This graph shows how many times the word ______ has been mentioned throughout the history of the program.
Avui, com cada darrer dimecres del mes,
parlarem a l'entrevista del dia del Servei de Mediació Ciutadana
i per això ens acompanya la mediadora municipal, la Jéssica Haig.
Bona tarda.
Hola, bona tarda.
Bé, doncs avui concretament ens centrarem en parlar de comunicació no violenta.
Què és exactament aquest tipus de comunicació?
Bé, doncs per parlar de comunicació no violenta podríem començar fent una pregunta, no?
Què prefieres, tenir raó o ser feliç?
Perquè les dues coses no són possibles.
Esta reflexió de Marshall Rosenberg, que és su creador,
i ens ha d'entrar en el món de la comunicació no violenta,
el que ell mateix define com un medi per establir relacions empàtiques
amb nosaltres mateixos i amb l'altre.
Aquest psicòleg estadounidense és el creador d'un model
basat en els principis de la no violència i de la solidaritat,
com un estat natural dels seris humans.
Rosenberg entiende la violència com tot el que ens aleja del altre.
Això significa que, més allà de la acceptació social,
del término de violència com algo purament físic, no?
i identifica també a la violència quan ens comunicem sin compasió,
sin llibertat real, amb els nostres familiares, amb els nostres amics,
amb els companys de treball i, per suposant, en els nostres propis monòlogos internos.
I la nostra comunicació costuma ser violenta?
Doncs sí, suele serlo.
Comunicar-se sin violència no quiere dir comunicar-se sin pegar al altre.
Nos comunicamos de manera violenta en general.
Doncs quan arribem a la violència física,
muchas veces lo que ha pasado és que previamente
ja ha habido una comunicació violenta.
És com si fosra caldeando el ambiente,
com si fosem rociando con gasolina
un terreno en el que després se va a incendiar con una mecha.
¿Y com és una comunicació no violenta?
Doncs la comunicació no violenta parte
de asumir la responsabilitat propia
i la del altre en una comunicació.
¿Podrías posar-nos un exemple per veure?
Pues, por ejemplo, cuando utilizamos juicios morales,
cuando asumimos y decimos al otro o a nosotros mismos
lo que está bien o lo que está mal.
Estamos siendo violentos porque estamos prejuzgando
que hay algo negativo en su comportamiento.
Si entendemos la violència, como refleja Rosenberg,
nos damos cuenta de que nuestro día a día
está salpicado de momentos de violencia
que actúan como chispas intermitentes
cargadas de electricidad negativa.
y esto hace que nos separe continuamente de los demás.
En realidad, lo que nos sucede
es que no sabemos hacerlo de otra manera.
No somos conscientes
de que la mayoría de las veces
lo que necesitamos es el reconocimiento,
ser escuchados, claridad, seguridad,
aceptación, comprensión, apoyo, cariño,
respeto y también confianza.
Como consecuencia de ello,
tenemos una mezcla de sentimientos internos
que nos descolocan y que, además,
tratamos de ocultar al máximo
para, bueno, no vaya a ser que nos volvamos demasiado humanos.
¿Cuántas veces pensemos, no?,
a raíz de nuestras conversaciones
sentimos que nos estamos desconectando del otro,
independientemente de que haya habido o no
un conflicto como tal?
Bueno, quizá esto es porque estamos más pendientes
de hablar nosotros y de tener razón
que de escuchar.
Porque, en general, nuestra escucha
está llena de interpretaciones y de juicios
que nos han fundado sobre los demás.
Porque nos cuesta muchísimo también expresarnos
desde el ser auténticos y vulnerables
y esto lo hacemos normalmente
porque nos da miedo el rechazo
y queremos tener razón a toda costa.
Quizá sea porque tenemos más facilidad
de pedir al otro que cambie o haga algo
en lugar de pedírnoslo a nosotros mismos.
¿Cuántas veces nos maltratamos,
también verbalmente,
desde nuestros propios juicios
y pensamientos destructivos?
Bien, como no hemos aprendido a expresarnos,
pues desde la empatía y la compasión
nos comunicamos de forma violenta
y entramos en un bucle.
De distanciamiento a través de exigencias,
de consejos que no nos han pedido,
de la huida a ver si el tiempo lo cura todo,
el victimismo y el no hacernos cargo
a través de la irreflexión y la falta de cuidado.
¿Y cómo pude enparlada forma no violenta?
Bien, la comunicación no violenta
requiere el uso de cuatro sencillos pasos.
El primero de ellos es la observación de los hechos.
Y os pongo un ejemplo, ¿no?
Sabes, María, hay una cosa que te quería comentar.
¿Recuerdas el otro día que estuvimos con unos amigos
y reímos tanto en casa de Lucía?
Pues bien, en uno de esos momentos en grupo
compartiste con todos ellos un secreto
que te había confiado solo a ti.
En este primer punto lo que hacemos únicamente
es establecer hechos de manera objetiva, objetivos, ¿vale?
El segundo punto, que sería la expresión de los sentimientos,
sería expresar lo puramente emocional.
Y se explica al otro cómo nos ha hecho sentir
el episodio descrito que hemos visto en el anterior punto.
En esta parte dejamos la visión objetiva
y utilizamos nuestra auto-observación
para poder identificar y contar con palabras simples
qué es lo que estamos sintiendo en este momento.
En este punto entra en juego la capacidad empática
de nuestro interlocutor,
que no puede darse por desconectado
y es necesario que la conversación sea bidireccional.
Si seguimos con el ejemplo anterior,
podríamos decirle que esto me hizo sentir
bastante incómoda y avergonzada.
De repente, un tema que ni siquiera yo misma
acababa de gestionar,
estaba expuesto a todo el grupo
y todos lo comentaban libremente.
Desde entonces, me siento bastante decepcionada
y triste contigo.
El tercer punto sería la expresión de las necesidades.
En este siguiente paso expresamos,
según la comunicación no violenta,
qué es lo que necesito para no sentirme de esa forma.
Ya he explicado cómo me siento
y ahora cuento cómo me gustaría sentirme
en situaciones similares de cara al futuro.
Se hace desde una visión más global
y no se repara tanto en el detalle
de lo recientemente sucedido,
sino que lo que se hace es una proyección a largo plazo.
¿Qué podría decir, no?
Si te lo conté a ti,
este secreto es porque eres mi amiga
y necesito saber que te puedo explicar mis problemas
y mis dudas sin exponerme al juicio de nadie más.
Debo poder confiar en ti.
Finalmente, el cuarto y último paso
de este esquema para la comunicación no violenta
está la petición formal
que le hacemos a nuestro interlocutor
a modo de un plan de acción y de compromiso
para poder avanzar en este aspecto
y que no quede todo en un simple intercambio
de percepciones y de creencias.
Esta petición sería
Así que, por favor, te pido
que no vuelvas a desvelar un secreto
que te he contado solo a ti
delante de todo el grupo.
Si desde esta comunicación honesta
la amiga sabe aceptar
lo que le está transmitiendo su amiga,
las dos podrán disfrutar
de una amistad plena y más fuerte.
Como veis, en la comunicación no violenta
se practica tanto la asertividad de uno mismo
para poder exponer nuestra posición
respecto al tema
como también lo que se está pidiendo
es empatía por parte del otro
para poder comprender y aceptar
que otras percepciones y creencias son posibles.
Este tipo de escenas
te las puedes encontrar en tu vida personal
pero también en el entorno organizacional
dentro de nuestros puestos de trabajo.
Pensemos cuántas veces
al tratar de solucionar un problema
lo que hacemos es agravarlo un poquito más
haciendo que todavía sea más difícil la convivencia.
Comenzar a practicar estos cuatro sencillos pasos
pueden ayudarte mucho a mejorar
y consolidar las relaciones.
Apuntaves al començament
que d'alguna manera no sabem
comunicar de forma no violenta.
En aquest sentit,
des del Servei de Mediació Ciutadana
de l'Ajuntament d'Abrera
¿ya ha previsto a terme alguna acción, alguna actuación?
Sí, desde el Servicio de Mediació Ciutadana
del Ayuntamiento d'Abrera
tenemos previsto realizar una serie de talleres
relativos a la mejora de la comunicación.
El tema de la comunicación no violenta
también será abordado.
Próximamente informaremos
de cuándo y de dónde se realizarán.
No obstante,
para aquellos que estén interesados
pues pueden ponerse en contacto con nosotros
a través del correo electrónico
que es naviación arroba ajuntamentabrera.cat
o bien llamando al teléfono del Ayuntamiento
el 9-3-770-0325
o viendo también personalmente al Hotel de Entidades
los miércoles de 9 a 7 de la tarde.
Aquest dia, els dimecres,
és quan s'ofereix aquest Servei de Mediació Ciutadana
a l'Hotel d'Entitats d'Abrera
que està obert a tots els veïns i veïna interessats.
Nosaltres avui agraïm la seva atenció
a l'entrevista del dia
la mediadora municipal, la Jessica Haig.
Moltíssimes gràcies.
Gràcies.