ja veurà per què ho diem, entre altres coses.
És autora d'un decorat que realment,
cada cop que aixequem la vista dels papers, ens transporta.
Ens transporta a un món de sentiment, de música.
En uns moments saludem Jorge López de Guerreño,
l'autor de Les Mirades sobre el Jazz,
que guarneix aquest vestíbul del Teatre Metropol.
Serà després d'una petita pausa per la publicitat.
Xana, t'obre les portes a un món màgic i misteriós.
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El matí de Tarragona Ràdio.
La una del migdia, no un minut, Jorge López de Greño,
muy buenos días.
Buenos días.
Yo en principio tenía muy claro que lo que iba a hablar contigo
era de pintura y sobre todo de estas magníficas obras
que nos envuelven,
pero me gustaría ser capaz de administrar el tiempo
para hablar de música,
para hablar de arte,
para hablar de las grandes estrellas
como la que nos acompañó anoche aquí al Teatro Metropol,
porque, de hecho, yo te preguntaba,
esto del jazz y la pintura,
es que va todo junto, ¿verdad?
¿Para ti?
Yo creo que no solo para mí.
El jazz tiene una estética muy concreta
y es muy fácil.
Bueno, en mi caso había dos aficiones,
la música y la pintura,
pero yo creo que hay muchos músicos aficionados a la pintura
y muchos pintores aficionados a la música.
Yo, por lo que hago,
pues sí que tengo bastante interés
en ver otra obra pictórica
de gente que se acerca al mundo del jazz
y es un mundo bastante más amplio
de lo que parece en principio.
Si no lo conoces,
te puede parecer que habrá tres o cuatro colgados
en el mundo por esta música
que pintan y que hacen cosas que tienen que ver con ello,
pero la sorpresa es que hay muchísimo más
de lo que parece en un principio.
Detrás de estas obras
hay una experiencia vital importante,
detrás de estas obras
hay una formación académica muy importante también
y una experiencia de vida
que te ha llevado por diferentes lugares
haciendo diferentes actividades
pero siempre vinculadas
de una manera al ámbito pedagógico,
a la música,
a la expresión artística
y por diferentes países.
Por lo tanto,
tu perspectiva debe ser bastante abierta.
Por obligación.
No tienes más remedio.
No, no, no.
Lo cierto, bueno, no sé,
yo creo que me ha llevado un tiempo
a admitir que...
Eres doctor en Bellas Artes.
Hice el doctorado todos los cursos
pero no llegué a leer la tesis
porque como hago tantas cosas
al final no tengo tiempo de terminar muchas.
Entonces, pues bueno,
una de las cosas que he dejado
sin terminar del todo
la escribí,
la escribí en el 93
y la dejé aparcada.
Estaba matriculada
como para leerla
ya en la Universidad del País Vasco
porque fue más o menos
la época en la que decidí
que volvía a casa
y me establecía de nuevo en Bilbao
pero finalmente no la leí.
Pero bueno,
sí que hice todo el tercer grado entero,
o sea que sí que tengo
una formación académica importante.
Además es que estudiar
siempre me ha gustado,
siempre ha sido parte de mi vida
y nunca he tenido ningún problema
en hacerlo mientras hacía otras cosas.
Por lo que he podido leer sobre ti,
entre otras cosas
has estado en Estados Unidos
participando en programas de cooperación
que relacionan el arte
con el jazz,
con el hip hop.
¿Qué te llevó a hacer
este tipo de actividades?
Eso vino más desde el lado musical.
Es decir,
yo fui a Estados Unidos
a estudiar arte
pero tenía una beca
que me llegaba para muy poco.
Llegué además en un momento
en el que la peseta
estaba muy mal frente al dólar.
¿En los 80 más o menos?
Sí, en los 80.
Entonces, bueno,
pues me pasó una cosa
tan material
como que no me alcanzaba
para vivir
con lo que tenía
de la beca
que me dieron
del Ministerio de Asuntos Exteriores.
Entonces,
lo que hice fue,
bueno,
pues ya tocaba
de forma matertal
y tuve bastante más contacto
de lo que había tenido
en Europa con la música
por obligación.
Allí hay mucha actividad
en bares y demás
de música en directo
y toqué bastante.
Entonces,
me metí en un mundo
como siempre he tenido
como muchos intereses a la vez.
Mi música principal
ya era el jazz
pero me interesaba muchísimo
el hip-hop
que estaba además
en su edad de oro.
Me interesaba desde siempre
el funk.
Siempre me ha gustado mucho
la música
muy de raíces,
muy negra.
Escuchaba bastante reggae
también.
Entonces,
me fui metiendo
en una historia
como de multidisciplinar
que me llevó
a dar con estas asociaciones
que se daban todavía
en la época
muy de vanguardia
que trabajaban
con gente desfavorecida
en barrios terribles
que había en la época
en Queens,
en Brooklyn,
en Manhattan mismo,
en el Bronx,
en sitios así.
Entonces,
lo que hicimos fue,
bueno,
pues con otra mucha gente
había cursos de música
para sacar a los chavales
de los malos rollos
de la calle
y enseñarles a hacer
otras cosas.
Había cursos de arte
y yo como hacía de todo
pues empecé a hacer
un poco como
de nexo de unión
entre unas cosas
y las otras.
Lo que hicimos fue
montar unos programas
donde a la gente
le enseñábamos
la historia del jazz
mientras les enseñábamos
a pintar,
les enseñábamos también
a hacer grafitis
pero de una manera constructiva,
no a firmar
fastidiando toda
la estética de la ciudad
y les enseñábamos también
lo que era la historia
de lo más importante
de la cultura americana
que era el jazz.
¿Y qué tal la experiencia?
Bueno, pues la experiencia
tuvo sus momentos
absolutamente increíbles.
Desde el aspecto artístico
yo aprendí muchísimo,
contacté en su momento
con gente que estaba
como en su cumbre artística.
Fue un momento también
que curiosamente
en los discos
de la época
la gente no se hace idea
de lo que fueron
aquellas experiencias
de mezclar el hip hop
con el jazz
y desde el punto de vista
de lo que a mí me tocaba
que era el arte
también fue muy interesante.
Es decir, yo hoy día
lo que hago
fundamentalmente
para ganarme la vida
es pintar murales enormes
y allí fue donde aprendí
a afrontar proyectos inmensos
poniendo de acuerdo
a mucha gente
para hacer grafitis
en ciudades
y mejorarlas estéticamente.
¿También estuviste en París
durante una época
de tu vida?
Sí, bueno, mi familia
es medio, te diría
que soy casi culturalmente
tan francés como español
y sí, he pasado muchas temporadas
en París.
Estudié música allí también.
También tuve muchísimo contacto
con la escena parisina
del jazz, hip hop.
Bueno, de aquella época
conocí, por ejemplo,
a gente que está relacionada
con la artista
que vimos ayer
en el concierto aquí,
a Didi Bridgewater.
Bueno, sí, también estuve
por ahí una temporada.
Y dime una cosa, Jorge,
¿qué tiene Francia
que acoge a tantos músicos
de jazz
respecto a otros países europeos?
Bueno, el caso
de Didi Bridgewater
que fue el artista de ayer.
Y hay otros artistas
del jazz,
está muy presente.
Está muy presente
porque, bueno,
pues Francia fue ya
antes de la Segunda Guerra Mundial
era uno de los núcleos
europeos del jazz.
Curiosamente,
el otro era Londres,
pero también Berlín.
La gente no sabe
y ahora creo que hay
alguna publicación por ahí
que habla del jazz
en la época de los nazis y tal.
Pero París era un centro musical
muy, muy potente.
Después de la guerra
fue al final
como el centro, digamos,
de la Europa reconstruida
por los americanos.
Era París,
había cantidad de músicos
allí todavía.
Entonces, bueno,
tiene una larga tradición.
Los músicos franceses
eran muy buenos músicos de jazz
ya desde los años 40, 50.
y después,
en la época de la revolución
del free jazz,
muchísimos músicos
que se refugían
en Francia principalmente.
También en los países nórdicos,
también algunos en Alemania,
pero sí,
Francia tiene una conexión
con el jazz
muy, muy grande.
Hay que tener en cuenta
que también desde
antes ya de la Segunda Guerra Mundial
la gran, gran figura del jazz
que no es americana
es un músico que es gitano
y de origen más belga
que francés
que es Jean-Gorreijard
pero es un músico
que desarrolla casi toda
su actividad musical en Francia.
¿Por qué todos los cuadros
que tenemos delante
son intérpretes negros?
¿El jazz no tiene color o sí?
No, para mí no.
Pero tus cuadros solamente...
Vaya, si no se me ha escapado algo.
Pues ahora que me lo dices,
en esta exposición en concreto
me parece que no hay...
Sí, hay aquí algunos músicos blancos.
Sí, pero como son
de más pequeño formato
no lo había observado
pero la mayoría son negros.
Pero la mayoría son negros,
tienes razón, es cierto.
¿Por qué?
Bueno, cada uno elige
la música que más le gusta
dentro del espectro enorme
que es el mundo del jazz.
Entonces, yo siempre he tenido
una tendencia muy, muy grande
a escuchar fundamentalmente
música negra
y a entender el jazz
como una música
que básicamente es una música negra.
Otra cosa es que luego
también haya grandes intérpretes
blancos
pero para mí sigue siendo
una música fundamentalmente
o básicamente negra.
Lo que no quiere decir
que no haya
excelentísimos músicos
de jazz europeos,
asiáticos,
blancos, negros, amarillos
de todos los colores.
Pero yo tengo que decir
que para mí fue muy importante
además la estética
de la última gran asociación
de músicos revolucionarios
de los años 60.
Yo llego a Estados Unidos
en una época muy concreta
que es la época
en la que la escena
de Nueva York
de vanguardia
se mueve en los lofts
y en esos lofts
la gente más famosa
que actuaba
venían de Chicago
y de una cosa
que se llama
la Asociación para el Avance
de Músicos Creativos.
Es una asociación
además con la que yo
tuve contacto
cuando estuve haciendo
esos programas
como de interdisciplinares
de enseñanza
y demás
y la verdad
es que me aceptaron
bastante bien.
El lema
de esa asociación
desde los años 60
es
una gran música negra
lo anciano
o lo tradicional
de cara al futuro
y bueno
yo siempre lo he hecho
como mío.
Yo no diría
que la música
que escucho
o que pinto
es solo jazz.
Aquí hay también
músicos judíos
como John Shorn
o Greg Cohen.
Hay también
algunas imágenes
de M. Selen de Gochelo
que es un artista
que tiene toques de jazz
pero también
de otras músicas
y escucho
digamos que
sí que igual
el 70% del tiempo
jazz
es el 70%
de mi interés
pero también
escucho muchísima
música africana
muchísimo soul
muchísimo
cantidad de funk
bastante rock americano
no diría que mucho
pero bastante
y luego evidentemente
tengo desde siempre
un gran interés
por el reggae
pero además
estoy casado
con una mujer
jamaicana
y que además
tiene muchísima relación
ella también
con la música
por otros temas
entonces
sí, también
oigo mucha música
de ahí.
¿Serías capaz
de recordar
qué música
escuchabas
cuando pintaste
alguna de estas obras?
Casi siempre
No es un concurso
no te preocupes
y no lo voy a contestar
como un concurso
porque no me hace falta
porque es muy sencillo
yo normalmente
cuando pinto
no pinto
las caras
de la gente
no se trata de eso
hay mucha gente
que viene a la exposición
y le impresiona mucho
que si capto
la mirada
que si que bien
dibujo
eso al final
es la técnica
pero igual que en la música
la técnica es una parte
pero si no cuentas algo
no tiene ningún interés
aquí pasa un poco
lo mismo
yo cuando le pinto
o dibujo
a Greg Osby
estoy escuchando
a Greg Osby
además
la gente que pasa
frecuentemente
por mi estudio
que siempre está abierto
y pasa un montón de gente
lo sabe
es un sitio
donde siempre
está sonando música
normalmente
la música que se está pintando
es la música
que se está escuchando
incluso a veces
hasta tengo algún instrumento
más frecuentemente
la batería
tú pintas música
yo pinto música
tú no pintas músicos
pintas música
es que no quiero pintar
utilizas un poco
lo que es la fisonomía
del músico
para que no se te escapen
las notas del cuadro
pero
es que no quiero pintar música
es muy difícil de escribir
a la gente que está escuchándonos
y no tiene delante
yo es que como los tengo delante
puedo hablar así
que vengan
porque es que es
te puedes estar así
mucho rato
yo creo que si nos pusieran
un poquito de música
podríamos
claro
es que
es difícil
tú lo tienes más fácil
porque lo tienes delante
bueno pero ellos también
que pueden venir
cuando quieran
al vestíbulo
deben
y además tú estás viviendo
muy desde dentro
un festival de jazz
que es una situación
muy especial
entonces bueno
pues está la gente
más sensibilizada
pero bueno
pues por ejemplo
a mi izquierda
tengo un cuadro
de Miles Davis
y el que llega
y no entiende así
mucho de esto
le sorprende
ver a Miles Davis
en pleno solo
y como luchando
contra unos aviones de papel
aviones de papel
algunos de ellos
coloreados
sí
bueno pues
lo que aparece
en los aviones de papel
yo me
voy a hacer
un pequeño inciso
yo en la vida
intento
funcionar
con ideas
muy muy sencillas
entonces
me repatea
que es una palabra
que me debería usar
pero la voy a usar
me repatea muchísimo
el carácter intelectual
que se le quiere dar
al jazz
a veces
es una cosa
que a mi no me va a nada
para mi es una música
que está muy viva
y el arte también
tiene que estar vivo
entonces
no me gusta
que la gente
se tome las cosas
muy en serio
y no me gusta
de la misma forma
las convenciones artísticas
y que la historia del arte
sea algo sagrado
y que todo el mundo
nos tenga que mirar a los artistas
como una gente muy seria
y muy intelectual
no
yo no creo que somos así
entonces bueno
en los aviones
contra los que lucha
Miles Davis
es que no solo
están coloreados
lo que aparece
estampado
en sus hojas
son obras de arte
famosísimas
del siglo XX
porque para mi
bueno pues es un poco eso
Miles Davis
en esa época concreta
de la imagen
que utilizo en ese cuadro
estaba luchando
contra todas las convenciones
artísticas
establecidas
y haciendo un disco
que ahora
además
justo cuando
este cuadro
lo estaba pintando
lo reeditaron
lo han remasterizado
y la gente lo redescubre
que se llama
On the Corner
entonces
bueno
yo estaba pintando
haciendo dibujos
con Miles Davis
y decidí hacer
From the Corner
es decir
coger eso
como ejemplo
y decir
bueno pues yo voy a hacer
un poco lo mismo
lo que aparece
en mis gorros
de fiesta
y vuelvo a lo festivo
vuelvo a lo divertido
lo que aparece
en los textos
que aparecen
en las tintas
que vuelan alrededor
de los músicos
normalmente son
referencias
a la historia del arte
pero lo hago
no para hacerme
el culto
ni para que la gente
vea
que conozco
toda la historia
del arte
del siglo XX
porque tengo mucha formación
académica
no
lo que quiero
es que la gente
se ría
y vea
desdramatice
y no haga determinados hechos
algo tan trascendente
¿verdad?
hay mucha gente
que cuando ve un Mondrian
en una cortina
de cuarto de baño
se pone de muy mal genio
a mí me parece una cosa
súper divertida
y dices
pero si son súper bonitos
los Mondrian
sirven para todo
y eso debería
seguro que él se está riendo
muchísimo en su tumba
¿no?
aparte fíjate
lo que tú dices
de esa cierta cosa
de ese aire intelectual
selecto superior
que se le quiere dar
cuando realmente
el origen
de esta música
es todo lo contrario
y una de las mejores cosas
que tenéis
en este festival
de Tarragona
es que
mientras otros festivales
intentan llevar
una vía de popularidad
que para mí
no es la correcta
que consiste en meter
muchísima gente
en grandes espacios
aquí en cambio
el tema popular
si se ataca
desde un punto de vista
que a mí me parece
el acertado
que es el de acercarlo
a la gente
es decir
esto
que curiosamente
a mí
la música tan tradicional
digamos
como el Dixieland
siempre me ha interesado menos
pero lo que me interesa mucho
de este festival
es cómo se conecta
con la gente
es decir
este es uno de los festivales de jazz
yo me paseo
por todos los festivales de jazz
sí
porque además
trabajas en estos temas
en crítica
en revistas especializadas
sí
como he comentado antes
hago muchas cosas
también estoy aquí
escribiendo la crónica
del festival
estaba escribiendo
una cosa sobre
Diddy Bridgewater
que la paré
cuando me enteré
de que ya venía
nos reencontramos ayer
y la volveré a escribir
a partir de eso
y bueno
tengo que contar un poco
lo que hay
y lo que hay
lo que pienso contar
es que este festival
es el ejemplo
de una manera de hacer
diferente
con un presupuesto
muchísimo más limitado
por ejemplo
que los festivales
del sitio
de donde yo vengo
que es el País Vasco
que es donde vivo ahora mismo
donde hacen unos macrofestivales
de verano
que tienen para mí
mucho menos sentido
que esto
esto es conectar
con la gente
de manera natural
y es una cosa
que me parece muy interesante
ya viste anoche
que el público
éramos personas
corrientes
que veníamos a ver
a Diddy Bridgewater
aquí no había grandes
focos
ni alfombras
a la entrada
gente de Tarragona
que venía
a disfrutar del festival
las medias cabezas
¿por qué?
es que hay que explicar
a los oyentes
que hay toda una serie
de cuadros
que forman una instalación
que son
medias cabezas
la parte superior
de la nariz
hacia arriba
de hombres y mujeres
del jazz
esto es un poquito
difícil de explicar
y va a sonar
un poquito
de gólatra
pero
yo tuve unos años
en los que intentaba
pintar algo
que fuese diferente
de lo de la música
y bueno
digamos que no me salió
mal del todo
pero me siento más contento
con lo que hago ahora
que he vuelto otra vez
al tema que más me gusta
en aquellos años
lo que hice fundamentalmente
fue
bueno pues era una cosa
muchísimo más intelectual
tal
estaba más metido también
en el circuito
de las galerías
de arte contemporáneo
del que me he salido
totalmente
y no sé si de manera
voluntaria
o porque me han echado
la verdad es que me da lo mismo
pero lo cierto es que
en aquella época
me pintaba a mí mismo
y bueno
yo llevo la cabeza afeitada
como tú me ves
aunque el público
no me vea
desde el año 87
y bueno
cuando yo me pintaba
a mí mismo
siempre jugaba mucho
con la mirada
es decir
no es
que sea
un pagado
de mí mismo
ni nada
pero bueno
la vida que llevas
al final se nota
en tus ojos
y a mí me lo decía
siempre la gente
entonces cuando yo me pintaba
a mí mismo
no me interesaba mucho
retratarme entero
me interesaba más
retratar
lo que mis ojos veían
y aquello que yo veía
en mis ojos
intentar que estuviese
en lo que estaba pintando
es una cosa difícil
de explicar
y que puede sonar
un poco golatra
pero no era ese
el sentido
de lo que buscaba
entonces cuando empecé
a volver a pintar música
siempre he tenido tendencia
a pintar mucho
la mirada de la gente
hay mucha gente
que no entiende muy bien
qué es esto del dibujo
y dice
jo pues encima
vas a como a lo más difícil
no a mí no me parece
que sea lo más difícil
de la cara
pero es aquello
en lo que me fijo muchísimo
sobre todo en los músicos
entonces hace
un par de años
o tres
hice otra serie
que eran solamente ojos
y ahora ha crecido
un poquitín
ahora ya les corto
solo por la altura
de las ventanillas
de la nariz
no dejas ni la nariz entera
no, siempre la verdad
es que cojo
la parte de arriba
de la cabeza
intento encontrar
la manera
de contar
lo que me transmiten
esos músicos
con lo que veo
en su mirada
sin que me estorbe
la parte donde yo creo
que más miramos
que es cuando nos hablan
o tocan
es la boca
o las manos
se nos acaba el tiempo
Jorge
qué lástima
digamos que esta exposición
que no se la tienen que perder
está llena de dedicatorias
a seguramente
no diría iconos
porque precisamente
no es un término
que tampoco me guste
pero aquellas personas
que han ido construyendo
tu vida
aquellas voces
aquellos músicos
sí
fundamentalmente
la tarjeta
de la exposición
quería ponerlo
y es lo que aparece
en la parte de atrás
el medio
de las dedicatorias
consiste en todos
los músicos
y los artistas
que me han influenciado
y bueno
luego alguna pequeña broma
sobre los profesores
que no han conseguido evitar
que deje de pintar
y todas estas cosas
porque no tuve una buena experiencia
la verdad
en alguna de las escuelas
de arte
por las que pase
pero bueno
lo que importa
es el principio
y el final
la primera dedicatoria
es a mi mujer
que es muy importante
en mi vida
Kathleen Nadine Owen
y la última
es a un gran artista
que por desgracia
justo cuando yo estaba
preparando esta exposición
tuvo un accidente de coche
lo está pasando muy mal
y es Scott Harding
que es un hombre
muy muy especial
y acabas con una frase famosa
de Duke Ellington
solo existen dos tipos de música
la buena y la mala
esto lo tendríamos que llevar
escrito en la frente todos
yo creo que lo deberíamos de llevar
escrito para todos
solo existen unos políticos
dos tipos de políticos
los buenos y los malos
solo existen dos tipos de gente
los buenos y los malos
solo existen dos tipos de arte
el bueno y el malo
firmamos todo eso
¿verdad que nos dejas
que lo firmemos contigo?
habría que firmarlo
Jorge López de Greño
estarás aquí
los días del festival
hoy me marcho a Barcelona
bueno
quiero ir un momento
a un concierto en Terrassa
porque escribo también
sobre pianistas
que tocan en solitario
y hay un concierto
muy especial allí
pero vuelvo enseguida
otra vez el viernes
además viene mi mujer también
a cubrir para otros medios
el festival
y el fin de semana
que es el plato fuerte
después de lo de ayer
de The Bridgewater
estamos aquí
seguro que tendremos ocasión
de encontrarnos
en estos escenarios
que se multiplican
en la ciudad de Tarragona
muchísimas gracias
por acompañarnos
este ratito aquí en el teatro
buenos días
bueno muchas gracias a ti
y a Tarragona en general
por lo bien que me habéis tratado
es un placer
gracias a ti