En la cadena a ser vivectotas, hoy, Berto.
Me gusta trabajar bien.
Tenías un 50% de posibilidades de acertar.
Me gusta trabajar bien.
La cuestión es que estuve en Vigo actuando,
Vigo, una ciudad a la que quiero y que llevo en mi corazón.
Perfecto, que el aeropuerto de Vigo tiene su miga.
Cuando entras con el avión y ves como una ladera al lado,
te pones a la altura de las casas...
Esté aterrizando en Santiago.
Ah, bueno, entonces nada.
Santiago no me acuerdo.
Pegué de Vigo, con lo cual no me fijé en la ladera.
Claro, claro. Porque el despegar es...
Bueno, Vigo, Vigo.
Es la cosa.
Me ocurrió en Vigo una de las experiencias foto,
una nueva también.
¿Nueva? Algo que no había vivido.
¡Guau!
¿No está ya extensa la relación con el público?
Nuevo formato de foto.
¡Hombre!
Una persona viene y me dice...
¿Te puedes hacer una foto para mi amigo?
Ajá. Digo...
Bueno, y me enseñó una foto.
Dice, es este.
Yo veo la...
Ya esto, de entrada, ya me daba vidilla, ¿no?
Sí, claro, claro.
Y dice, ¿lo conoces?
Digo...
No, creo que...
Contrariado.
Digo, no, no...
Le sorprendió, ¿no?
¿Cómo que no conoces?
Es mejor, ¿eh?
Vienen dos giros.
¡Uuuh!
Dice... Digo, ¿de qué debería conocerlo?
Dice, de Barcelona.
Y él cree que en Barcelona nos conocemos todos, ¿no?
Pero es que viene otro giro mejor.
Digo, no, no, lo siento.
Y entonces él hace a demanda de marcharse.
Ya se gire y se va.
¡Ah! Contrariado.
No, no.
Y entonces yo le digo,
perdona, pero no hay fotos y no lo conozco.
Y hace...
Se marcha.
¡Muy bien!
¡Muy bien!
¡Sí, señor!
¡Sí, señor!
Me gusta, me gusta.
¡Sí, señor!
Me gusta, me gusta mucho.
Y me he quedado desde entonces
flashado con esta historia.
¿Podrías hacer un retrato robot de esa persona?
¿La tienes en la cabeza?
No, no me acuerdo.
Es muy mal fisonomista.
Es muy difícil eso.
Tendría que verlo con...
La foto de su amigo la tengo más presente.
Sí, la del amigo, digo.
Sí, un chico joven con barba.
Bueno.
Estaré alerta.
Está mal, vale.