Bueno, ¿qué pasa, Berto? ¿Cómo estás?
Bien, bien, ¿qué pasa?
¿De qué te rías?
Bueno, ¿qué pasa?
Te he dicho, ¿qué pasa?
Una forma de empezar un tanto...
Bueno, bueno, bueno.
¿No?
Sí.
Bueno, no, hombre, no, no, porque...
Temporada 12.
No, no, 11.
Yo creo que 12.
Que no, hombre, no.
Llevamos dos temporadas diciendo que es la 10.
¿Estáis tontos o qué?
Vamos a ver.
Solo cuento yo aquí.
Vamos a ver.
Técnicamente es la 11, pero ahora me dicen desde el control, ¿no?
Administrativamente.
Otro concepto nuevo.
Igualmente y moralmente...
Es la 10.
No, hombre, no.
Esto no.
Administrativamente, ¿no?
¿Sabéis dónde os podéis ir administrativamente?
No.
A la mierda.
No, no.
Nunca 10, porque la 10 ya la hemos mareado y magreado mucho.
Yo creo que sí.
En el peor de los casos es 11, administrativamente.
Joder, yo qué sé.
A ver si nos van a venir impuestos todavía del año pasado.
Porque yo administrativamente ya lo asocio a un tema impositivo.
Vale, muy bien.
Oye, yo te quiero comentar una cosa.
Yo estoy como nervioso.
Sí.
Tengo las sensaciones de un arranque.
De un arranque de época, de temporada.
Sí, sí.
La 11, la 12 o la 14.
Arranque de caballo parada de burro.
Correcto, correcto.
Y no sé cómo estás tú, pero yo me he levantado con un cuerpo de...
Yo, como siempre en mi carrera, igual que tú, pero un poco más tarde.
Ya, va, va.
Te has levantado más tarde, ¿no?
Sí.
Has llegado un poco justo, me ha parecido a mí.
No, he llegado.
Para lo que tú eres en puntualidad, digo.
Porque he bajado caminando desde mi casa.
Ah, muy bien.
A mí no cuesta abajo, como hacía Hitler.
Sí, sí, lo sé, lo sé.
Lo has comentado alguna vez.
Nunca cuesta arriba, ¿no?
Nunca cuesta arriba.
Ya.
Bueno, es que me ha sorprendido.
He llegado antes.
Digo, oye, que estamos en el bar de los...
¿Cómo lo llamamos?
Los educaos.
Los educaos.
Hay un bar que una vez nos trataron bien.
Y ya para nosotros...
Sí.
El bar de los educaos.
Son los educaos.
¿De dónde los educaos?
Pero te quiero decir una cosa.
Ya no trabajan los mismos.
No, no.
Y ya no son tan educados.
No son tan educados.
Sí, sí.
Porque justo te llamo
y te mando y digo,
estoy en los educaos.
Y vino y dice, ¿qué quieres?
Ya.
¿Llamamos los ex educaos?
Hombre.
Los ex educaos.
Vale.
Muy bien.
Bueno, pues supongo que eso es bueno,
tener estas sensaciones,
porque quiere decir que
nos seguimos respetando al público.
Sí.
Aunque a veces no se lo merece.
No, no, no.
Tener sensaciones es importantísimo
porque es una muestra de que no has fallecido aún.
Entonces, mientras sigas teniendo sensaciones,
sean buenas o malas,
alégrate, coño.
Ya es verdad.
Es que estás vivo y caliente.
Es verdad.
Mira, esto lo decía Jesús Ermida,
insignia comunicador.
Pero tardaba el doble, quizás.
Sí.
Con las pausas.
Con las pausas.
Es verdad.
Es verdad.
Pero él decía,
es bueno tener nervios.
Aquí puedes bajar a buscar el tabaco al coche.
Sí, como una colchoneta.
Ser nervios.
Porque eso quiere decir que estás vivo.
Y yo siempre me acuerdo de eso, tío.
Sí, sí.
Ya me lo has contado como mil veces.
Pero cada vez es como la primera.
Yo siento, ya que estamos hablando de sentimientos,
siento la misma emoción.
Vale, tío.
¿Podría ser que me repitiera bastante yo con la edad?
Sí, y luego bastante.
Se queda muy corto.
Ya, pero...
Bastantes...
Pero escúchame una cosa.
Tú a veces también me dices,
cuenta aquello, cuenta aquello,
como si yo fuera un jukebox de humor.
Claro, yo me repito también.
Es que no entra tanto material como sale.
Claro.
En mi vida.
Ya.
Es que sale mucho, ¿eh?
Una hora hablando aquí a la Semanada
para mucho material.
Joder, en diez o once años.
Depende, depende.
No, pues te lo voy a decir rápido.
¿De qué?
Te lo voy a decir rápido.
Mala expresión porque es que tengo que calcular
y rápido no va a ser...
Este es un buen chiste, ¿no?
Es como...
Te lo voy a decir rápido.
Es como medio abstracto.
Te lo voy a decir rápido y te callas.
Está muy bien.
Sí, sí.
Bueno, la primera vez que fui a Lomás Plus,
el programa de humor,
hice un chiste involuntario muy bueno.
Ah, ¿vale?
Estaba muy nervioso
porque yo trabajaba totalmente...
Trabajaba solamente en TV3.
Sí.
Lo llevan y tal.
Y entonces estaban allí...
Y estaba uno hablando y digo...
Digo, ¿te puedo interrumpir?
Y...
De los nervios, ¿no?
¿Te puedo interrumpir?
Y dice, sí.
Digo, vale.
Y pasó esto y dije...
Hostia, no...
No era el objetivo, pero...
Sí, estoy involuntario.
Bueno, que te lo diré rápido.
Aunque no sea rápido, pues...
Y está por aquí el presidente
inspector del programa.
Los 400 programas...
¿Qué significa impectoré?
Inpectoré, que tiene pecho.
Pecholata.
380 y pico.
Presidente, ¿cuántos?
390, casi 390.
¿390 qué?
Programas.
Ah, programas.
Pues 390 horas explicándonos cosas.
Te tienes que repetir.
Es verdad.
Y al que no queda, pues que se bache.
Sí, sí, sí.
Que todavía no ha empezado el programa.
Hay muchos podcast.
Es que voy a escuchar lo mismo otra vez.
Es así.
Bien, vamos a empezar.
El público ya dice...
A ver si empieza esto de verdad.
En realidad ya ha empezado.
Y nada, como si fuera un programa normal y corriente.
Pues venga.
Venga, vamos para allá.
La cadena Sergi el Terrat presentan
Nadie Sabe Nada.
Un programa a priori de humor
con Andreu Buenafuente y Berto Romero.
¡Venga!
Bueno, bueno, bueno.
Muchas gracias.
Gracias.
Queridos amigos, aquí estamos.
Venga, el afilador.
Y hasta aquí el afilador.
También los nervios vienen porque hace dos meses
que no hacíamos el programa.
Es que no...
Es verdad.
Está un poquito la bicicleta ahora ya.
¿Sabes cuando coges una bici
y que el freno al principio hace...
¿Os pasa eso o no?
Y luego se calienta y ya va bien.
Hostia, me fascina eso.
No me ha pasado en mi vida.
No.
Hombre, yo tengo una bici que cuando freno
suelo arrancar, se asustan los gatos.
Sí, y luego...
Y luego ya está.
Y luego se calienta.
El rozamiento.
Sí.
Hombre, no le veo entidad a esto de...
No.
No le veo.
No es Vivectota.
¿Cuántos años llevamos juntos, Ramón?
Hombre.
Tendrías que verlo tú.
A ver, Ramón, esto es...
¿Todos cuántos?
¿Diez o once?
No sé si es.
Esto es situación, no es Vivectota.
Sí que podemos sentar en Vivectota si quieres
porque lo único que traigo apuntado durante el verano
eran tantas semanas.
Una semana llego, apúntate cositas.
Pues venga, tira.
¿Quieres que arranque yo?
Sí.
¿Tú tienes también?
Sí, pero no las he traído apuntadas.
Me he confiado en que fueran fluyendo.
Vale.
El otro día uno me dijo, escucho el nada.
Muy bien.
Le dije, hostia, es la primera vez que me ha llegado.
Escucho el nada.
Dice, sí, a veces sí que hacemos programas aburridos.
Estoy esperando el de escucho el sabe, pero quién sabe.
Claro.
Quién sabe dónde.
Venga, vamos para allá, Vivectota.
Ahora sí, ahora sí.
Voy rapidito, ¿vale?
Vale.
Bueno, rapidito.
A ver, ¿tenéis prisa?
No.
Pues ya está.
No sé por qué me meto yo.
Pues si es igual de rápido que antes.
Sí.
¿Cuánto has dicho que ibas contando?
Para en una gasolinera poner gasolina, taquito normal.
La dependiente me mira como diciendo, sé quién eres, pero todavía no te tengo etiquetado.
Tenía el relojito buscando.
Sí, sí, sí.
Y una sonrisa como preludio al descubrimiento.
¿Qué tal?
Digo, bien.
El precum de la fama.
Exacto, precum de la fama.
Y yo, ¿me cobras el surtidor a seis?
Dices sí.
¿Me cobras el surtidor?
¿Le hablaste como a alguien de cine, Kinki?
No.
¿Me cobras el surtidor a seis?
¿A qué ha sonado, Kinki?
Ha sonado poco así.
Pues ya no me ha dado cuenta.
Bueno, pues sí.
Yo dije, Kinki, va.
¿Me cobras el surtidor a seis de la gasofa?
El hoy de la iglesia dirige esta, Vivectota.
Y ella me iba mirando y dice, sí, claro que te cobro.
Digo, está buscando.
No sabe quién soy.
No sabe quién soy.
No sabe.
Y en eso que viene otra persona, otra chica que trabajaba allí con ella, para mi gusto
demasiado maquillada, pero es una opinión personal.
Hombre, pero...
No, es personal, es personal.
Sí.
No rayaba circo.
Rayaba circo.
Sí, sí.
Sí, sí.
Rayaba circo.
Pero hay que respetarlo.
No, bueno.
Sí.
No, coño, es verdad.
Esa gente que, bueno, que juega fuerte, juega fuerte.
Y sale allí que están haciendo pan porque eran las gasolineras.
¿Hacen pan también?
Más que gasolina, lo que venden más es el pan.
Sí, es una mezcla de pan y chicle, pero sí.
Bueno, sí.
Y le dice esta.
Fíjate lo fuerte que juega.
Dice, ¿no sabes quién es?
Ella, ella.
¿Pensa que te lo decía a ti?
No, no, no.
Refiriéndote a maquillar.
Sí.
Claro.
Es que es otra persona.
Digo, no, no.
Si me llega a preguntar, no.
Bueno.
Pero me gustó mucho porque...
Es tu mujer.
No.
No.
Maquillar.
Hace como un misión imposible que se quita la máscara.
Eso habrá sido muy bueno, ¿eh?
No, la que no me conocía, le dice, re señalando la otra...
Bueno, le dice a la otra, ¿no sabes quién es este?
Que yo iba a decir, pero si eres tú, que no lo sabes.
Bueno, es igual.
Y esta dice...
Se queda un rato pensando.
Tampoco digo, vaya, si todavía estamos bloqueados.
Aquí a todos le sueno, pero nadie sabe nada.
¿Pero se veía la expresión de que estaba pensando?
Sí, sí.
Bueno, debajo del maquillaje...
Hasta que ya dice...
Claro que lo sé.
Tú eres Flip.
Perdona, pero Flip es el saltamontes de la abeja maya.
Tú eres Flip.
Y yo le dije, diga, mira, no.
Pero me encanta, me gusta más que mi nombre real.
Dice, no, va, por favor, dime quién eres.
Digo, Flip.
Soy Flip.
Y me voy marchando diciendo, soy Flip.
Soy Flip.
Y desde atrás oigo que dice...
No, ya sé que eres Fuentes.
Vale, digo, bueno, pues...
Puto Flip, qué aire se da.
A esta cancionera tengo que volver siempre.
¿Quieres meter otra tú? Yo tengo varias.
Ahora no me veo ninguna. ¿Sigue tú?
Bueno, ¿sigo yo? Vale.
Dejo pasar un coche en un paso cebra.
¿Son todas como de automovilismo?
¿Son todas relacionadas con el motor?
Urbanas, urbanas.
Metropolitanas, urbanas.
Urbanas, muy bien.
Cotidianidad.
Dejo pasar un coche por un paso cebra.
Que me parece, que es un gesto, que me honra mucho.
Como peatón. Como peatón.
¿Cómo lo haces? Haces un gesto con la mano.
Hago así con la mano.
De repente tú diriges el tráfico.
Como un árbitro cuando dice, no es falta, sigan.
Adelante, pase, adelante.
Me molesta tanto cuando me hacen eso los peatones.
Cuando yo soy conductor.
Te meto una cuña.
Sí, sí.
Cuando yo voy con el coche y un peatón hace eso, me molesta.
Me molesta.
Digo, ahora que eres urbano tú.
Tú tienes que pasar, que es tu obligación.
Me paro y me paro.
¿Pero tú eres un rancio? Te mira al volante.
He tenido momentos de yo pararme y el presunto urbano.
El urbano guanabí.
Mala cara.
¿Por qué me obligas a pasar si yo la quería gobernarte?
Yo gobierno la tuya.
De la mano con el ministerio de urbanismo.
Que ha puesto en mi un paso cebra.
Soy un auténtico hijo de puta.
Espérame, espérame. No te extralimites.
En mi caso, creo que dice mucho de mí en cuanto a normas de urbanidad.
Porque yo estaba todavía como unos tres metros del paso cebra.
Muy buena persona. Tú eres como Gandhi.
Bueno, sí.
El peatón Gandhi.
Gandhi, Gandhi, peatón.
Y es verdad.
Porque yo digo, joder, este lleva una marchita.
Él está haciendo las cosas bien.
Pero yo todavía tardo un rato.
Esos segundos que tardo, coño, no pasa nada.
¿Le rompiste la cadera?
No, no tengo la prepotencia del piatón.
Esto es mío. Llegaré cuando quiera.
Eres noble al balante.
Esa gente que pasa tres por hora como diciendo...
Este es territorio seguro.
No, la gente también tiene cosas que hacer.
Yo dije...
Me he perdido un poco.
Digo, pase.
El hecho de dejar pasar estaba muy bien colocado.
Uno dentro de un coche, el otro fuera haciendo gestos con la mano.
Pero esto no es la anécdota.
No, no es la anécdota todavía.
Entonces yo paso, o sea, pasa él, yo paso.
Y me dice...
Bien, bien.
Y entonces ya da una vuelta a una plaza muy grande.
Y lo vuelvo a encontrar el otro paso cebra.
Está corriendo.
Que yo pensé, vamos a ver...
Te he dejado pasar en uno.
Pero no vamos a estar toda la mañana que si tú que si yo.
No, pero no hizo falta.
Y ya...
En ese momento llegaba yo antes, o sea que pasé.
Pero él pasa.
Y hace un...
Este día vi el anuncio.
Bueno, es Gueropa. ¿Os acordáis de Gueropa?
Es muy antiguo. Sí, sí, es muy antiguo.
Me salió otra vez. Digo, ¿dónde sale el Gueropa?
Bueno, y yo ya estoy evolucionando por una cera.
Y baja la ventanilla y dice...
Eh...
Gracias, guapo.
Me voy...
A tatuar que me dejaste pasar.
¿En serio?
Que vaya loco, ¿no?
Y yo he dicho...
Yo pensé, hostia, el gesto es bueno.
Pero tampoco para tatuarte.
Pero tanto como...
Andrea me dejó medio prioridad en un paso a cebra.
Me hubieras salvado a su hija de un incendio.
Lo entiendo, pero...
Qué agradecida es la gente, ¿eh?
Sí, sí, sí.
Bueno, tengo algunas más. Por ejemplo, un hombre que trabaja en un parking.
Mira, sí que es de coches, sí.
Claro.
Es increíble.
Y me dijo...
Después de pandemia ya me dijo
¿Qué tal? ¿Cómo estás, Manel? Manel, Manel, Manel.
Yo no sabía si quitarlo del error o no.
Al final de aquel primer contacto
le dije, mira, no soy Manel Fuentes.
Hostia. Perdona.
Dos años después. Salto a dos años después.
Voy y dice...
¿Cómo va todo, Manel?
Digo...
¿Te acuerdas que ya vine otra vez? Bueno, vengo bastante.
Porque es al lado del trabajo.
Dice sí, digo sí.
Ah, es aquel, el del...
Sí, el que está cerca de aquí.
Digo, es que no soy Manel. Me cago en la mierda.
Digo, mira, si tú estás más cómodo llamándome Manel...
Sí, claro.
Oye, pa'lante, tío. ¿Qué problema hay?
Pero esto es así. Se está repitiendo periódicamente.
Bueno, tengo alguna más. ¿Quieres que te diga alguna más?
Si quieres las dejamos para más tarde
porque el material es tan bueno que no lo vamos a concentrar todo al principio.
Vale.
Es verdad, ¿eh?
Está bien. Bueno.
¿Cuándo quieres que toquemos al tema Tesla?
Hombre, todo coches hoy.
Ya, por mí si quieres.
¿Sí? Necesitaríamos una sintonía
porque hemos vivido unas experiencias
relacionadas con el mundo de Tesla
que queremos compartir con vosotros
aquí presentes y en casa, ¿sí?
No, no me gusta, no me gusta.
No, porque es muy motor...
Eso es como de moto...
Es como motor antiguo y Tesla tiene un componente tecnológico muy importante.
Entonces, tendría que ser...
Casi sería cencia, pero sin llegar a cencia
porque agota mucho la sección.
Que ciencia, ¿eh?
Y motores.
Bueno, bueno.
Bueno.
Esto es old school, esto Ruta 66.
ZZ Top.
Sí, no, no lo veo, Ramón, no pasa nada.
Que sólo tiene rock and roll, ¿eh?
Sí, puede ser, ¿no? Le gusta mucho.
Que ponía la música en el Mississippi.
Ya, le gusta.
Era el que ponía la música en...
El Disjockey de Pepe Labarro.
Esta noche cruzamos el Mississippi.
Déjala rodar.
La que sea, más bien neutra,
pero vamos a hablar del tema Tesla cuando quieras, compañero.
Adelante.
Sin música...
Las cabezas como los loros, ¿eh?
Bueno, yo las cabezas y toda la cara.
Ya, ya, ya.
Vale.
Yo no he vivido ninguna.
A mí me han contado una anécdota.
La conducción del futuro.
Uro, uro, uro.
Un uro era un tipo de toro prehistórico,
¿lo sabes?
Todos están recuperando. ¿El uro?
Que no rías, ¿eh? Que sois tontos, ¿o qué?
Es que se ríen de todo.
¿Has visto el vídeo del toro este que lleva en un coche?
¡Ese toro!
Mira, todo coches. Para la música, para la música.
Todo coches. ¿Te acuerdas que te envíe un vídeo
de un tío en Estados Unidos que había transportado
un toro...
Bueno, seguramente lo habréis visto.
En un coche. ¿Sabéis esos coches de Estados Unidos
que son muy grandes?
Son tanquetas. Y detrás llevan una...
Como un...
Son camionetas, ¿no? O sea, una pick-up.
No, pero este era una pick-up, ¿eh? ¿No?
Pues cortó medio coche con una radial.
Cortó un coche por la mitad
y entre el asiento
del acompañante y el de atrás
colocó un toro de 1500 kilos.
No sé si habéis visto esas imágenes.
Pero con unos cuernos, se ve que es un toro
de una raza que tiene unos cuernos muy, muy grandes.
Le puso bozal. No todo va a estar mal.
Sí, sí, le puso como una especie de bozal
y ya salieron todos los informativos
y nosotros ya por nuestro sesgo
guarro nos dimos cuenta de que el toro,
claro, el toro iba asustado
y se fue cagando durante todo el trayecto
y dejó toda una cascada
en el cristal posterior
alucinante.
No, no, chicos, qué queréis, es un toro.
Ya que sale tema caca, una de las noticias
de este verano, y ha sido un verano muy cargado
de noticias, han pasado cosas muy importantes
este verano.
Recuerdo que está Tesla esperando.
Algunas truculentas,
bueno, de todo, tipo.
Pero la noticia ha sido ese avión
que venía de
los Estados Unidos
y una persona se cagó como una
metralleta.
Tuvo un problema intestinal.
Para mí la clave del asunto es un dato
que apareció y es que habían
tirado ambientador de vainilla
para contrarrestar el efecto.
A mí la vainilla es una de las cosas que más asco
me da un poco de asco la vainilla.
Y la mezcla de mierda y
vainilla, o sea, ese
combo, el combo
mierda con toppings de vainilla,
es como, guau.
Pero cuéntalo todo, es un avión donde había
un conocido tuyo, dices?
Unos conocidos de unos conocidos viajaban
viajaban a Estados Unidos a España
y a mitad, no, a mitad no, pero
en el trayecto vuelve otra vez a Estados Unidos.
Hay un momento que dice... ¿Cómo sería
el tema?
El avión no podía aterrizar así.
Y el piloto, perdona, qué detalle, porque al piloto
no le llegaba nada. El piloto va encerrado allí.
Sí, el piloto podría haber dicho una mierda para vosotros.
El piloto dijo, yo aterrizo
y salgo por delante.
Abro el parabrisas
y salgo por delante.
Y ahí os jodáis.
¿Hay alguien que igual está relacionado?
Hola, buenas tardes.
Nada, ya que mencionabais
el concepto de mezclar mierda
con vainilla.
La intención no era abrir
un subtema.
No, no, no, pero es que me parece que está relacionado
porque, de hecho,
el sabor de vainilla normalmente, no sé
si sabéis, que viene del
castorio, que viene de las glándulas anales
del castor.
Lo sabía
y había querido olvidarlo.
Es cierto, es cierto. A mí me pasa
cada vez que pruebo un helado de vainilla.
Es como olvidar, pero...
Pero tengo entendido que eso es para hacer
el compuesto químico
que es el aroma de vainilla
porque la vainilla es una planta, ¿no?
Sí, sí, desde luego. Es una manera de producirlo más barato.
Y es unas glándulas que salen del ano, ¿no?
Del castor, sí.
Pero bueno, a quién no le va a gustar, ¿no?
Chuparle el culo a un castor.
No hay nada mejor. Un paseo por el bosque,
chuparle el culo a un castor
y para casa.
Gracias. Gracias.
Muy buena aportación, muy desagradable al mismo tiempo, pero...
Pero también buena.
Joder, esa sensación. Bueno, volvemos al mundo Tesla.
Venga, a ver. Lo que nos ha pasado
a nosotros
personalmente, a Berto y a mí creo,
nos hace bastante gracia el mundo de los coches
eléctricos.
Más gracia casi el de los conductores
de coche Tesla. Sí. Que ya podemos
etiquetar como un subgrupo de la población.
Son un grupo apasionado por la tecnología
al mismo nivel que los que tienen una freidora
de aire, que también están
obsesionados y no pueden dejar de hablar
de ella. El que tiene un Tesla
está dispuesto a contarte absolutamente
todo de la experiencia
y...
Quien tiene un Tesla tiene un tesoro. Exacto.
Y entonces cuando entras
te van a explicar todo el rato
lo que hace el coche. Es verdad que nosotros
tenemos ya una predisposición a buscar
buscar boca.
Pinchamos, cada uno de nosotros pinchamos.
Entramos, vemos ese, no sé si os habéis fijado,
como un iPad muy grande.
Sí, una pantalla de 70 pulgadas.
Sí, que le decimos. Siempre el mismo comentario.
Muy grande, ¿no?
Empezamos por ahí. Muy grande, ¿no? Sí, bueno, claro.
Sí, sí. Es que esto
empiezan. Tiene unas cámaras
por fuera, se comunica con los otros coches.
Entonces sacan la carta pedo.
Sabéis que el Tesla tiene una cosa
que es que le dan a un botón y suena
un pedo. Como es una broma
una broma Tesla, una broma de los
máscaros. Sí, sí, sí, es verdad.
Tienes que poner un pedo en la zona del coche que tú digas.
En el asiento que quieras. Siempre te lo hacen.
Enseñan el pedo.
Trasero o derecho.
Y la gente hace, ostras,
es una broma que en algún
momento algún ingeniero de Tesla dijo
esto va a dar valor
al coche. Y lo otro día nos
contaron, porque seguimos investigando
en nuestra especialidad, vamos, nos dicen
también se oye por fuera.
Cuidado, habría unos altavoces,
no, en serio, que tú
pasarías al lado de un grupo un poquito cerca
y puedes lanzar pedo. Puedes lanzar un pedo
hacia afuera. Puedes hacerlo, si quieres.
El sonido, ¿vale? Sí, sí, sí.
O voces, se ve que puedes
atrás de tu, ¿no? Sí, tu teléfono,
tienes una aplicación. De tu teléfono.
Hablas y entonces
se oye por fuera del Tesla.
Con tu voz distorsionada.
Entonces, como tienes una cámara puedes ver si hay alguien
cerca del coche. Claro. Puedes hacer que el coche
diga, ¡márchate!
O lo que tú quieras. No, no, sí, sí.
¿Qué pasa? ¿Te gusta mi coche? Pero con voz distorsionada.
¡Qué percha! ¿Te gusta mi coche?
Como el malo de Scream. Exacto.
Este nos cuenta, este conductor, el último,
la última fuente. El último Tesla.
Nos ha dicho que si efectivamente él estaba
tomando un café, vio a alguien apoyado, lo típico, ¿no?
Y le manda al coche
una señal para que lance un claxon.
Este, con sus huevos gordos también,
dice, bueno, igual.
Y sí, no se movió. Y
este dice, entonces pasea al plan B, que es
a través de la aplicación, con voz distorsionada,
le dice, ¿te puedes levantar del coche,
por favor? Sí, sí.
Y el tío, claro, también. Y luego...
Y luego...
Pero lo que más nos gustó es
una anécdota que dijimos, esto tienen que conocer
nuestros seguidores.
Y que nosotros llamábamos
naranja en volante.
Vamos con naranja en volante.
Venga.
¿Sabéis que el Tesla puede
conducir solo? Sí. Vale.
Como está listo el coche, más que
tú. Sí. De hecho,
en algunos países lo permiten, pero
en España todavía por legislación
no puede. Por administrativo.
Administrativo. Administrativamente no se puede.
Es el mismo que llevo las temporadas del nage y dijo, no,
coches solos no. Exacto.
Que... Bueno, se puede desbloquear
en cualquier momento. Yo creo que llegaremos a verlo.
De hecho, en San Francisco creo que hay taxis que van solos.
Sí. Que eso tiene que ser también,
para cagarse un poquito. Tú solo en un coche
vacío, perdona, ¿eh?
Pero bueno. Como en La Noria. Sí.
¿Qué tiene Tesla? Tiene un seguro
que es, bueno, un... Un sistema.
Un sistema. Un sistema. Un sistema.
Que es que tienes que tocar el volante cada
20 segundos, porque
si no el coche se pararía. Pero no tienes que tocarlo.
O sea, que el volante percibe, si hay
presión, cada 20 segundos lo va
probando, para
evitar que te duermas. Exacto.
Entonces, este conductor, la última
fuente de la que disponemos, nos cuenta.
El otro día en Madrid,
en la M40, pararon a un tío.
¿40 o 30? Yo creo que era 30.
Yo se ha pedido 40. No sé.
Porque realmente no me importa mucho. Ya, ya, ya.
Si es 30 o 40, como si quiera es 50.
Vale, vale. Son esas que dan vueltas a Madrid.
En la M. En la M, sí. En la M.
Dice el otro día en la M,
detienen a un tío que iba, había
puesto una naranja
en el volante.
Donde hace, ¿sabes?, donde hace un
volante redondo. Sí. Y tiene como
un... Un radio, un nervio. Un radio.
Pues en el nervio del radio hay una naranja
apretada para que el volante note la presión.
Con lo cual, eso ya estaba salvado. Ahora le
tocaba a él dormir. Sí.
Su objetivo era dormir. Era dormir.
Pero, claro. Y esto no es broma. Bueno,
a menos nos lo cuenta. Este hombre
se pone en el asiento
y se coloca con la cabeza
apoyada en el reposo a cabeza.
Y se pone una cinta
que lo ata a... Como en la peli
esta de... El cazador. El cazador.
Una cinta que le coge cabeza
y por detrás de
se posa cabezas. Claro, para no
caer y que la gente viera a Stephen
Hawking conduciendo un coche.
¿No? Exacto.
Si lo ven... Si lo ven dormido.
Sí. Pues llama mucho la atención,
¿no? Hay un señor dormido.
De alguna manera...
Nuestra teoría
es que de alguna manera este hombre
llevaba ya varias horas dando vueltas a Madrid.
Eso disparó alguna alarma.
Yo he estado pensando, digo.
Dice, ostia, hay un tío que por lo que sea
está batiendo un récord, ¿no?
Porque él iba durmiendo, ¿eh?
Iba agarrado con la cabeza sujeta,
la naranja en el volante y...
Dijo, mejor esto que en casa,
¿no? Sí, sí.
Pero lo detuvieron porque una foto
que le hicieron se le vio con...
la boca abierta de
Papanata donde ya dije,
no, este señor va durmiendo. En eso nos pareció
fascinante.
Y desde aquí hacemos un llamado
que si este hombre, por lo que sea...
Para que nos llame, se ponga contacto con nosotros,
nos cuentes su punto de vista.
Sí, sí. ¿Por qué?
Porque en lugar de si está en sofá
dijo naranja en volante.
Bien, vamos a hacer una pausa
y volvemos en un momento, si te parece.
Me parece estupendo.
Nadie sabe nada. ¿Humor inteligente?
¡Oh, zapato malo!
No, humor normal.
Venga, retomamos el programa
Nadie sabe nada en la cadena
serie y plataformas de audio.
Para que yo me oriente. ¿Qué día es hoy?
Hoy, bueno, va a ser muy bueno.
Te lo voy a decir rápido también.
¿Sábado? ¿Sábado 9?
Sí, sí, sí.
Este programa es caliente.
Lo grabamos ayer.
No, no, es que he pensado... Hoy es ayer.
Es que como voy a estar en el teatro en Madrid
he pensado, no, vaya a ser que me pille
este programa.
Sí, claro, claro.
Estoy en octubre del 5 al 29
en el Teatro Príncipe Pío.
No, no, no.
Simplemente estoy hablando conmigo mismo.
Ah, claro, claro.
Para no confundirme.
Claro, claro.
Tu avísanos.
Bien, si quieres cogemos preguntas.
Yo tengo ya unas cuantas seleccionadas.
Vamos a ver.
Pablo, desde Logroño.
Sotana Veloz.
Sotana Veloz.
He visto perfectamente
pertrechado con su alza cuellos
reglamentario a un cura en patinete.
Me ha salido en voz alta.
Teleostia.
¿Alguna otra idea
de nombre para soluciones a domicilio
y la modernización del clero?
Ah, bueno, porque he pensado que iba...
a lo mejor no iba a trabajar, a lo mejor iba a su casa.
Tienen domicilio esta gente.
Claro, viven en sitios.
Cura ecológico, qué mejor.
No, pero la modernización del clero
acorde a los cambios tecnológicos,
esto me está interesando un poquito.
Sí.
Sí, a lo mejor una misa todos con patines.
El cura en medio y todos patinando.
Hostia virtual.
Bueno, hostia virtual.
No lo veo yo.
No lo ves tú.
También es porque tengo poco conocimiento del campo.
A ver.
Género eclesiástico no lo toco.
Yo lo he trabajado una etapa de mi vida.
Te marca.
No estamos diciendo nada
del otro mundo.
Ay.
Bien colado.
Porque ya el concepto de Dios
es muy tecnológico.
Claro, es el wifi de la religión.
Correcto, estamos hablando de un ente
que está en una nube.
Que tú contratas con tu fe.
Si tú tienes fe
tienes gigas allá arriba.
Y tus pecados
van acumulando.
Hay un momento dado que igual también te dicen
estás ya al límite, hijo de la gran puta.
¿Sabes?
Sí, va con otro léxico.
Sí, con otro léxico.
Pero sí, porque Dios nunca diría eso.
Muy educado.
Por mí es eso educado que no habla.
Por no molestar.
Y la relación con tu fe
en cierto modo es inalámbrica.
Te lo conto muchas veces.
Una pintada que vi en Barcelona que me encantó que ponía
y yo sé que es inalámbrica.
Es que yo lo más cerca que tengo
a la religión culturalmente
es Star Wars, que es lo más parecido.
Porque yo no he sido religioso
ni he trabajado en ese asunto.
Lo más parecido en lo laico creo que es Star Wars.
Lo más parecido a una religión.
Está La Fuerza, los Jedis son
una especie de obispos.
Sí, santos.
¿Estás viendo Corrientes?
¿Estás viendo Osepia?
Sí, hombre, está viviendo Osaka.
¿Asoka?
Asoka, sí.
Asoka, sí.
Es que a Andrés le llama la de la sepia.
Porque lleva eso en la cabeza.
Bueno, lleva como una sepia más grande.
Sepia de color, muy bien puesta.
Y el otro día estuvimos departiendo de eso.
Pero eso sería nadie sabe nada a series.
Nadie sabe series.
Ya la abriremos.
En fin, para volver a eso.
También desarrollé un poquito el concepto de
qué pasa si uno tiene fe, que lo respetamos,
que se comporta durante un tramo
de su vida o de su día
muy mal.
No, pues decir, hostia,
porque no tenía cobertura.
¿Por qué hiciste eso?
Pero al contrario que con la
telefonía, la cobertura
en la cuestión de la fe, yo
estoy aventurando una hipótesis de trabajo.
A medida que lo cuento, lo pienso.
Nadie sabe religión un poco.
De la misma manera que tú
en lo alto de una montaña
cálmate, cálmate. ¿Cómo estás?
No estoy calmado.
Al ser religión trabajamos un poco más.
Sí, la calma. Dime, dime.
Que en el teléfono
en lo alto de una montaña no tienes cobertura.
¿Quieres una hostia?
¿Sí va a ser mejor para mi espíritu?
Sí, con tu espíritu.
Que de la misma manera que en lo alto de la montaña
no hay cobertura telefónica, sí que la habrá
religiosa, porque Dios está más cerca.
Sí, pero en una cueva.
En una cueva no.
No tengo ni idea y no me
interesa mucho.
En una cueva se han cometido atrocidades.
¿Por qué?
Por eso.
Yo te absuelvo.
Muchas gracias. No tengo ningún
poder, pero
si cuela, cuela.
Como diletante religioso.
Yo te absolvo. Muchas gracias.
Y yo se lo agradezco.
Y con tu espíritu.
Muchísimas gracias.
Nuevo lenguaje cristiástico.
Buenas tardes.
Vete con Dios.
¿Por qué?
¿Por qué no existen, Susana desde Soria?
¿Por qué no existen las lunas
de los coches graduadas para gente
mío?
Joder.
Sí señor.
Sí señor.
Para poder conducir sin gafas.
Qué idea.
Cómo no la ha tenido nadie antes.
Qué idea.
Estoy convencido que...
Y una pecera graduada.
Carglass está trabajando en esto.
Seguro.
Iñaki de Carglass
ahora no sale porque está trabajando la graduación.
Han llegado a un acuerdo con General Optica.
Oye, sí, pero claro, tú dejas tu coche
graduado, que me parece maravilloso,
a otra persona
y esa persona le estalla la cabeza.
Uno que tenga muchas dioptrias
y lleva allí como un culo
de botella.
Van a un tanque, van a un tanque.
Y el copiloto y los pasacan.
Vomitando.
Bueno, un tramito
para ti solo, como una pantallita.
Esto está graduado. Progresivo.
Progresivo.
Buena iniciativa.
Seguro que no cae en sacos rotos.
Pero graduarlo todo, los cristales de las
personas de tu casa también.
La puerta del microondas.
Todo tiene que estar graduado.
El espejo. ¿Se puede graduar un espejo?
Hay alguien que sepa de
graduar aquí.
¿Tiene conocimientos de refracción?
No, no.
¿Autometrista, refractario?
Bueno, aquí también pedimos unas cosas.
Vale, yo que sé. Aquí puede entrar quien sea.
No se piden papeles.
Andreses de Madrid nos lleva
a un terreno bastante
ilusorio.
Creo.
Ilusorio.
¿Cuál es vuestro paraíso en la
Tierra?
Imaginativo.
Imaginativo. Dice, no me refiero
a un lugar idílico.
Ni él mismo sabe lo que quiere.
Dice como las Maldivas
o Talavera de la Reina.
No, no.
No es solo tu pasión por esta ciudad.
Sí, visita pendiente, por cierto.
Si no un lugar o momento
dadas unas circunstancias específicas
en las que das gracias
a un todopoderoso inexistente
por encontrarte ahí.
Samanté, varios y cordiales.
Lugares en los que una vez
tomada conciencia
por tu parte dices gracias.
Y esto conecta un poco con mi
carácter de realista rancio.
Creo que es imposible
un lugar o un sitio perfecto o un tiempo
perfecto porque a poco que te fijes
siempre hay algo que te lo jode.
Tú, por ejemplo, proyectas
en tu vida algo que te hace
mucha ilusión. Yo tengo toda
la ilusión del mundo en llegar
y estar una semana en esta playa
paradisíaca, de este lugar
con mi persona favorita
y cuando vayas
va a pasar algo, seguro.
Hay mosquitos. Es que aunque no
pasara nada. Los mosquitos son muy buenos en eso.
Va a pasar porque va a pasar.
Aunque no pasara nada
tú te pones en el lugar
idílico, precioso, delante de la playa
el mar. Todo está perfecto.
Te quedas ahí sentado y estoy seguro
que al minuto dices, me estoy
aburriendo.
Es la naturaleza humana.
Vamos a darle
un poco de cancha al disfrute,
a la percepción de disfrute.
Yo no lo tengo.
Estoy pensando.
Una pizzería.
Tienes hambre
es sábado y está saliendo
una pizza a cuatro quesos.
No quieres estar en ningún otro lugar.
Un cuarto de baño, limpio,
que vuela bien, que tenga buena
lectura, que tenga una buena entrada
de luz, donde no estén mis hijos
en ese mismo domicilio,
para que no vayan a entrar.
Yo, por ejemplo, cagar
de principio a fin solo,
yo lo cerebro.
No pides más.
No te imaginas
cómo cerebro eso.
Para eso es cotidianos.
Un hotel.
Tengo una tarde de hotel.
Me voy a meter en ese baño.
Colchón bueno.
Tú estás todavía con el tema.
Habitación de hotel donde el colchón
te envuelve.
Paso de todo.
Esos hoteles que hay un espejo delante
de la taza del lavabo.
Dan rabia.
No quieres ver esa imagen.
Hay muchos restaurantes,
sitios que te sientas.
Hay restaurantes
y ya tu otro yo allí.
Baños de restaurante que parecen la casa
de los espejos
de la feria.
Se han chiflado con eso.
No queremos espejo en el cuarto de baño.
Yo me imagino cómo estoy cagando.
No quiero verlo tampoco.
Volvemos a paraísos cotidianos.
Vamos a explorar un poco más este campo.
El momento en que tu hijo
te suelta de la mano y entra en el cole
donde va a estar seis horas.
Es una respiración
buena.
Bueno.
Es un momento
que hay que disfrutar.
Me voy a poner un poco
romántico.
A veces cuando me despierto
por la mañana y veo a mi mujer
durmiendo y pienso qué bien
duerme esta mujer.
Tú no sabes lo bien que duerme esta mujer.
No digas nada.
No lo sabes.
Joder.
Felicidades.
Porque te veo la cara.
Te veo la cara.
La sonrisa oblicua.
Que sonríes para abajo.
Oye.
Te felicito porque has hecho
un minority report
de comedia. Un precog de chiste.
Estaba pensando algo
para meter, pero es verdad. Te lo digo de verdad.
Deja ya ese paro.
Me admira lo bien que duerme.
La boca cerrada, respiración.
No hay ronquido.
Parece una pintura esa mujer.
Hostia, qué maravilla.
Es bastante flipante.
Yo cambiando de tema
me admira lo rápido que se calienta
la máquina en expreso.
No, no, no.
Han mejorado esa tecnología.
Antes tú arrancabas y estabas un minuto largo.
Ahora en 20 segundos hace
cuando quieras.
Y bueno, yo tengo una ahora
que yo la pongo en marcha y hace
pa, pa, pa.
Pa, pa, pa es...
Es que me sale en catalán, hombre.
Pampayugues.
Intermitencia.
¿Cómo es Pampayugues en español?
No, destellos no.
Parpadeo.
Gracias.
Pero no es Pampayuga, no es parpadeo.
No, parpadeo es párpado, ¿no?
Parpadear es párpado.
Bienvenidos a Nadie Sabe Nada Linguística.
Hoy vamos a explorar las diferencias
entre estos dos maravillosos idiomas.
Catalán y castellano.
Ahora tú le das a arrancar la máquina en expreso
y mientras está parpadeando
o lo que sea, tú le dices
que real la dosis pequeña.
Y ella hace, vale,
y solo parpadea una.
Y en 10 segundos hace, cuando quieras.
Y hoy le digo, bien.
¿Sabes que he encontrado mi café favorito?
Sí. A los 48 años.
Lo tenías escondido.
Tipo de café, tío. No.
He ido a un lugar donde venden café
de diferentes tipos y te lo muelen.
Bien, bien jugado.
Café Roura.
Está en la calle Borrell, en Barcelona.
Y tiene varios tipos y hice varias pruebas.
Y lo encontré.
Allí mismo. Bueno, me lo fui llevando.
Me llevo 250 gramos de este y de este.
Que no hicieran catas.
Me ha gustado más este que este.
Pues si te ha gustado este, vamos por aquí. Maravilla.
Se llama Calosi.
El que me gusta a mí.
Como de Juego de Tronos, ¿no?
Esa es Calesi.
Calesi para todos, ¿no?
Calosi para todos.
Joder, que bien.
Yo creía que allí mismo te daban chupitos.
No, allí puedes tomar café. Pero eso es peligroso.
Chupitear todos. No, no, no.
No, eso no.
Sabes que te comes el asfalto, ¿no?
Muy bien. Ya no sé de lo que estábamos hablando.
Y nos hemos comprado una máquina
para hacer espuma con la leche.
No me gusta eso.
No, no, no.
No quiero saber eso. ¿Por qué?
No, porque me da rabia. ¿Por qué te da rabia?
Me da rabia esa resistencia y no me gusta.
Hostia, yo pensaba que ahí vamos a coincidir.
No, no, no. Lo hace Silvia.
Yo me siento ahora superpoderoso.
Tengo en casa, puedo hacer café con espuma.
Solo me falta una nevera de rico de ser
que hacer así sale hielo.
Que eso para mí es...
Ser rico es tener una nevera que aprieta y sale hielo.
Eso no puedo tener nunca.
¿Y puedes decir una copa?
¿Una copa?
Te falla el micro mucho, ¿eh?
Me han puesto el malo.
Me petece hielo y...
Que sabes que te he dado varias variedades de hielo.
Claro, no lo sé, pues no la tengo.
Tú la tienes, claro.
Yo sí, también te digo, te quito la ilusión.
A ver, la tengo.
Bueno.
Oye.
Lleva más años trabajando que yo.
Las cosas han ido bien.
Y ha sabido invertir su dinero.
Ha comprado una nevera de hielo.
Yo he ganado más dinero que tú.
También he perdido mucho más que tú.
Pues si no es una competición.
No, no, no. Pero tampoco es tan cara la nevera.
No sientas vergüenza.
No, te voy a dar una...
Inmerecido. Cada euro.
Tranquilízate.
También te diré una cosa.
Se estropea a las primeras de cambio.
Y luego tiene un sistema que te da agua filtrada.
Y también se estropea.
Y el gas que va con unos...
Porque puedes hacer agua con gas.
Y la gente, oye, qué bonito.
Pero tú tienes la más pro.
Tú tienes una nevera que hace Coca-Cola.
Sí, sí.
Pero ¿por qué no me lo has enseñado?
Le metes naranja por detrás y te hace un zumo.
No, no, no.
Te da gas. Ese gas, esa agua carbónica
no es buena.
Tiene un grano que parece canicas.
No es bueno, no.
Y luego dura poco, porque va con cartuchos.
¿Te has estropeado cartucho? ¿Quién lo cambia?
¿Cómo? ¿Cuándo? No, nada.
O sea, ¿gas no?
Si me la tengo que comprar, ¿gas no?
Un solo tipo de hielo.
Porque hay como unas palas dentro
que buscan el hielo y se cansa de buscar.
Se cansa.
Hay un momento que ya dice...
Estoy buscando, no tengo.
Estoy buscando, no tengo.
Sí, tú abres y hay un depósito
donde ves como una especie de cigüeñal
con cuchillas.
Pero esto es mejor que un Tesla.
Sí, hombre, tú vas allí y dices, ¿por qué no me sale hielo?
Si le clavas una naranja hecha hielo todo el rato...
Sí, sí. En el asa.
Una naranja ahí. No, hombre, hay como un depósito
donde una especie
de joder, una cosa...
Sí, un alambique, ¿no?
Un engranaje, una maravilla.
Sí, como un sacacorchos gigante.
Va cortando y seleccionando hielo.
Se estropea también.
Y tú dices que lo quiero picadito
porque quiero hacer un hielo pique.
¿Hielo pique? ¿Hielo pique?
Esto es una canción de Shakira, ¿no?
¿Pique?
Pile, pile, hielo pile.
Es una canción de Shakira.
Me gusta el hielo pique.
Me gusta el hielo pique.
No me dejaste venir
a tu casa
a tomar hielo pique.
Es pile, pile.
Una de las mejores mitazes de Shakira que se
pueden escuchar. Tampoco va bien el pile.
Si dices, sí, hombre, no te voy a cortar
el cubito grande, te lo voy a machacar.
Una mierda para ti, te está diciendo la nevera.
No te la compres. Pues mira, yo este verano
he aprendido a hacer huevo mollet.
¿Alguien sabe lo que es el huevo mollet?
¿Te parece que nos vayamos ya de tecnología?
Que llevamos dos horas dentro del Tesla.
Hace como calor dentro del Tesla.
Último tramo del programa.
Ahora ya gastronomía. Huevo mollet.
Cuéntanos, amigos. Huevo mollet.
Agua hirviendo y cuando está el agua hirviendo
metes el huevo con la cucharita.
6 minutos exactos.
Sacas y agua fría.
Rompes el calor.
Hola, buenas tardes.
Esto es para pelarlo.
¿Qué estás explicando?
¿El huevo qué?
Huevo mollet.
Entonces, el huevo
¿Cómo lo haces tú?
Yo lo hago con nitrógeno.
Yo cojo una
¿Cómo está una de nitrógeno?
Le tiro los huevos dentro
y pasamos una tarde
El típico chiste, ¿no?
Como huevos y testículos.
El chiste es...
Ya he contado cómo lo es.
Chiste de cocina.
Cuidado.
Dice, estando...
Pasan mucho los chistes de eso.
A veces van tres.
Dice, oye
por lo que sea, le interesa
un tema.
Dice, ¿tú cómo te comes el conjome?
Ya lo sé.
Pues cuéntala tú.
Con un huevo dentro.
Y yo dice, hostia.
Es que me ha dado mucha gracia
los chistes.
No os puede acabar.
No os puede acabar.
Y yo, hostia.
No os puede acabar.
Bueno, pues no la cabe.
Ya está.
Hostia que...
Estaban dos.
Uno es el que pregunta
y el otro es el que le gusta con un huevo dentro.
Esos dos personajes.
¿Cómo se llaman?
¿Cómo se llaman?
Se llaman José María
Inagijo.
Y dice José María
A ver cómo acaba porque les hemos cogido ya
cariño a estos dos personajes, ¿verdad?
No queremos que acabe, ¿no?
Dice, ¿tú cómo...?
Bueno, ya habían hablado de otras cosas.
Llevan toda la mañana hablando
ahí en el restaurante. Se ve un poco.
Sí.
¿Son familia? Uno no es medio...
No, habían ido al colegio juntos.
Y se ven muy desde cuando.
Le llamaban el Josemi
y el otro el Ansel.
Ansel y Gretel.
Y de...
Bueno.
Y de...
Con un huevo dentro dice, pues ahora pido a la cocina
que te lo preparen.
Como a ti te gusta.
Y el otro dice...
Es una incómoda.
Y...
Pues ha hecho usted con el chiste lo que hace con la comida, ¿no?
De construirlo.
Parece muy interesante.
Yo creo que lo normal me aburre.
O sea, lo normal no le llama la canción.
Bueno, vamos a coger más preguntitas.
¿No se despide?
No, porque...
Vamos con otra.
¿Tú aquí en el banquillo?
Inés, desde Mataró.
Hola, Andrés Viverto. Cuando cantáis una canción
de nuestro idioma, pero que está cantada con un acento distinto al vuestro,
en argentino o en valenciano, por ejemplo,
¿con qué acento la cantáis?
¿Con el vuestro o fingís el acento del cantante?
Hombre, fingir siempre.
Siempre fingir. Siempre buscar el ridículo, ¿no?
No, pero cómo vas...
Tú imagínate...
Vamos a hacer la prueba, verás qué raro es.
Eso es complicado ahora, ¿eh?
Venga, una canción que tenga un acento en...
Flaca, por ejemplo, de...
de camarón.
De...
De calamardo.
Cámara.
Calamaro.
Calamaro.
Muy fan de la etapa actual de Calamaro, ¿eh?
No sé si le estáis siguiendo en Instagram.
Yo no.
O lo recomiendo,
o lo recomiendo.
Hace unos vídeos donde se coloca
la cámara muy cerca y arriba.
Y hace unas
valoraciones muy personales
de los conciertos
en habitaciones de hotel,
que para mí es un género, ¿eh?
Sí, sí, os recomiendo que está ahí.
Hola, buenas tardes.
Hemos actuado
en Cuenca.
Pueblos maravillosos.
Y muy cerca.
Vino el niño Joselé Grande.
Grande Joselé.
No puedo dejar de mirarlo.
Claro, sí.
Bueno, ¿tú has visto los vídeos...
Estoy siguiendo la gira muy de cerca.
¿Has visto los vídeos que hace David Lynch
dando la predicción del tiempo cada día?
No sé si lo sigue haciendo hasta ahora.
No lo tienes que decir, coño. Es lo que me interesa ahora.
Hostia, David Lynch, que es flipante
como habla David Lynch.
No sé si está la corriente.
Hace una cosa, ponte cualquier
entrevista de él charlando.
Además que lo entiendes muy bien,
lo entiendes todo, y tiene una forma de hablar
flipante. Ah, qué bueno.
Salía como en un estudio que debe tener
en su casa o algo.
Flipante. Hostia, qué fuerte.
Yo soy muy fan de esa...
Te entiendo, te entiendo, y creo que estamos de acuerdo.
También soy muy fan de Michael Douglas.
Que eso, padre, sabes que no quiere ir Douglas,
pero se llama Douglas. Michael.
Mismo apellido, pero cuida.
Bueno, de una generación a otra, cambió la pronunciación.
Cambió el país.
Es un tío muy majo que ha decidido
que va a retransmitir su envejecimiento.
Es un señor, bueno,
que la gente dice, hostia,
que ha rogado hasta aquí Douglas, pero a él no importa.
No, Michael, perdón. No, bueno, está mayor, claro.
Sí, sí, está mayor, pero hace unos vídeos
donde se anda buen fin de semana.
No tiene más predicción.
También soy muy fan de eso.
Voy con Michael, voy con Calamaro.
Ahí pasó las tardes.
¿De dónde veníamos? ¿De qué hablábamos?
No lo sé.
De cantar con acento, ¿vale? Una estrofa de flaca.
Venga, muy bien.
Pero no la flaca, no me claves tus puñales en la espalda.
No, no, no. ¿Otra?
¿Ah, no? Cualquier...
Es que no me la sé. Ah, vale, vale.
¿Tú te la sabes? Sí, pero no me acuerdo ahora.
¿Cómo es? ¿Alguien se la sabe?
Necesitamos la letra.
No nos acordamos.
¿Alguien se sabe la letra de la flaca?
No la flaca.
La flaca es la de... Flaca.
No me claves tus puñales por la espalda.
No, pero el estribillo no.
Ya la busco.
Venga, la buscamos. Estamos en los últimos minutos.
Hemos puesto un reto absurdo.
Pero, chicos, ahora estos nervios van a aflorar
en este momento del programa.
Vamos a ver, sí, venga.
Nueva semana que viene, no la ha visto nadie.
Lejos en el centro de la tierra
Las raíces del amor
Donde estaban, quedarán
No, no, lejos, lejos, no, lejos
En el centro de la tierra
Las raíces del amor
Donde estaban, quedarán
Vale, pues si esto lo...
Lejos en el centro
De la tierra
Las raíces
Del amor
Donde estaban, quedarán
Dice, ¿qué pasa?
Es como que no te gusta la canción, ¿o qué?
¿La puedo cantar yo?
¿Quieren cantar la dúo con Shakira?
Sí, sí.
A ver, a ver.
Venga, con esto acabamos.
Podemos ir a la estrofa de
Entren, no me olviden
Me dejen vuestros árboles
A ver, a ver.
¿Esta no?
Entren, no me olviden
Me dejen vuestros árboles
A ver, a ver.
En el fondo del placa
En el fondo del placa
En el fondo del placa
En el fondo del placa
Muy bien.
Gracias. Esta semana que viene.
Adiós.
Adiós.
Adiós.