Aprendimos a quererte
Desde la histórica altura
Donde el sol de tu bravura
Le puso cerco a la muerte
Aquí se queda una clara
La entrañable transparencia
Passen set minuts de dos quarts d'onze del matí.
Aquesta cançó ens serveix per representar
a la nostra propera convidada.
Perquè en aquesta quarta hora del programa
hem parlat molt de política local en els últims minuts.
Amb l'anterior convidat amb el Xavier Sabaté
i ara volem parlar d'altres tipus de política
o d'un altre àmbit geogràfic.
Volem parlar molt més de política a Cuba
i en altres països del món
a partir de l'anàlisi i de la perspectiva
que ens pot fer la nostra convidada.
És Aleida Guevara.
Ella és metge de professió
però es distingeix i la coneix tothom
per ser la filla del comentant Ernesto Guevara.
Està aquests dies a Tarragona
convidada per l'Associació d'Amics de Cuba de Tarragona,
per l'Ajuntament de Cambrills
i per la Universitat Rovira i Virgili.
Aquesta tarda, per exemple, farà una xerrada
al local d'Iniciativa per Catalunya, aquí a Tarragona.
A partir de les 7 al carrer Santa Joaquim de Badruna.
I demà farà també una altra xerrada,
col·loqui amb estudiants i professors de la universitat
i, en fi, obert al públic en general.
També demà serà a les 7 de la tarda
al campus Catalunya de la Universitat Rovira i Virgili.
I ara ens acompanya en directe
en aquests estudis de Tarragona Radio.
Aleida Guevara, bon dia, buenos días.
Buenos días.
¿Qué tal?
Muy bien, muy bien.
¿Cansada, quizás, o no?
Un poquito, però ahí vamos.
Lleva muchos anys?
¿Hay muchos días fuera del país, quería decir?
Sí, sí, llevo unos cuantos días.
Para mí, demasiado, pero se soporta.
¿Qué está haciendo en Tarragona,
en otros puntos de Catalunya i en otras zonas de España?
¿Cuál es el objetivo, un poco, del viaje,
de esta estancia en España?
A ver, ya hace muchos años que yo vengo trabajando
con las organizaciones de solidaridad.
Y ellos me invitan un poco para que el público,
en general, pueda tener otra información.
Otra que a veces no les llega por los medios de comunicación,
o que les llega divirtuada, o que les llega manipulada.
Y entonces, bueno, es escuchar algo diferente
por parte de una mujer que vive y trabaja dentro de un pueblo.
¿Cómo está Cuba, ahora mismo, desde su perspectiva?
Pues estamos bien.
Está un proceso muy interesante de unidad latinoamericana
a través del ALBA,
que es la alternativa bolivariana para nuestra América.
Tenemos varios países ahí trabajando.
Somos solidarios en lo que les hace falta a las personas
y esos pueblos también son solidarios con nosotros
en lo que nos hace falta.
Comenzamos a hacer intercambios muy justos,
de comercio justo entre los pueblos,
pero sobre todo de aprender quiénes somos,
de unir más nuestras identidades,
de reconocernos más como pueblos hermanos.
Y eso es muy importante porque es la única manera
que tiene nuestro continente de enfrentarse
al enemigo común de todos nuestros pueblos,
que es el gobierno de Estados Unidos de Norteamérica.
Y es la única manera también de ser autosuficiente.
Es un tipo de comunidad europea, por ejemplo,
pero en América Latina,
con países del llamado Tercer Mundo.
Es decir, buscar apoyos fuera de la propia Cuba
y trabajar en la misma línea.
Un poco yo creo que es darle también a muchos pueblos
la misma oportunidad que hemos tenido nosotros.
Decía José Martí,
que es el apóstol de la Revolución Cubana,
vivió en el siglo XIX,
yo creo que es uno de los cubanos más conocidos,
que para que un pueblo sea realmente libre
tiene que ser un pueblo oculto,
para que no te engañen,
para que no te utilicen,
para que no te manipulen.
Y eso es lo que intentamos hacer.
Estamos haciendo, por ejemplo,
un proyecto que se llama Yo Sí Puedo,
que es de alfabetización,
no solamente en los idiomas de la colonización,
en este caso el castellano, el francés,
el inglés, el portugués o el francés también,
bueno, sino en los propios idiomas autóctonos
de nuestras tierras.
Además de esto,
tenemos otros proyectos,
por ejemplo, Operación Milagro,
nos dimos cuenta que había gente
que no podía aprender a leer
porque no veía bien.
Y empezamos estas operaciones,
ya llevamos alrededor de 4 millones de operaciones
gratuitamente de catarata,
también se les pone las gafas
con su graduación,
la que necesiten,
también gratuitamente.
Bueno, entonces estamos trabajando en este sentido
para que los pueblos puedan sentirse más dueños de sí mismos
y saber lo que quieren,
cómo quieren hacerlo
y buscar sus propios caminos.
Y por otra parte,
estamos trabajando mucho también
en todo lo que es salud general.
Ahora acabamos de terminar la primera etapa
de un proyecto en el ALBA,
muy lindo,
que es rescatar a aquellos pacientes con minusvalía
de cualquier tipo,
que a veces por creencias religiosas,
por conceptos de estos arcaicos,
piensan que es un pecado,
que es pagar una culpa de algo que hicieron antes
y entonces tienen un familiar casi arrinconado,
casi escondido,
en lugares que no te puedes imaginar
porque de verdad son muy difíciles.
Y entonces rescatar a esta gente,
darle la dignidad que realmente merecen,
pero implicando a toda la comunidad en ello.
Es un trabajo humano extraordinario
y de verdad creo que nos hace mejores seres humanos.
Entonces, en ese sentido,
por supuesto,
nosotros tenemos una cuota de sacrificio
desde el punto de vista humano,
pero a la misma vez
tenemos una cuota de aprendizaje,
de sentirnos mejor como personas.
Ahora mismo yo venía hablando con Maripá
y le decía que hay veces que sí
tenemos necesidades en nuestros mismos hospitales
porque nos faltan gente
en el sentido de que estábamos acostumbrados
a tener un médico de familia
cada 190 familias
y ahora algunos de estos médicos no están.
Entonces hay que cubrir ese espacio,
hay que trabajar un poco más.
Es cierto,
pero es que la solidaridad no es dar lo que te sobre,
la solidaridad es dar precisamente
lo que otros necesiten aún a costa tuya.
y eso, bueno,
se aprende en el camino,
se va trabajando.
¿Y Cuba está ahora en un proceso de cambios,
de transformación del régimen político?
¿Lo que nos llega a aquí
es Raúl Castro introduciendo mensajes
o, en fin,
en la línea de ir transformando poco a poco el sistema?
No, para nada.
El sistema socialista es el sistema que el pueblo cubano,
un 95% de sus pobladores,
aprobó.
Y todavía tenemos y queremos seguirlo desarrollando.
El problema es ese,
es desarrollar un sistema,
no encausularlo,
no trabarlo.
Entonces, claro,
estábamos buscando alternativas
para solucionar problemas reales
que hemos tenido durante todos estos años
y que no hemos podido solucionar.
Te pongo un ejemplo.
Un carpintero,
hacer este tipo de trabajo en las casas,
es muy difícil resolver esos problemas
desde el punto de vista estatal.
Es realmente difícil.
Entonces,
¿qué se ha pensado ahora?
Que está todavía en discusión,
porque eso lo está discutiendo en este momento
el pueblo cubano en todos los niveles.
Yo digo que ya llevo tres discusiones.
En el núcleo del partido,
en el trabajo,
en el hospital donde yo laboro
y en mi barrio.
Antes de venir para acá,
nos reunimos tres barrios,
que es la circunscripción donde yo vivo
y ahí empezamos a analizar punto por punto,
punto por punto
y hasta que no se terminaba un punto
no pasábamos a otro.
Ya están todas las opiniones del pueblo recogidas
si están preocupados por esto,
si están preocupados por lo otro.
Por ejemplo,
hay una posibilidad ahora
de quitar la famosa libreta de abastecimiento
que nosotros hemos tenido
todos los años de revolución.
Y la gente que antes protestaba un poco
por esa libreta,
ahora tiene miedo
de que se le quite,
porque es liberar un producto,
el Estado no tendrá que subvencionar
totalmente esos productos,
porque ya no es necesario,
es decir,
económicamente no es necesario.
pero la gente un poco eso lo ve como que
ay, espérate,
¿qué va a pasar?
Tiene sus dudas.
Bueno,
esas dudas se plantean,
todas las preocupaciones que se tienen
y eso se recoge
y después se analizará otra vez,
por supuesto,
ya cuando esté el Congreso del Partido,
pero no se aprobará ningún cambio
hasta que no llegue a la Asamblea Nacional Cubana,
que es elegida por el pueblo cubano,
que a cinco años tú sabes que tenemos elecciones
provinciales y nacionales.
Bueno,
pues esa Asamblea Nacional
tendrá que decidir
cuáles son los cambios
que realmente pueden funcionar
dentro del sistema socialista,
porque nuestra Constitución,
en uno de sus primeros acápites,
habla que somos una sociedad socialista,
por tanto,
no se puede contradecir.
¿Cuál es el riesgo
que quizás podamos estar enfrentando
en los próximos años?
Bueno,
que al ver personas
que empiezan a trabajar
por cuenta propia,
aunque yo soy de la opinión
que vamos a intentar
hacer más cooperativas de servicio.
A mí por lo menos me gustaría más.
Pero bueno,
eso en última instancia
es decisión
de la Asamblea Nacional
del Pueblo Cubano.
En ese caso,
bueno,
pues las personas,
tú sabes que piensan según viven
y que se pierda un poco
esa cuestión de solidaridad
entre las personas del pueblo,
esa cuestión de ayudar al otro
cuando lo necesite,
que empieces más a pensar
en tu propio bolsillo.
eso es un riesgo
que yo pienso
que tendremos que correr
en los próximos años
y veremos
si resolvemos realmente
un problema
o estamos creando otro.
Pero una decisión de pueblo,
imagina tú.
¿La revolución está mejor
que nunca ahora?
¿Está en su mejor momento?
Yo no creo que esté
realmente en su mejor momento.
Fíjate,
está en un momento
de crecimiento,
está en un momento
de buscar soluciones
a problemas reales
que hemos presentado.
Pero el peor momento
de la revolución fue
la desaparición
del campo socialista europeo.
Yo anoche les decía
tocamos suelo,
de verdad,
el fondo lo tocamos.
Y hemos ido subiendo
poco a poco
buscando esos recursos
poquitos que nos han quedado
después de una
debacle, digamos,
de colonización
durante 500 años
y después 50 años
con Estados Unidos encima,
te podrás imaginar
que nos queda
pocos recursos.
más un bloqueo criminal
que estamos sometidos
hace 50 años,
pues es difícil
la situación económica
en ese sentido.
Pero sin embargo,
las cosas básicas están.
Tenemos una salud,
tenemos una educación,
no nos preocupamos
por ese tipo de cosas.
Por eso te digo
que es muy difícil
cambiar este sistema
porque nos ha dado
cosas que antes
no teníamos
y que nosotros sabemos
disfrutar a plenitud.
Bueno,
con todo esto,
ya sabes,
estamos quizás
en el momento
de más auge
de la solidaridad
porque como estamos
trabajando en el ALBA
tenemos un poco más
de conocimiento
de quiénes somos
realmente como pueblo.
Acuérdate que
nuestra población indígena
desapareció
y ahora nosotros estamos
conociendo a los Guayú
de verdad,
a los Quichos,
a los Quechos,
a los Aymara,
a los Guaraní.
Estamos en contacto
con nuestra verdadera cultura
y eso nos hace,
por supuesto,
enriquecernos más,
tener más posibilidades
de ayudar a otros pueblos,
de entenderlos mejor.
Yo pienso que
estamos en un momento
muy especial
que disfrutamos
pero nos queda mucho
por caminar todavía.
Nosotros estamos
atravesando
por un momento
de crisis global,
de crisis económica
fortísima,
como mínimo
en lo que conocemos
como la Europa Occidental
y los países
del primer mundo.
en este contexto
de crisis
tan grave,
Cuba,
¿cómo lo lleva?
Bueno,
igual yo decía,
vivimos en este planeta,
si no estamos
en otro
ni en otra parte.
No son extraterrestres.
Así que de alguna manera
siempre nos toca esto,
por supuesto,
se hacen más caros
los productos
que tenemos
que comprar,
nos compra mucho
más barato
lo que debía
comprarse a precio justo,
bueno,
en fin.
¿Y la revolución
tiene soluciones
o tiene alguna salida
para intentar
superar la crisis?
Esta unión
con Latinoamérica
es nuestra esperanza
de poder resolver
muchos problemas
porque nuestro continente
es un continente
muy, digamos,
capaz
de crear cosas,
tiene riquezas,
mucha riqueza,
tenemos unos suelos
fértiles,
no tendríamos necesidad
de comprar alimentos
en otras partes,
y si Europa
las compra allí,
se los lleva de allí,
se los lleva
más que comprarlo,
pero bueno,
en ese sentido
nosotros
podíamos tener
todas estas riquezas
a nuestro alcance
más fácil,
mucho más fácil.
Tenemos petróleo,
tenemos gas natural,
tenemos ríos
intensos
y caudalosos,
por tanto,
hay cantidad de agua
potable,
tenemos el pulmón
del planeta
prácticamente ahí
que es la Amazona,
es decir,
en ese sentido,
si nosotros logramos
la unidad
de nuestros pueblos
de verdad,
pues la crisis
para nosotros
es ligera
en ese sentido,
desde el punto de vista
de alimentos,
desde el punto de vista
de servicios,
pero nos afecta
todavía
porque
es muy importante
lo que está pasando,
lo que más
nos preocupa
a nosotros
es que normalmente
las crisis
económicas
del capitalismo
casi siempre
se han resuelto
o desgastando
mucho más
el planeta
y buscando
soluciones
en el medio ambiente,
explotando más
y desgastando más
nuestro continente
o con guerras
y eso
sí sería
un serio problema
para la humanidad,
no solamente
para nosotros,
para todos,
porque ahora,
por ejemplo,
un jefe de campo
militar de Estados Unidos
tiene microbombas
atómicas
a su alcance,
no tiene que ver
el presidente
para que el tipo
decida
si va a tirar
una bomba
que puede ser
la mitad
de la potencia
de Hiroshima
o seis veces
la potencia
de la de Hiroshima
y a eso
le llaman
microbombas nucleares.
Ahora imagínate tú
el riesgo
que estamos
alcanzando
porque antes
una guerra
de armas
convencionales
aumentaba
el empleo
de la gente
¿por qué?
Porque las fábricas
de armas
necesitaban manos
de obra,
entonces tú
quitabas el desempleo
de una crisis
con el armamentismo,
pero ahora
las armas
son tan sofisticadas
que no necesitan
personas,
son máquinas,
robots,
casi siempre
los que trabajan,
por tanto
no arreglaría
la crisis
desde ese punto
de vista
y por otra parte
ya no destruyes
una fábrica
ni una industria,
estás destruyendo
ciudades,
estás destruyendo
la naturaleza
que vamos
a reparar después,
¿de qué servirá
eso?
Es un peligro real
que estamos
enfrentando
y a mí lo que más
me preocupa
es que las personas
estemos de espaldas
de esa realidad,
que no nos demos
cuenta
del peligro real
que estamos viviendo
y no es para
que todo el mundo
empiece a dar gritos
ni cosas prestigios,
es para unificar
nuestras fuerzas,
es para decir
basta,
hay que respetar
lo que tenemos
y hay que cuidar
lo que tenemos,
es la única manera
de sobrevivir
como especie
y eso para mí
es lo más importante
en el momento
que estamos viviendo.
En este contexto
global,
Aleida Guevara,
global de crisis,
general,
¿qué reflexión
le merece
lo que está pasando
en una región del mundo
como es el norte
de África,
el próximo oriente,
lo que está pasando
en Libia,
en Egipto,
en Túnez,
en Marruecos,
en otros países,
¿qué reflexión le merece?
Mira,
una vez yo dije,
cuando se nos realiza,
por ejemplo,
en nuestro continente,
en América Latina,
yo dije
que los hombres
tienen un límite
de soportar
y empiezan a decidir
o morirse de hambre
y de miseria
o morir intentando
cambiar una realidad,
es decir,
no nos dejan alternativa,
nos llevan a extremos tales
que las personas
tienen que empezar
a pensar así.
Después yo dije,
bueno,
a lo mejor soy yo
que tengo mi ideología,
mi cultura
y mi lugar de nacimiento
en un país muy guerrero,
es posible,
pero no,
conocí mujeres
que no tenían
ni mi cultura,
ni mi ideología,
ni nada de esto
y que habían muerto
defendiendo un pedazo
de tierra
para alimentar
a sus hijos.
Entonces,
no tiene nada que ver
ni con ideología
ni con nada,
tiene que ver
con la sobrevivencia
de la especie,
de la necesidad
que tiene el hombre
primero de alimentarse,
segundo que lo traten
con dignidad
y con respeto.
Entonces,
en ese sentido,
hay pueblos
que dicen basta
y comienzan a andar.
¿Cuál es el problema?
que a veces
esas fuerzas
de pueblo
no se encaminan
hacia un objetivo común,
sino que empiezan
a diluirse
o que personas
que no habían hecho
absolutamente nada
para merecer
estar en lugares
cimeros
de estos movimientos,
se cuelan
por alguna cuestión,
digamos,
que un poco más
de cultura,
un poco más
de posibilidades económicas
y llevan
esta fuerza
del pueblo
a objetivos
para ellos,
no para las necesidades
reales de la gente.
Eso puede pasar también.
Desgraciadamente,
lo hemos visto mucho
también en el continente
latinoamericano.
Entonces,
bueno,
tenemos que esperar.
¿Sabes qué?
El problema de todo esto
es que la información
que nos llega
muchas veces
es muy manipulada.
Entonces,
tienes que tener
mucho cuidado
en emitir criterios
cuando tú no tienes
la información
de primera mano.
Volviendo al caso
de Cuba,
¿qué le parece
la actitud,
la política
que lleva ahora mismo
el gobierno español
respecto a Cuba?
Mira,
nosotros tenemos
relaciones
muy,
digamos,
tranquilas,
por decirlo
de esa manera,
porque ustedes
pertenecen
a la Comunidad Europea
y la Comunidad Europea
emite un voto único.
Entonces,
hay algunos países
de esta comunidad
que han intentado,
han intentado
un poco
una relación
más profunda
con Cuba,
pero ha sido
realmente imposible
hasta el momento
por ese voto único
a la Comunidad Europea.
Hay empresas
dentro de España
en general,
dentro del Estado español,
que sí comercian
con Cuba
y que sí
mantienen
una actitud
muy digna.
No tienen nada
que ver
con nuestra ideología,
pero han sido
muy dignos
y han sido
muy valientes.
Por ejemplo,
la Amelia.
Nosotros las reconocemos
porque en un momento
determinado
lo presionaron,
el gobierno
de Estados Unidos
lo presiona
a esta compañía
para que abandone
Cuba
y ellos no lo hicieron
y no tienen nada
que ver ideológicamente
con nosotros,
pero son personas
dignas
y eso nosotros
lo vamos a respetar
siempre.
En aquel momento
tenían dos hoteles
y hoy tienen
casi 12 o 13 hoteles
en explotación
en el país
y a mucha honra.
es decir,
nosotros decimos
que honrar
es reconocer
las virtudes
de otro hombre
y eso es muy bueno
para el pueblo cubano.
Entonces,
tenemos casos así
de personas
que nunca se fueron,
que se mantuvieron
hasta los últimos momentos,
aún con dificultades
nuestras reales,
de que tuvimos
que tomar medidas
a veces financieras
que afectaron
sus intereses,
aún así
se mantuvieron firmes
y hasta el último momento
y hoy están con nosotros.
Entonces,
yo no hablo
de un Estado español,
estoy hablando
de un pueblo
que para mí
es lo más importante.
Nos queda solo un minuto.
El comandante,
¿cómo vería ahora
su país?
¿Cómo vería
la revolución?
¿Mi papá?
Mira,
a ver,
si mi papá estuviera vivo
ya tendríamos
una América Latina
diferente,
realmente diferente,
¿no?
Entonces,
es muy difícil
hablar del vivo,
pero ¿sabes qué?
Hay una milonga argentina
que dice,
si yo muero,
no llores por mí,
haz lo que yo hacía
y seguiré viviendo en ti
y así es como
nosotros vemos
a mi papá,
llevándolo a la práctica
y teniéndolo presente
como un guía,
un maestro,
como un gran amigo
y entonces está al lado
de nosotros
todo el tiempo.
¿Qué le dice
a Estados días
la gente
cuando entra en contacto
aquí en Tarragona
o en otros puntos de Cataluña?
¿Qué le dicen
a la Ida Guevara?
Bueno,
mucha gente se entusiasma,
mucha gente me abraza,
a ayer mismo
personas mayores
que me abrazaron
con mucho cariño
y jóvenes
que vinieron a tirarse
fotos a mi lado,
eso a mí me da gracia
porque un poco
te pareces
una actriz,
una estrella
del cine,
pero es el calor humano,
es esa ternura
que nace
de la gente
más linda
de los pueblos
y que uno recibe
con mucho agrado,
de verdad.
Si quieren escuchar
muchos más argumentos
de Aleyda Guevara,
la hija del comandante
del Che Guevara,
recordamos que esta tarde
estará a las 7
en el local de Iniciativa
Par Cataluña
aquí en Tarragona
en la calle Santa
Joaquima de Bedruna
y mañana,
miércoles,
también a partir
de las 7 de la tarde
en el Campus Cataluña
de la URB
de la Universitat Rubira
y Virgili.
Aleyda Guevara,
médico de profesión,
hija del comandante
del Che Guevara,
muchas gracias
por estar estos minutos,
esta mañana un rato
al lado de los oyentes
de Tarragona Radio.
Que vaya muy bien
esta estancia
en nuestro país
y buen viaje
también de retorno a Cuba.
Muchas gracias,
pero no te olvides
que soy ante todo
hija del pueblo cubano,
eso es lo fundamental.
Gracias Aleyda,
buenos días.
Tu amor revolucionario
te conduce a nueva empresa
donde esperan la firmeza
de tu brazo libertario.
Aquí se queda la cara
la entrañable transparencia
de tu querida presencia,
comandante Che Guevara.
Seguiremos adelante
como junto a ti seguimos
y con Fidel te decimos
hasta siempre, comandante.
Aquí se queda la clara
de la entrañable transparencia
de tu querida presencia,
comandante Che Guevara.