Un día de buenas a primeras, mi reloj, que es un teléfono, un celular, un iPhone, bueno,
decidió avanzarse seis minutos y medio.
Que ya me sorprendió, porque esto va todo... No, no, no, te lo juro.
Sí, sigue, sigue.
Sí, mira, oye, no te miento, ¿qué hora tienes? Dime tu hora.
Las 11 y 20.
Pues mira, ahora está en cuatro. 11 y 24.
Ah, vale. Es que me ha enseñado el móvil y justo cuando me lo ha enseñado el móvil se ha apagado.
11 y 24.
Me ha enseñado una pantalla negra.
Escucha, 11 y 24.
11 y 24.
Vale, para que veas. Dice que son el 18. Tú también estás viviendo irrealidad.
Porque yo llevo un reloj analógico y yo lo respeto. El reloj analógico tiene otra regla.
Vamos a ver, según el reloj oficial que está colgado aquí en el estudio Toresky...
Me he fijado que dice reloj.
Reloj, reloj.
Vale, vale.
Sí, sí, sí.
Vale, vale, reloj.
Y acto, también digo. En lugar de actor digo acto.
El reloj.
Mira, este reloj, reloj, tiene 11 y 18.
¿Te puedo completar yo la palabra?
Sí, hombre. Este reloj...
Gracias.
Marca la... Espera.
Marca las 11 y 18. Pronto llegará la 19.
Fíjate que hace todo el recorrido de los minutos.
¿Qué es lo que hace el recorrido?
Estas puntitos verdes.
¿De qué hablas? Del...
Del reloj.
Ya.
Entonces, esto va coordinado con la hora central europea que marca el paradigma horario que creo que está en Suiza, ¿no?
Sí.
Creemos.
¿Qué hora tienes tú?
Ahora las 11 y 22.
Perfecto.
Vas dos minutos adelantado.
Según la hora oficial.
Vale.
Bueno, vale.
Yo voy siete ya. Voy siete.
Vale.
¿Vale?
¿Qué pasa?
¿A dónde vamos?
Bueno, no, no, no. Yo nunca voy con la hora buena.
Si yo tengo una moto, que sí, la tengo.
¿Qué pasa en el reloj de la moto?
Que es un reloj que no ha cambiado al horario de invierno.
¿Es mi moto igual?
Bueno.
¿Mi moto le pasa lo mismo?
Ve sumando cositas.
Entonces, yo me monto en la...
Uy, que voy tarde.
Porque tengo siete minutos ya adelantado.
Vale.
Uy, que he quedado a tal hora.
Subo.
Uy, es un...
Una hora más.
Es una hora más.
La moto llevo una hora más.
Cago en la madre que me parió.
Sí.
Entonces, cojo el reloj.
El móvil.
No, no me ayuda.
Pero tu móvil es tu reloj.
Bueno, pero espera un momento.
Es que...
Perdona.
No.
Su reloj...
Su reloj es de esto.
Va con el móvil.
Claro.
Entonces, el reloj...
El reloj ha dicho.
Yo voy con el móvil.
Claro.
Vas adelantado.
Vale.
Él no tiene autonomía.
¿Eh?
Él no tiene autonomía el reloj.
El reloj no.
Va con el móvil.
Vale.
Vale, entonces...
No, tampoco.
Mira.
Yo te he dicho que no me encontraba bien.
No era el día.
Escúchame una cosa.
No era el día.
Escúchame una cosa.
Es que mira...
Uy, uy, uy.
Todo se está alineando.
El teléfono.
11-29.
¿Por qué cada vez hay una foto distinta?
¿Por qué?
Una cosa que hizo...
Que hizo mi hija.
Va cambiando la foto.
No me quites.
Una cosa que hizo mi hija, que va asociada a una carpeta.
Pero cualquiera se centra.
Si todo lo que tiene le cambia.
Todo el rato.
Como te digo, mira.
11-22, horario de aquí.
11-29, teléfono.
11-28, pulsera.
Pero si la pulsera va con el reloj...
Pues también se ha cabreado con el reloj.
¿Por qué llevan un minuto de diferencia?
Bueno, no te digo.
Bueno, me subo a la moto.
Una hora más.
Sí.
El otro día...
Digo, bueno, pues solo me queda una esperanza, que es el reloj de la cocina.
Un minuto de la cocina.
Y está 5 minutos por debajo de la hora oficial, que yo ya no sé cuál es.
Y le pregunto a Silvia.
Y dice, ah, sí, este va 5 antes.
Y digo, por favor.
No sé en qué momento vivo.
Para saber la hora que es, tienes que coger tu reloj y decir, a ver, le resto 7, menos 5 del de la cocina, más una hora del...
O sea, tienes que hacer una regla de 3.
Correcto.
Correcto.
En la moto unos disgustos, porque, hostia, voy tarde.
Ay, no, no, luego...
Miro aquí, ah, tampoco.
No sé.
Yo he llegado a preguntar la hora por la calle.
Mi consejo, como amigo es...
Sí, dime, dime.
Por eso te he invitado a la sección Perdido en el Tiempo.
Coge todos los relojes que tengas en casa, el de pulsera, el móvil, el de la cocina.
Coge la moto también.
Sí.
Haces una montaña.
Si quieres, haz que coincida para San Juan.
Sí.
Y haces una hoguera, le metes fuego a todo.
Correcto.
Y te compras un palo largo.
Y vas por la calle con un palo largo.
Sí.
Y cuando quieras saber qué hora es, plantas el palo en el suelo,
calculas la sombra con el sol, como los griegos, coño, como los griegos.
Gracias.
Gracias.
Gracias.