Qui no coneix el conte de la Ventafocs?
Aquest conte que explica la història d'una noia jove molt vella
que, en morir-se el seu pare, després d'haver-se casat per segon cop,
queda privada del paper que li correspon a la família
i la seva malvada madrastra i les seves cruels germanastres
li imposen el paper d'esclavar domèstica
i, com que l'odien tant, li posen el nom de la Ventafocs.
Aquesta és una història que, a veure, potser pensem que és de Disney
o fins i tot de Perrol, però, de fet, és una història molt antiga
que sembla que prové de la Xina.
Però sempre ha estat una història, la història d'aquella heroïna
que té una vida molt dura, molt trista, però al final sempre triomfa al bé.
El món de l'època, de l'òpera, del cinema i del ballet en particular
s'ha costat aquesta obra, Strauss, Prokowicz-Eb,
i ara també, dansa contemporània.
És el que ens proposa la companyia Plan B, amb Aranxa Sagardoi al capdavant
i, en aquests moments, també a l'altre costat de la línia telefònica.
Aranxa, bon dia.
Hola, buenos días, què tal?
Tu, la Cenicienta en clàssico, l'has vist?
Sí, sí, alguna versió l'he vist, però la veritat és que no moltes.
Jo sé que l'han fet molt estar dentro del repertorio clàssico,
però no he vist moltes.
No soc molt fan de la Cenicienta en ballet clàssic,
que m'agrada més el lago de los Cisnes, Isel, altre tipus de ballet.
És que, a part, jo m'imagino que la Cenicienta,
la propia historia en danza contemporània,
debe permitirte unas cuantas licencias,
con su hada madrina incluido, que espero que la tenga.
Sí, claro, tiene hada madrina y tiene ayudante de hada madrina,
que tiene un duende que la ayuda.
Oye, príncipe también, ¿no?
Príncipe también, pero ¿qué sabes lo que le pasa a este hada?
Que nuestra hada, lo que le pasa a la pobre,
es que hace mucho tiempo que nadie le pide ningún deseo.
Vaya, está...
Porque los niños ya no creen en las hadas,
y la pobre no trabaja.
Entonces tiene que venir un niño a despertarla,
porque hay una niña que se llama Cenicienta,
que está en apuros, y así puede ir a ayudarla.
Este es un espectáculo que se ha visto en muchos teatros,
pero también lo hemos visto en el Metropol,
y ahora se recupera en esta programación del Metropol Familiar.
Claro, hacer danza contemporánea,
y tratar el mundo de los cuentos,
en una compañía como Plan B,
que se dedica mayoritariamente a hacer espectáculos
de danza contemporánea,
pero para un público adulto dentro de la creación,
de vez en cuando os permitís estas licencias
de hacer cosas para un público más familiar.
Sí, bueno, a mí me gusta llegar a todo tipo de públicos,
por eso también hacemos espectáculos de calle,
y lo que pretende la compañía
es acercar un poco la danza
a todo tipo de público.
Entonces en nuestro repertorio
intentamos tener un abanico amplio de posibilidades,
ya sea público familiar,
ya sea, como dices tú, público más adulto,
espectáculos de calle,
o en este caso el familiar para niños.
Nos parece interesante, desde muy temprana edad,
fomentando la asistencia al teatro
de los más pequeños.
Es una coreografía contemporánea
que recrea el cuento de La Cenicienta,
ya lo hemos comentado,
diferentes bailarines.
En cuanto a la música,
¿tiráis de la música clásica
composiciones más contemporáneas?
No, es un colágeno.
La danza se tiene que ver,
pero Arantxa, explícanos un poquito
cómo se orquesta todo.
Mira, la música es un repopilatorio
de música clásica,
tenemos Mozart,
tenemos Bizet también,
y la coreografía es contemporánea,
pero lo que sí es fiel es a la historia
original del cuento.
O sea, no es una nueva versión
del cuento de La Cenicienta,
ni es una versión actualizada.
Hemos intentado ser lo más fieles posible
al cuento,
siempre algún toque que hemos puesto
de la compañía,
para que yo, mira,
me sentía así con ganas
de proponer algún tipo de cosa nueva,
pero muy pequeña,
dentro de una historia
que es muy fiel a la historia original.
Todo el mundo que venga
lo va a entender perfectamente
porque tenemos todos los personajes
y la historia pasa
como igual que el cuento.
Las malas son malas.
Las malas son muy malas.
El príncipe es muy guapo.
El príncipe es guapísimo,
La Cenicienta es guapísima también.
¿Y hay zapato y calabaza, Arantxa?
Hay calabaza también,
hay zapato también,
tenemos de todo.
Todos los ingredientes
para el cuento están ahí
para que los niños puedan seguirlo,
eso, como te digo,
de principio a fin.
Y es un espectáculo
que hemos hecho mucho
y es muy divertido
porque los niños
siempre hablan con sus padres
durante el espectáculo
y comentan
¿qué es la madrastra?
¿y ahora qué?
¿qué mala?
¿qué dulenta?
¿ahora qué fa?
¿ahora el zapato?
Y bueno, nos parece genial
porque la verdad es que
están muy metidos en la historia
y lo entienden perfectamente.
Incluso hay muchas veces
en los teatros,
a la salida del teatro
que nos hacemos fotos
con los niños.
Sí.
Y es muy gracioso
porque todos los niños
quieren hacerse fotos
con la Cenicienta
y con el hada,
pero las hermanastras
son tan malas
que tienen pocos fans,
pocos fans
los niños pequeños.
¿Qué te iba a decir?
A ver,
¿fue en marzo
que la representasteis
en el Metropol?
Creo que febrero me parece.
Febrero o marzo,
a mí me suena que era
a principios de año
y recuerdo también
que lo que era la escenografía
estaba proyectada
desde la Escuela de Arte.
Sí.
¿Conserváis todo esto?
Es decir,
¿vais a hacer la misma representación
con los mismos elementos?
La misma representación,
los diseños del vestuario
se hicieron a las escuelas
de danza de Tarragona,
que cada una,
escogimos un personaje,
dos personajes
de cada escuela,
hicimos un concurso
del vestuario,
la Renata
de la Escuela de Arte
nos hizo unos dibujos
para la escenografía,
que son los mismos dibujos,
y aquí la única novedad
es que en febrero
nos acompañaban
los de Baile de Salón,
la Escuela de Baile de Salón
de Reus,
pero en nuestra última actuación
que hicimos en Mallorca,
la escuela que participó
de Baile de Salón
era los de Mallorca,
porque normalmente
invitamos a la gente
de la ciudad
donde vamos
para hacer un poco
de vivencia
con la ciudad,
y ahora los de Mallorca
estaban apasionados
y querían venir
a visitar Tarragona,
a conocer Tarragona
y a bailar
hasta con nosotros
en el Metropol,
y vienen todos los bailarines
de Mallorca
a bailar para nosotros
el sábado
a las 7 de la tarde.
O sea,
que vienen expresamente
desde Mallorca.
Vienen expresamente
de Mallorca,
8 bailarines
y 20 familiares
que los acompañan
para disfrutar
de nuestra ciudad,
de nuestro teatro
y del espectáculo.
Pues oye,
imagínate.
Qué bien, ¿no?
¿Qué te iba a decir Arantxa?
A ver, tú,
coreógrafa,
directora de la compañía,
¿actúas en esta obra?
Sí, sí, sí.
¿Qué haces?
Ya vendré,
ya lo veréis,
ya lo veréis.
No puedo desvelar
mis papeles secretos.
No nos lo quiere decir,
¿no?
No nos lo quiere decir Arantxa.
Lo que hace.
Porque, ¿sabes lo que pasa?
Que en realidad,
yo digo que salgo,
pero en realidad no salgo,
porque ya lo veréis,
porque hay una madrastra,
hay hermanastras,
ahí está la Cenicienta.
No puedo decir quién soy,
porque son los personajes
de verdad,
los que están ahí
sobre el escenario.
No soy yo,
me transformo,
me transformo.
Y otra,
ya para acabar Arantxa,
que sabemos que estás así
con mucho lío,
aparte de...
En mitad del ensayo estamos.
Por eso,
de esta obra de repertorio,
¿qué estáis preparando?
Porque siempre tenéis
repertorio y así, ¿eh?
Mira,
estrenamos hace dos semanas,
como ya sabéis,
en el Metropol,
la obra Dinamo Visions,
que funciona muy bien
y estamos preparando ya
la gira para este espectáculo,
por un lado.
Y luego,
por otro lado,
tenemos propuestas muy interesantes
para realizar el año que viene
y, bueno,
estamos intentando ya
enlazar los proyectos
para ver los meses
que se van a ensayar
y cuándo se puede estrenar
y, bueno,
es un proyecto grande,
es un proyecto muy chulo
el que viene para el año que viene
y, bueno,
cuando esté todo concreto
y realmente,
realmente vayamos para adelante
ya os lo cuento.
Pues te vienes aquí
y nos lo cuentas.
Claro.
Miraremos que sea un día
que no tengas ensayo.
Muy difícil.
Bueno, ya, ya lo sé.
Una buena cosa encontraremos, sí.
Arancha Sagardo,
y muchísimas gracias.
Un abrazo.
A vosotros.
Espero el sábado.
Ya, naturalmente,
ya puedes contar.
Hasta pronto.
Muy bien, guapa.
Adiós, adiós.
Adiós, gracias.