Fins demà!
Acaba a tots els costats, no?
Jo també, jo ja miro sempre això,
com les bruxoles, dret a esquerra,
amb una vall, cap a tot arreu,
avui molta precaució, perquè hi ha ratxes també molt fortes
i que s'ha de tindre molta d'arte avui.
Avui era molt aventuràs
a caminar amb aquest fort vent que anava, no?
Doncs avui parlem,
tenim com sempre activitats,
ara descomendarem l'agenda, però tenim un nom propi, un protagonista,
un home que, a més a més,
ja vam parlar amb ell quan estava a punt de crear un llac,
el Baikal,
i ara què ha fet aquest home?
Bé, doncs ni més ni menys
que ha travessat
tot l'oceà Atlàntic,
i llavors ha fet
la Reims-Guyant
uns 4.700
quilòmetres remant.
4.700 quilòmetres remant.
64 dies.
Imaginau-vos, eh?
Ramón de la Rosa, bon dia.
Antonio, la Rosa, Antonio.
Antonio, ¿qué tal? Bon dia.
Antonio, no Ramón, hola, bon dia.
Disculpa, disculpa.
¿Cómo estás, Antonio?
Oye, ¿te quedan brazos o qué?
¿Cómo estás?
Sí, me quedan brazos y piernas todavía, la verdad es que bien. Ha pasado ya, ha terminado hace ya casi un mes y, bueno, ya estoy recuperado, pensando en la montaña, pensando en remar en padel surf y pensando en seguir haciendo cosas, que es lo que me gusta. Seguir buscándome desafíos y límites.
Hablando de desafíos, este quizás hasta ahora puedes pensar que ha sido uno de los mayores que has hecho.
Sí, sí, sin duda la travesía del Atlántico a Remo en solitario que acabo casi de terminar, ha sido uno de los mayores desafíos que he hecho y ha sido el más reconocido. De hecho, bueno, pues he tenido una cobertura bestial que me ha superado incluso a las expectativas que tenía.
Para mí muy contento, porque, lógicamente, los sponsors y los patrocinados que me han estado apoyando, pues están también contentísimos.
Y lo interesante de esto es que, claro, ha sido sencillo que una travesía del Atlántico a Remo en solitario haya tenido mucha cobertura, porque es algo que en España, pues hay muy poca gente que hace.
España es un país rodeado de mar, pero que prácticamente no se hacen desafíos en el mar, más que travesías oceánicas a vela. Pocas más cosas se hacen.
Entonces, en cuanto planteas hacer algo como lo que he hecho yo, pues la gente le sorprende muchísimo, ¿no?
De hecho, desde... bueno, ha sido el único participante español con 18 participantes, casi todos franceses, me imagino.
Todos franceses, sí, de Guayana y de Brasil.
Y, bueno, he conseguido ganar la prueba, como muchos saben. O sea, que para mí ha sido muy interesante.
A nivel técnico, la primera parte, que era la que, bueno, yo particularmente pensé que iba a ser más remado.
Yo llevo toda la vida remando, haciendo travesías de todo tipo y corriendo raíz de aventura durante muchos años.
Algo que me ha servido, sobre todo, para la última parte de la travesía, que ha sido la parte donde dije, bueno, yo creo que puedo hacer un buen puesto y puedo disputar esta carrera.
El tema de aguantar el sueño, aguantar los días que duermes una hora.
Eso, la verdad, es que esa experiencia que tengo de muchos años me ha servido mucho para poder vencer esta prueba.
Es que, de todas maneras, lo dice todo, una palabra o una frase que dijiste tú, ¿no?
Dice, estuve remando más de tres horas sin moverme del sitio.
Eso, supongo que era por las fuertes corrientes que pillabas, ¿no?
Claro, el tema es que cuando, como el día 50, este año ha sido una travesía muy complicada.
Esto es una competición, que es la cuarta edición que se hace.
La primera edición fue en el año 2006. Más o menos se hace una edición cada tres años.
Y, habitualmente, pues se ha comenzado en la época de alicios estables.
Los alicios son los vientos y las corrientes favorables que van de África a América.
Esto quiere decir que si tú te pones con una embarcación en la costa africana,
si sales en diciembre, noviembre, diciembre, que es cuando empiezan los alicios,
hasta ni siquiera habría que remar y, a lo mejor, en 100 o 120 días llegarías a algún lugar de América, ¿no?
Este año la competición se ha adelantado más de un mes y medio.
Ha empezado el 18 de octubre y el problema grande ha sido que los alicios no estaban todavía estables
e, incluso, la primera semana hemos tenido vientos en contra.
Después de un mes y medio, corrientes en contra, corrientes favorables.
Y eso es lo que ha obligado a todos a tener que esforzarse mucho más,
a que la competición se alargara muchísimo en el tiempo.
Cuando las previsiones eran de que el ganador estuviera más o menos en 40 días,
como las ediciones anteriores, pues yo he ganado con 64 días.
Incluso a nivel de alimentación, pues he tenido que pescar bastante para completar las raciones de comida,
porque yo llevaba raciones de comida para 50 días, que era la estimación del peor tiempo.
Y, bueno, pues ha sido todo mucho más duro.
Y, además, estas corrientes, pues han obligado a forzar mucho, sobre todo en la última parte.
Eran corrientes muy cercanas a la costa de Guayana Francesa, donde estaba la meta,
que lo que hacían era obligarte a retroceder y a bajar hacia el sur.
Entonces, bueno, yo me planteé que ahí era el momento de que yo no me podía quitar de los remos.
Es una franja de corrientes de unos 100 kilómetros de ancho que yo tuve que cruzar,
como si cruzaras un río de corriente.
Lo único que es que es un río dentro del mar, ¿no?
Pero la corriente es exactamente la misma.
Y me tuve que plantear, pues no parar en esos 100 kilómetros hasta que no cruzara el otro lado.
El resto de participantes, incluso que iban por delante de mí,
pues en cuanto se pararon, retrocedieron, si se pararon 4 o 5 horas, retrocedieron 20 o 30 kilómetros
y ya les metió en un bucle de corrientes que ya estuvieron más de un día para poder salir de ahí.
Yo estuve dos días remando 22 horas diarias, ¿no?
Dormía en el asiento una hora diaria para poder cruzar esas corrientes y salir,
y salir, bueno, pues ya en primer lugar de esas corrientes.
Supongo que esas corrientes, como buen palista eres y tal, y hacer los ríos y tal,
te han ayudado, ¿no?
Porque me imagino que las tienes que cruzar así un poco en diagonal para que...
Claro, efectivamente.
Tú, si vas a cruzar una corriente en un río de un punto A y quieres llegar justo al punto enfrente,
lo que tienes que hacer es, por muy buen palista que seas,
la corriente siempre te va a hacer una diagonal.
Entonces tienes que subir un poco y a lo mejor remontar por la orilla 10 metros
para que cuando tú cruces al otro lado salgas en el punto exacto en el que quieres salir.
Eso es lo que hice yo en esta corriente.
Lo que hice fue aguantar más por el sur una línea más larga para cruzar lo más adelante posible
para que la diagonal no me metiera en el bucle de corrientes.
Fue, bueno, echar un poco de cuenta, calcular la velocidad y me salió bien, me salió bien.
Déjame decir, Antonio, tu página web aventurasedelcali.com,
bueno, digo porque ahí hay imágenes y se ve exactamente el recorrido y, en fin,
quien quiere hacer una idea exacta tiene mucha información.
Sí, ahí se ve la trayectoria que he hecho yo y, bueno, y la que hicieron el resto de participantes,
porque la verdad es que hubo...
Y en la página ramsguyan.com, que es la página de la organización,
ellos nos tenían a cada uno geolocalizados,
cada... prácticamente cada 10 o 20 minutos
aparecía la posición exacta de cada uno de los competidores,
incluso a pesar de ser una carrera de caracoles, ¿no?,
o de una carrera que el ganador hace 64 días y el último ha llegado la semana pasada en 86,
pues puede resultar una carrera muy aburrida,
pero como ha habido continuos cambios de posiciones,
gente que bajaba para abajo 200 kilómetros
para ver si conseguía coger otras corrientes,
pues la gente, me lo ha dicho muchísima gente,
que estaba enganchada, que todos los días por la mañana
miraba la página web a ver en qué posición iba,
qué había pasado y tal,
luego por la noche, o sea, que ha sido interesante
la carrera de caracoles en el Atlántico.
La verdad es que sí, yo era uno de los que estaba enganchado y te seguía, ¿no?
Entonces, ¿no te daba la sensación el último día de que...
que me parece que es Curou, ¿no?,
que llegabas en la Guyana,
¿no te parecía que todo y que siendo menos kilómetros
ya nos quedaban aquellos y decir,
va, si solo me quedan 100,
pero que a ver estaba más lejos la meta?
No, la verdad es que el último día fue muy tranquilo,
porque ya además ya veía que, bueno,
ya la sacaba más de un día al segundo
y la verdad es que el último día me lo tomé...
El penúltimo sí que fue duro porque también
la última corriente, las corrientes que están cerca de la costa
son unas corrientes muy fuertes
que vienen paralelas a la costa de sur a norte.
Y ahí el último peligro que yo corría
era pasarme la línea de meta,
pasarla por arriba de Guyana
y de ahí no puedes bajar otra vez a Guyana.
De hecho, ha habido tres participantes
que han tenido que ir a buscarles casi al Caribe
con embarcaciones de rescate para traerlos,
porque lo que han hecho es pasarse
10 kilómetros por delante de la línea de meta,
que es una línea entre una isla y la costa
en Guyana, al lado de Curú,
donde está la Estación Espacial Europea,
y nada, y si te pasaba ya la corriente
y los vientos que no estaban muy bien
te pasaban de largo.
Entonces, el penúltimo día fue otro día de estrés,
de 25 horas remando para no pasarme esa corriente
y fue duro.
Pero el último fue tranquilo,
ver que ya estaba llegando a la costa.
La costa no la vi hasta tres horas antes,
porque como son costas muy planas,
no tiene referencias.
Entonces, la veía en el GPS,
veía que estaba a 15 o 20 kilómetros,
pero yo me asomaba encima al barco
y no veía todavía los arbolitos.
Hasta que vi la isla,
ya estaba casi pisándola.
Como los piratas, ¿no?
Tierra a la vista.
Sí, pero como yo no tengo un mástil
porque no se puede,
pues claro, yo tengo que mirar
desde un metro y medio y desde un metro y medio.
Solo con las olitas, que son de dos metros,
el ángulo de visión es prácticamente nulo
en una embarcación directa.
Oye, ¿cómo es la visión del cielo de noche
en medio de la nada?
Porque estás claro, en medio de Atlántico.
Bueno, obviamente no hay mucha contaminación
en el cielo, en el centro del Atlántico.
Pues muy, muy chula.
Hombre, yo por suerte, yo vivo en la montaña.
O sea, ya estoy acostumbrado a cielos,
a cielos despejados, sin ruido, silencios,
a días de luna llena de todos los años
que he hecho Raíz de Aventura
y he tenido noches extraordinarias
con cielo, cuando está la luna llena
que está reflejando sobre el mar
y prácticamente ese taje de día
puedes estar remando y viendo todo.
La verdad es que, bueno,
todo suma momentos inolvidables
que es lo que atrae también
de este tipo de cosas, ¿no?
Esos momentos que son momentos de soledad,
que estás contigo mismo,
pero que los disfrutas
como si estuvieras rodeado
de tus mejores amigos.
Y así como anécdotas así solo, ¿no?
Que te las puedes contar a ti mismo, ¿no?
Y después a nosotros.
Terminas hablando solo algún día, ¿eh?
Sí, ¿no?
No iba a ser tan directo, ¿no?
Porque si oye, esto me toma por loco.
No, pero sí ocurre
porque a veces que vas a la montaña también
de vez en cuando dices
si estoy hablando,
estoy diciéndome alguna cosa yo solo, ¿no?
Sí, sí, sí.
En vez de decirlo en tus pensamientos
lo dices en alto
porque además no hay nadie
que te llame loco en ese momento.
Claro, ¿no?
En vez de hablar en bajo,
hablas en alto.
A lo mejor yo llevaba mucho tiempo
llevaba un pequeño aparato de musiquita,
iba escuchando música
y cantas
y todo esto, pues
nadie te va a mirar raro.
No, no, está claro, ¿no?
No hay nadie.
Oye, ¿y cuánto había soñado
por primera vez esta travesía?
Pues hace muchísimos años.
Yo me enteré
que se podía cruzar el Atlántico de Remo,
que me parecía algo.
Pero ¿cómo se va a cruzar el Atlántico de Remo?
Hombre, si Colón tardó ahí
con unas carabelas
y escopón y gorro,
¿cómo se va a poder cruzar el Atlántico de Remo?
O sea, que es también por lo que ha sorprendido.
Lo mismo que yo pensaba hace 12 o 13 años,
a pesar de ser un deportista
que ya se había metido en mil fregados,
pero yo no me podía creer
que el Atlántico se pudiera cruzar a Remo.
Y conocí a un chico en la isla del Hierro
que lo había hecho con otro compañero,
un vasco,
en una competición que lleva ya como 15 años,
que sale desde Canarias hasta Barbados.
Es la ruta tradicional, digamos.
La ruta que yo he hecho es la ruta del sur,
que es una ruta un poco más agresiva
en olas y en mareas y tal.
La llaman, bueno,
la ruta que es muy cercana al Ecuador.
Entonces, al estar cerca de la línea del Ecuador,
es más probable que tengas días malos,
días de vientos, de lluvia, tormentas, etcétera, etcétera.
La línea de Canarias a Barbados
es una línea un poco más tranquila.
Y este chico lo había hecho en el 2002,
en el 2003, en la isla del Hierro.
Yo estaba organizando el primer Vim Batch Strain,
que era una prueba de la Copa de Europa
de Rey de Aventura.
Y le conocí allí, me contó,
y yo me quedé flipado.
Y claro, me quedé flipado.
Y dije, bueno, pues hombre,
a ver si algún día en mi vida
puedo llegar a hacer esto.
Y ya hace tres o cuatro años
es cuando me planteé,
bueno, pues ahora ya estoy preparado físicamente
y técnicamente y mentalmente
para intentarlo.
Y me apetece hacerlo solo.
Bueno, bueno.
Estuve buscando,
buscando un tipo de embarcación para hacerlo.
Aquí está.
Intentado buscar algo que fuera un kayak.
Porque yo, claro,
llevo toda la vida en kayak.
Pero no es un kayak al uso, ¿eh?
Lo digo por estar viendo imágenes,
no es un kayak al uso, ¿eh?
Lo digo para los vienques.
No, por eso, por eso.
Esa es una idea, ¿no?
Sí, a buscar un kayak especial,
que tuviera espacio para poder dormir.
Pero al final un kayak,
que el problema del kayak
es que tú vas remando
con una palanca muy corta.
Solo trabajas de brazos y de hombros.
Y va a ser muy difícil la progresión.
De hecho, bueno,
hay por ahí un polaco
que tiene un kayak especial, tal,
pero tarda en cruzar 200 días.
O sea, ya te vas a expediciones
de muchísima duración.
Sin embargo,
todo el mundo lo cruza
pues en un barco de estos,
que es un kayak grande,
pero en banco móvil.
Tú vas con un banco de remo olímpico.
Claro, la ventaja que tiene
es que las palancas son mucho más largas
porque llevas remos de tres metros
y que trabajas las piernas
más incluso que los brazos.
De hecho,
yo las piernas
es lo que más he fortalecido.
Yo nunca había hecho banco móvil
y, de hecho,
yo cuando era piragüista
que en el embalse
en la casa de campo
la gente había remeros
que remaban y decía
vaya aburrimiento
eso que vas de espaldas
porque en remo olímpico
vas de espaldas.
y al final he terminado haciendo
4.700 kilómetros de espaldas.
O sea que nunca sabe uno
dónde va a terminar.
Y, desde luego,
para entrenar un poquitín
esta expedición y tal,
¿lo hiciste en algún pantano,
algún embalse por aquí cerca de Madrid?
Sí, sí.
Yo he entrenado,
yo he entrenado,
bueno,
el 100%,
en excepción de una semana
que tuve que ir a hacer un curso
al norte de Francia
obligatorio de la organización
de manejo de la embarcación,
de seguridad,
de manejo de todos los aparatos
electrónicos que llevas en el barco,
de GPS,
de salinizadora,
etcétera,
etcétera.
Yo al 100% he entrenado
en la Sierra Norte de Madrid,
que es donde vivo,
yo vivo en la Sierra Norte,
hay un embalse bastante grande
que se llama La Tazar,
y he entrenado ahí,
pues,
durante todo el,
toda la temporada,
durante todo el año,
entrenado en un embalse
para cruzar el Atlántico Arremo.
Yo cuando solo decía
a los otros competidores,
pues,
se sorprendían,
¿no?
Porque lo lógico es,
todos más o menos son navegantes,
gente que ya conoce el mar,
y yo para mí el mar
era el gran desconocido.
He hecho algunas cosas
en kayak y tal,
pero nunca había hecho
navegación en alta mar,
y,
pero bueno,
parece que no me ha ido tan mal
entrenando en la Sierra Norte
y entrenando aquí
en la zona donde vivo,
en el...
Eso es lo que ahora pensarán.
Ahora pensarán
los que se reían
para sur adentro,
con el tío,
con Antonio.
Sí, sí.
Y,
¿para cuándo
un poquitín
de reportaje
así en la tele?
Ya has hablado
con alguien
para que lo puedan,
lo podamos ver,
vaya.
Bueno,
estoy intentándolo,
pero es como todo,
al final es presupuesto todo,
tengo las imágenes,
algunas las he perdido,
porque bueno,
por desgracia,
el último día
en el barco
la organización
se despistó,
me entró en el barco,
el ordenador se mojó
y no he podido recuperar
parte de la información
que tenía,
pero tengo mucho material gráfico,
tanto del Atlántico
como de la travesía
que hice de Idy Tarok
en Alaska,
que estuve 42 días
también este mismo año
recorriendo
Alaska en solitario
y quiero hacer un documental,
pero bueno,
el documental,
la edición del documental
son tres meses de trabajo
de la productora,
son entre 6 y 8 mil euros
y ahora ya estoy
en otros proyectos
y no sé si ese material
verá la luz,
a ver si hay suerte
y algún sponsor
pues se moja un poquito
y quiere que este documental
salga adelante,
vamos a ver.
¿Tienes otros proyectos?
¿Ya estás otra vez?
Hombre,
por supuesto que tengo
otros proyectos,
sino que,
y además tengo que aprovechar
ahora el tirón
que ahora más o menos
en los medios
estoy teniendo
bastante repercusión,
hay que aprovechar
este momento
y aparte bueno,
yo soy una persona
muy inquieta
y siempre estoy,
siempre cuando,
de hecho,
estoy cruzando el Atlántico
Remo
y estoy pensando
en cosas futuras
que voy a hacer,
o sea,
no ha sido terminar
y empezar a pensar,
sino que como he tenido
tantos días de soledad
pues siempre tienes
cosas en la cabeza
y quiero hacer este verano,
primavera,
verano,
algo que sea un poquito
más cercano también
porque bueno,
ahora mismo soy
el embajador de turismo
activo y naturaleza
de la Comunidad de Madrid
desde este año
y quiero hacer algo también
que sea un poco cercano,
entonces me he planteado
otro desafío
que tenía pensado
hace dos o tres años,
ahora hago mucho padel surf,
me gusta
e incluso compito
a nivel nacional
y se me da más o menos bien
y quiero bajar
desde Madrid
hasta Lisboa
en padel surf,
que sea algo
que la gente de Madrid
que pueda ver
una buena convocatoria
y vengan a verme
en la primera parte,
quiero salir
incluso desde la Puerta al Sol,
obviamente en la Puerta al Sol
no pasa ningún río
por el que pueda descender,
voy a ir con una
con una embarcación hinchable
que va dentro de una mochila
que además ahora va a funcionar
estupendamente
y un remo desmontable,
salgo con una mochila
que es la que lleva
esa embarcación
y a unos 10 kilómetros
de la Puerta al Sol
llego al río Jarama
y desde ahí
pues puedo bajar
por el río Jarama
hasta llegar al río Tajo
y ya por el río Tajo
unos 800 kilómetros
hasta la desembocadura
en Lisboa,
eso es lo que quiero hacer
este veranito
e intentar
en el mismo año
a finales de año
ir al Polo Sur
si consigo el presupuesto
para poder ir al Polo Sur.
Una de verano
y una de invierno,
eso va a ser un clásico ya.
Una de remo,
una de esquís.
Muy bien,
pues muy bien Antonio,
estaremos pendiente
de tus hazañas
y tus aventuras
y seguro que desde aquí
como tienes estos amigos
que tienes por aquí
por Tarragona
pues aquí estamos.
Tengo buenos amigos
y tengo una pesita pendiente
por allí por Tarragona.
Pues sí.
En breve andaré por allí
y seguro que me invento algo.
Antonio, gracias
y hasta pronto.
AventurasDelCalib.com
Gracias.
Un saludo a todos.
Venga, un saludo Antonio.
Adiós.
Adiós.
Adiós.
Adiós.
Adiós.
Adiós.
Adiós.
Adiós.
Adiós.
Adiós.
Adiós.