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Arxiu/ARXIU 2013/PROGRAMES 2013/


Transcribed podcasts: 256
Time transcribed: 9d 0h 14m 33s

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El programa Habaneras desde el Balcó,
desde Tarragona Radio.
Aquesta semana es el número 475.
El programa Habaneras desde el Balcó,
el programa Habaneras desde el Balcó,
el programa Habaneras desde el Balcó,
el programa Habaneras desde el Balcó,
el programa Habaneras desde el Balcó,
el programa Habaneras desde el Balcó,
el programa Habaneras desde el Balcó,
del Balcó,
el programa Habaneras desde el Balcó,
el programa Habaneras desde el Balcó,
habaneras desde el Balcó,
el programa Habaneras desde el Balcó,
el programa Habaneras desde el Balcó,
el programa Habaneras desde el Balcó,
el programa Habaneras始mado donnerá
con los mató,
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Fins demà!
Bona nit.
Bona nit.
Bona nit.
Bona nit.
Bona nit.
I en aquest cas són els, precisament, els autors.
I estan acompanyats al piano també d'Ernesto Licuena.
Curiosament, una versió, o una gravació, perdó, del 1930.
Una de les sabaneras que més se escoltan encara, aquells ojos verdes.
Aquellos ojos verdes, de mirada serena, dejaron en mi alma eterna sed de amar,
anhelos, de calices, de besos y ternura, de todas las dulzuras que sabían brindar.
Aquellos ojos verdes serenos como un lago en cuyas quietas aguas un día me miré.
No saben las tristezas que a mi alma le dejaron, no saben las tristezas que a mi alma le dejaron.
Aquellos ojos verdes que nunca me estaré.
Fueron tus ojos los que me dieron, no saben las tristezas que a mi alma, no saben las tristezas que a mi alma, no saben las tristezas que a mi alma.
Me dieron el tema dulce de mi canción, tus ojos verdes claros serenos, ojos que han sido mi inspiración.
Aquellos ojos verdes, de mirada serena, dejaron en mi alma eterna sed de amar,
anhelos de caricias, de besos y ternura, de todas las dulzuras que sabían brindar.
Aquellos ojos verdes, serenos como un lago en cuyas quietas aguas un día me miré.
No saben las tristezas que a mi alma le dejaron, aquellos ojos verdes que yo nunca besaré.
Aquellos ojos verdes, serenos como un lago en cuyas quietas aguas un día me miré.
No saben las tristezas que a mi alma le dejaron, no saben las tristezas que a mi alma, no saben las tristezas que a mi alma.
No saben las tristezas que a mi alma y me miré.
No saben las tristezas que a mi alma le dejaron, no saben las tristezas que a mi alma, no saben las tristezas.
Aquellos ojos verdes, serenos como un lago en cuyas quietas aguas un día me miré.
Aquellos ojos verdes, serenos como un lago,
en cuyas piedras aguas un día me miré.
No saben las tristezas y a mi alma le dejaron.
Aquellos ojos verdes que yo nunca besaré.
El trío Guayacán de Luis Rosales y de Ricardo Palmerín,
al himno de la península de Yucatán, ritmo de manera,
molt versionada també, peregrina.
Música
Música
Música

Música
Música
Música
Música
Música



Música

Música
Música
Música
Música
Música
Música
Música
Música
Música
Música
Música
Música
Música
Música
Música
Música
Música
Música
Música
Dos, ara passem a una altra habanera i ens anem, bueno, a una habanera, a un cuplé,
és un cuplé però al ritme d'habanera.
La veritat és que la versió que escoltarem tampoc és precisament en aquest ritme,
sinó totalment diferent, però aquí està, està en Miguel de los Reyes,
de un i doi, de la seva antologia de la rumba i una versió una mica flamencada
d'aquest cuplé que, com deia el maestro Padilla, porta rime d'habanera
i és una també de les més versionades i de les més internacionals, la violetera.
La violeta
Com abre precursora, hay de primavera, en Madrid ya aparecen, hay la violetera,
que pregonan
parecen colondrinas que van piando, que van piando
Cómpramelo señorito, que no vale más un rey, cómpramelo señorito,
Compramelo usted el ramito pa' lucirlos en el ojo.
Y tienen ustedes ahí a su persona, no presume de guapa, ay ni de chulona,
que no vale más un rey, cómpramelo señorito, compramelo señorito, compramelo señorito,

trompa que tumba que tumba, tumba que tumba, tumba que tumba, tumba que tumba,
tumba que tumba, tumba que tumba, tumba que tumba, tumba que tumba, date a tumba.
Se va, se va, la violeta.
Dos envisaguetes rimes tan estrepidant, por así dirlo, de la violetera.
I ara ens anem a Yucali, el grup de Moliendo Tangos Argentins, Kratzline 96, Bandoneón, Piano, Violín y Violonchelo.
I com sona? Doncs d'aquesta manera la música de Kurt Weill, i estem una setmana més en habaneras,
en aquest cas era un tango habanera, més escoltadas i més enregistradas.
Yucali.
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I com sona?
I!
I!
Cuando en la playa la bella Lola, su lindo talle luciendo par,
los marineros se vuelven locos y hasta el piloto pierde el compás.
¡Ay, qué placer! Sentía yo, cuando en la playa sacó el pañuelo y me saludó.
Luego, después, se acercó a mí, me dio un abrazo y en aquel brazo creí morir.
Después de un año de no ver tierra, porque la guerra me lo impidió,
me fui al puerto donde se hallaba la que adoraba mi corazón.
¡Ay, qué placer! Sentía yo, cuando en la playa sacó el pañuelo y me saludó.
Luego, después, se acercó a mí, me dio un abrazo y en aquel brazo creí morir.
La cubanita lloraba triste al verse sola y en alta mar.
Y el marinero la consolaba, no llores Lola, no te has de ahogar.
¡Ay, qué placer! Sentía yo, cuando en la playa sacó el pañuelo y me saludó.
Luego, después, se acercó a mí, me dio un abrazo y en aquel brazo creí morir.
Ella me habló en la bahía de la isla donde nació.
Silvia, Lucía y Javier Perdina, desde Tarragona Radio.
Os dien adeo y os esperamos, al disapte, a la una de mis días.
Ha estat el programa 470 Sim, de Habaneras, desde el Balcó, desde Tarragona Radio.
Buenas tardes.
Tengo a giros y palmares, oíos y de su amor.
Mulata, mulata, mulata, mulata, mulata, la cubanita, la cubanita,
que allá en La Habana me habló de sueños, de caña dulce y de buen café, de buen café.
Mulata, mulata, mulata, la cubanita, la cubanita, la cubanita,
y allá en La Habana, con su sonrisa, medio galana, tabaco y ron.
Sentados en la bahía, contemplando el mar azul,
yo le cante esta manera, con la brisa caribeña, que acarició nuestra piel.
Ella me habló en la bahía, con el viento en libertad,
en la bahía, con la brisa caribeña, de callos y de manglares, de guajiros y palmares, boíos y de su amor.
Mulata, mulata, mulata, mulata, la cubanita, la cubanita, la cubanita, que allá en La Habana me habló de sueños, de caña dulce y de buen café, de buen café.
Mulata, mulata, mulata, la cubanita, la cubanita, la cubanita, que allá en La Habana, con su sonrisa, medio galana, tabaco y ron.
Mulata, mulata, mulata, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanita,auenita, la cubanita, la cubanita, la cubanita, la cubanda la cubanita, la cubana y la cubanita y la cubana y la cubanita.