I a punt de tocar els tres quarts de dotze del migdia,
gairebé ens falta un minutet per aquests tres quarts.
Entrem també a parlar amb Lila Lorenzo i Anna Calvet.
Lila Lorenzo és educadora i també dinamitzadora del somriure,
ja estem acostumats a escoltar-la aquí a la Justa Ràdio d'Esvern,
i Anna Calvet és coach, mentora especialitzada en adiccions.
La saludem a les dues. Bon dia, Anna i bon dia a Lila.
Hola, buenos días. Qué alegría de poder estar aquí. Gracias.
Buenos días, Anna, també. Buenos días.
Hola, bon dia, bon dia.
Bon dia. Gracias por venir a las dos.
Vamos a enfocar esta entrevista en castellano
porque sé que luego también la difusión llega a otras personas
que quizás les és més fàcil entender el castellano.
Eso és. És que esto és internacional.
Somos internacionales? De aquí a Latinoamèrica, creo, no?
Sí, de hecho yo tengo clientes, pacientes de Latinoamèrica
y algunos también que están en el Líbano
y entonces, bueno, y también en España, en diferentes puntos de España.
Puede ser útil, ¿no?
Mejor que lo hagamos así porque yo sé que ellos me van a estar escuchando.
Perfecta. Pues vamos a hablar, Lila, para empezar.
Explícanos hoy por qué has traído a Anna Calvet aquí a la radio.
Bueno, pues para mí es alguien de referencia muy importante y muy especial
no solo por su profesión y su experiencia de vida, sino como amiga.
Amiga de, bueno, pues de la adolescencia.
Llevamos juntas al instituto.
Guau. Un poco como Monse Flores, ¿verdad?
También. Bueno, como Monse Flores era en la escuela.
En la escuela, ya. Guau.
EGB, en escuela primaria.
Y con ella fue en el instituto y, bueno, fue, no sé,
luego nos encontramos en la carrera.
Exactamente, después nos encontramos en la carrera.
Sí, sí, sí, sí.
Guau.
Sí, sí, sí, sí.
Nos hemos ido encontrando y desencontrando, ¿no?
Eso es, ¿no?
Y tenemos vínculo, bueno, en San Feliu y Obregat,
que es donde habíamos vivido, y también en San Yus,
o sea, que estamos muy unidas.
Y ahora, pues aún más, porque tenemos las dos a nivel profesional.
una labor de acompañamiento, de guía, de servicio y de apoyo
a las personas que lo necesitan.
Y en caso de Ana, porque Lila, contigo hemos hablado bastantes veces
de tema de la sonrisa, de beneficios, ¿no?
De cómo encontrar un poco ese, aquest benestar personal.
Pero Ana, que comentaba antes, ¿no?
Has facializado en adicciones.
Explícanos un poco en qué se basa un poco tu día a día,
la ayuda a los demás.
Claro, o sea, yo me especializado en adicciones,
pero me gustaría concretar que las adicciones que yo toco
son la comida, ¿vale?
Las plataformas, cuando la gente está muy enganchada
a las plataformas estas de plataformas de redes.
O sea, digitales, redes sociales.
Exactamente.
Las parejas, eso de que pasas de una pareja a otra.
¿Vale?
Sí, sin fin, vamos a decir.
Y la codependencia, que es algo muy común
en todas las personas que tienen mucha adicción
y que tienen mucha compulsión.
Entonces, básicamente, estas son las adicciones que yo toco.
¿Hay muchas personas que tienen algún tipo de adicción
de estas que mencionas?
O sea, yo creo que muchas más de las que creemos.
¿Quieren tratarse?
Sí, yo creo que muchas más de las que creemos.
Porque siempre, y justamente ahora lo estamos comentando con Lila,
el tema más difícil de la adicción,
primero es saber si la tienes,
pero sobre todo la adicción se vive muy en silencio y en secreto.
Porque es un tema que te da mucha vergüenza.
Te da mucha vergüenza transparentar que tú estás ahí
y que tienes ese problema.
Entonces, los porcentuales son altos estadísticamente,
por lo tanto, los reales son mucho más altos.
Porque hay mucha gente que está ahí y no lo cuenta.
Y que lo está pasando muy mal.
Y a mí me llega mucha gente que me dice,
ostras, es que yo esto no sé con quién hablarlo.
Y no lo he hablado nunca con nadie.
Claro, porque antes de llegar quizás a ti,
pasan por psicólogos, pasan por otro tipo de medicina.
Claro, también lo estábamos hablando ahora con Lila, ¿no?
Yo decía, lo que me pasa, o sea,
una de las cosas que estoy notando mucho
es que la gente me viene con doble trauma.
El trauma de, tengo este problema,
que es un problema que llevo conviviendo con él mucho tiempo
porque no sé cómo salir de él.
Y el segundo problema, que casi es peor que el primero,
es que llevo intentando muchas cosas y no lo consigo.
Lo he probado todo y no lo consigo.
De forma solo o sola, ¿no?
Claro, solo o sola, exactamente.
Solo o sola o no.
O de repente con ayudas,
pero a lo mejor no han dado con lo que es adecuado
para cada persona o para cada tipo de adicción
o para...
Y entonces, claro, vienen muy castigados.
La gente te llega muy castigada.
Muy castigada y muy desesperada en el sentido de
me va a funcionar.
Claro.
Me va a funcionar.
Claro, la desencantados, ¿no?
Y un poco decepcionados, ¿no?
Sí, cansados.
Sí, cansados, muy, muy...
Lila, voy haciendo preguntas,
pero también si te libre de añadir lo que quieras, ¿eh?
Si querías añadir ahora algo.
Sino que yo tengo como una visión
que sí que me gustaría compartirla contigo
y creo, no sé si estarás de acuerdo o no,
porque no lo hemos hablado del todo,
es si crees que las personas que tienen
algún tipo de compulsión o adicción
viene generado en mayoría, ya sabemos, ¿no?
Generalmente por carencias afectivas
que hayan podido sufrir en la infancia.
O sea, que es causa-consecuencia, ¿no?
Quizás.
Bueno, preguntamos, ¿no?
Yo tengo aquí como odio.
¿Cómo es eso que una persona llega a esta situación?
¿Qué le lleva?
Claro.
Yo te diría que efectivamente
viene producido por carencias en la infancia,
normalmente carencias afectivas, ¿vale?
Que probablemente estás en una familia que es normal,
pero tú lo has vivido con alguna carencia.
Y después, con el tiempo,
tú, como no tienes herramientas,
sustituyes lo que necesitas,
sea afecto, sea cariño, con la comida,
si hablamos de la comida, ¿vale?
Y después esto se constituye como un hábito.
Ese es el problema.
Y salir de ese hábito es muy difícil.
Claro.
Y ese hábito después es del uso al abuso,
del abuso a la adicción.
Se potencia muy mucho.
¿Y después qué pasa?
Que la sociedad aprieta mucho.
Estamos en una sociedad que nos aprieta mucho.
En todos los sentidos, ¿no?
Y entonces eso lo que hace
es que aún se exagera mucho más.
Hay más exigencias.
Claro, porque hay mucha exigencia.
Hay mucha exigencia en todos los sentidos.
A nivel profesional, a nivel personal,
a nivel de imagen.
Y eso, si tú tienes un problema,
lo que hace es que lo potencia.
Lo agranda.
Lo agranda.
Claro.
Y, por ejemplo,
con el tema de las adicciones de redes sociales,
en concreto,
claro, esto hace quizá 15, 20 años
no existía como tal
o no se trataba como tal, ¿no?
O sea, es nuevo, digamos, ¿no?
Claro.
O nuevo la forma de tratarse.
Claro, sí, sí.
O sea,
para el tema de las redes sociales,
que es un tema que viene muy fuerte.
Sí.
Muy fuerte y que además
la juventud ya está,
mucha juventud está enganchada.
Cuidado no nos confundamos,
porque la gente me dice,
ah, mi hijo también está enganchado.
A ver, a ver, a ver.
Estar enganchado para mí
es pasarse una noche
enganchada en las redes sociales.
Eso es estar enganchado.
O sea, no dormir.
Exactamente.
Por estar haciendo esto.
No dormir por estar haciendo esto
y al día siguiente continuar con tu vida.
No sé cómo,
porque si no duermes
ya me dirás tú cómo funcionas.
Bueno.
Pero lo haces, ¿eh?
Es un pez que se muerde la cola igual, ¿no?
Pero lo haces.
Yo te lo digo porque yo
te hablo de estas
porque son las que yo he superado.
Y como yo he superado
considero que tengo una cierta autoridad.
Y yo lo he hecho esto.
O sea, a título personal, ¿eh?
A título personal.
Por eso lo conozco muy bien.
Estás toda la noche,
al día siguiente vas a trabajar.
Claro, al día siguiente
estás hecho un desastre,
pero vas.
porque, bueno, porque vas, ¿no?
Y después ya al día siguiente
y duermes y ya está.
Pero quiero decir que
es que ahora
yo me como una tableta de chocolate
y estoy enganchada.
No, no, no, no, no, no.
Es bastante más que eso.
No confundamos, ¿no?
Claro, claro.
Es bastante más que eso
tener una adicción.
Igual que estar enganchada
a una red social.
Es yo me paso toda la noche ahí
y después continúo con mi vida.
Entonces,
pero bueno,
es un tema que viene muy fuerte
y hay que tratarlo.
Hay que tratarlo
y hay que ponerle freno
porque las adicciones
nunca van a menos,
siempre van a más.
Siempre van a más.
Y tema de redes, por ejemplo,
para abordar esta cuestión,
sobre todo gente joven
o es un abanico
que puede comprender
edades que no son
solo adolescentes.
Todas las edades.
Yo te diría que los adolescentes
quizás están en un tipo
de plataformas
y la gente mayor
está en otro tipo
de plataformas.
Pero también puede ser
adicción igual, ¿no?
No hace falta tener TikTok
para estar adicto
a esa plataforma como tal.
No, no, no, no, no, no, no.
Y normalmente
mi experiencia es más
de que tú te enganchas,
por ejemplo,
una serie de Netflix.
Entonces es un capítulo
y otro y otro y otro.
Y el tema de la adicción
para mí es que eso te domina.
Entonces es adicción
cuando eso te domina
y tú no lo puedes frenar.
Tú lo quisieras frenar
pero no lo puedes frenar.
Claro, claro, claro.
Con Lila también habíamos hablado
en algunas ocasiones
del tiempo que te dedicas
a ti mismo, ¿no?
De respetarte,
de escucharte.
Te imagino que este tipo
de personas
dejan muy de lado
este aspecto
de su vida totalmente interior.
Claro, claro.
Cuando tú estás
en el momento
que digo yo
del demonio de la adicción
te abandonas totalmente.
Claro.
Y justamente
para volver a ti
pues una de las cosas
que yo tengo
en mi método
que yo tengo un método
para poder salir
de todo esto
es volver a ti.
Escucharte,
respetarte,
mimarte,
estar mucho contigo.
Anteponerte
a esa adicción, ¿no?
Claro, claro, claro.
Para que eso no te atrape.
Para que tú
lo puedas vencer
porque es como
una especie de demonio.
Una especie de demonio
que te atrapa.
Y yo creo que
a solas
es muy difícil, ¿verdad?
O casi imposible.
Yo te diría
que es prácticamente imposible.
O sea, sin ayuda
te refieres, Lila.
Claro, a solas
uno, ¿no?
Como que autodidacta
e intenta.
Es muy difícil
porque tú te levantas
en la mañana
y dices
hoy no voy a caer
y a las nueve y media
has caído.
Claro, la fuerza de voluntad
también dura
lo que dura.
La fuerza de voluntad
es muy limitada.
Con suerte, con suerte
nos dura hasta las doce
de mediodía.
Con mucha suerte.
Con mucha suerte.
Vaya, nos quedan cinco minutos
para las doce.
No se trata
de fuerza de voluntad.
No, no se trata
de fuerza de voluntad.
Se trata de generar
buenos hábitos
e instaurar buenos hábitos
de ser muy constante,
de estar ahí
muy pendiente.
Bueno, de trabajar
diferentes áreas.
Pero la fuerza de voluntad,
ni la fuerza de voluntad
ni la mente.
que yo digo la mente,
siempre te va,
la mente te engaña.
Sí, es traicionera.
La mente te traiciona mucho.
Sí, porque la mente te dice
mañana lo vas a conseguir
y mañana vuelves a estar igual.
Es como una ilusión.
Exactamente.
Más que otra cosa.
Sí, sí, sí.
¿Y a través de qué método
consigues que estas personas
con adicciones alimentarias,
tema de pareja,
codependencia o redes sociales
ayudar a que salgan
de esa adicción?
Mira, yo he desarrollado
un método
que es el que me ha funcionado
a mí,
que lo he desarrollado
al final de mucha búsqueda,
que yo le he puesto
el nombre de Método Smart.
Y al final es un método
que se basa en esto,
estar contigo muy presente
desde que te levantas.
Y entonces tengo
como una serie de,
bueno, pues durante el día
yo tengo que hacer esto,
y hay muchas cosas
que yo tengo que hacer
sí o sí cada día
para que mi vida funcione.
Y llega un momento
que esto lo tienes
como un hábito
y tu vida se convierte
en magia.
Tu vida se convierte
en algo súper mágico
y entonces cambia todo
y eso.
Pero hay que estar ahí.
Claro.
Pero hay que estar ahí.
Y es un proceso duro,
entiendo.
Para esas personas
no es un camino fácil.
No es fácil,
es un proceso largo
y es un proceso
en el que tú
vuelves a recaer.
Y yo digo,
te caes mil,
te tienes que levantar dos mil.
O sea,
pues la gente es,
ostras,
no me está funcionando.
Bueno, hombre,
claro, ya,
pero es que llevas 50 años
con el otro patrón.
Claro, exacto.
A valorar cuánto tiempo
llevabas con esa rutina,
con esa manera.
Y claro,
y como estamos en esta sociedad
que es todo tan inmediato
y que queremos
que todo sea para ayer,
pensamos que esto
tiene la misma manera
de resolverse.
Y no, no.
Tú llevas muchos años
forjando un patrón
de comportamiento
que es muy tóxico,
pero que lo tienes
muy instaurado
y que más o menos
tú vives con ello,
¿no?
Entonces, claro,
para traspasarte
el otro lado,
pues hay que incendir,
bueno, pues ya te digo,
yo tengo muchos,
¿no?
Y justamente
una de las cosas
que yo incido mucho
es en la meditación,
obviamente,
en tener una alimentación
que esté muy estructurada
y sobre todo
y sobre todo
no caer en el tema
de no voy a comer
porque el no voy a comer
te va a llevar
a la tracón
seguro,
seguro,
segurísimo.
Y bueno,
después ejercicio,
yo qué sé,
yo tengo muchas cosas
instauradas,
pero para empezar,
empezar el día
con una cosa súper básica,
limpieza facial.
¿Sí?
Sí,
¿y sabes por qué?
Porque yo empiezo
mirándome al espejo
y cuidándome
y eso es algo
que antes
yo lo tenía muy abandonado.
¿Sí?
Sí.
Que parece como un gesto
casi hasta animal,
¿no?
Decir,
si no me pongo agua en la cara
no despierto todavía,
¿no?
Sí,
pero no es tanto
para despertarse,
sino es como para
yo me estoy mirando
y ya me estoy acariciando,
ya me estoy cuidando,
ya estoy en mí.
Son actos de amor.
Claro,
hacia uno mismo.
Claro,
porque antes
yo me salgo de mí
y me voy a comer,
a tragar,
a beber,
a jugar
con este,
con el otro
y después en Netflix
y vengo una serie y otra.
Claro,
esto te lleva totalmente
al desorden,
al descontrol
y al caos.
Es un redirigir,
¿verdad?
Un redirigir.
Exactamente,
es un ordenar,
¿no?
Ordenar.
Es volver a ordenar tu vida.
Lo que pasa que,
ya te digo,
normalmente la gente,
o sea,
llegamos con,
cuando la gente llega
es que ya está muy desesperada.
Que no es tarde,
pero,
ojalá hubiera sido quizá antes,
¿no?
Sí,
nunca es tarde,
nunca es tarde.
O sea,
yo creo que cuando la gente llega
es el momento,
porque la gente llega
cuando realmente ya no puede más.
Entonces,
pues bueno,
es el momento.
Y una cuestión que creo
que es bastante interesante
también son los entornos
de estas personas.
Por ejemplo,
con las adicciones quizá
de parejas,
¿no?
Te sorprenderías,
¿eh?
Sí.
O sea,
me refiero a interesante
en el sentido de,
claro,
igual no entra aquí,
¿no?
Pero,
por ejemplo,
la ludopatía,
¿no?
Puede llegar a también
tener un círculo de amistades
o unas personas en concreto
que las relacionas con eso,
¿no?
O que te evocan,
no sé si en este aspecto
también sucede o no.
Yo te diría
que las adicciones
se viven muy en secreto,
muy en solitario
y no generas
demasiados vínculos.
¿Por qué?
Porque la vergüenza
es tanta
que tú no lo compartes
con nadie.
Que no quieres
compartirla.
No lo quieres compartir
con nadie.
Entonces,
tú lo haces
tú solo.
Y básicamente,
en general,
todas.
Tú,
por ejemplo,
una persona que bebe
que es alcohólico,
seguramente,
de cara a la galería,
de cara a la sociedad,
de cara a la familia,
esa persona probablemente
de poco.
Él cuando bebe
para esto,
él lo hace solo.
Él no lo hace
esto en compañía.
Raramente
lo va a hacer en compañía.
Entonces,
por eso,
muchas veces
pasa muy desapercibido,
¿no?
No lo sabes.
O sea,
yo ahora,
porque claro,
estoy muy especializada
en el tema
de muchos años
y enseguida
la veo la persona.
La persona tiene un problema
de esto,
de esto,
de esto.
Pero,
si no,
no lo sabrías.
La experiencia te lleva
a poderlo detectar
más fácil,
¿no?
Lila y Ana,
tenemos que dejar casi aquí
el espacio.
Seguiría preguntándonos
más temas
y creo que seguiríamos
con un debate
muy interesante,
pero Ana,
te invito a que vuelvas
cuando quieras,
ya sabes.
Pues cuando me invitéis
estaré aquí feliz.
y Lila,
de nuevo,
mil gracias
por pasar por aquí
por la radio,
por traernos personas
con cuestiones interesantes
como nos ha traído
hoy Ana Calvet
y por tu sonrisa.
Muchas gracias.
Es gratis,
ya lo sabes
que es gratis.
Sí,
pero nos encanta
que vengas
y la veamos.
Un abrazo a las dos,
Ana,
gracias,
y Lila también,
casi que buenas fiestas.
Bueno,
no sé si nos veremos antes,
pero por si acaso
nos vemos,
buen Nadal a las dos
y buen Aindaú.
Claro que sí.
Muchas bendiciones
y mucha conciencia
para todos.
Un abrazo.
Muchas gracias.
Adiós.