene como una nota.
Es impresionante.
Ustedes cantan.
No, no hagas más.
Hombre, necesitaré esas herramientas para...
Pues si te ha dicho este señor que soy uno de allí que le da vergüenza, para.
Es que te estoy diciendo lo que no hice.
No llegué al canto, porque no llegué, pero sí que un semicanto en la construcción de las frases.
Chicos, pues sí, un hablar, un hablar, y llevas muchos días y al final puede pasar eso.
Pero yo no lo veo negativo, entiendo la broma.
No vas a llegar, no vas a salir del avión, ya estabas, seguro.
No, no, no, porque entre adaptarte y querer empatizar y cretino, creo que hay una línea.
Sí.
Yo creo que no la pasé.
Difusa, difusa.
Difusa.
Bueno, oye, pedimos disculpas a...
Yo no pido disculpas de nada.
Sí, sí, yo pido disculpas en nombre de Andreu, América, por la conquista y por la reciente visita de Andreu.
¡Gracias!