Hola, buenas tardes y bienvenidos a Tutorial de belleza con Berto Romero.
¿Cómo estás? ¿Estás preparado para una noche mágica?
Una noche en la que vas a seducir,
una noche en la que vas a emitir ese brillo especial.
Tan tuyo, tan personal, tan bello.
Vamos allá con el primer consejo.
Hombre, yo agradecería que no hicierais palmas,
porque esto es un tutorial de belleza, ¿vale?
No es una conga en la boda de tu primo.
Bueno, vamos con el tutorial de belleza,
propiamente dicho, después de esta introducción,
tan a contrapelo, ¿no?
Vamos con el primer consejo y único consejo
para mantener tu belleza.
Ese consejo es ser guapo, ¿vale?
Porque...
Pero quítala, quítala.
Es que lo pienso realmente.
Pero... Con mi cara, ¿qué vas a hacer?
¿En qué momento decidieron que tú eras el más adecuado
para este tutorial?
A ver, soy el único que no miente.
Vale, venga.
Y si no vas...
No, con este maquillaje, parecerás una...
No, no vas a parecer nada. Ya.
Es una persona muy fea.
Claro, claro.
Es una persona muy fea. Muy fea, sí.
Ambiente la cara con el de otro. Es la única solución.
Venga, dilo el tono al tutorial.
Venga.
Consejo de belleza, vamos a repetirlo una vez más
para que os quede grabado en las mentes, ¿verdad?
Sé guapo.
Si no lo eres, venga, dedícate a otras cosas.
No intentes ser bello, seas simpático,
porque si eres feo y encima eres un hijo de puta,
vas a durar tres días en este mundo de mierda, ¿verdad?
Sé guapo, que tengas una buena genética
y a partir de ahí, a funcionar.
Ah, dale al like.
Dale al like y suscríbase.
Ah, muy bien.
Muchas gracias.
Ah, bueno, bueno, otro consejo, otro consejo.
Sí, oh, espérate, no, espere.
Y también, muy importante, no seas demasiado guapo,
porque si eres demasiado guapo,
estás muy cerca de la deformidad, ¿entiendes?
Una persona demasiado guapa tiene tantos problemas
como una persona fea casi deforme.
¿Entiendes lo que quiero decir, no?
Vas a entrar en un bar, todo el mundo te va a molestar,
todo el mundo va a intentar seducirte.
Ey, ¿qué haces esta noche? ¿Quieres hablar? Te pago una copa.
Déjame, ¿por qué? Porque eres demasiado guapo.
Mi consejo está ahí, en medio, ¿vale?
En medio y un poquito más para arriba.
¿Ves así? Medio guapo.
Estupendo, medio guapo.
Resultó no, ¿eh? Resultó en una forma de intentar
que se tranquilicen los que son feos.
Venga, adiós.
Adiós, adiós, adiós.