logo

Nadie sabe nada

Andreu Buenafuente y Berto Romero se sientan frente a frente, micro a micro, e improvisan. ¿Qué puede salir mal? El humor de estos dos genios es oro para tus orejas. Ábrelas bien que, en el fondo, nadie sabe nada. Andreu Buenafuente y Berto Romero se sientan frente a frente, micro a micro, e improvisan. ¿Qué puede salir mal? El humor de estos dos genios es oro para tus orejas. Ábrelas bien que, en el fondo, nadie sabe nada.

Transcribed podcasts: 694
Time transcribed: 6d 0h 26m 18s

This graph shows how many times the word ______ has been mentioned throughout the history of the program.

Bueno, a ver, vamos a ver, esto es un falso inicio, hay que hablar de este tema porque...
A ver, ¿qué pasa?
Por primera vez, en los diez años de historia del programa, ¿qué?
¿Qué primera vez?
Pero si no lo he desarrollado todavía.
Que he traído cosas escritas.
Que no es eso, hombre, que no es eso.
Ah, vale, vale.
Por primera vez hemos llegado al estudio, estábamos trabajando, tomando un café con
nuestro estimado director, y de cositas, y luego llegamos aquí y la gente...
Un abucheo.
Un abucheo.
Bueno, que lo podríamos reproducir para que la gente lo vea.
¿Podéis reproducir mínimamente el abucheo, por favor?
A ver cómo ha sido.
Vosotros entrava...
Tú ahora entra a un sitio y empieza a hacer comedia con esta base.
Ahora diviérteme, payaso.
Bueno, y luego dice, no, ha sido idea de uno, que no vamos a señalar, pero vamos a estar
en la segunda fila.
Somos personas, ¿eh?
Y claro, pero ellos lo entenderán porque son de la comedia, ¿no?
Bueno, o no, o no.
Primero somos personas y luego de la comedia.
Claro, claro.
Así, esa es la gradación.
Ya.
Bueno.
Y yo he pensado en hacer el programa todo el rato cabreado, pero luego he visto que no
lo sé hacer, no lo sé hacer.
Me parecería innovador un cómico cabreado, pero no lo sé hacer.
Bueno, pues nada, vamos a hacerlo como siempre.
Bueno, sí.
Yo mentalmente...
Hay res que more, ¿eh?
Yo mentalmente hay una persona a la que voy a intentar no hacerle reír a una persona.
Ah, no, contigo no.
Contigo estoy bien, sí, perdón.
Para saber el parámetro, no.
Vamos a olvidar esto.
Sí, bueno, olvidar.
Vale.
¿Qué más?
No, nada, nada.
Yo tengo unas cosas...
Además, me he comido un corazón de chocolate blanco y estoy...
Chocolate blanco.
¿En serio?
¿En serio?
¿Qué mierda?
Vamos a dejar de llamarle chocolate.
No es chocolate, es una manteca blanca.
Sí, sí.
Era muy malo, ¿eh?
¿El qué?
El croissant que me he comido.
¿Sí?
Sí.
Dice, no me quedan solo blanco.
Y no es blanco, estaba...
Era como una crema.
Mal, mal.
No me ha sentado bien.
Y café.
Hay una mezcla de glucosa y café.
Vamos a cagar como una gaviota.
Y encima...
¡Uy, llego aquí!
¡Umba!
Terrible.
Bueno.
Vale.
Pollo antiestrés.
Vale.
Dime.
Una reflexión es que he estado...
¿Quieres que te la lance ahora o en programa?
Vamos a calmarnos.
Si quieres, hacemos el programa ya normal.
Vale, hacemos el programa normal y te cuento unas cosas que he pensado.
Sí.
Que son importantes para el programa.
Vale.
Venga, va.
La Cadena Ser y el Terrat presentan Nadie Sabe Nada.
Un programa a priori de humor con Andreu Buenafuente y Berto Romero.
Venga, ahora sí.
Muchas gracias.
Muchas gracias.
Bienvenidos al programa.
Ya regular, como Dios manda.
En sus plataformas de streaming, en la Cadena Ser y eso.
Ya no sé qué época del año es.
Creo que estamos en agosto o así.
Estamos en agosto.
Emisión agosto.
Como no para este año, el programa no para, ¿no?
Pues precisamente de eso quería hablar.
¿Ha decidido alguien que no para el programa?
Precisamente de eso quería hablar.
¿Sería el programa?
Sí.
¿No?
Sí.
¿No?
Sí.
¿No?
Sí.
¿No?
Sí.
¿No?
Sí.
¿No?
Sí.
Sí.
Sí.
Yo quería hablar.
Sí, ya lo hablamos.
Estamos haciendo un programa que no para durante el verano.
Cada semana hay programa nuevo.
Sí, sí, sí.
El año pasado hicimos lo mismo.
Llevamos dos años que el programa no para.
Sí.
Creo que nos estamos equivocando.
Sí.
Creo que estamos haciendo daño al programa.
Sí.
A nosotros mismos.
A la Cadena Ser.
No, la Cadena Ser está encantada, hombre.
No, no está.
No, por lo que te voy a argumentar a continuación.
Ah, vale.
Vale, vale, vale.
Y al público, ¿vale?
Sí.
Te voy a contar por qué.
Venga.
¿Es una reflexión interna?
¿Qué reí?
¿Qué reí?
Le llamaremos reflexión interna.
¿Tiene sintonía?
Sí, sí.
Claro, claro.
Para acotar todo bien.
Sí, sí.
Radiofónico, como Dios manda.
Venga, vamos allá.
Vamos a ver.
Venga.
A ver.
Joder.
Uf.
Bajonera, ¿eh?
Bueno, pero tiene un tono bajonero, ¿no?
Vale.
¿Por qué?
Yo estaba pensando en casa.
¿Por qué?
¿Qué suerte tienes?
Porque tengo tiempo.
Ah.
Pensaba, ¿por qué estamos haciendo esto y en qué nos está repercutiendo positivamente
te llega la conclusión que...
Perdón.
No me gusta la música, ¿eh?
No, a mí tampoco.
Me molesta.
Quítala, quítala.
Yo así no puedo reflexionar.
Solo pienso en la muerte.
Joder.
Venga, va.
Adelante.
Bueno.
Está más luminosa, un poquito así.
Bueno, sí.
Bueno, esta es una reflexión más activa, ¿no?
Venga, va.
Si no, ponlas todas a la vez, hombre.
Sí.
Haz un borruño de música y lo pones ahí a ver si...
Es igual no lo comparto de lo que estaba pensando porque me estoy cansando ya.
Bueno, va.
Es igual.
Tú tira, tira ya.
Bueno, ¿por qué los programas de radio paran en verano?
No paran solo por el descanso de los presentadores, muy lícito, sino que paran porque durante
ese tiempo se hacen resúmenes con mejores momentos, ¿vale?
Un programa regular como este tiene mejores momentos, pero también tiene peores momentos.
También, sí.
Y solo escuchas mejores momentos, aunque estén repetidos, tú dices, ¡ay, qué buenos son!
Sí.
Este programa es buenísimo.
Todos son mejores momentos.
El efecto tráiler de una película, ¿no?
Que todas son buenas y luego vas y desvagan mierda.
Es una ilusión óptica, entonces, auditiva en este caso.
Entonces, cuando acaba el verano, tienes muchas ganas de recuperar a esos dos.
Sí.
Porque en tu mente se ha plantado la semilla de que todo lo que hacen es bueno.
En cambio, nosotros estamos sirviendo mediocridad semana tras semana, ¿vale?
Llega septiembre y nadie te echa de menos, que es lo que pasaba antes.
Te echan de más, a lo mejor.
Claro, dice, bueno, ya está otra vez con la misma mierda.
Incluso la gente pensando, ojalá pudiera escuchar un resumen, pero esto no se lo estamos dando.
Entonces, estamos haciendo daño al programa, haciendo daño a la radio y a otros presentadores
que yo creo que van a empezar a, yo qué sé, Ángel Barceló un día va a venir a tu casa
y te va a dar una hostia.
Sí, no, no, no.
Que te va a decir.
El día me lo encontré por el pasillo y casi me gira la cara, ¿eh?
Claro.
Como pensando, mira, ya está aquí el esquirol.
Claro, estáis reventando el mercado.
El que no para.
Entonces, lo que yo propongo es, a ver qué os parece, a mí me parece lícito, el año
que viene vamos a parar los dos meses de verano, como debe ser.
Hostia, qué decisión más fuerte.
Julio, y agosto se para y se recupera también los dos veranos que hemos estado trabajando.
Entonces, se añade, ¿no?
Aquí todo el mundo con la boca cerradica mientras había programa nuevo, pero ahora
lo vas a pagar en 2024.
Ahora quiero ver tu fidelidad.
Ahora, ahora, ahora.
Dos meses por el año 2023, dos meses por el año 2022 que se van a contrapechar unos
con otros, entonces nosotros pasado Semana Santa ya paramos el año que viene y nos reincorporamos
en noviembre.
¡Joder!
Claro, porque metes también el verano natural.
Y Ramón, que me ha dicho por línea interna, me como yo la mierda.
Efectivamente, Ramón, tú preparas, pues, ¿cuántos programas especiales?
¿Cuatro por seis?
Veinticuatro programas especiales.
Anda, que no hay buenos momentos si los buscas para llenar veinticuatro.
Yo esto es lo que pongo encima de la mesa.
Sí, no, para empezar la negociación, ¿no?
Para empezar.
No, no, no.
A negociación acabada.
Ya, vale, vale.
Para la cara de perro vas, ¿eh?
Vale.
Oye, yo, por supuesto, siempre contigo, amor, solo en aras, quizás, de programas especiales,
¿sí?
Sí, sí.
Y si no, pues un abucheito de estos que trabajáis también, ¿eh?
Sí, sí.
En vuestra casa.
¡Uh!
Y el rato que queráis hasta que os quedéis sin aire.
¡Uh!
Y caigáis al suelo, eso es, caiga la tapa del pecho al suelo.
Efectamente.
Por supuesto, siempre contigo, amor, solo en aras, quizás, de pronosticar algo.
Te quiero recordar que no hemos firmado el contrato el año que viene.
A ver, está bien, eso está bien, es un dato que no manejaba.
No lo tenías, ¿no?
No lo tenías, lo digo porque a lo mejor con esta información que has dado nos mandan
a la mierda a ti y a mí y acabamos en, pues yo que sé, ¿sabes?
En rock FM, ¿no?
A lo mejor, ¿no?
Bueno, lo voy...
Bueno, oye, mira, no sé.
Lo voy a reflexionar, pero...
No, ya está, ya lo he reflexionado, sigo en la misma posición.
Vale, vale, vale.
Lo vamos viendo, ¿no?
Lo sepas.
Que es algo muy español.
Ya lo vamos viendo si eso.
Ya lo vamos viendo si eso, exactamente.
Venga, va, venga.
Me sirve esta música para contarte una Bebegdota, pero no me pongas Bebegdota, que ya me va
bien esta.
Pues no me coge mi mujer el otro día, dice...
¿Te coge en el sentido latinoamericano?
Si no...
No, no, no, no, no.
Buah, vaya a tiempos.
No me hagas hablar, no me hagas hablar.
Que un domingo y dice, oye, prepárate que vamos a cenar a un sitio que he pensado
por a ti.
¿A qué hora?
Ahí viene una cosa.
A las seis y pico.
No, no, mal, mal.
Y dice...
Mal, no hay margen.
No hay margen.
No, no, ya, ya, dice...
Y además habíamos comido fuerte, ¿eh?
Veníamos de comer en un chiringuito, eso guarro, bien, ese calamar, bien, bien, de aceite.
Sí, sí, sí.
Sí, sí, sí.
Ese ardor, ¿no?
Sí, sí.
En mi cabeza ya estaba solo...
¿Yogurt?
O sea, en mi cabeza se veía un yogur, que era como el sol de los Teletubbies, yo veía
un yogur en la noche, ¿no?
Y decía, esta va a ser mi noche.
Y dice, prepárate que tenemos que ir a cenar a un sitio.
Bueno, yo siempre muy solícito.
Ya me conoces.
Yo nunca pongo problemas.
Tú siempre a favor.
Yo os digo, yo, Silvia, no tengo hambre.
No tengo hambre ahora y creo que a las siete no voy a tener hambre tampoco.
A quedan las seis y media.
Bueno, cinco y media, seis y tal.
En media hora no te veías, tú...
No, no me veía.
Y suelta un argumento incontestable.
Dice, es que vamos a un sitio que si tú no quieres comer, pues no comes.
¿Hombre?
Sí, ¿cómo estaría yo de empanao?
Que me pareció bien.
Me pareció bien, dije.
¿Cuánto de restaurantes este?
La primera vez que lo veo.
Sígueme en este viaje mental.
Que va a ir avanzando.
Digo, bueno, mira, vale.
Además, nos vemos poco.
Digo, como para ahora, yo entraré en conflicto.
¿Con tu mujer?
Sí, está trabajando fuera ahora.
Así va y viene y tal.
Bueno, ahí dije, bueno, pues...
Yo no entiendo muy bien, pero vamos.
Y rapidito, rapidito, ¿eh?
Digo, bueno, rapidito.
Es domingo, son las cinco y media.
Donde está la ansia, ¿no?
Dice, no, venga, venga, venga.
Venga, venga, venga.
Venga, pum, pum.
Y dice, vamos en moto, ¿eh?
Vamos en moto.
Porque hay que ir en moto.
Digo, ah, bueno, que es un restaurante para motoristas,
a lo mejor, de ángeles del infierno, pensé.
No, no, no, hay que ir en moto, hay que ir en moto.
Y yo te voy guiando.
Y para las ramblas, para las ramblas.
Ay...
Misteriosa, ¿no?
Sí, sí, sí, sí.
Pero, bueno, yo, de verdad,
que también me da por reflexionar
cómo ya me he compenetrao con ella, que pensé, me abandoné.
¿A ti no te pasa que cuando tu mujer decide, tú no piensas?
Sí, prácticamente eso es una definición de mi matrimonio.
Vale, perfecto.
Vale, a mí me va muy bien, porque hay que decir,
no lo disfracemos de crítica, porque muy bien.
No, no, alguien tiene que llevar el timón.
Al volante, ¿no?
Sí, sí.
En este caso, yo iba al manillar y ella detrás.
Tira, tira, tira, rambla, rambla, rambla.
Dice, para por aquí, para por aquí ya.
Para, en la mitad de las ramblas,
mitad más o menos, ramblas de Barcelona.
La parco allí, bien.
¿Te vendó los ojos?
No, no me vendó los ojos.
En ese momento, ¿eh?
No en la moto, que eso ya sería muy...
Porque no tenía aire de gran sorpresa.
Vale.
Todos respiraba una idea que yo pensé,
mira, qué mona, porque como está fuera tanto tiempo,
pues quiere que estemos juntos ella y yo.
Sí, sí.
Yo me agarre ahí.
Qué bonito.
Yo me agarre ahí.
Ya me extraño que viniera mi suegra, por sorpresa.
Dice mi suegra.
Apareció allí en las ramblas, entiendo.
No, no, apareció en casa previamente.
A ver, explícamelo de la moto.
Ya.
Ahí...
No, no, no.
No íbamos como en Calcuta.
Mi suegra y mi...
Mi esposa y yo.
No, un sidecar.
No, era...
No sabía que había un sidecar.
No, ahora...
No, no.
Mi suegra era el sidecar.
Eso me gustaría mucho.
Ahora, Santras, pues vino...
Llegó mi suegra y dice, mira, que se queda con la niña,
porque tú y yo vamos a un restaurante.
Vale.
Hija, mira, qué bien.
Suegra, niña, mujer y tú, restaurante, moto.
Todo me encaja.
Ramblas, centro.
Ramblas, centro.
Fué gran niña.
Sí, mosaico de Miró.
¿Lo ves?
Dice, aparca aquí, pum, bajamos,
entonces vamos tirando tal.
Y veo en el teatro del Liceu,
la movida de siempre que hay en las ramblas,
y yo iba fumando, por lo que fuera.
Y me dice el...
Uno que estaba como en unas vallas allí fuera,
dice, no puedo entrar fumando, ¿eh?
¿Al Liceu?
Sí.
¡Hombre, hombre!
No, ya, ya, ya.
¡Hombre!
¡Hombre, al Liceu, no!
No, no, no.
Yo le iba a decir...
Te revisan por si llevas piedras de Yesca también.
No, no.
Yo le iba a decir,
¿usted no sabe en una tormenta donde se están más seguros
donde ha caído un rayo?
Digo, pero no lo va a entender.
Ni yo.
No.
Donde ha habido el incendio, no va a haber otro.
Bueno, ya.
Y yo le digo al tío,
porque ya estaba un poquito nervioseta,
yo digo, es que no voy a tirar de cigarro
porque no voy a entrar.
Ya subí el tonito.
Y Silvia poniendo caras de...
Y dice, Silvia...
Sí que vas a entrar.
Sí, vas a entrar.
Ah.
Y digo...
Sorpresa en el Liceu.
Sí.
¿Representación de Aida solo para ti?
No.
¡Bob Dylan!
¡Ah, ahí está!
¡Bob Dylan!
¡Aquí!
Ya hay que decir...
No os aburriré,
porque seguramente habréis leído las crónicas
de Bob Dylan en Barcelona.
No tenía ni idea que había estado Bob Dylan en el Liceu.
No, ni yo.
Bueno, hasta ese momento.
Sí, estuvo los días de San Juan,
estamos remontándonos a junio.
Sí.
Estuvo la noche de San Juan,
con dos cojones, la más celebrada en Cataluña,
y dijo, yo voy para allá, igual.
Y el día siguiente, 24.
Y nada, que fui a ver a Bob Dylan, tío.
Hostia, qué bueno.
¿Y qué tal?
Estuve a 110 metros de él.
Durante dos horas.
Son muchos, ¿no?
Él no me vio, ¿eh?
Él no me vio.
Sí que es grande el Liceu, ¿no?
Bueno, estaba en la platea,
yo calculé esos 80 metros, 70, no sé.
Sí, sí, calculados por ti.
Igual estaba a 20, pero...
Bueno, no sé.
Es que no puedo hacer los pasos.
Uno, dos, tres.
Hasta llegar ahí y tocarlo.
Ya está.
Y, oye, pues nada, muy bien.
Ya sabéis la movida, ¿no?
De que te ponen el móvil en una funda de neopreno.
No, no sé nada de esto.
Hombre, este hombre ha dicho que no quiere un puto móvil.
Que ya está, que se acabó la tontería.
Sí.
Tú entras en una fundita de neopreno,
ellos te la sellan.
Y luego, si tienes una emergencia,
hay una zona que se llama de Free Mobile,
por si tú quieres llamar.
¿Y te lo guardan ellos?
No, no, lo llevas tú en el bolsillo.
Pero con la bolsilla.
Sellado.
Y cuando sales, cracka, te lo desean.
Eh, yo lo haría en todos.
Sí, ¿no?
En todos los teatros.
Sí, sí, esto como se imponga, tal.
Y luego, muy bien el tío, pues todo el mundo.
Yo iba con una expectativa que generé en ese momento
de, uy, cuidado, como dirán que tiene una mala follá,
que no reconoce las canciones,
que se pone de espaldas al público.
Hay una leyenda como...
Pues era Miles Davis, ¿no?,
que se ponía de espaldas al público.
Este también lo hace.
Decían que se ponía como un tres cuartos girao.
Ah, vale, vale.
Que nos saludaba y tal.
Y bueno, pues salió un señor.
Porque es alucinante estar delante de una leyenda como él
donde se le celebra absolutamente todo.
Yo no había visto un concierto así en mi vida.
Todo el mundo esperando el caracoleo de la voz
que él por alguna razón, bueno, por alguna no,
tiene 82 años.
Que oye bien.
¿Cuál es el caracoleo?
El caracoleo, sí.
Él está en imitación básica.
¿Por qué has quitado la funda del micro?
Para ganar matiz.
Ah, vale, gracias.
Es como descorchar un vino.
A ver, a mí también me pasa.
Hostia, qué matiz, ¿no?
¿Ves?
Él está en el...
¡Hola!
Él está en el...
Cuando él hace...
La gente...
Te lo juro.
O sea, se celebra...
Como si lo estuviera viendo, ¿eh?
No, está haciendo como un rapsoda.
Una formación mucho.
Y cuando él alarga una notita...
La gente hace...
¡Hola, estos huevos!
Bueno, porque ves que sube.
Está muy rapsoda, muy bien.
El tío hace su último disco.
Yo te llego a una conclusión, no os quiero aburrir,
de que él no va de gira.
Tú vas a sus conciertos.
Claro, claro, claro.
Como hace esa gira que no se acaba nunca,
que se llama el Neverending Tour, que no para.
Que él no para.
No está bien en casa.
Bueno, pues como nosotros...
Como nosotros aquí en la radio.
Sí, sí, sí, sí.
Exacto.
Pero aquí no celebra nadie nada, aquí a buchear.
Sí, sí.
Hablé una vez con un mítico artista español
que se retiró y digo...
Mira, Dylan no se retira.
¿Qué le pasa a Dylan?
Digo...
Bueno, no sé qué le pasa, pero no se retira.
Y me dijo...
Es que este no está bien en casa.
Bueno...
Neverending Tour es que...
Tú tienes esa sensación de que él está
con sus colegas presentando su último disco.
Y por lo que sea, tú apareces allí.
Y tú apareces, pagas un dinero y estás allí con él
y tienes el placer de estar delante de la historia de la música.
Hostia, qué bueno.
Muy bien.
Se levantaba de vez en cuando, está en un piano.
¿Debo decir algo a esto que no me ha...?
Bueno, no sé, es igual.
Yo creo que no toca bien el piano.
Pero a ver, ¿quién le dice a Bob Dylan?
No, a lo mejor es...
¿Quién tiene los huevos de decirle...
Bob...
Your piano is not okay.
Bob...
Your piano is...
Maybe better...
Maybe better piano.
¿Un piano man?
Pero a lo mejor es un honky-tonk de estos
que tiene una leve desafinación.
No, es un piano que él usa para...
Para andar casi, andar musicalmente dentro de la canción.
Se da una nota...
Hostia.
A ver, la definición de lo que estás haciendo
es un gato tirado contra la Torre Mar.
No, no, no.
Entre el piano que hace...
Y el que hace...
Hostia puta.
¿Sonaba a música o sonaba a que estaban apaleando un perro?
Sonaba muy bien y los que le siguen mucho acojonantes
dicen que fantástico.
Lleva con una formación muy buena, un batería buenísimo,
hace rock, soul, blues, esto, ¿no?
A ver, hay un tramo que dices...
Venga, vamos por arriba un poquito.
Creo que puedo decir, porque no pasa nada,
que Silvia se durmió en una canción.
Cabezazo, dio cabezazo.
No entiendo el aplauso, pero...
Bueno, porque es un público muy bronco.
Ya, ya, ya.
Terebran lo malo.
No, ella estaba...
Es verdad que estaba muy cansada con sus ensayos
y estaba apoyada aquí y pensé, mira, qué mona.
Y de repente veo el espasmo.
La caída.
¿Sabes el espasmito de empezar a dormir?
Y yo digo, Silvia...
Porque, claro, era un mantra, era casi una oración,
una misa, una misa de blues.
Y bueno, pues ahí, tío, muy bien.
Bueno, pues muy bien, gracias por compartir,
pero, por favor, ¿qué cenaste?
Ah, no, no.
Porque todo esto partía de vamos a cenar
a un sitio donde se come, yo quiero solo un yogur
y hemos acabado con...
No, no cené, no cené.
Ah, vale, pues entonces se cumplió tu deseo.
Sí, sí, sí.
Pues ya está.
El concierto dura casi dos horas, menos cinco minutos o así.
Sí, sí.
Así que me encontré a las 10 con, digo yo, el yogur, ¿sabes?
Bueno...
Bueno, en fin.
Pero nada, pues lo quería contar.
Pues muy bien, muchas gracias.
Vamos a seguir.
Vamos para acá.
Un momento, un momento.
A ver, ¿qué pasa?
Ya que estamos contando cosas,
quiero compartir con vosotros y contigo especialmente
algo que me ocurrió el otro día cuando volví a casa en moto,
¿sabes?
Que dispongo de una moto.
Sí, hombre, claro.
Que ya hemos hablado de ella, que me la he cambiado.
De segunda mano.
Sí, sí.
No, no, bien, bien.
¿Qué pasa?
Era de una señora que no la usaba nunca,
que la tenía en el garaje.
¿Vas con una moto de señora?
Sí, bueno.
Sí, sí.
Es que son iguales, ¿no te has dado cuenta?
Sí, sí.
Son iguales.
Tienes razón.
Que antes había una diferencia entre las bicis
de chico y de chica,
que la de chica tenía como el palo más alto,
como para tener que abrir las piernas.
No, al revés.
Tenía como...
Ah, para...
Para no tener que abrir tanto.
Ah, vale, vale.
Me parece mal.
Bueno...
No, me parece mal.
Que todos tengamos que hacer lo mismo.
A mí también me cuesta abrir las piernas.
Sí, sí, sí.
Es verdad, es verdad.
Yo me he caído bajando.
Diría que morfológicamente igual hasta me cuesta más.
Por cómo está montado el sistema.
Yo me he caído bajando.
Porque no tengo, digamos...
No está pre...
Me entendéis, ¿no?
Sí, sí.
Vale.
Yo me he caído de la bici de montaña.
Me tengo fuella, dice Ramón.
Ramón, ponte el micro que se te haga.
Hombre, qué buenísimo todo lo que dices.
Oye, Berto.
Yo tengo una bici de estas
que me puso el sillín alto
porque leí que tenías que ir con la pierna estirada.
La pierna estirada.
Al dar el pedaleo, la pierna estirada.
Pues paré en un bar a tomar un café y me caí.
Y claro.
Y me dijeron, ¿estás bien?
Digo, no, es que yo bajo así.
No, no, no.
Joder, es que es muy difícil bajar de la bici.
Bueno, pues cuando voy a casa...
Sabes que en la zona que vivimos
de vez en cuando hay jabalíes.
Jabalíes que están pasando un mal momento
porque se han puesto todos los contenedores anti-jabalí.
Antes ellos llegaban por la noche,
volcaban todos los contenedores
y empezaban a comer allí como jabalíes.
Y ahora se han encontrado
que no pueden tumbar los contenedores
y están de mala hostia.
Están...
Te miran raro.
Siempre te miran raro.
El jabalí tiene un mirar muy raro.
No se agradeció.
Pero notas que hay como una mirada de humano.
No nos estamos entendiendo.
Claro.
Y soy un jabalí.
Soy como una máquina de coser con patas.
Te puedo reventar.
Esa mirada está.
Sí, sí, sí.
Entonces yo voy con la moto por arriba
y de repente veo una papelera
de estas de...
¿Papelera?
Sí, urbana, ¿no?
Es como un cilindro.
Como un R2D2, ¿no?
Esa es.
Hay como un palito que sostiene este cilindro.
Y veo una figura puesta en la papelera
que yo al principio no supe leer muy bien que era.
Porque estaba a dos patas,
a dos paticas, las dos patas de adelante
apoyadas en la papelera y rebujando con la cabeza.
Era un jabalí a dos patas rebujando.
Como el culo de un rockero, ¿no?
¿Sabes?
Tenía culo de rockero, ¿no?
Es que a donde voy a ir a parar no te va a gustar,
pero tengo que ser sincero contigo.
Ya, ya.
Yo, primero veo esta figura
y no leo muy bien la imagen.
Digo, hay una persona muy rara.
Bajita, bajita.
Bueno, bajita.
Hombre, para encaramarse una papelera.
Sí, sí, pero ahí pues te cita.
No eres Pau Gasol, quiero decir.
Y entonces, a la que oye el ruido, gira la cabeza
y entonces veo que es una cabeza de jabalí,
un cabezón enorme, me mira,
así que he puesto hacia arriba.
Qué impresión, ¿no?
Me asusté mucho, pero lo peor que ocurrió,
y esto es lo que no te va a gustar,
es que durante un microsegundo me hizo recordar,
o sea, pensé en ti.
No, no, no, que no es...
No te quiero faltar, pero sabes que yo te he visto desnudo.
Sí, sí, sí.
Cuerpecito del jabalí, así puesto,
con las paticas.
Hubo un momento que...
Pero, pero...
No pensé, hostia, el Andreu desnudo,
mucho más peludo de lo que yo le recuerdo,
hurgando en la basura, pero hubo un momento...
Qué mal está la cosa, ¿no?
Durante un microsegundo me vino un flash.
Ya, ya, ya.
Bueno, mira, yo sí, para reír bien...
A mí me ha ofendido un poco esto.
Que lo entiendo.
Nada, me va a durar poquito, pero...
No había visto nunca un jabalí.
Yo te lo dije, que tu cuerpo parecía el de un...
Sí, sí, sí.
¿Sabes? Un pitbull francés puesto de pie.
Es verdad que tengo poco culo.
Pues es eso, como así...
Sí.
Bueno, bueno...
El...
El tono físico, el...
Sí, sí, el tono, sí.
Como el carácter, el girarse...
Sí, sí.
La actitud.
Sí, sí, sí.
Y no pensaste, mira, ha sacado mi nariz, ¿no?
Bueno, vamos a hacer una pausa y intentamos calmarnos.
La cosa está mal hoy, ¿eh?
Oye, mal rollo.
Sigue a Nadie Sabe Nada el Instagram, Twitter, TikTok, Facebook y YouTube.
Tenemos canales por encima de nuestras posibilidades.
Bueno, bueno, vamos a intentar calmarnos un poquito.
Yo ya he bajado lo que tenía que bajar.
A ver, ¿cuántas veces te he faltado a ti físicamente?
Sí, hombre.
¿Y qué pocas tú, no?
Claro.
Teniendo incluso más razones para hacerlo.
Sí, hombre, por supuesto.
Una cosa que ocurrió la semana pasada y creo que es importante.
Sí.
No sé si lo recordáis, no lo recordáis.
Porque, por lo que sea, no se ha emitido aún.
Sí.
Andreu, pusimos el audio del pedo de Wisconsin,
que es un clásico de este programa, que es...
Ramón, si lo tienes por ahí lo podemos recordar.
Es un señor que en unos grandes almacenes
agarra un teléfono de estos para hablar por megafonía,
se lo pone en el culo y suena...
Vale.
Esto para mí es uno de los hitos de la comunicación mundial
que va a marcar una época.
Es más, ahora que mandan al espacio sondas con información
para que conozcan la raza humana,
yo mandaría una solo con esto.
Y que cuando la alienígena abre la velnana se oiga...
Se oiga esto, ¿ves?
Abre la nave...
Y ahora bajas y tienes cojones.
Ven a la tierra, ven, ven.
Bueno, entonces, Andreu y yo nos engorilamos
con saber qué notas formaban musicalmente
este sonido.
Oye, oye, vas a contar eso, qué vergüenza.
Se lo pedimos a Pirata en directo.
Qué vergüenza.
No, no, no, si es que no os preocupéis
porque es que no va a ningún lado esto.
Se lo pedimos a Pirata.
Pirata no podía...
No contestó en ese pirata nuestro amigo, el músico.
Y cuando acabamos el programa nos dimos cuenta
que esto ya lo habíamos pedido en su día en el programa,
con lo cual es la constatación de que esto está muerto.
Sí.
Esto se ha acabado.
Hace años se ha acabado el programa.
Estamos repitiendo los mismos.
De vez en cuando uno ve un jabalí, le recuerda al otro
y bueno, eso es contenido nuevo.
Pero vamos...
Pero muy poca percha es la que aguantar semejante traje,
¿me entendéis?
Entonces, con lo cual, llegados a este punto,
entiendo la bucheo, perfectamente.
Encima que vengo a hacer material reciclado,
llegar tarde, lo entiendo perfectamente
que estáis enfadados.
Yo me había ido...
Aquí hay que subrayar la profesionalidad de Pirata
o quizá también que está peor que nosotros
porque le llamamos mucho tal, tal
y al final él me mandó este mensaje,
el primero que llegó.
Me cago en la puta leche, tío.
Me había pillado fuera de juego.
Estaba grabando en el estudio y tenía el teléfono en silencio.
Es un sinatural.
Un sinatural como una casa grande.
Un pedo en sinatural.
Maravilloso, por cierto.
Sí, un pedo en sinatural.
Pero no te dijo que ya lo había hecho.
No, porque ni él lo sabe.
Pues esto es otro síntoma de problema.
Esto es la gente que no se atreve a decirle a alguien
que ya está dando señales.
¿Hay esa gente mayor que te cuenta lo mismo otra vez?
Claro que sí, abuelo, claro que sí.
Y por respeto, por cariño no se lo dices.
Pero está bien que nos demos cuenta.
Nosotros estamos ahí ya.
Oye, ¿y si llevamos siempre unos caramelos en el bolsillo
para cuando veamos gente?
Toma un caramelito, hombre.
Me parece perfecto.
Y el otro día en el AVE se cagó a alguien.
Te lo juro, en el AVE que yo iba,
que este también me lo ha apuntado.
Un sí, un sí natural, ¿no?
Sí.
20 de junio de 2023.
Fíjate de cuándo estoy hablando.
Que no he sacado el tema hasta ahora
porque de lo que me impresionó.
Todavía puedes olerlo, ¿no?
20 de junio de 2023.
A lo mejor porque como tienes esa nariz se almacena el olor.
No me jodas.
No, yo digo que se almacenen registros
en toda la carcasa tuya.
¿Sabes dónde se me almacenan a mí registros?
No, no, no.
Vale, vale, pues nada.
Pues llegó un momento que estando en el AVE
me vino una bocanada
que inmediatamente dije
no puede ser, no puede ser,
es inequívoco
que alguien se ha cagado,
pero big time.
A todo lo que da, a todo lo que da
en este vagón porque salí fuera
y al volver a entrar era madre mía
y no podía, madre mía
y no podía ser
que se hubiera mezclado
con olor, con pedo, con lo típico
que a veces...
Qué agradable este tema.
No, pero a veces en un vagón del AVE
pues se crea una alquimia, se crea una
maestro perfumero que dice mira pon unas gotas
unas gotas de ajenjo, un poquito de tal
y sale una fragancia.
No, aquello era inequívoco
y yo venga a mirar para todos lados
y alguno me miraba y sonreía, ¿qué pasa, Alberto?
Y yo con cara de no, ¿qué pasa, Alberto?
¿Ha sido tú? ¿Te has cagado tú?
Con la mirada, todo el rato con la mirada, ¿ha sido tú?
A ver, dame las manos, ¿no?
De verdad, una cosa insoportable
¿Qué te costará salir un momento?
Pero una persona que estuvo
yo no vi a nadie salir corriendo con la mano detrás
ay, ay, ay, no, no, alguien
se cagó y se quedó allí todo el viaje
y esto ocurrió en el AVE
Pues muy bien, muy bien
Muchas gracias, Alberto, necesitábamos saber eso
Alguien ha levantado la mano
Venga, pues va
¿Fuiste tú?
No fui yo, no fui yo, de verdad
¿Cómo te llamas? Adrià
Pero me he quedado con la anécdota del jabalí
y os he traído una cosa
que también me recordó al escroto de Andreu
Al escroto de Andreu, pero si no lo has visto
Madre mía, qué programa, vaya tono va cogiendo
¿Qué pasa, nen?
¿Cómo estás?
Yo paseaba por La Habana
y cuando vi este instrumento
Uy, paseaba por La Habana, mola
Pero vi este instrumento y pensé
hostia, se parece al remate
Y me he dado el monedero con la piel cosida
Ah, es una maraca
una maraca con costura
Una maraca con su costura
Y lo vi muy tensado y pensé
a lo mejor con 80 años, si ya es todo más grande
¿No te dio por pensar en tu vida?
El lugar del orgullo de Andreu
Pero me gustáis tanto que os tenía en la cabeza
Ya, ya, tío, pero estás en La Habana
en un paraíso, ves unas maracas y piensas en mis testículos
No estás bien tampoco, ¿no?
No del todo, pero
Bueno, qué guay
¿Y nos las regalas?
Sí, claro, claro
Hombre, tío, muchísimas gracias
Gracias, guapo
Pero van atadas
Entonces es la famosa
hamaca de gemelos que solo podemos tocar
La maraca en un chaco
Sí, sí, qué bonitas
Ay, cuidado
Bueno, si te parece
¿Leemos alguna pregunta de la urna?
Vamos a ver
Uy, ha cogido una y luego la ha desestimado
Hostío
A ver
Hostío
Rocío desde Córdoba
Uy, uy, uy
Uy
Dice, hola Berto y Andreu
Como soy muy curiosa
y de tanto escuchar que estáis en la calle Caspe
de Barcelona

Un día me dispuse a buscaros en Google Maps
por echar el rato
Mi sorpresa
Hostia
Mi sorpresa
¿Qué pasa?
Es que lleva una foto impresa
Mi sorpresa fue mayúscula cuando vi lo que aparece
en la imagen que acompaña este texto
Samantha hermanos es la puerta de la radio
y estamos Andreu y yo
¿En serio?
¡Oh!
A ver
Hostia, qué bueno
Y yo me estoy liando un piti
No, no, no, no
Yo no soy este
¿No?
Yo creo que
¿No es una chica?
¿Es rosa?
¿Podés que sea rosa?
¿Pero él sí que soy yo?
Sí, sí
Parece que sí
¡Hala, tío!
¡Qué miedo!
Ya
¡Qué miedo!
Las cámaras todo el rato
Está emburrullado el, ¿no?
Emburronado la cara, ¿no?
Pixelada
Ha pixelado la cara
O sea, Google te pone
pero te pixela un poquito la cara
Sí, pero mira, este le han pixelado la calva
que no hacía falta tampoco
Tío, ¿qué pasa?
Un tercero
¡Qué miedo!
Hostia, qué miedo
Bueno, bueno, bueno
A mí me he quedado mal para toda la semana
Madre mía
No puedes hacer nada, ¿eh?
No, no, no puedes hacer nada
Has inmortalizado ahí
¡Qué horror!
Oye, ¿nos piden filosofía barata
que hace tiempo que no la hacemos?
Sí, la semana pasada
Ah, vale, vale
Bueno, porque ya sé que pasa
que nos da un poquito de pereza
Bueno, porque es una sección muy complicada
porque yo todavía no entiendo
qué hay que hacer en ella
Ya, pues llegamos diez años, ¿eh?

Vale, vale, vale
Necesitaría diez más
Bueno, eso sí
Venga, vamos allí
Esto sí se dice que hay que hacerlo

Hay que bajar el tono
Hay que desearse, Samanté, hermano
Samanté para ti, hermano
Mucho para ti también
Samanté con un poquito de hielo, si quieres, para verano
Sí, sí
¿No?
Como granizado
Samanté frappé
Frappé, incluso aquí
Dice Quimo desde el Masnou
Gracias por este espacio
Gracias a ti por tus palabras
Vale
Filosofía barata
Punto y coma
Mira que bonito
La gente ya no usa el punto y coma
porque no sabemos cómo usarlo
Sí, hombre, punto y coma muy necesario
¿Vosotras usáis punto y coma?
Muy necesario
No, no digáis que sí porque es que no
Sí, yo lo uso
¿Quién usa punto y coma?
Yo lo uso

Cuando la frase es muy larga
y pienso, esta coma
cuando digo, la coma me sabe a poco
digo, va, punto y coma
¿Serio?
Sí, yo lo uso así
Yo no lo uso nunca
Porque el punto es como se acaba la frase

Pero a veces no se acaba la frase
viene otra pero la coma es
Yo estoy muy loco
Yo pongo punto donde hay comas
¿Ah, sí?

Me gusta hacer como
una escritura como de realismo sucio


¿Qué quiere decir?
Bueno, pues
Fui a ver a Bob
Punto
No, no
Tenía hambre
Punto
No, como un telegrama
Esto lo hacían esos escritores
Yo como todo lo que había me meo

Pues pongo punto
Y luego me aburro a mí mismo del punto
Digo, venga, la coma
Pero punto y coma no
Pues igual
Filosofía barata
Punto y coma
¿Hay algún lingüista en la sala?
Quique va a ver
No, no, oigan
Para que nos diga exactamente
cómo se usa el punto y coma
¿Alguien lo sabe?

Atención
No lo uséis
Atención porque viene
Si no sabéis, no uséis
Dice
¿Qué nos hace humanos?
Con tono, con tono, con tono
Con tono, con tono
E
E
E
¿Qué entero diofónico llamarla?
E
La duda
Efectivamente
Dudar
Dudar es de humanos
Un perro no duda
Un perro no te conoce
Punto
Te muerde los huevos
Punto
El humano dice
Bueno, le muerde a los huevos
Pero vamos a ver
A lo mejor
¿Sabes?
Es pariente
Dudar
Dudar es procesar
Dudar
Dudar es vivir
Me ha
Me ha encantado la sección
Es que no tengo nada
Pero si no la quieres hacer
Tú dímelo
Pues si ya te lo he dicho
No, pero
Me has empujado a la sección
Ahora la gente le está gustando
que tú no la quieras
Sofía
Ya, claro
Porque la gente como es gratis
Estamos ahí
Está igual todo
Me ves sufrir
Eso les gusta
Pero es que no sé qué más añadir
Dime un rasgo
Estoy de acuerdo

Dime otro rasgo de humanidad
Está sufriendo, Alberto
Resopla
La
La
Sudar
Dudar y sudar
Bueno
También es humano

Porque al no haber pelo por todo el cuerpo
Bueno, hay casos en los que sí
Sí, sí, sí, claro
Menos yo por las noches, ¿no?
Dudar y sudar
Para mí es el
No sé
No me está haciendo bien
No, no, esta no te va bien
No, no me va bien
Así como otras te van muy bien
Pues esta no
Salgamos
Salgamos y volvamos a la vida normal
Volvamos a la vida normal
Uy, uy, uy
Aquí hay una turra interesante
Desde Tenerife
Tiene una, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete
Ocho líneas
¿Apetece leer una de ocho líneas?

Venga, léela, que no quieres
Pero no
Ha hablado el gandul
Y la gandula que tenéis dentro
Porque no sabéis que hay
Ha hablado la de ocho líneas
Hostia, ocho líneas
Son una
Bueno, pues mira, la voy a leer
Carla desde Tenerife
Pues así se vivía antes
De las redes
Leyendo cosas largas
Pome música de turra, hombre
Y más
Hasta libros
Sí, sí
La turra
Muy bien
Samanté para Laura Carla
Desde Tenerife
Hace unas semanas
Enseñé a mi abuela
De ochintisiete años
Muy bien
Ochentisiete
Muy bien llevados
Un vídeo donde
Aparecía Infinito de Córdoba
Bueno
Ya está
Bueno, chicos, lo que hay
Vídeo que tuve que parar
Ante la amenaza
Palabras textuales
Quítalo que me meo
Esa señora
Pero para rematar
En días posteriores
Mi abuela vino a mi habitación
Y me preguntó
Que si podía ponerle el vídeo
De Infinito
No
Lo que me hizo no poder
Disimular las risas
Imaginándome una conversación
Representada por vosotros
Ah, porque le dijo
Ponme Infinito de Málaga
Le dijo
Bueno
Y dice
Me gustaría ver una conversación
Entre Infinito de Córdoba
E Infinito de Málaga
Ella cree que es una
Raza
Que se reparte
Por el territorio Andaluz
Y que cada provincia
Tiene el suyo
Gracias, gracias, gracias
Por hacer posible
Tal, tal
No apareis nunca
No, no
Si es lo que estamos haciendo
Sí, sí, sí
Exactamente
Excepto el año que viene
Que va a venir
El paro brazo
Ya, ya, ya
Vas a flipar
Tú y tu abuela
Vas a fliparla
Tu abuela
Tu abuela
¿Quieres que
Que invoquemos a Infinito
Bueno

Estamos en la recta final
Del programa
Nos lo podemos permitir
Vamos a invocar
Con nuestra ouija
De la improvisación
Ya mira ya
Ya calienta, ya calienta
Ya se acerca
Por el pasillo
Imaginario
Ya está
Ya está
Ya está
Con su camisa
Entre abierta
Y palmeando
¿Cómo estás, Infinito?
Estupendamente
Con muchas ganas
De hablar
Con vosotros
Y en especial
A la abuela
A la abuela
De Tenerife
A la abuela
De Tenerife
A la abuela
De Tenerife
A la abuela
De Tenerife
De Tenerife
Que buena es rated
zenie
Solia bailacha
Oie
Oye
Ya no he entendido nada
Lo que has hecho
Obvio
Nabil lo que me toca
Los huevos
Fácil
a mí lo que me toca
Los huevos
que durante el aplauso tengo que seguir.
Oiga, ¿y el efecto...?
Lo que te iba a decir...
¿Y el efecto de que yo sude cuando lo hace usted?
...empatía se llama...
¡Joder!
Una cosa que no me ha gustado,
una cosa que no me ha gustado
es que a Bondi la le aguanta el caracoleo
y a mí, a mí, que me canto,
y toco un poquito...
No, no, no.
Cuidado, cuidado, cuidado.
Cuidado.
Voy a intentar hacer una cosa que no he hecho nunca,
que beber agua...
¡Oye, oye, oye!
¡Ay, Madre mía!
Bueno, madre mía, está mojado.
Si me pongo perdido,
me pongo perdidito de agua...
Bueno, infinito, no quiero abusar de usted.
Solo una pregunta, ¿le consta que tenga...?
¿Le consta que tenga un pariente en Malaga?
No, mira, somos...
Somos muchos de familia...
¿Cuántos hermanos eran?
Banzer, somos siete, uno se fue a vivir a América,
otro volvió...
Bueno, sí, en general...
...yo que sé que somos tanto, que no me acuerdo,
pero probablemente haya alguien en Malaga,
porque la tierra es muy bonita, nos gusta visitarla...
Gracias, infinito.
Adiós.
¡Adiós!
No me había pasado nunca en la vida
que yo sudara cuando lo haces tú.
¿Por qué será?
Puedo permanecer un rato en silencio.
Sí, sí, hombre, claro.
Madre mía.
Dice Santi desde San Boy,
si tuvierais que cambiar de compañero en el programa,
¿a quién elegiríais?
Un saludo, payasos.
Se puede hacer.
No se puede, no tiene sentido, que lo hagan ellos.
Dice Juan Antonio López García desde Zaragoza,
pregunta para Berto Romero como experto en frutos secos.
Buenas tardes.
¿En los cócteles de frutos secos a ti te gustan los pasas,
las pasas o eres normal?
Ay, qué tonto eres.
Estamos ya en la cadena C.
¿Estás tan tonto?
Sí, está un poquito, tranquilo.
La cadena C, Berto Seco.
Hola, ¿qué tal?
¿Cómo estás?
¿Te gusta la fruta seca?
Es una sección que yo creo que debería patrocinar Grefusa,
pero como no sale de ellos, pues yo lo digo, sale.
Vamos a esperar un poco, que tengamos 60 años, ya.
Adelante.
Yo no necesito sponsor.
Ya, ya lo sé.
He venido aquí a regalar mi sabiduría gratis.
¿Cuál era la pregunta?
Que si me gustan las pasas o soy normal.
Ya.
Mira, me he topado en mi vida con mucho purista del fruto seco.
Pasas la vida.
Con un rato de color...
Es para poner un poquito de música.
Pasas la vida.
Pasas la vida, una marca.
Como decía...
Me he encontrado con mucho purista del fruto seco,
mucha gente que confunde la radicalidad
con lo que es un conocimiento interno y profundo del fruto seco.
Cuando tú encuentras en un mezcladito...
Vamos a llamarle mezcladito
por aproximarme a vuestra terminología de usuarios.
Pero cuando en un mezcladito encuentras pasa,
normalmente el que entra en el fruto seco...
Estoy poniendo muy redamido.
No, pero bien, bien.
El que entra en el fruto seco por un poquito de buenas a primeras
gusta de lanzar esta butad de la pasa.
¿Qué hace aquí la pasa?
La pasa está puesta ahí.
Por algo, ¿no?
La pasa está puesta ahí con toda la putería
para que de vez en cuando la vayas encontrando
y tu cuerpo diga...
Dulce.
Como se te va un poco el sabor al dulce.
Dices, estoy en otro territorio.
Pero luego vuelve el fruto seco y entras con mucha más ganas.
¡Guau!
La pasa es el potenciador del sabor del fruto seco.
¡Qué juego sensorial!
Es un juego sensorial perfectamente.
También tengo que decir
que lo que se está llevando en tendencia ahora
vuelve el pistacho con fuerza.
¿Ah, sí?
Sí, vuelve el pistacho con fuerza.
¡Qué bueno!
Durante mucho tiempo,
sabéis que yo estaba muy atrapado en el anacardo.
Sí.
Sabéis que yo amo el anacardo,
que siento un poquito de nausea con el anacardo.
Sí, sí, sí.
Ya os lo he contado.
Anacardo, perdone que le pregunte.
¿Es el cacahuete que ha ido al gimnasio?
El anacardo es la realeza del cacahuete,
por decirlo de alguna manera.
Pero cacahuetea.
Cacahuetea, pero el cacahuete no anacardea.
Es que es muy diferente.
Sí, sí, sí.
El cacahuete siente como que es un poco un guanabí anacardo.
Sí, sí, sí.
Debe llegar, pero no puede.
Y el anacardo lo mira siempre todo con una cierta superioridad moral.
Y otra pregunta.
¿La piel de esa rosácea del cacahuete se come o no se come?
Esto va a gustos.
Si es usted un asqueroso, se la puede comer.
Vale, vale.
No, no, se puede comer.
Pero luego se queda...
Bueno, pero como la cáscara de la gamba.
Cuando usted come camarón, se come la cáscara de la gamba.
Porque si no, tiene que sacar unas pinzas y hacer microcirugía.
Pero entiéndame.
Comer camarón está muy cerca conceptualmente de comer piojos.
Lo dejo ahí.
¡Uuuh!
Bueno, bueno.
¿También eres experto en eso?
Es riquísimo.
No, aquí esta opinión no la valoréis porque en esto no soy experto.
Solo os digo una cosa.
Vuelve con fuerza el pistacho.
El que fue rey del fruto seco viene reclamando el trono.
Sí, sí.
Estamos ahí.
No habráis nunca pistacho cerrado.
Si el pistacho está cerrado, es como la almeja.
Ameja cerrada, pistacho cerrado, fiesta acabada.
Sí, sí.
Y nada, disfrutad.
Nos vemos la semana que viene con nuevas consultas.
Muchas gracias, Berto Seco. Gracias, hasta luego.
Últimos...
Últimos cinco minutos del programa.
Estamos emitiendo desde Barcelona, grabando esto en Barcelona.
Finales de... ¿Dónde estamos?
Junio, ¿no?
Agosto.
Bueno, pero ya emisión en agosto.
¡Calor!
Ya está.
Nadie calor, nadie frío.
Ya está.
Se acabó como una nocilla de dos colores.
Dice, hola, Berto y Andreu.
Aunque esto va dirigido para Berto...
Pues vaya día de curros.
Bueno, sí.
No sé si sabías que en Telegram hay un canal
que está usando el nombre y el póster de tu serie.
¿De qué serie?
Ah, no sé.
Dice, supuestamente para fans y para distribuir enlaces
para ver la pirata.
¡Oh!
No, es...
¡Oye, oye, oye!
Este es un tema... No me quiero...
Pero lo único que encuentras, que pueden peorar...
Son links de citas, vídeos porno...
y comentarios sexuales.
¿Qué opinas de este trato hacia tu persona, Sara?
Estamos hablando de mira lo que has hecho.
Supongo, sí.
De la serie que hice para Movistar.
Vale, yo me he encontrado con gente, no es la primera vez,
me pasó la semana pasada, a unas personas que me dijeron,
se atrevieron a decírmelo, yo creo que habría más gente
que me lo diría, pero estas se atrevieron a decirme...
Sí.
Tu serie la he visto, pero la he visto de forma ilegal.
Con esta voz temblorosa, ¿no?
Sí, y me dijeron, lo siento.
Y entonces yo fui sincero,
porque es algo que cada vez quiero serlo más en mi vida,
y les dije, mira, te voy a decir una cosa,
a mí me pagan por hacer la serie, no por reproducciones.
Hasta ahí puedo leer.
Yo no te voy a animar a que hagas nada ilegal, esto ya es tu vida.
Pero que cuando alguien ve la serie ilegal,
que no piense que yo lo voy a pasar mal,
porque es que hasta cierto punto,
si yo cada vez que alguien pusiera la serie en la plataforma,
recibiera un dinero, pues si me dices que la has visto ilegal,
a lo mejor llegábamos a las manos.
Porque es el dinero con el que compro la comida para mis hijos,
y con eso no vas a jugar.
Pero, ¿qué pasa?
Ah, que hay alguien que quiere hablar.
Pues que me interrumpa, claro que sí.
¿Me escucha?
Sí, no, claro, claro.
Hay una chica que es de la selección femenina.
No, tú habla de lo tuyo.
Selección femenina de Samanté, va con la camiseta oficial,
tiene partido esta tarde.
¿Sí me escuchan?
Sí, perfecto, lo escuchamos bien.
Les traigo un regalito de Costa Rica.
Es café el grano de oro, clásico de nuestro país.
Yo creo que entre café y pirateo, café, ¿no? ¿Qué hacemos?
Yo he perdido el hilo de lo que estaba diciendo.
Estoy en café.
Sí.
Espera, muchísimas gracias.
¿Qué tal estáis?
Todo bien, pura vida.
¿Qué tal estáis en Costa Rica, la ciudad por el resto del país?
Sí, sí.
Muy bien.
¿Qué pasa?
Hombre, tú vas por ahí y dices, soy de España, ¿y cómo vais?
¿Y tú hablas nombre de todos?
Yo sí, porque en ese momento soy el embajador de España.
Yo no me atrevo, no soy tan pretensioso.
Ya, bueno.
Muchísimas gracias, de verdad.
Bueno, pues aquí está.
Sí, ahora te lo recojo.
¿Está molido?
Sí.
¿Para italiana?
Eh, no sé.
Vale.
Yo lo pruebo y si sube, me lo bebo.
Y si no, pues tiro a la cafetería.
Si está sonando.
Quería hacer un paréntesis también.
Ella ha venido a lo suyo, o sea...
No, no, es relacionado a lo que antes mencionaron
de la imagen de Google Maps, porque venía para acá
y ustedes salen también acá.
¿Es otra imagen?
Es otra. ¿Puedo verla?
Sí, claro.
Pero, hombre, eso es como si estuviéramos todo el día
y venimos cada quince días.
¿Pero qué ha pasado aquí?
Sí, ahora sí que somos nosotros.
¿En serio?
¿Me puedo llevar tu teléfono un momento?
A ver.
Mira, ahora sí.
Mira.
Un poquito más lejos.
Ah, para la cámara, vale.
Un poquito más lejos.
Pensaba que es que odia a yo mal.
¿Aquí está bien?
Mira, estoy de espaldas.
Parece que el jabalí, ¿no?
Estoy como...
Estoy como jabalinao.
¿Pero por qué no coges un micro?
Vale, sí.
Porque si lo cojo yo no lo tienes tú.
Solo hay uno.
Hay dos micros.
Yo me levanto con uno.
Viene él, habla sin que se le escuche
y cuando le digo por qué no coges un micro, coge el mío.
Puedes proyectar la voz.
Oye, pero esto me hace pensar que los de Google Maps
están todo el rato fotografiando la puerta esta de aquí
para cuando salimos nosotros.
Es rarísimo.
Yo creo que sí, ¿eh?
Hay cierta trama ahí que podríamos seguir
de un graciosete en Google que dice a ver si los pillo.
O tiene varias y dice, me quedo cuando están ellos.
Venimos cada 15 días, esto es así.
Es mucha casualidad que pase el coche con el pirulo, ¿no?
Pasa un coche con un pirulo, ¿no?
Yo no he visto nunca el coche con el pirulo.
Nos dicen que acaba el programa aquí.
¿Tú querías decir algo?
Venga, rápido, dale el micro.
Pero muy rápido, tiene que ser muy rápido.
Ambulancia.
Quería daros esto.
A otro regalo.
Os hallo la palabra payaso y yo también soy payaso de oficio
y payaso de hospital y payapupas os regala esto.
Payapupas, hombre, una labor histórica.
Muchísimas gracias.
Muy bien.
Muchas gracias.
Soy el maestro del gremio, así que gracias por dignificar
la palabra payaso a través del insulto.
Me encanta.
Sí, sí, muchísimas gracias, tío.
Y además, esta cajita la vendías el pasado San Juan.
Bueno, la vendías, la regalaban, ¿no?
Había una incidencia que me sorprendió un poco.
¿Qué?
Nada, que solo las hacéis de talla única,
las narices de payaso.
Sí.
Simplemente.
¿Puedo preguntar si te haces un especial para ti o algo?
No, es que mira cómo me queda.
Mira qué cosa más rara.
¡Hombre, te queda bien!
Me queda bien desde delante, pero a la que me giro
está la nariz en cuenca.
Sí, es verdad, te queda como una prueba, ¿no?
Como la prueba.
Bueno, pues lo dejamos aquí.
Sí, me parece que es una imagen muy vital.
Si algún día queréis venir al hospital a trabajar.
Sí, sí, a trabajar. Yo quiero ir a trabajar al hospital.
O a vernos, me han dicho que os invite.
Muchas gracias.
Me gustó que el pasado San Juan yo fui a comprar cuatro petarditos
para la verbena, que, por cierto, no hemos tocado ese tema.
La semana que viene hablamos.
Y me dicen, ¿de regalo una nariz de payaso?
Y dije, hostia, qué guay. Se ve que había echado un acuerdo.
Pero me sorprendió.
Me quedé con esa nariz.
Me cuadra. Bueno, pues volvemos la semana que viene aquí.
Espera, ¿quieres que te haga Bob Dylan para acabar?
Sí.
¿Qué es eso?
¿Podrías hacerlo mientras rebúscas en una papelera?
Sí.
Claro.
Subtítulos realizados por la comunidad de Amara.org