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Arxiu/ARXIU 2005/ENTREVISTES 2005/


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Time transcribed: 18d 4h 18m 22s

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D'aquí dos minuts serà tres quarts d'onze del matí.
Seguim en directe des de la quarta hora del matí de Tarragona Ràdio,
parlant ara d'una qüestió relacionada amb la solidaritat
i la cooperació amb el Tercer Món,
concretament amb Centramèrica
i amb un dels països emblemàtics d'aquesta zona del món,
com és Nicaragua.
L'organització Setem, aquí a Tarragona,
col·labora, participa en un programa de beques i de cooperació
amb entitats i, sobretot, centres educatius de Nicaragua.
Un d'aquests centres és l'escola Quinxo Barrilete,
de la ciutat de Managua,
que acull un miler d'erenys
amb unes característiques i especificitats molt concretes.
Avui, un dels seus responsables,
el subdirector Luis Manuel Fariñas,
ens acompanya, aprofitant que es troba uns dies aquí a Tarragona,
gaudint de vacances,
però també explicant la situació del seu país.
Senyor Luis Manuel Fariñas, buenos días.
Buenos días.
Y bienvenido a Tarragona.
Muchas gracias.
¿Ustedes están de vacaciones estos días?
Sí, estamos aquí de vacaciones.
Pero siempre se puede aprovechar para explicar un poco lo que hacen,
¿no?, desde la escuela.
Sí, nosotros estamos para servir,
para servir en todo aquello que signifique aclarar,
orientar y poner un poco cómo está en otro país.
Somos el centro de Centroamérica
y prácticamente somos un atractivo mundial.
Hablemos, pues, de la escuela Quincho Barrilete.
Explíquenos un poco su historia
y luego podremos explicar cómo participan en este programa de cooperación de becas.
Sí, nosotros somos un proyecto educativo escolar que surgió hace 24 años en el barrio Sanjuda, Managua.
Ese proyecto educativo escolar es exclusivamente para los menores de la calle,
los niños de la calle y los menores en situación de alto riesgo.
¿Quiénes son estos?
Los que venden, los que lustran, los que cantan en los buses,
los que viven en situaciones sociales muy deprimentes,
los que viven en extrema pobreza,
son jóvenes en situación de alto riesgo
que quieren llegar a hacer algo en la vida.
Y entonces nosotros, hace 24 años, fundamos este proyecto educativo
desde la revolución nicaragüense a principios de los 80.
Y 24 años después, el objetivo continúa siendo el mismo,
ayudar a estos niños a la calle.
Sí, pero estamos viendo 24 años después
que los excluidos del sistema siguen siendo más.
Estamos viendo 24 años después
que la situación socioeconómica de la gente en Nicaragua
es más de extrema pobreza.
Es decir, en un ambiente de democracia, entre comillas,
en el país, se han multiplicado más los pobres,
se ha multiplicado más la miseria,
se ha multiplicado más el desempleo,
se ha multiplicado más la situación de los niños de la calle.
Entonces, la respuesta sigue siendo hoy, más que nunca,
una respuesta urgente.
Es respuesta urgente y necesaria.
¿Cuántos niños hay ahora, por ejemplo, en el colegio?
950 menores.
¿Ahora mismo?
Ahora mismo en escuelas.
¿Cuántos han debido de pasar en estos 24 años de historia por el centro?
Hombre, prácticamente tenemos casi como unos 10.000,
12.000 estudiantes que han podido pasar por el colegio,
que se han preparado desde primaria hasta secundaria, de bachillerato.
¿Qué edades tienen?
Entre 7 y 18 años.
¿Y cuáles son los casos más extremos?
De todos los niños que han llegado al colegio,
¿cuáles han sido las situaciones más extremadas que ustedes han visto?
Lo que más nos llama la atención y más nosotros hacemos énfasis en los asuntos del muchísimo,
son hijos de madres solteras, prácticamente abandonadas por la pareja.
Entonces vemos mucha extrema pobreza desde ahí, mucho abandono económico desde ahí,
y también vemos que eso da lugar y da pie a una prostitución y a una delincuencia temprana en estos jóvenes,
porque no son hogares constituidos, son hogares desintegrados.
Y prácticamente la droga, el licor, la prostitución y la violencia intrafamiliar son parte de la vida de este hogar.
Entonces usted imagínese cómo crecen estos muchachos.
Crecen en un ambiente de violencia, un ambiente de rebeldía, un ambiente de rechazo.
Son rechazados y por ende tienen que rechazar.
Desde la escuela a estos niños ustedes les ofrecen evidentemente toda la educación,
pero también les ofrecen algo más.
Sí, nosotros tenemos desde las 7 de la mañana hasta las 5 de la tarde todo un proyecto educativo con los muchachos.
De tal manera de que por la mañana estudian, almuerzan dentro del colegio,
y luego continúa lo que hemos denominado las tardes preventivas.
¿Qué significa la tarde preventiva?
Jugar, recrear, platicar, charla, hacernos con ellos chavalos,
hacernos con ellos educadores desde su realidad y no desde un escritorio.
Y nosotros también como maestros nos sentimos muy satisfechos de saber que no nos ven como profesores,
nos ven como amigos, nos ven muy cercanos.
Y para que logremos esa cercanía, la escucha, el diálogo, el estar atento a su situación de ellos,
los hace sentirse a ellos muy importantes.
¿Estos niños siempre abandonan el colegio a los 18 años con la mayoría de edad o no?
¿O pueden dejarlo antes?
Lo pueden dejar antes según la situación económica de cada familia.
En el caso concreto, nosotros hemos tenido ya 13 generaciones de bachilleratos.
Estas 13 generaciones de bachilleratos terminan a los 18 años.
Y luego después surge la necesidad de apoyarlos después del bachillerato.
Y es donde nace el programa de becas para apoyar a estos jóvenes que recién se han bachillerado la secundaria.
Hablemos de este programa de becas, que es en el que colabora una organización no gubernamental de aquí de Tarragona como SETEM.
¿En qué consiste este programa de becas?
Pues justamente como lo explicaba hace poco, de que los estudiantes nuestros son de extrema pobreza.
Al terminar la secundaria prácticamente hasta ahí llegaron.
No continúan más porque necesitan ir a trabajar, necesitan sacar adelante el problema de la familia.
Entonces, Tarragona, SETEM Tarragona, vio, como ellos viven llegando al colegio constantemente,
vio, observó, sintió la necesidad de dar una respuesta en conjunto con nuestro colegio
para ver qué se podía hacer por tantos jóvenes que se bachilleraban.
Y es así que en 1995, exactamente hace 10 años, surge el programa de becas
como una forma de apoyar por 5 o 6 años la carrera profesional y universitaria de estos jóvenes
que no tienen otra alternativa más que de tecnificarse y si pueden prepararse en la universidad.
Pero de lo contrario se quedan en el aire, vuelven a quedarse solo como estudiantes bachilleres.
¿Y qué nivel de éxito y de fracaso ha tenido este programa?
En el sentido de que cuántos jóvenes han podido luego especializarse en alguna profesión
y han tenido salida profesional a partir de estos estudios.
Nosotros damos gracias a Dios a que con la creación del programa de beca
se le ha dado un lugar importante a estos muchachos.
Por ejemplo, tenemos estudiantes abogados ya, tenemos estudiantes médicos,
tenemos estudiantes de ingeniería, tenemos estudiantes y que apoyan la escuela.
Ahora ya están preparados y entonces prácticamente los frutos se ven.
Los frutos son, y tenemos siete maestros también, maestras, exalumnas
que se han preparado de alguna u otra manera con el apoyo de este programa de becas.
O sea, para nosotros es importante estar preparando este relevo, el relevo generacional.
La escuela va a quedar en buenas manos, la construcción de la escuela está en manos
de los exalumnos que estudian ingeniería, la defensa de la personería jurídica de la institución
están en manos de abogados que han servido del programa de becas.
O sea, prácticamente nosotros sentimos que sí hay respuestas muy fuertes y muy importantes para el colegio.
Prácticamente también repercute, impacta en nuestra escuela la preparación de estos jóvenes.
Este programa de becas, una idea surgida hace diez años, ¿la voluntad es mantenerlo, es incluso aumentarlo si se puede?
Exactamente. Yo creo que gracias al programa de becas, el proyecto educativo de los quinchos tiene rostro de futuro.
Porque si no tuviéramos el programa de becas, ¿quién nos va a apoyar?
Entonces prácticamente el rostro de futuro es que estamos preparando la nueva generación
que se va a encargar de los destinos de nuestra institución educativa.
El próximo año, el 11 de mayo de 2006, estamos cumpliendo 25 años de vida.
Ya la bola de plata le llamamos allá nosotros a estos 25 años.
25 años de caminar, 25 años de ir creando conciencia, 25 años de luchar, 25 años de solidaridad, 25 años de mucho esfuerzo.
Y no podemos dejar que eso se caiga. Tenemos que dejar que la nueva generación lleve en sus manos este proyecto educativo,
que para nosotros es un proyecto de vida, es un proyecto de futuro.
Más allá de la ayuda que reciben, por ejemplo, de Setem Tarragona para este programa de becas,
¿la entidad, la escuela, el colegio, cómo se mantiene económicamente?
¿Reciben ayudas del gobierno nicaragüense o de otras instituciones?
El gobierno nicaragüense, que le llaman allá el gobierno de la nueva era, es un gobierno prácticamente neoliberal,
es un gobierno prácticamente que no piensa en función de los más pobres.
Entonces hemos sufrido las consecuencias de que no han hecho recortes económicos.
Somos concertados, le llaman ustedes aquí, allá nosotros llamamos subvencionados.
Y entonces en eso concertado nos han ido quitando dinero y ha disminuido un poco el apoyo,
bastante el apoyo económico hacia el colegio.
De esta manera que tenemos amigos de España que de alguna u otra manera sostienen y ayudan a sostener este programa,
este proyecto educativo nuestro.
Sin embargo, nosotros somos del criterio de que algún día en Nicaragua el amanecer va a dejar de ser una tentación
y vamos a seguir adelante, porque los políticos que gobiernan nuestro país no sirven.
La gente, la clase política de Nicaragua ha defraudado a muchos nicaragüenses.
Entonces la esperanza en quién está, en quiénes está, solo en los pobres.
Somos los pobres los que tenemos que sacar adelante del país,
porque hasta ahora no ha habido ninguna solución al problema.
Entonces tenemos que preparar hombres, mujeres, muchachos y muchachas de bien,
para que sequen adelante nuestro país.
Nosotros no nos vamos a doblegar ante nadie.
Estamos dispuestos a luchar y a seguir adelante para que en nuestro país el amanecer deje de ser una tentación.
Hace pocas semanas, señor Fariñas, estuvo aquí en estos estudios,
porque estaba aquí en Tarragona el exministro de Cultura de su país,
el exministro Ernesto Cardenal, que vino a recibir un premio.
Él se mostraba bastante decepcionado y negativo incluso con el presente y el futuro de Nicaragua.
Ustedes que dirigen una escuela con estas iniciativas tan interesantes como es este colegio Quincho Barrilete,
¿cómo ven el futuro?
Ustedes que trabajan con los jóvenes, con los niños y los jóvenes de Nicaragua,
¿cómo ven el futuro de su país?
Muy incierto, muy inseguro.
Es una incertidumbre extraordinaria.
Sabemos de dónde venimos, pero no sabemos hacia dónde vamos o hacia dónde nos llevan.
Hay mucha decepción, además de decepción, hay mucha indiferencia ante todo lo que está pasando.
No hay credibilidad, ya no se cree en nadie.
Los políticos, los líderes no se ven, no están al alcance del pueblo.
Entonces, prácticamente nosotros sentimos de que la escuela nuestra, pues, de alguna u otra manera
tiene que entrar en el proceso de ir creando personas mejores de servicio.
Nosotros tenemos un lema de Leonardo Boff muy fuerte.
El que no vive para servir, no sirve para vivir.
Y ese es nuestro lema.
Si no formamos gente para que sirva a este país, este país fracasará.
Este país seguirá siendo el más pobre de América Latina.
En el marco de esta situación, de todas maneras, experiencias como esta que comentamos hoy
de la escuela Quincho Barrilete ayudan a mejorar como mínimo el estado de ánimo
y pensar que habrá jóvenes en el futuro que podrán ser abogados, maestros, en fin,
como ya han tenido las primeras generaciones.
Esta es la situación que hoy queríamos explicar por la ayuda de una organización de Tarragona
como es SETEM, que colabora en este programa de becas y que ayuda a que estos jóvenes de la calle,
niños de la calle de Nicaragua, puedan ser alguna cosa en el futuro desde el punto de vista profesional.
Señor Luis Manuel Fariñas, subdirector de la escuela,
muchas gracias por venir esta mañana a los estudios de Tarragona Radio,
aprovechando estos días en que se encuentran aquí de vacaciones en Tarragona.
Gracias. Feliz aniversario para los 25 años.
Muchas gracias.
El año que viene y, en fin, que continúe este trabajo tan interesante que hacen desde la escuela,
desde Quincho Barrilete en la ciudad de Managua.
Sí, muchas gracias.
Mucha suerte.
Ok, gracias.
Buenos días.
Buenos días.