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Si vols veure la vida amb esperança, escolta Porta a l'Esperança.
Tots els diumenges a dos quarts de deu del matí a Tarragona Ràdio.
Un programa de l'Església Protestant de Tarragona.
Porta a l'Esperança.
Obre la teva porta a l'Esperança.
Porta a l'Esperança.
Porta a l'Esperança.
En tu habitación sin llamar, sin pensar.
Con mi rostro y mi corazón sin lavar, sin aparentar.
Y no hablaré nada.
No habrá un momento más perfecto que verte cara a cara.
Contártelo sin miedo, sin ocultarte nada.
No usar mis oraciones como si fueran cartas.
No usar mis oraciones como si fueran cartas.
No usar mis oraciones como si fueran cartas.
No usar mis oraciones como si fueran cartas.
No usar mis oraciones como si fueran cartas.
No usar mis oraciones como si fueran cartas.
No usar mis oraciones como si fueran cartas.
No usar mis oraciones como si fueran cartas.
No usar mis oraciones como si fueran cartas.
No usar mis oraciones como si fueran cartas.
No usar mis oraciones como si fueran cartas.
Quiero entrar en tu habitación sin llamar, sin pensar.
Con mi rostro y mi corazón sin lavar, sin aparentar.
Y no hablaré nada.
No habrá un momento más perfecto de verte cara a cara, contártelo sin miedo, sin ocultarte nada.
No usar mis oraciones como si fueran cartas.
Estar nunca tan lejos de mi ser de esta paz y llamarte papá.
No hablaré nada.
No habrá un momento más perfecto que verte cara a cara.
Contártelo sin miedo, sin ocultarte nada.
No usar mis oraciones como si fueran cartas.
Ni estar nunca tan lejos, ni ser de esta paz y llamarte papá.
Y llamarte papá.
Y llamarte papá.
Un programa de radio que tiene como objetivo principal hacer llegar a todo el mundo la Palabra de Dios, que es la Biblia.
Y con el testimonio de nuestra Iglesia Evangélica Bautista de Tarragona situada en la calle Monastir de Poblet, número 7.
Y nos encontramos en los estudios de Tarragona Radio.
José Martínez, buenos días.
Hola, buenos días.
Miguel Alfaro, buenos días.
Buenos días.
Elvira Montagud, buenos días.
Hola, buenos días.
En los controles tenemos a Alejandro Martínez, muy buenos días desde aquí.
y yo, Raquel Mesas, quien nos habla.
Nos encontramos en plena Semana Santa, durante la cual podremos ver en nuestras ciudades diferentes procesiones donde se recuerda la muerte de Cristo.
Pero hoy nosotros queremos hablar de lo que sucedió después.
Pero antes de adentrarnos de lleno en este tema, escucharemos esta canción.
y yo volveré a cantar
y yo volveré a cantar
y yo volveré a cantar
y yo volveré a cantar
a la gloria del nombre
que sobre todo nombre
el nombre de Jesús.
Jesús
el nombre de Jesús
el nombre de Jesús
Dios está buscando
Dios está buscando
Dios está buscando
Dios está buscando, Dios está buscando, ¿dónde, dónde estás?
Ordo
Os recordamos que estamos escuchando Tarragona Radio en el 96.7 de la FM
Antes de empezar deberíamos definir qué es la resurrección
En estos días todos los cristianos lo tenemos muy presente
Ya que en estos días es que recordamos la resurrección de Cristo
Pero ¿sabemos qué es realmente la resurrección?
Yo creo que, para que sirva de introducción, la resurrección
El paso de la muerte a la vida es una preocupación que el género humano viene sintiendo desde que se tiene uso de razón
y lo vemos en todos los restos arqueológicos de necrópolis, etcétera, etcétera, que existen sobre este tema.
Hay un miedo a la muerte y hay una necesidad de volver a resurgir, volver a renacer o volver a revivir,
que es lo que realmente significa esta palabra resucitar. Resucitar es volver nuevamente a la vida.
A partir de aquí hay filosofías, hay pensamientos, hay miles y miles y miles y millones de literatura sobre este tema.
Ahora, yo creo que la resurrección que en este momento nos preocupa y que nos gustaría dejar claro,
porque es la base de nuestra creencia, la base de nuestra fe, es una resurrección muy concreta. ¿Verdad, Josué?
Sí, la verdad es que desde el punto de vista cristiano, la resurrección es uno de esos pilares fundamentales de nuestra fe
porque sin ella se hubiera quedado, coja nuestra estructura de fe y de doctrina.
De hecho, es lo que fortalece, podríamos decir, nuestras creencias también
y lo que nos da estímulo y esperanza, esperanza desde el punto de vista de saber que todo aquí no termina
y de que efectivamente la muerte ha sido vencida y en ese aspecto el Señor nos da con ese sello de volver a la vida
y con ese poder que él tiene, pues nos da esa visión futura, ¿no?, de que un día, pues también, como dice la Escritura,
él es las primicias, ¿verdad?, y él es el que surge, digamos, con poder, con triunfo, con gloria
y con él vamos también a través de la fe a vencer en ese aspecto, ¿no?
Habla también de ese sentido de inmortalidad, ¿no?, de que la cosa no se acaba, de que la cosa no se termina,
de que la vida continúa más allá de la muerte y esa yo creo que es una credibilidad y una garantía
que el Señor, pues, nos ofrece resucitando él mismo y dando ejemplo de ello.
De todas maneras, ¿creéis vosotros que, por ejemplo, en el Nuevo Testamento vemos varias resurrecciones,
como puede ser la hija de Jairo, Lázaro, el hijo de Naím y la misma resurrección de Cristo?
¿Creéis que es la misma resurrección en el caso de Cristo que en el caso de los demás?
Bueno, a mí me gustaría hacer una observación. En principio, sí. Es decir, vemos actuando el poder de Dios.
Dios está actuando en estas personas y estas personas, Jesús, obrando por el poder de Dios, las vuelve nuevamente a la vida.
Dios fue el que resucitó a su hijo al tercer día. Pero la gran diferencia, la gran diferencia que también existe,
por supuesto, sobre estas resurrecciones y la resurrección sobre la que estamos hablando concretamente en esta mañana es
la resurrección de Jesús es totalmente distinta. ¿Por qué?
Principalmente por el origen, por lo que significa. Porque Jesús es resucitado, pero antes de ser resucitado ha muerto.
Y ha muerto en una cruz. Y esa es la base que diferencia estas resurrecciones. El fondo, el motivo por el que podemos considerar que es diferente.
Hay una obra, hay una obra de sacrificio primero, que es la muerte. Todo esto parte de más atrás cuando se nos dice,
la palabra de Dios nos dice que la paga del pecado es muerte. Y lo que está haciendo Jesús es ocupando el lugar de todos nosotros en esa cruz,
muriendo, pagando el precio de ese pecado que todos llevamos. Y él es el que se está sacrificando.
Es el poder de la cruz. Es lo que hace diferente a la resurrección futura de Jesús. Futura al tercer día, cuando resucita.
Resucita. Por lo tanto, lo que hace diferente a la resurrección de Jesús, de la resurrección del Lázaro, de la resurrección de la hija de esta mujer que habéis comentado,
pues es este. Que Jesús ha muerto, ha muerto en una cruz, con un motivo, con un propósito.
Y su resurrección es la que da base a toda la teología, a toda nuestra fe.
Si Cristo no ha resucitado, como dice Primera de Corintios, pues en qué creemos, ¿no?
Yo lo que también añadiría es que hay una cosa que quisiera también matizar.
Y aparte de lo que ha dicho Miguel, sí que hay algo que es diferente a cualquier otra resurrección, ¿no?
Que él realizó en estos otros casos con Lázaro, con la hija de Naimi, con estos personajes que murieron
y el Señor los resucitó, ¿no? En diferentes momentos de su ministerio.
Y es que estas resurrecciones se produjeron y, bueno, estas personas luego volvieron a pasar por la muerte.
Es decir, la vida no continuó.
Pero es verdad que en el caso de Cristo, la resurrección, cuando él vuelve otra vez a la vida,
después de pasar por el sepulcro y la muerte, es la vida ya definitiva, eterna y por siempre.
Es decir, ha pasado por la muerte, pero ya no volverá a pasar por la muerte.
¿Por qué? Porque de alguna manera ha venido a expresar que Cristo le ha quitado el aguijón a la muerte,
como dice la Escritura también, que ha vencido a la muerte
y que el poder de la vida, que es él, está por encima de la muerte.
Por lo tanto, la muerte es un poder inferior, la vida es un poder superior, que pertenece a Dios.
Tanto es así que él mismo lo anuncia, así como anuncia su muerte en varias ocasiones,
también anuncia la resurrección, ¿no?
Y aquellas expresiones de destruir este templo y en tres días lo reedificaré,
haciendo una figura a su propio cuerpo, a su propia muerte y luego resurrección,
pues es la evidencia de que él tiene poder, además, para volver a la vida en sí mismo,
porque en sí mismo es Dios, y siendo Dios nadie le tiene que resucitar,
sino que él mismo vuelve a ese estado del cual nunca ha dejado de ser,
que es la vida, como creador y como regenerador de vida.
Y eso, pues también nos da a nosotros esa fuerza, ¿no?
También de saber que la vida está y estará siempre en aquel que cree en el Cristo resucitado.
Y por lo tanto, sabe que estará también un día viviendo gloriosamente y eternamente con Dios.
Desde el punto de vista de personas no creyentes, la resurrección quizás es un poco difícil de entender.
Es conocido por todos que hay diferentes corrientes que opinan que Cristo realmente no murió en la cruz,
que estuvo, como lo podríamos decir, inconsciente o invernando durante unos días
y que después se reanimó, salió de la tumba y posteriormente fue hacia oriente.
Hay otras opiniones que dicen que el cuerpo de Cristo fue robado por los discípulos
o que fue robado incluso por los enemigos de Jesús.
Vosotros, delante de razonamientos como estos, ¿qué opináis?
Bueno, incluso el mito de que el cuerpo fue robado está narrado en la propia Escritura, ¿no?
En la propia Biblia, pues ahí se nos dice que este mito ha venido, ha sido,
o ha estado activo desde siglo tras siglo, ¿no?
Pero es que has hablado de que personas no creyentes piensan que el hecho histórico no se produjo.
Yo diría más, personas creyentes afirman que el hecho histórico de la resurrección no se produjo.
Y existen teólogos que afirman, bueno, que la resurrección es un mito, es un simbolismo, etcétera, etcétera.
La resurrección es un hecho histórico para nosotros.
Eso es indiscutible.
O sea, la resurrección es la base del cristianismo.
El cristianismo es el seguidor de Cristo y es la base de nuestra fe.
Que Cristo resucitó como así estaba escrito, así estaba profetizado en todo el Antiguo Testamento.
Es un hecho histórico, no es un mito, no es un simbolismo, no es un significado de algo en concreto.
Es un hecho real de que Cristo, hombre, murió en una cruz y fue introducido en una tumba como cualquier otro hombre y que al tercer día resucitó.
Hay también una cosa interesante en esto y es que si nos fijamos, es evidente que siempre hay grupos y que siempre hay gente que por sus propios intereses,
lógicamente le interesaba o le interesa intentar decir que, bueno, había muchas otras teorías y formas de expresar que aquello había sido un montaje de los discípulos o de los apóstoles
y que no era real, pero la verdad es que intentar mantener esto es muy difícil en relación a lo fácil que es mantener que Cristo resucitó.
¿Por qué? Porque la verdad es que hubieron tantos testigos oculares de la resurrección de Jesús.
Si vemos las páginas del Nuevo Testamento, encontramos que hay un montón de testimonios de encuentros de personas que vieron al Cristo resucitado.
Y hay muchos textos que hablan de esto, ¿no?
Y que se apareció no solo a uno, no solo a dos, no solo a los doce, no solo a mujeres, a hombres, sino incluso a grupos enormes.
A grupos enormes, ¿no? Y además el tema está en que, bueno, eso desde un punto de vista creyente está ahí, ¿no?
Testimonios creyentes, pero también hay muchos testimonios de incluso historiadores de la época que realmente luego en sus propios redactados de historia
y en sus propias narraciones, escribiendo crónicas de la época, pues comprueban en entrevistas que hacen a gente que ha estado con el Cristo resucitado.
Y esos testimonios están también ahí, en los anales de la historia.
O sea que hay testimonios de creyentes, pero hay testimonios de no creyentes que también avalan la resurrección de Jesús.
Antes ya creo que habéis contestado la pregunta que queríamos hacernos, que es la siguiente,
que cuál era la importancia de que Cristo ya haya resucitado o no.
Antes ya habéis contestado de que, bueno, ya dicen corintios que van a ser ya nuestra fe si Cristo no hubiera resucitado.
Pero queríamos preguntaros cuál es el mensaje que Dios quiso dar con la muerte y posterior resurrección de Cristo.
¿Qué es lo que realmente importa de este hecho?
Que ya fue anunciado en el Antiguo Testamento de que moriría y al tercer día se levantaría de entre los muertos.
Pues evidentemente es un hecho que tiene consecuencias, consecuencias personales, consecuencias espirituales, consecuencias existenciales.
Es decir, el mensaje es un mensaje de vida, es un mensaje de esperanza, es un mensaje de fundamentar toda una creencia, toda una fe.
Es el mensaje de que la salvación tiene un sentido.
Es el mensaje de que tenemos un Dios que es un Dios vivo, que no adoramos a una estatua de mármol,
que no adoramos a un pensamiento filosófico, que no seguimos un ritual, etcétera, etcétera.
Es decir, que estamos adorando, estamos alabando, estamos siguiendo, estamos obedeciendo
a un Dios que es un Dios que está vivo, que está presente, a un Dios que es real, que está en medio nuestro.
A un Dios con el que podemos comunicarnos, con el que podemos hablar, con el que podemos tener un contacto directo e íntimo.
Y esto, evidentemente, esta situación lo que hace es transformar vidas.
Esta relación íntima con el Dios vivo, con un Dios real, un Dios que existe, es existencial,
es que transforma nuestras vidas, transforma nuestra forma de ser, transforma nuestro pensamiento
y, evidentemente, nos da algo, algo que es esperanzador, que es la esperanza, valga la redundancia, de una vida,
y volvemos otra vez a hablar de la vida, de una vida eterna.
Porque como Cristo resucitó, nosotros, en un futuro, también, si llegamos a morir, también resucitaremos.
Además, fijaros que, en realidad, el mensaje que viene a darnos es un mensaje compacto,
porque, en realidad, la redención o salvación del hombre y la posterior consecuencia de la vida eterna
es conjunto la muerte con la resurrección.
Este fue el mensaje querigmático de los apóstoles.
Cuando empezaron a predicar, en los primeros momentos, ellos no sabían predicar otra cosa
que la muerte de Cristo en la cruz, pero también la resurrección,
porque entendían que una cosa sin la otra no puede ir, no puede ir.
Es decir, la muerte es la redención del hombre para realmente poder darnos la salvación,
pero si nos da la salvación, nos da también la vida,
y la vida eterna está en el hecho en que Cristo resucita
y en el hecho de que nosotros heredamos también esa situación de vida y de resurrección.
Hay un versículo que dice en Colosenses 3.1, dice,
ya que habéis resucitado con Cristo, buscar las cosas de arriba,
donde está Cristo sentado a la derecha de Dios.
O sea, que también nos da la esperanza de que, bueno, busquemos las cosas de Dios
porque ahí es donde también estaremos en un día nosotros, ¿no?
Y esa es la esperanza que tenemos.
Bueno, pues la verdad es que es un tema muy interesante
y estaríamos mucho rato, ¿no?
Porque hablar de la resurrección yo creo que es algo importante también
por la sociedad que nos rodea, que a veces tiene tan poca esperanza
y tan pocos motivos para seguir adelante, ¿no?
Y el tener una fe que nos garantiza que estaremos en el mismo sitio
donde Él está, donde Dios mismo está, pues la verdad es que da mucha esperanza.
Vamos a seguir en esta mañana escuchando ahora mismo una canción.
Pastor de los perdidos
Amigo de enemigos
Amigo de enemigos
Bálsamo al herido
Mi sangre y mi latido
Suspiro por ti
Suspiro por ti
Cuánto amor
Hizo falta para destruir mi error
¿Cuál poder
Fue capaz de hacerme ver
Mi condición
Mi Señor
Mi Señor
Solo tuviste en mí una razón
Y al morir
Derramaste eternidad al corazón
Suspiro por ti
Suspiro por ti
Suspiro por ti
Suspiro por ti
Pues bien, hasta aquí el programa de hoy.
Muchas gracias por habernos acompañado en esta mañana.
Esperamos que este programa haya estado de interés para todos vosotros.
Si quieres contactar con el equipo de Puerta a la Esperanza para alguna consulta,
puedes dejar tu mensaje grabado en nuestro contestador automático.
El número de teléfono es el 977-24-2408.
También nos puedes hacer llegar tu opinión a través de un mensaje de correo electrónico
a la dirección de Puerta a la Esperanza.
iglesia.iglesiedetarragona.com
Si deseas hacernos una visita, tienes a tu disposición la página web de la iglesia,
www.iglesiedetarragona.com
También puedes visitarnos personalmente en la iglesia que está situada en la calle Monastía de Publet, número 7.
El horario de culto son los domingos a las 11 y media de la mañana. Estás invitado.
Bien, pues nada más por hoy. Muchas gracias, Josué.
Muchas gracias a Miguel por vuestra participación.
Porque ha sido un tema muy interesante y también al resto de equipo de la radio en esta mañana.
Si Dios quiere, nos volveremos a encontrar de nuevo el próximo domingo aquí en Puerta a la Esperanza,
en Tarragona Radio.
Un programa de radio que tiene por objeto hacer llegar a todos la palabra de Dios,
que es la Biblia. Así que Dios os bendiga y os guarde.
Pastor de los perdidos
Amigo de enemigos
Amigo de enemigos
Bálsamo al herido
Mi sangre y mi latido
Suspiro
Suspiro por ti
Suspiro por ti
Suspiro por ti
Cuando amor
Hizo falta para destruir miedo
Cual poder
Cual poder
Cual poder
Fue capaz de hacerme ver
Mi condición
Mi Señor
Mi Señor
Mi Señor
Solo tú viste en mí
Mi narra
Y al morir
Derramaste eternidad
Derramaste eternidad
Corazón
Corazón
Cuanto amor
Hizo falta para destruir mi error
Cual poder
Su mal poder
Cual poder
Cual poder
Cual poder
Cual poder
Cual poder
Cual poder
Cual poder
Y al morir derramaste eternidad al corazón.