This graph shows how many times the word ______ has been mentioned throughout the history of the program.
Rosana en concert.
Dissabte, 14 de febrer, a les 10 de la nit, al Teatre Metropol.
Ens presentarà Tarragona el seu darrer treball discogràfic,
marca registrada.
Venda d'entrades a les taquilles del Teatre Metropol.
Al Servicaixa, truquen al 902 33 22 11
i per internet a servicaixa.com.
Rosana en concert.
Dissabte, 14 de febrer, a les 10 de la nit, al Teatre Metropol.
Gràcies a Dios por dejarme en hacer de la mano una canción.
Gràcies a Dios.
Gràcies a Dios por traerme a la vida y llenarla de tanto amor.
Con más dedos.
La darrera vegada que vaig poder veure en concert de Rosana
va ser a Reus, al Pabelló Olímpic.
I una de les coses que mai se m'esborrarà de la memòria
és que en diverses vegades Rosana va baixar de l'escenari,
va estar cantant amb nosaltres
i si abans se'ns agradava a partir d'aquell concert
va ser inoblidable.
I si a més a més posem dins d'una caldera imaginària
la bona música, la simpatia,
les seves lletres,
tot el que comporta en si Rosana
i a més a més li afegim que és 14 de febrer,
el Dia dels Enamorats
i aquest que crec que
pot ser d'aquells dies màgics
que ens dona la vida.
I per parlar-nos una miqueta d'aquest dia tan especial
que millor que saludar a Rosana
que la tenim ja con nosaltres.
Rosana, buenas tardes.
Hola, buenas tardes.
¿Te acuerdas tú de ese día?
Sé que, no sé, has tenido tantos conciertos
ese día de Reus que comentaba yo ahora.
Sí, pero eso fue, además, casi al principio.
Yo prácticamente al principio era una ruta.
Era difícil olvidarse de eso.
Ahí me lo has puesto facilito.
Sí.
Además, una de las cosas que más me gustó
es que, de verdad,
que era como si estuvieras en casa.
Todos los conciertos te los metes en el bolsillo.
Yo lo que sí que intentamos siempre
es que ese ratito que la gente va a encontrarse con nosotros
no solamente sea para encontrarse con la música,
sino para encontrarse con nosotros de verdad
y, sobre todo, aprovechar en mi caso
para encontrarme con ellos, ¿no?
Porque ellos siempre nos llevan una ventaja,
que es, tanto a ti a través de la emisora de radio
como a mí a través de mi música,
pues ellos nos conocen más a nosotros
de los que nosotros los podíamos conocer a ellos, ¿no?
Sí.
Entonces, encontrarlos ahí en el concierto
y no solamente cantar, sino contarles cosas
siempre es una forma mágica
de conocer y de ir conociendo a tu gente, ¿no?
Y es una manera también de enamorarnos, Rosana, ¿eh?
Porque no es broma.
Yo recuerdo otro concierto que estuvieses aquí
en la Plaza de Toros
que ya, bueno, ya nos tenías en el bolsillo.
Pero una vez que bajaste
y además tuvimos la oportunidad
de saludarte justo después del concierto,
que todavía eso,
si te anima a seguirte en todos los conciertos,
ya no te digo nada más, ¿eh?
Hombre, yo creo que sí,
que eso es importante, ¿no?
Que eso, pues lo que decíamos, ¿no?
Sí.
Aprovechar, igual que la gente me regala
esos momentos de tranquilidad,
un día cualquiera cuando yo no estoy trabajando
y me deja estar por ahí por la calle
o entrar en un centro comercial
con la misma tranquilidad con la que van ellos,
pues luego yo les debo el 100%
de esa noche de concierto
y procuro que así sea, ¿no?
Procuro que ellos noten
lo que se les quiere de verdad.
Háblame un poquito de este concierto.
El día 14 de febrero,
yo no sé si es más especial precisamente
por la fecha la cual cae.
Bueno, yo espero que la gente entienda
y no sea como esos días de cine
que la gente va a ver una película
pero aprovecha para otras cosas, ¿no?
Yo espero que no, ¿eh?
Que tampoco pasa nada, ¿eh?
Si la gente quiere estar a otra,
tampoco pasa nada.
Pero, pues bueno, es un día curioso, ¿no?
Sí.
Pero en cualquier caso, básicamente,
lo que queremos es llegar ahí
y vamos con una banda chiquitita
en esta ocasión, ¿no?
Sí.
Con una banda de cuatro músicos
y, bueno, es un concierto entrañable
en el que, a diferencia de los conciertos
que se puedan hacer en plazas de toro
o en espacios abiertos,
pues donde uno puede contar más cosas, ¿no?
Porque el de la primera fila
y el de la última
te están viendo con claridad.
No te escapas, ¿no?
Sí, es como todo más cercanito, ¿no?
Y entonces puede darse más
para esa parte más de comentarios,
de contarles a la gente cosas, ¿no?
Y que vayan pasando cosas.
O sea, que la energía vaya y venga
con mucha fluidez, ¿no?
¿Qué parte del Marca Registrada
nos tenemos que aprender?
Yo creo que...
Las nuevas todas.
¿El de Málaga o el de Madrid?
¿Cuál de los dos?
Bueno, el concepto,
el concepto musicalmente hablando,
es parecido al que hicimos en Madrid, ¿no?
Vale.
Es ese tipo de sonoridad.
Pero no son esas canciones.
Las canciones serán las nuevas
y otras que están en Marca Registrada
y otras que están en otros trabajos
y que no están precisamente
en este último disco, ¿no?
Te he de confesar abiertamente
que he descubierto muchísimas canciones
que ya tenías en el Marca Registrada
que me suenan a Gloria.
Una de ellas es la de Cuéntame.
¡Ay, qué guay!
O de Cuentan, mejor dicho.
Muchas gracias, muchas gracias.
Y mira que tengo los álbums en casa.
¡Qué guay!
Y aquello que dices,
bueno, qué bien suenan, qué bien suenan.
Pero en el Marca Registrada
si le das ese directo,
ese cariño, la gente cantándola,
tarandeándola, todo...
Como que parecen nuevas todas.
¿Sabes lo que pasa?
Que cuando cambia el intérprete...
Sí.
...las canciones cambian.
Y en este caso el intérprete
de un disco en directo es el público.
Sí.
Y el público que estaba allí...
Dios santo, ¿no?
Yo creo que hay que callarse
y grabarle un disco entero, ¿no?
Entonces en ese sentido, no sé.
Yo creo que el público siempre
mirarle a los ojos a la gente
y ver cómo sonríen
y cómo se lo pasan bien.
Pues eso...
O cómo se emocionan, ¿no?
Yo creo que eso siempre
le va a imprimir a un disco en directo
algo que no va a tener prácticamente nunca.
Es posible que sí se consiga,
pero infinitamente
tiene que darse muchas más cosas, ¿no?
Que tú te imagines a la gente
de una manera concreta.
Que ocurra...
Desde un estudio es más complicado
que esa magia se cuele, ¿no?
Además, además, que se nota.
La gente que vaya al concierto
este sábado,
que yo he de decir
que queda un poquito centrada,
o sea, que como no os dais prisa,
os quedáis sin.
Que no hay segundo día,
que no pasa como en Barcelona,
que esto no es justo.
No, no, no, es verdad, es verdad.
Pero, ¿sabes lo que pasa?
Que en Barcelona
íbamos a hacer un día también.
Ya lo sé, por eso me quejo.
Por eso me quejo.
Bueno, pero ahí,
si no me equivoco,
hacemos a dos horas, ¿no?
Ya, ya, pero siempre nos quedamos
con más ganas de Rosana,
ya lo sabes.
Otro día a dos horas también.
Mira, y si sigáis una semana entera,
eh, Rosana,
yo en primera fila
con una claca que tendrías.
Bueno.
Pues así habrá que hacerlo, mujer.
No, la idea la tenemos, ¿no?
¿Sabes lo que pasa?
Dime.
Es guay así,
porque así encuentran
la excusa perfecta para volver.
Claro.
Sí, mira,
acepto la propuesta también, ¿eh?
La acepto, la acepto.
Y por cierto...
Dale por sentado, ¿eh?
Por cierto, ¿cómo va el libro?
Porque aparte de musicalmente hablando,
hace poquito que también sacaste un libro.
Sí, pues muy bien, la verdad.
O sea, mucho más tranquilo, ¿no?
Porque los libros se mueven de otra manera.
Y porque, bueno,
porque esto es un libro
que recopila de alguna manera
las canciones conocidas hasta ahora.
Sí.
Y algunas canciones que son inéditas todavía.
Y luego pensamientos o frases o...
y la verdad es que
cuando la palabra de una canción
se plasma sobre un papel
y no se escucha la música
adquiere otra dimensión, ¿no?
Eso es indiscutible.
Sí.
Se hace...
La imagen se hace mucho más grande
frase a frase, ¿no?
Y de repente una frase que cantaba...
era bonita, pero que se quedaba ahí
de repente en el papel
es como mucho más significativa, ¿no?
Es curioso.
Lo de los libros es curioso,
pero vamos,
nada más lejos de la realidad
que yo me voy a dedicar a escribir libros, ¿eh?
Bueno, sentía...
Es una anécdota, es una anécdota.
Teóricamente dicen que el ser humano
tiene que leer un libro
o tener un libro
o hacer un libro.
Sí.
Tiene que tener un hijo
y plantar un árbol.
¿Tú el libro ya lo tienes listo?
El libro ya lo tengo listo.
Tú ya...
El árbol, el árbol,
pues puede estar de un momento a otro también.
Y el hijo es lo que me voy a plantear
tal y como está el mundo
si debería o no.
Está complicado, ¿no?
Claro, hay que tener cuidado, ¿no?
Tal y como está el mundo.
El mundo está muy frágil ahora mismo, ¿no?
¿Cómo se pueden cantar cosas tan bonitas
precisamente viendo
lo que nos está pasando ahora, Rosana?
Todas estas cosas tan frágiles
como me comentabas.
Yo creo que cuando el paisaje
viene de dentro,
cuando el paisaje viene del corazón,
lo que...
aunque no exista ese paisaje,
te lo inventas, ¿no?
Y yo creo que este es un momento
en el que...
Hombre, es verdad que en el Marca Registrada
hay canciones un poco más duras
como el No Habrá Dios, ¿no?
En el que sí que se hace una exposición
o por lo menos creo que intento
con honestidad y con claridad
hacer una exposición
de lo que se ve en cualquier informativo, ¿no?
Y por otro lado intento también
ponerle remedio a eso
que se ve en los informativos,
también es verdad
que en paralelo a eso
a mí
ese enfado
que me puedo coger
en una canción
como el No Habrá Dios
no es común en mí, ¿no?
En mí es mucho más común
que después de ver algo así
intente alegrar
al que está triste, ¿no?
Buscar ese optimismo nato
que tienes, ¿no?
Sí, la verdad es que sí.
Lo que pasa es que, bueno,
hay de todo, ¿no?
Pero yo creo que todo viene
porque el paisaje está dentro.
O sea, el paisaje de fuera,
a la hora de hacer una canción,
lo que la persona ve
o lo que por lo menos yo veo,
me sirve a mí para recrearme yo, ¿no?
Pero el paisaje de una canción
viene del corazón
y con mucha suerte
y uno de esos días
que el cielo del corazón
está transparente
viene incluso del alma, ¿no?
Yo te veo de pintora, ¿eh?
De cara al futuro, ¿eh?
Yo le echo morro...
Tienes muchos lienzos
que pintar, ¿eh, Rosana?
Yo le echo mucho morro
a todo lo que sea crear.
Sí.
¿Sabes?
Y pinto, pero mal, mal.
Bueno.
Mal.
Un cursillo lo hace cualquiera.
No, yo siempre pinté, ¿eh?
De hecho, en casa,
o sea, en la familia hay pintores.
No hay cantantes,
pero hay pintores, ¿no?
Bueno, ¿tú has cogido otra rama?
Sí, pero yo me he ido
por otro lado para no tener competencia.
De acuerdo.
Que yo de las comparaciones
que son odiosas, ¿no?
Es una broma, es una broma.
Pero sí que hay gente
que se dedica a la pintura
y yo pinto porque le echo morro,
pero no, no, no...
Vamos, pinto porque me gusta pintar
y me ayuda.
También me gusta la fotografía, ¿no?
Yo creo que cualquier cosa
que sea crear a mí
me va a gustar siempre.
Estaba leyendo un poco
la biografía de Rosana
antes de hablar con ella
y me acordaba
de la primera vez
que oí tu voz,
que fue a través
de un programa
que se hacía por las mañanas,
con un tal...
Ay, José Antonio...
Ah, sí.
Avellán.
Como el torero, como el torero.
Sí.
Que además, además,
en aquel momento, claro,
tenemos una gran amiga
que tenéis que escucharla.
Yo creo que fue
un buen redentor tuyo, ¿eh?
Hombre, yo creo que fue
esa semana,
que fue una semana, ¿no?
Sí, sí, sí.
Además, además,
esa semana yo creo
que tuvimos Rosana
para dar comer en el postre.
Sí, sí, sí.
Y no nos cansemos, ¿eh?
Fue durante una semana,
yo me acuerdo, ¿no?
La historia fue que
cuando él escuchó el disco,
pues le encantó
y quiso hacer una cosa
muy especial
y esa cosa especial
era poner el
Si tú no estás
durante una semana
antes de que saliera el disco
y no decir quién era,
ni quién no era,
ni qué cantaba,
ni quién cantaba,
ni qué era, ¿no?
Y que a todos
nos tenía medio locos,
pero quién es,
por amor de Dios,
dime algo.
Aparecía la gente
y decía,
pues es...
Yo qué sé,
y empezaba a decir nombres,
¿no?
Y yo escuchaba cada nombre
que me reía mucho en casa
escuchándolo, ¿no?
Y yo decía,
joder,
es alucinante, ¿no?
Y bueno,
y a la semana
se suponía
que él decía
quién era
el día que salía el disco,
¿no?
Sí.
Y bueno,
y pasó lo que pasó,
¿no?
De hecho,
se colapsó
la centralita,
se colapsó todo
el primer día
que eso no...
Si tú no estás,
y yo siempre digo,
aunque luego
el primer single
a nivel nacional
fue el Talismán,
yo siempre digo
que el que rompió
el rollo,
¿no?
El que rompió
la brecha
y el que hizo
que Lunas Rotas
fuera mágico,
sin lugar a dudas,
fue el Si tú no estás,
¿no?
Por cierto,
me decías que escuchabas
y casi te hacía mucha gracia
precisamente que toda la gente
intentaba buscar nombres.
Sí, sí, sí.
Eso de sentirse...
Yo me partía, de verdad, ¿eh?
Eso de sentirse en la radio,
esas primeras notas,
que esa soy yo, ¿eh?
¿Quieres que te diga una cosa?
La primera vez a mí me dijeron,
mira,
lo vas a poner por primera vez
a las nueve y media de la mañana.
Y yo a las ocho,
claro,
ya abrí el ojo
y pues puse la radio,
¿no?
Y me puse a escucharlo.
Y me quedé medio sobada,
me quedé medio sobada,
¿no?
Estaba medio sobada
de escuchar,
y de repente empiezo a escuchar
el Si tú no estás,
¿no?
Me dijo,
joder,
con perdón de la expresión,
¿no?
Digo,
¿quién ha puesto el cassette?
¿Eh?
¿No?
Pues yo lo tenía grabado en cinta.
Digo,
¿qué le ha puesto el cassette?
¿Qué y yo tal?
Y empiezo a escuchar,
y ya escucho a José
en mitad de la canción
y flipé.
Y flipé del todo,
porque yo,
aunque sabía que era la radio,
yo no paraba de mirar
de un lado para otro
a ver quién había puesto
el cassette,
¿no?
Para que yo estuviera
escuchando algo
que solamente escuchaba
de esa manera,
¿no?
La primera vez,
la verdad,
es absolutamente impactante,
¿no?
La primera vez que te escuchas
en una emisora de radio.
Y todo,
¿qué soy yo?
La segunda también,
pero lo disimulas mejor.
Y sobre todo
si tienes gente alrededor,
¿no?
Sí.
¿Qué tal?
¿Cómo estás?
Además,
esperan ese primer movimiento,
¿no?
Sí,
sí,
no,
no,
y además,
a mí me pasaron dos momentos
fugaces,
pero brutales.
Uno fue ese primer día,
tal,
y otro fue el día
que salió el disco a la venta
que en tres horas agotaron
las copias que habían salido,
¿no?
Del sueño.
Y entonces,
claro,
me llamaron,
pues me llamó un amigo,
¿no?
Y me decía,
oye,
tía,
que estaba completada el disco
y está agotado,
y a mí me entró la risa,
¿no?
Y dije,
venga ya,
tío,
tú me quieres mucho,
digo,
vete a otros centros comerciales,
digo,
ya verás que estás,
o a lo mejor es que no ha llegado,
dice,
no,
no,
no,
yo he ido a tres,
en concreto,
a tres,
en Madrid,
y me han dicho
que no es que no haya llegado,
sino que se ha agotado,
y que si quería,
que me reservaban uno y tal,
digo,
bueno,
pues,
llamo a la compañía
y la compañía aún no lo sabía.
Ostras.
Y entonces ya,
con toda la risa del mundo,
me voy con dos o tres amigos
que tenían ganas de partirse de risa.
Sí.
Uno de ellos además
me había contado una cosa muy simpática,
dice,
dice,
llegué,
dice,
y fui a coger el último
y lo cogió una señora
justo a la vez que yo.
Sí, señora,
que yo la conozco,
démelo,
démelo.
Exactamente,
y le dijo,
oye, señora,
déjeme que me lo lleve,
que es amiga mía,
y le dijo,
pues si es amiga tuya
que te lo regales.
Anda.
La señora la acabó rápido,
¿eh?
Y la señora dice,
y me pegó un tirón del disco
y se lo llevó a la tipa,
me decía.
Que yo peleas como la...
Por favor,
por favor,
que es mío,
mío.
De verdad,
espectacular.
Y entonces,
bueno,
pues nada,
nos fuimos a un centro comercial,
¿no?
Sí.
Y estos decían,
pregunta tú,
anda,
que ya no vas a preguntar
nunca más por un disco tuyo.
Y digo,
por favor,
mi disco es Rosana.
Y se queda así la señorita
y dice,
está agotado,
dice ella.
Ya no damos de sí.
Dice,
mira,
tengo una lista.
Si quieres apuntarte en la lista,
cuando estés,
te llamo.
No me digas que hay lista.
Sí, sí, sí,
¿y tu nombre?
Y ya dije otro nombre,
¿no?
Sí.
Di mi número,
pero con otro nombre,
¿no?
Digo,
no voy a decir,
no, no,
si yo llámeme para comprarme uno.
Es que no me lo acababa de creer,
por eso he venido.
Pero te juro que fue espectacular.
Y luego,
efectivamente,
como a las cuatro y media
o así de la tarde,
me llamó la compañía discográfica
y me dijo,
oye,
que los discos se han agotado todos
y que no sabemos qué vamos a hacer
porque no teníamos previsto nada.
Que se quedan las fábricas por la noche,
esta noche se quedan fabricando
porque la demanda es brutal.
Y bueno,
de hecho,
íbamos pues de 80.000 en 80.000
y cada vez que me daban el disco de platino
ya llevaba doble
y cuando escogía el doble
me daban el triple.
¿Ya tienes sitio en casa
para todos los premios
y para todo lo que te han dado
y lo que te falta por darte?
Yo los he colocado
todos los premios
en un sitio
donde creo que deben estar,
que es en la oficina,
porque al fin y al cabo
es donde trabajamos todos.
Yo siempre creo que aunque
al fin y al cabo
la gente me conoce a mí
porque soy la que da la cara,
por decirlo de alguna manera,
sí que es cierto
que los premios
son un trabajo en equipo.
Que si no tienes un manager,
no tienes una oficina,
no tienes una...
Si no tienes gente
a tu lado
que trabaja contigo,
pues por muy bonitas
que yo haga las canciones,
si no hay nadie como tú
que me haga una entrevista
o que ponga mi música,
mis canciones pueden ser preciosas
pero no se entera nadie.
Entonces yo creo que
los premios deben estar
en el sitio de trabajo de todos
y ahí los tenemos.
Bueno,
por la parte que cuenta conmigo,
por la parte que me toca,
aquí estamos.
Muchas gracias, guapa.
Guerreando con Rosana,
claro que sí.
Gracias, de verdad.
Rosana,
y el día 27,
si no recuerdo mal,
es el último concierto
de esta gira,
el 27 de febrero
y te nos vas de nuevo
para las Américas
o quedas,
te descansarás.
No, no, no,
llegamos hasta abril.
Ah,
y es que he entrado
a través de la página,
digo porque si queréis entrar
tenéis una página preciosa
donde hay un montón de cosas,
un montón de datos,
un montón de fotos
de Rosana.
Ah, claro,
pero porque a lo mejor
lo que no me siento
actualizándolo.
Vale, vale,
y es que ahí se me quedó.
Yo, eh,
la verdad es que
tendría que mirar ahora mismo.
Pues se me quedó
en el 27 de febrero,
digo,
no puede ser,
no puede ser.
No, no, no, no,
no, no,
no, seguimos hasta,
te digo.
Dime.
Hasta finales de abril.
Finales de abril.
A finales de abril
más o menos
acaba esta gira
que estamos haciendo
de teatros
y luego,
si Dios quiere,
ya nos vamos,
nos vamos a América.
Pero un descansito
tendremos,
¿no?
Pues sabes qué,
aunque sea una semanita.
Yo se lo estaba diciendo
esta mañana
a un compañero todo
que empiezo a notar
que necesito
un descanso de verdad
porque hasta ahora,
desde el 96 hasta ahora
lo que he hecho
es descansar,
pero un falso descanso,
¿no?
Como los falsos directos,
¿no?
Sí, sí, sí.
He hecho un falso descanso
porque la realidad
es que en un momento determinado
cuando he parado
de mis discos
y de mis giras,
al final me he puesto
en paralelo a eso.
Sí.
¿Sabes?
Siempre me he puesto
pues a producir
un grupo de gente nueva
o a producir tal
o a hacer...
O a hacer una ayudita
a algún que otro grupo
de hip hop...
Siempre, siempre, nunca.
Parar, o sea,
parar en el sentido de parar.
He dejado de aparecer
en televisión y en radio
con mi música,
pero no he dejado
de estar trabajando
con la música
y yo creo que
me empieza a llegar
el momento en el que
de verdad voy a tener
que parar
un par de meses y...
¿Tanto no?
¿Una semanilla?
¿Dos?
¿Dos meses?
¿Dos meses?
Solo pido dos.
En siete años,
dos meses no está mal, ¿no?
Bueno, vale, vale.
Concedido, venga.
Sobre todo,
sobre todo para
para preparar
un próximo disco
con toda la energía
que esto necesita, ¿no?
Y recargar pilas
que también se necesitan.
Sí, sí, de todas, todas.
Pero la verdad es que
tengo ganas
de descansar,
pero lo justo, ¿eh?
Y te digo la verdad
es que te digo dos meses
y seguramente en una semana
efectivamente
esté ya diciendo
pero es que me aburro,
vamos a hacer algo, ¿no?
Pues hago esto,
esto no es trabajo y tal
y otra vez me meto de cabeza, ¿no?
Hombre, mejor que sea así, ¿eh?
Sí, la verdad es que sí.
Porque esa es la esencia de Rosana.
Te digo con honestidad
que lo mejor es eso, ¿no?
Pero que es verdad
que yo me tengo que poner eso,
decir, mira,
por primera vez voy a obligarme
a tener algún descansito, ¿no?
Y voy a ponerme más
para si tengo menos
que, bueno,
que sea culpa mía, ¿no?
Porque si digo una semana
y luego necesito tres meses
siempre será culpa de los demás, ¿no?
Pues sí.
Yo digo que no.
Y te llamaría
y te ponía a ti a parir y todo.
Vale, vale, hazlo, hazlo.
Me espero, me espero.
Entonces, Rosana,
ya para acabar
que ya sabes cómo funcionan
todas estas cosas.
Que empezamos,
que podíamos estar aquí tú y yo
una hora y media
y tres horas y cuatro horas
y al final me dirías
por favor, pesada de la radio,
¿quieres callarte ya?
Para nada, es un gustazo.
Invítame a la gente
que se venga el día 14,
que deje a su enamorado
al lado del sofá
y que esté delante.
Yo lo que le propongo a la gente
es que se lleve
a su enamorado al concierto.
Vale.
Más que dejarlo de lado.
No, porque algunas veces
sabes que se pasa siempre, ¿no?
Que los caballeros dicen...
Que se lleve a su enamorado
y que se lleve a su cumpleañero, ¿eh?
Acepto.
Que hay de todo, ¿eh?
Lo sé, lo sé.
Hay de todo, ¿eh?
Entonces,
hacedme el favor todos de ir
que nos vamos a reír un rato.
Y quién sabe,
a lo mejor si hay algún cumpleañero de más
o algún enamorado de más,
lo mismo hacemos un día especial
de San Valentín
y yo qué sé.
A lo mejor sacamos una tarpa
o algo.
Eso es una directa, ¿verdad?
Lo mismo sí, ¿eh?
Pero más directa ya no puede ser.
Ya más directa no puede ser.
Te digo eso
y te digo que paso lista.
Vale.
Vale.
Presente.
Rosana, pues muchísimas, muchísimas gracias.
No cambies nunca, por favor.
Ándale a ese favor, ¿eh?
Gracias.
Es lo único que te pido.
Bueno, yo espero que ya,
como dicen en mi tierra,
después de vieja ya no me caiga
una maceta en la cabeza, ¿no?
Pero igual procuro siempre tener
a los amigos y a mis amigos
y a la familia
y a la gente que me quiere bien cerca,
lo suficientemente cerca,
como para si se me despegan
los pies del suelo
que tiren de mí, ¿no?
Pues como dices en tu canción,
muchísimas, muchísimas gracias a ti.
Gracias, guapa.
Gracias de veras
y hasta pronto, ¿vale?
Gracias.
Gracias a ti, gracias por tantas cosas
que no van a poder caber aquí.
Gracias a ti, gracias al mundo entero.
Gracias, mi gracias, muchísimas gracias
al que me quiere, al que me odia,
al que pasa, solo quisiera devolver tanta magia
a la gente de mar, a la gente de tierra,
a la gente que grita que se pare la guerra.
Sí, gracias a ti.
Sí, gracias a ti.
Gracias a las señoras, a los caballeros,
si me permiten a los niños primero.
Sí, gracias a ti.
Yo, contigo me caso, contigo me quedo,
entre todos ustedes me quito el sombrero.
Sí, gracias a ti.
Muchísimas gracias.